Para que a mí una tía me guste tiene que cumplir unos requisitos bastante complicados. No me vale con que sea guapa. Tiene que ser de una Belleza No Amenazante. Eso no quiere decir ser fea. Quiere decir que me pueda imaginar contigo en la cama, sí, pero pasándomelo bien y no intentando taparme la cabeza con la sábana. Por ejemplo: ¿podría montármelo con Natalie Portman? Pues no, porque ella me miraría con esa cara radiante de perfección, esa belleza trágica y brutal que tiene siempre, y yo lloraría por dentro y después me quemaría la cara con ácido. ¿Podría enrollarme con Sara Carbonero? Pues ni de broma, porque sería como "Por el amor de Dios, Sara, parece que te ha dibujado un adolescente salido, y además temo que cuando terminemos de tener sexo me arranques la cabeza como una mantis".
Así que ya os digo: no es lo mismo "me pareces guapa" que "me haría bollo por ti". Es un tema complicado y no sé bien qué delimita la frontera entre "guapa y te odio por ello" y "guapa y me molas". Pero en fin, sin más preámbulos, aquí va mi lista.
1. Beatriz Montañez. Me encanta esta chica. Creo que es por su belleza exótica y chinosa, sus brazos redonditos y, sobre todo sobre todo, por su risa. Me flipaba verla reír en el Intermedio junto a Wyoming cuando él decía chorradas. Con ella te puedes imaginar así: tú diciendo chorradas todo el rato nada más que para verla reír a carcajadas. Eso me encanta.
2. Úrsula Corberó. A mí esta muchacha ni me iba ni me venía, que conste. Yo Física o Química siempre la he visto por los maromos, con O, y porque me recordaba nostálgicamente a la adolescencia que nunca tuve. Pero mientras más madura la chavala, más guapa está y más salada se la ve. Y me requeteconquistó en uno de los recopilatorios de momentos televisivos en fin de año, cuando la vi en este vídeo. Tiene pinta de ser una cachonda, en el buen sentido: la típica tía con la que te puedes ir a tomar chupitos y luego decir tonterías, bailar por la calle y cantar muy alto... y que seguro que como pareja es genial, te hace reír, te pide que la peines y luego te compra en las rebajas ropa que piensa que te gustaría.
3. Franka Potente. Esta chica me parece mortalísimo de guapa. Y es una belleza buenrollante, una belleza que no te hace sentir inferior, sino que simplemente emana dulzura e inteligencia y te invita a que la compartas. Además es de estas personas que resplandece cuando sonríe. Con ella te puedes imaginar no sé, casándote de blanco y teniendo una vida, cogiéndole la mano desde el otro lado de la mesa y hablando de literatura y filosofía, y después adoptando a niñitos africanos o inseminándote artificialmente con sus óvulos. Eso sí, nuestros hijos llevarían mis apellidos, al menos en España.
4. Donna, la de Aquellos Maravillosos Setenta: Con ésta tendríamos un problema, porque es mega alta y creo que eso me haría sentir un poco rara. Quiero decir, que bastante tengo con ser bajita en las relaciones heterosexuales; si me echara novia, al menos querría que no fuéramos muy distintas en altura y poder compartir ropa. Pero bueno, independientemente de eso esta chica me parece que tiene una cara lindísima y una sonrisa preciosa. Creo que para mi vena bollo el tema de la sonrisa es muy importante: me gustan las chicas que posan así sonriendo, con pinta de divertidas, no las que ponen expresión lánguida y giran el cuellito para mirar a la cámara.
5. Hillary Swank, especialmente en el papel de Maggie en Million Dollar Baby. Para nada en Boys Don't Cry, que parece que la ha peinado el enemigo. Me gustaría salir con una Hillary así to musculosa to loca, como la de la peli, y con ese carácter tan fanático, ilusionado e ingenuo. Seguro que le gustaría escalar y nos iríamos las dos por ahí en plan bolleras furgoneteras. Hillary-Maggie me inspira una relación del tipo lo mismo te aseguro mientras escalas y luego aprieto yo como una bestia, que por las noches te hago mimitos y te abrazo mientras duermes. Es amor.
6. Penny la de Big Bang Theory. Me gusta porque más que guapa guapa es resultona, así rubia y tetona y tal, pero aun así consigue ser muy dulce y fina, nada basta. Y eso que tiene unos brazos que flipas. Me gusta porque se la ve muy atlética y fuerte, y al mismo tiempo capaz de obsesionarse por unos zapatos bonitos. Penny como novia sería algo así como una tía super leal, que está contigo a muerte y que se pegaría por ti en una discoteca, tirándole a la otra de los pelos y arañándola con una manicura perfecta. Y eso me mola de una manera absurda.
Y después de este post tan profundo y enriquecedor, me voy a dormir, que mañana hay que escalar temprano y a este paso voy a tener que ir de empalmada.