Cópula de típulas sobre una asperilla (rubiácea) |
Freud pensó que los sueños podían ser explicados
principalmente por pulsiones o manías sexuales reprimidas. Exageraba. El
filósofo francés Miguel Foucault se esforzó por probar que la sexualidad no es
sólo una realidad biológica, sino también una “cultura”, una idea o una
ideología histórica; la afirmación moderna de la productividad específica
humana, un discurso que resulta de la desacralización clínica de las
actividades carnales y de su genitalización. Según Foucault, desde el siglo XVI
el hablar de sexo no sólo no ha sufrido un proceso de represión o restricción,
sino que ha estado sometido a mecanismos de incitación creciente que han
tendido además a la diseminación e implantación de sexualidades polimorfas (M. Foucault.
Historia de la sexualidad, 1, I).