Alain Badiou, a quien estimo como uno de los filósofos vivos
más potentes, no deja de sorprender en esta conferencia abordando el tema de la
mujer.
Llegó al asunto a
través de su cuestionamiento sobre los “hijos” y la desorientación que les
afecta en la actualidad. El asunto de los hijos varones a raíz de diversos hechos de sociedad que
ellos protagonizan, fracaso escolar, incidentes en barrios obreros, bandas,
radicalización religiosa….hizo que se planteara y ¿qué pasa hoy con las hijas?
Sin duda el estatus de la hija ha cambiado radicalmente en
muy pocos años. Sobre todo si comparamos como hace Badiou la sociedad
tradicional, en la que la hija se limitaba a esperar la meta del matrimonio,
con la sociedad contemporánea, en la que el matrimonio ha dejado de ser la “salida”
femenina por excelencia.
Como en ciertas novelas de ciencia ficción de las que a
veces hemos hablado, Badiou también atisba el advenimiento de la “sociedad de
las mujeres”, competitivas, trabajadoras, responsables, dedicadas y mujeres
desde siempre, parece que pueden comerse el mundo. Lo demuestran algunos ejemplos
de chicas hijas de familias inmigrantes que han llegado a lo más altgo. Por
ejemplo la ex ministra de Educación con Hollande, Vaud Belkacem, hija de un
obrero marroquí. Y en territorios más cercanos, sabemos que entre nuestros
alumnos hijos de inmigrantes más chicas que chicos tienen éxito en la escuela y
se agarran a lo académico como a una tabla de salvación que las saque de un
medio familiar machista y tradicional, que las infravalora cuando no las hace víctimas
de muy malos tratos.
Najat Vaud Belkacem |
Ignoro si esas predicciones sobre el triunfo de lo femenino
se cumplirán. Me avergüenzo tras escuchar a Badiou de haber puesto de ejemplo a
mis alumnos de Ciudadanía las mujeres triunfantes hoy en política, economía,
banca. No son los mejores ejemplos de mujer “emancipada”, porque en realidad sólo
demuestran que son capaces de llevar a cabo la cartilla del capitalismo
explotador mundial mejor que los propios varones. A conservadoras de lo
que hay no nos gana nadie.
Sin embargo otro tipo de mujer es posible, más respetuosa y
menos explotadora de los recursos y de sus semejantes. Por ahí va la utopía
propuesta. Y un deseo final de Alain Badiou: hacen falta mujeres filósofas
¿Es la mujer un concepto de la filosofía? se pregunta Badiou. Para comprender la exposición es recomendable conocer su ontología expuesta en El ser y el acontecimiento, una ontología matemática de altos vuelos que aclara sus disquisiciones sobre el Uno y el Dos y lo que hay entre ambos.