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07 febrero 2025

Contenido y continente: La clase trabajadora en una mansión neogótica


El contraste del continente y del contenido: el otro día estuve en una mansión que se hizo un ricacho donde había una exposición sobre la clase trabajadora británica ("Lives Less ordinary: Britain working class reseen"). Llevábamos unos días grises y encapotados, lloviendo, pero el domingo salió un solazo de esos de invierno. Otro contraste: el de ver la vida un día gris o uno soleado. 

Siempre tan fotogénicas las cabinas-
en el fondo, 2TemplePlace

 Esto es Temple: No pasen, musgo sobre piedra

El rico en cuestión -que se construyó una especie de palacete neogótico con vistas al Támesis [para el turista, está justo al lado de Temple, una de los distritos legales de Londinium que ya explicamos aquí, y acá]-  era William Waldorf Astor, el de los hoteles. Nació en Nueva York (que vamos, que vamos!) donde fue de todo (abogado, filantropista, hotelero, político, dueño de una editorial), pero sobre todo hijo de un magnate que cuando se murió le hizo el segundo hombre más rico de EE.UU (tras Rockefeller). 

"Pero quién quiere todo esto cuando tienes heroína?"
(si no pillas la ref, vete de aquí: eres demasiado joven)

Según la wiki, un conflicto con su tía Lina (quién no tiene una tía Lina?) le llevó a mudarse a Inglaterra. Por resumirlo: para fastidiarla, él construyó el hotel Waldorf de 13 plantas al lado de la casa de ella, una de esas de "brownstone" salidas de "La edad de la inocencia". La tía Lina se acabó hartando y se fue a vivir a la 5a Avenida y allí construyó otro hotel, el Astoria. Cuando ambos se unieron dio lugar a, voilá, el Waldorf-Astoria, y pasado los años, los cuando los demolieron, se construyó allí el Empire State Building -desde donde espero retransmitir pronto, ji. 

Waldorf a su arquitecto: "No mire el penique"

Pero volviendo a Londinium, el potentado se hizo construir este casoplón por el arquitecto
John Loughborough Pearson, uno de los mayores representantes del neogótico británico del SXIX, con el lema "el dinero no es óbice" [o como dice el Náufrago Ro: "antes se nos acabará la paciencia que el dinero"] y claro: un festival. 

Nota: cuando llego veo que hay otras bicis atadas a los raillings (las vallas de hierro que la rodean) y me dicen que adelante que la ate (cuando en muchos equivalente por toda la city pone eso de que las arrancarán). Esto ya es un buen punto, como lo que sienten los con-perro cuando se los dejan entrar en los cafés y hasta les ponen un bol de beber. 

Waldorf: "Antes muerta que sencilla"

Cuando tras quitarme todas las capas (ahora llevo hasta un pasamonta
ñas que ríete de los del IRA) y me transformo en medio persona, entro a la primera sala y ya me quedo algo impresionada. Claro que nada te prepara para las escaleras de madera que suben a la primera planta. Yo sé que a los españoles no os gusta la moqueta y sí, no se puede fregar con lejía a rodilla, pero esta es tan gruesa como el jersey de Navidad de tu tío Ernesto (si no tienes un tío Ernesto, piensa en Hemingway), luego de lo más "cosy" y además se traga el ruido. En la escalera hay siete figuras de caoba de "Los tres mosqueteros". Parece que los diez pilares de ébano en la primera planta son de personajes de la literatura americana de Nathaniel Hawthorne y Washington Irving- Waldorf era un amante del arte y la literatura. Le daba para todo. 

Las siguientes imágenes van para seguir ilustrando la grandéur, no perdonó ni el aseo...







La exposición sigue arriba y, por supuesto, tiene su tienda que por una vez está ahí enmedio, no a la salida (así que no puedo decir mi mantra: "Exit through the gift shop"). Creo que he dicho otras veces que en esas tiendas de museo me compraría siempre la mitad de los objetos sin sentido que tratan de enchufarte, pero entonces recuerdo mi batalla al consumo, y en particular a una señora que vi el otro día que dijo que ella "ayudaba a la gente a declutter" (quitarse objetos innecesarios)- recordemos aquel programa que me impactó, la señora Linda que llenó un hangar con sus titos. Bueno, pues esta nueva declutterer decía que "no bastaba solo con declutter, es que luego había que prevenir volver a caer". O sea, la gente vuelve a recargar su casa! En fin: que hace tiempo que no compro nada y tampoco lo hice aquí. 

Hablando de escaleras, la famosa es la de arriba, pero metiéndome por una pasillo sin gente descubrí esta otra que no puede ser más neogótica o incluso gótica: vamos, que veo por ahí bajar a Maléfica de la torre tras haber hecho pincharse a Aurora con el huso.


He olvidado decir que la casa se llama Two Temple Place. Y ahora un breve finale para la exposición, que muestra la obra de diversos artistas de distintos grupos étnicos y géneros, pero con algo en común: todos vienen de la clase trabajadora, y han querido expresar ese sentir, esa manera de ver el mundo desde esa esquina -mayoritaria- de la sociedad, a través de la pintura, fotografía, escultura, cortos y cerámica.



"This England" (1985), de Bobby Robinson. Este cuadro te puede gustar más o menos estéticamente, pero tiene un montón de elementos que lo clavan en cuanto a la clase trabajadora de este país: la camiseta del hombre, el papel pintado, la lámpara torcida, el aspirador y la posición de la mujer, impúdica y pasota. Si me lo planteo, a veces me siento así.



"Triple transformations: Monument to Working Woman" (1985), es una performance fotografiada por Patsy Mullan. En ella, tres limpiadoras le superimponen sus carteles a las glorias del señoro industrialista de la estatua de turno (como los posesivos en inglés tienen género, es más fácil que en castellano que "su" es tanto masculino como femenino: "Our work, his glory" (Nuestro trabajo, su gloria), "His benefit, her labour" (Su -de él- beneficio, su -de ella- mano de obra), "Her poverty, his reward" (Su pobreza -femenina-, su -masculino- premio). Este tipo -no pienso escribrir su nombre- está ahí por ser el "gran reformista social": uno de sus hitos, oponerse a la jornada laboral de 10 horas. Quién se opone hoy en Ejpein a la reducción de la jornada laboral? Los de siempre.  


"Baa's House" (1985), de Henain Patel. Los inmigrantes, la mayor parte de ellos, clase trabajadora. Los hijos, los nietos de algunos de ellos, particularmente indios o pakistaníes, estudian medicina. El fotógrafo va de Spiderman y posa con su abuela. Esos inmigrantes que tanto preocupan a los brexiteros son los que han estado atendiendo sus hospitales por décadas. En España, cuidan de nuestros ancianos. Algunos imbéciles les llaman "sudacas".



"Cleaner No 1" (2022) de Kelly O'Brien. La autora quiere hablar de tres generaciones de su familia, todas exhaustas de tanto trabajar. Todo mi respeto para las personas que limpian: esos ejércitos que entran de noche a nuestras oficinas. 



"Gorbal boys" (1948) de Bert Hardy. Qué simpáticos los raskales. Pero esto es una suma cero: para que algunos tengan todos esos privilegios, otros tienen que perder. Mantenerlos significa quitárselos a los demás, deberíamos tenerlo claro incluso a nuestro nivel. 


Estos chavales miran su ciudad industrial (creo que era Leeds) enmedio de la niebla desde un alto. Debían ser los 80. Hoy miran sus pantallas.  


"Frozen Pit Pond" (1974) de Jimmy Floyd. Este me gustó porque me llevó a Lowry, y sus escenas de invierno, tan de postal de Navidad. Por algo le llamaban "el pintor de la clase trabajadora".


"Hair bells" (2003), de Beryl Cook, que decía que solo pintaba cuando algo le emocionaba, y lo que le emocionaba era la alegría de vivir. Sororidad: mujericas en una peluquería. Hoy he escuchado hablar de mujeres activistas de la transición, de esas a las que obligaban a dejar su trabajo al casarse, pero que luego se unían para luchar por cosas prácticas, como coles en su zona, o ambulatorio. Estas de arriba llevan todas una activista dentro. 


"People and factories" (fecha desconocida) de Eric Tucker. Tiene un toque deprimente, pero me encanta. Tiene lentitud, reflexividad, dignidad. 


No se aprecia, pero es una paradoja: un tatuaje que se empieza a difuminar por la edad que reza "Para siempre joven". Forever young, como la canción de Alphaville...

So many adventures couldn't happen today
So many songs we forgot to play
So many dreams swinging out of the blue
We'll let 'em come true


Y otra cruz de San Jorge para terminar: ablándate un poco, machote. 

Al final, no es todo tan complicado. Como decía la admirada Maruja Torres el otro día en una entrevista, siempre hay dos bandos, uno que empuja para que las cosas vayan para adelante y otro que estira para que vayan para atrás -y de paso llenarse los bolsillos. Estos son lo que están en contra del cambio climático, de los homosexuales, del hedonismo, del ateísmo, de los de fuera, de los que sufren... siempre en contra todo. Y aún los hay más extremos, los que se llaman "patriotas" ["un patriota, un idiota"], también lo escuchaba hoy en la radio: "los de la xenofobia, el revisionismo histórico, la nostalgia de una supuesta grandeza nacional perdida, los del victimismo, la inspiración religiosa de la familia y de los derechos reproductivos, los de la cruzada ideológica contra "la ideología de género", los del antifeminismo beligerante, la desconfianza hacia la ciencia y hacia la grandes intituciones mediáticas y educativas -sobre todo universidades, ahora el Daily Hell está acusando a King College London de "wokismo", - los del autoritarismo, con una voluntad común: la de la reducción al mínimo del estado. 

Recordemos: es una suma cero. Y para que Mr Waldorf tuviera sus hoteles y su masión neogótica a orillas del Támesis, muchos, todo ellos de la clase a la que se dedica esta exposición ahí dentro, tuvieron que estar -y disculpen mi francés- jodidos. No corren tiempos propicios para este discurso, pero abracemos los contrastes.


"Import & Export" (2022), de Rene Matic,
una tienda de Peckham.

23 noviembre 2024

Concierto en Brixton Academy o sobrepasar la edad media del público en varias décadas

¿Alguien ha estado en un concierto donde sobrepasa la media de edad de los asistentes en 20-25 años? Yo sí, el pasado viernes 15. 

Hola, soy Di y estuve en el concierto de "Role Model".



Por supuesto no espero que nadie que entre en d&d conozca a este pavo, porque ni siquiera los amigos de Mini le siguen (aunque acabo de ver al enlazarle que va a tocar en Madrid y Barna: a bolos). Es uno de esos músicos extraños que interesan a mi hija (por extraño me refiero a... ¿a alguien le suena "Tyler The Creator"?) -sí,  sé que esto puede sonar a "comentario de madre" con el que se podría hacer un "rap de madre" (chiste solo para iniciad@s), pero es así. Cuando oigo una canción por ahí, una sintonía, no falla: le pregunto a ella y siempre conoce al cantante, el album, loquesea. El caso es que el tal Role Model venía a Londinium de su América natal y ningún amigo de Mini tenía £30 sueltas, así que... quién iba a ser el o la acompañante?

Ah, porque se rifaban ticket entre el Peda y la que firma. El Peda se ofreció (tal vez tuvo flashbacks de cuando mi pobre suegro les llevó a él y a su hermano a ver a Miguel Ríos en la plaza de toros-solo esa imagen me da risa), pero Mini dijo que "prefería a la amá porque bailaría" mientras que su aitá sería La Esfinge imperturbable que conocemos. No sé si habéis visto este vídeo de dos cacatúas que según Mini nos describen a su padre y a mí: son asquerosas pero siempre me hace reír. Bueno, total que así es como me tocó a mí. 

Eh, que no suene a que fui en mal plan. Hace tiempo que no estaba en ese tipo de concierto, porque me gusta ir cuando me sé las canciones. Aquí no solo no me las sabía, sino que no las había escuchado jamás (Mini compartió alguna lista de Spotify un mes antes, pero no pudo ser, la vida moderna). Sin embargo, me apetecía ir por una serie de razones, la primera y foremost, claro -no me lee pero quién sabe si algún día, yo ya fallecida claro- por el hecho de ir con ella, las dos baddies en Brixton-La-Nuit. La segunda porque era en una sala mítica, legendaria, con historia... El divagante de pro sabe lo pesada que soy todos los septiembres con el Open House (el finde de puertas abiertas para entrar en edificios normalmente cerrados) y esto por tanto también cubría mi interés por la arquitectura -otra de las profesiones que, junto con profiler de asesinos en serie (ji), me hubiera gustado ejercer en mi vida, y no sé por qué, creo que se me habría dado bien.  

La sala se llama Brixton Academy y se abrió como cine y teatro en 1929. En 1972 lo convirtieron en discoteca y en 1983 en sala de conciertos. Tiene un estilo Art Déco maravilloso (pensar que estuvieron a punto de demolerla): ya he hablado de estilos convencionalmente poco populares como el Brutalismo que me gustan, pues imaginen esto. En la entrada desde fuera tiene una semi-cúpula donde ponen el nombre del artista con letras físicas, como antiguamente. Yo trabajé años atrás en Brixton, casi enfrente, y recuerdo los nombres de grupos que ponían cada semana que no había oído en mi vida, pese a ser un lugar donde han tocado aunténticos dioses, se han grabado discos y videos. Podéis mirar la wikipedia, pero por nombrar algunos: The Smiths, Madonna, Sex Pixtols, Ramones, The Clash, Bob Dylan, The Smashing Pumpkins, Meatloaf, Pet Shop Boys, AC/DC, Iron Maiden, Coldplay, Amy Whinehouse. Me ha hecho gracia que los video de dos canciones ultra-ochenteras se rodaron aquí: "Get me up before you go-go" de Wham y "When the Going Gets Tough, the Tough Get Going" de Billy Ocean (lo enlazo porque es despatarrante: Ocean se trajo a Danny de Vito, Michael Douglas y Kathleen Turner a hacerle los coros-la canción fue banda sonora de "La joya del Nilo").

Pero divago. Volvamos al viernes por la noche: Mini y yo llegamos a Brixton en bus -donde ya hay dos chicas que claramente, según Mini, también van al concierto. Brixton Road, la calle principal, es normalmente un hervidero, y el viernes tiene ese toque pre-concierto: cierto tipo de gente baja por la calle y ya se sabe a dónde van. Son como las 20:30 cuando llegamos, porque "el artista" sale a las 21:00 (antes hay un "telonero irrelevante", Mini dixit), así que tras hacer algo de tiempo en TKMax, vamos a lo que creemos que es la entrada pero nos hacen rodear el edificio hasta llegar a un callejón con vallas que ni que fuera eso Wembley (la capacidad es de unas 3000 personas). Hay casi más gente con chalecos reflectantes que asistentes ["crowd managementent", cómo se dice? "manejo de multitudes"?] luego lo entiendo todo: hubo una estampida con dos muertos hace solo dos años. 

El último paso es ser cacheadas antes de entrar en el vestíbulo bajo la cúpula -que está pintada con estrellas y planetas-, que es obviamente circular. Cuando pasas al segundo vestíbulo es una estancia con escaleras a los dos lados que suben al primer anfiteatro y wow, qué preciosidad: art déco en vena:





Nosotras vamos a la platea, que está sin asientos claro, y que nada más entrar tengo ese momento magdalena de Proust que me lleva a sanfermines: se me pegan los pies al suelo al caminar... ah, qué tiempos. La sala es enorme y ya está hasta arriba (parece que hay gente que lleva ahí un rato -fueron al "irrelevante"!). Incluyo una foto del anfiteatro desde abajo para una idea:


Nos situamos hacia la derecha mirando desde el escenario. Como no tengo ninguna foto que pueda explicar el marco del proscenium (la cuarta pared), uso estas que me he encontrado por ahí:



Es que me parece curioso estar en una sala en el corazón de Londinium en la que te quieren hacer sentir como si estuvieras en un pueblo del Mediterráneo, como dicen en la web: "
edificios agrupados con techos de tejas y cúpulas, balcones, estatuas en nichos, logias con balaustradas, puertas barrocas y muros de jardín, sobre los cuales se elevan árboles modelados de forma naturalista". Hasta hiedra pusieron!  Y además, el techo que está oscuro y debe ser curvo da la impresión de estar al aire libre: varias veces miro para asegurarme, porque esa es una de las partes más chulas de la noche. Podría estar en un pueblo de mar en la costa amalfitana, pero no, estoy a media hora andando de mi casa. 

Sumerjámonos ahora en el análisis sociológico:

Claramente, Mini y yo somos los "outliers" de la muestra: la mayor parte de la gente son veintiañeros, tal vez alguien de 30... pero, aparte del personal que trabaja allí, solo veo en la multitud a un hombre que puede tener mi edad e interpreto como el enfermero de algún paciente que no puede salir solo. Delante tenemos a una chica con lo que viene siendo el disfraz de conciertos últimamente (tras Taylor Swift y Harry Styles): botas, brillantina y sombrero de cow-boy. Evidencia de sombrero que no se quita aquí abajo pero me ha quedado algo oscuro:


También hay muchos chicos con bigote, se nota que es movember: se hace esto también fuera de la isla? Consiste en que quien quiera (o pueda) se deje un moustache (de ahí mo-vember) en el mes de noviembre para una charity (ONG). Es un ejemplo más de cuando la gente hace algo (correr una maratón, ir en bici a Brighton, raparse la cabeza), pide dinero por su hito a los amigos, y va en donación a la ONG de su elección (ya divagué aquí cuando el amigo Aritz la corrió por Plan International, la mejor ONG, que lucha por la educación de las ni
ñas). Así que mucho mostacho que espero que sea por el mes que estamos, aunque empiezo a ver con preocupación por la vida que ciertos modernos lo llevan ya fijo. Las barbas me gustan, pero esto, no sé por qué, me dan ganas de darles un tortazo. Tal vez un psicoanalista podría explicármelo. 

Sobre el artista, qué decir. Música pop que desconocía, y que todo el mundo corea a voz en grito, siento cierta envidia porque me gusta cantar (he dicho que me he unido al coro de padres del cole de Mini? ...tal vez en otra entrada). Una cosa que me hace gracia es que en estas situaciones, en la península, la gente más o menos corea como puede, pero aquí... los cabrones entienden lo que dice! Entre ellos la hija inglesa, que me va también transmitiendo las bromas que hace RM en el escenario. Según Mini "tiene un gran sentido del humor" y parece que tiene un "feud" con Harry Styles sobre quién es el cantante más sexy vivo e hizo bromas sobre ello a las que el público respondió enfervorecido. Un par de veces Mini me conminó a que me relajase con mi baile porque estaba "acaparando el espacio" de una joven de origen indio a mi derecha que no se movía en absoluto: qué rollo no bailar en un concierto, no? Además, no fui la ganadora de la rifa porque bailo? 

Pues eso, que la gente bailaba poco, cantaba mucho y, por supuesto grababa continuamente con sus móviles-imagen que intenté yo también captar con el mío, con limitado éxito:



Antes de terminar, un consejo "para mayores" (esto Mini nunca lo sabrá): mirad qué cuca soy, me llevé tapones para los oídos, una de las mejores decisiones de la noche - a esta edad ya no estamos para decibelios gratuitos. Y, cómo hacer un corolario de la experiencia? Muy positiva, sobre todo porque Mini, que piensa que soy Lo Peor en sentido de la moda, maquillaje y actitud ("el mayor main character que conozco"), dejó caer que "no aparentas para nada tu edad, tranquila". Sí, lo sé, podría ser una mentira blanca caritativa para que me sintiera más relajada. Poco sabe ella que a los main characters esto nos las suda.



22 septiembre 2024

Ático lexicográfico, bibliotecas orgásmicas, escalera expresionista, quirófano pionero, edificio orwelliano: todo eso en Open House 2024

Una vez más, la cita anual con el festival de puertas abiertas aquí en Londinium, el Open House- que ya no dura un finde sino dos semanas. Este año he visto cosas tan maravillosas y con tanto que contar que, tras reunión con la editora ejecutiva de D&D, he decidido que solo voy a poner la lista, con alguna foto. Más adelante, cuando salga del pantano escritor que tengo entre manos (demasiado contenido!), haré divagues puntuales sobre algunos de los edificios, que si algo tienen es historia e historias.  En uno de esos libros de visita de uno de ellos alguien había escrito: "Open House es mi finde favorito del año" y pensé, mira, un alma gemela. Y escuchen, turistas de segunda o tercera generación, igual estos días sean un buen momento para venir. Vamos allá...

Dr Johnson compiló el monumental diccionario de lengua inglesa (publicado en 1755 y el principal hasta que llegó el Oxford en 1928) en el "garret" de esta casa. El garret era la planta superior, en plan abierto (como un desván pero los techos son normales, en imagen). Después de esta visita, en la que hasta me puse una peluca de época, decidí que la habitación donde trabajo, la del balconete, ha de llamarse a partir de ahora el garret. "Dónde está Di?" "En el garret". Hice muchas fotos a cosas interesantes, así que este va a ser uno de los que espero expandir. Quien no pueda esperar, tiene un poco más del diccionario y Dr. Johnson al final de este divague: "Persiguiendo a Becky Sharp (aventureta literaria en Chiswick)".

El garret donde trabajaba Samuel Johnson-
el mío ya os lo he ense
ñado mil veces
(cosas de la pandemia)

Está al lado de la anterior y aunque ya había estado el finde justo de antes con mis amigos, decidí entrar un momento para poder acceder a la sala de lectura dodecagonal sin Mini no dejándome hacer fotos.  Aquí está:




Es una de las cuatro asociaciones de abogados y jueces de Londinium. Quienes hayáis leído "The children's act" de Ian McEwan os sonará que la protagonista vive en una de ellas, Gray's Inn (hay cuatro en Londinium). Lincoln's Inn tiene más de 600 años y contiene edificios espectaculares de arquitetura medieval, victoriana y georgiana, todo en medio de extensiones de césped, árboles y tranquilidad. También le dedicaré un divague porque es un lugar increíble. Ahora, la biblioteca es directamente para arrodillarse y llorar, o no?



La biblioteca del guildhall de Londinium (un guildhall es un edificio histórico que antiguamente era donde se recaudaban impuestos y hoy suelen ser ayuntamientos) se construyó junto con todo el guildhall tras la destrucción de la Segunda Guerra Mundial.  Se abrió en 1974 y es la biblioteca más grande del mundo con especímenes sobre una ciudad. Lo cuento otro día también, pero aquí incluyo dos maquetas inmensas de Londinium: 





Unico ejemplo de arquitectura expresionista en Londinium, con una escalera preciosa. Bueno, todo era precioso: desde las puertas hasta las manivelas. Un edificio que me recordó mucho al modernismo de Barcelona y así se lo comenté a uno de los guías. 


El antiguo quirófano del hospital de St. Thomas es una auténtica gema que aunque no hayas estudiado medicina o farmacia deberías visitar cuando vengas aquí. De verdad que es maravilloso y salí en éxtasis. Aquí va la foto, las historias otro día...



Esta maravilla de Art Deco inspiró a Orwell para su "Ministerio de la Verdad" en "1984", y aunque la Habitación 101 estaba en el "Ministerio del Amor", o aseguro que la vi aquí. Luego hice un tour guiado por las bibliotecas, porque tiene varias. El olor a libro viejo en algunas de ellas me llenó de nostalgia...







En los Reales Tribunales de Justicia está el Tribunal de Apelación y el Alto Tribunal de Justicia de Inglaterra y Gales. Es un edificio impresionante, de la época del revival neogótico británico: el SXIII visto por los victorianos, vamos. Es como estar en una peli de Disney, con el castillo, las torretas, las celdas donde esperan los acusados su juicio... incluso estuve en un juzgado, todo paneles de madera, moquetas y cuero, donde se representaba un juicio por asesinato. 







Es lo que digo siempre: esta ciudad no te la acabas. Hasta el año que viene!