Una profusión de jerárquicos silencios
guardaron virtuoso y sumiso silencio
ante el imponente gravamen
del silencio de tu alma.
El silencio del viento
el silencio del alba
el silencio del océano.
El silencio del cielo
el silencio de la tierra
el silencio del agua.
Pero la especial y única elipsis
de dos almas en perfecta paz y gozo
-después de, con amor, amarse-
no logró tal solemnidad
y él…
-el más perfecto silencio que existe
en el universo y alrededores-
durante mil y una noches
fue vencido… -sin lograr continencia-
por el apóstrofe y el sollozo.
P-Car