Sentir y percibir el amor que hay en mi, en compañía de quien si esta en esencia. Y pensar, en armonía, que puede haber en el corazón de un hombre, cuándo desea la muerte, el sacrificio, la tortura de la que es madre de sus hijos, o al contrario, de la qué muy probablemente, en un alto porcentaje de casos, le lavo, le cuido, le mantuvo la casa en condiciones optimas, la que dono su cuerpo, y vientre para darle unos hijos, su salud, la que le ayudo en todo lo que pudo y más. Y en muchos casos, mucho más, y callan. Qué puede haber en un Hombre así, cuando ni es agradecido, ni quiere compensar, los servicios prestados, sí, servicio por amor a la familia, de una Mujer hacia su esposo, y sus Hijos, servicio porque aún trabajado sin cobro, se le llama mantenida, ni que fueran Reinas de gran vida. Cuidadas y con todo el capricho, nada más lejos de la realidad, qué puede haber en el Corazón de un Hombre, cuándo odia tanto, y se venga hacia quien muy probableme...
Entra en un mundo real. La otra realidad.