Ayer se reunió la Comisión del Pacto de Toledo para, por enésima vez, iniciar los trabajos que den viabilidad a nuestro sistema de pensiones. De la situación actual de nuestro sistema de pensiones solo hay unos responsables el Partido Popular y Mariano Rajoy.
Rajoy y el Partido Popular se encontraron en 2011 una Seguridad Social saneada que producía superávit y con un Fondo de Reserva de las Pensiones de 66.815 millones de euros. Todo eso lo ha dilapidado en los cinco años de desgobierno del Partido Popular. Y no ha sido por la crisis económica, sino por haber tomado esa crisis como excusa para entrar a saco con el estado de bienestar español.
El PP fiaba la recuperación de nuestra sistema de pensiones en la creación de empleo, pero todo lo que hicieron en estos últimos años ha ido en contra de que el empleo sea el motor que saneara las cuentas de las pensiones. La reforma laboral fue la puntilla del sistema de pensiones, porque ni sirvió para crear empleo ni para mejorar las cuentas de la Seguridad Social. La precarización del trabajo y la reducción salarial que ha producido la reforma han hecho que, aún a pesar de incrementarse el empleo, los ingresos de la Seguridad Social sean menores. Esto ha motivado que el PP haya saqueado el Fondo de Reserva de las Pensiones, a pesar de que solo podía sacarse de dicho fondo un máximo del 3% anual. La realidad es que del Fondo de Reserva solo quedan 25.176 millones de euros. Si no se remedia antes, el fondo se agotará en el verano de 2017.
Pero el PP no solo ha saqueado el Fondo de Reserva de las Pensiones sino que con su política de reducciones de cuotas a la Seguridad Social, como ayudas a la contratación, se han dejado de ingresar, desde 2012 a 2015, a las arcas de la Seguridad Social unos 4.677 millones de €. Es decir se ha estado financiando la creación de empleo con las pensiones de los trabajadores en lugar de con impuestos del Estado. Ahora dice la ministra del Desempleo que el Gobierno estaría dispuesto a hacerse cargo de 1922 millones de euros de las reducciones pagadas transformándolas en bonificaciones. Es decir el importe de 2015. Pero el resto ¿quien lo paga? Parta enjugar el déficit de la Seguridad Social (18.000 millones de €) hacen falta otras medidas.
Es cierto que la mejor política para sanear el sistema de Pensiones es la creación de empleo, pero con la condición de que este sea de calidad y con salarios dignos. Para ello hay que subir el Salario Mínimo Interprofesional hasta el 60% del salario medio, elevar el nivel salarial de los trabajadores; elevar la inspección para hacer que se paguen y coticen los millones de horas extraordinarias que no se pagan en este país, o que se transformen en puestos de trabajo; luchar contra el fraude en la contratación, el que cometen los empresarios no el de los trabajadores porque ese es el chocolate del loro y en todo caso el trabajador no es el que quiere trabajar de manera ilegal sino el empresario el que le obliga a hacerlo y sobre todo luchar de manera decidida contra la economía sumergida.
Es hora de encontrar una solución definitiva a nuestro sistema de pensiones, los sindicatos llevan mucho tiempo reclamándolo y el gobierno del PP tomando medidas que no han hecho mas que no crear empleo e incrementar los problemas de tesorería de la Seguridad Social. Soluciones hay como las apuntadas o la creación de un impuesto finalista que financie el déficit de la Seguridad Social o que ese déficit vaya a cargo de los presupuestos del estado, como se viene haciendo en otros países de nuestro entorno. Mientras tanto habrá que seguir luchando porque de este gobierno solo cabe espera que siga degradando el sistema publico de pensiones para hacer rentable pensiones privadas.
Salud, República y Socialismo.