La educación que pudo ser. Reflexiones desde el pupitre (Editorial Zumaya, 2010) es el título del libro que acabo de publicar.
La educación siempre puede ser de otra manera si son otros los presupuestos que nos guían, aunque partamos de los mismos principios. Éste es el sentido del título. Un título que está lleno de esperanza, precisamente porque añora una educación que, aunque podría haber sido, puede serlo ahora. Si bien para ello deberíamos reconducir lo que en otro momento nuestra soberbia política o intelectual, o acaso nuestra incompetencia, no nos dejó hacer.
En la base de esta reflexión desde el pupitre está el estado de nuestro sistema educativo y lo que le impide progresar. Más allá de cualquier pretensión inabarcable, he querido centrar esta reflexión en la visión integral de un conjunto de elementos que se consideran claves para un cambio educativo óptimo.
En los ocho capítulos de que consta abordo distintas visiones de la educación de hoy. Es así como hablo de las claves de la evolución del mundo actual, de las reformas educativas y la obsesión reformista que muchas veces nos invade, de la imagen negativa sobre la educación, de los problemas de la escuela, de la búsqueda de la mejora, del profesorado, de los medios de comunicación o de las familias.
Educar en nuestros días, por su complejidad, requiere la participación y la conjunción de las voluntades de todos los sectores sociales. El desinterés o la falta de colaboración en esta responsabilidad social debilitan notablemente la labor que la escuela ha de cumplir como agente educativo.
En esta reflexión sobre la educación y el sistema educativo incluso aventuro que, si no se produce un esperado cambio en los sectores implicados, la situación actual del sistema educativo es de agotamiento e incapacidad para promover la mejora.
Ante tal tesitura, ahora más que nunca, se hace necesario alcanzar un pacto educativo que saque a la educación y a la escuela de los vaivenes políticos y los intereses de grupo y particulares que tanto la condicionan.
La educación que pudo ser es un libro que invita a la reflexión y al debate. Su lectura estoy convencido que no dejará indiferente a nadie.
La educación siempre puede ser de otra manera si son otros los presupuestos que nos guían, aunque partamos de los mismos principios. Éste es el sentido del título. Un título que está lleno de esperanza, precisamente porque añora una educación que, aunque podría haber sido, puede serlo ahora. Si bien para ello deberíamos reconducir lo que en otro momento nuestra soberbia política o intelectual, o acaso nuestra incompetencia, no nos dejó hacer.
En la base de esta reflexión desde el pupitre está el estado de nuestro sistema educativo y lo que le impide progresar. Más allá de cualquier pretensión inabarcable, he querido centrar esta reflexión en la visión integral de un conjunto de elementos que se consideran claves para un cambio educativo óptimo.
En los ocho capítulos de que consta abordo distintas visiones de la educación de hoy. Es así como hablo de las claves de la evolución del mundo actual, de las reformas educativas y la obsesión reformista que muchas veces nos invade, de la imagen negativa sobre la educación, de los problemas de la escuela, de la búsqueda de la mejora, del profesorado, de los medios de comunicación o de las familias.
Educar en nuestros días, por su complejidad, requiere la participación y la conjunción de las voluntades de todos los sectores sociales. El desinterés o la falta de colaboración en esta responsabilidad social debilitan notablemente la labor que la escuela ha de cumplir como agente educativo.
En esta reflexión sobre la educación y el sistema educativo incluso aventuro que, si no se produce un esperado cambio en los sectores implicados, la situación actual del sistema educativo es de agotamiento e incapacidad para promover la mejora.
Ante tal tesitura, ahora más que nunca, se hace necesario alcanzar un pacto educativo que saque a la educación y a la escuela de los vaivenes políticos y los intereses de grupo y particulares que tanto la condicionan.
La educación que pudo ser es un libro que invita a la reflexión y al debate. Su lectura estoy convencido que no dejará indiferente a nadie.