Creo que uno de mis primeros contactos blogueros con el Camino vino de Ñoco. Justo antes de comenzar a andar. Ahora siempre lo asocio a esta aventura que, si uno quiere, no tiene fin...el fin lo ponemos nosotros, como de tantas otras cosas que no debieran acabarse nunca e injustamente relegamos...
La mirada de Ñoco es realmente especial. Me habría traído todos sus blogs al mío pero no tiene sentido, por lo que os invito a dar un paseo por esos saloncitos cargados de buen trabajo, de buen placer...
Yo suelo decir que sus fotografías son mágicas porque me transportan casi siempre a otros lugares que parece he pisado alguna vez. Me recuerdan muchas veces a mi infancia, al aroma de aquellos rincones frescos tras la tormenta, tras la calma, a esa naturaleza que tantas veces añoro...
Y los retratos....¿qué se puede decir de los retratos y sus detalles?...mejor verlos, admirarlos...
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ACLARACIÓN: Me indica Ñoco que esta fotografía no es suya, sino que pertenece a una bloguera que colaboró con él en esta entrada. Se llama Esmeralda. Mis felicitaciones desde aquí también para ella. Gracias, Ñoco. |
CRISTAL RASGADO
LA MIRADA AUSENTE