La identificación de un nombre en una estampa del Museo del Prado, me ha conducido hasta la obra del grabador turinés Carlo Antonio Porporati y su relación con la pintora Louise Elisabeth Vigée-Lebrun.
PORPORATI, INCISORE DEL RE DI SARDEGNA (1741 - 1816)
Carlo Antonio Porporati nació en Volvera, un pequeño pueblo cercano a Turín, el 18 de noviembre de 1741. Estudió arquitectura militar y diseño topográfico, tras lo cual entró a prestar sus servicios para el ejército piamontés en el taller de Topografía Real donde hacía los dibujos a pluma para los grabadores.
Estando en una ocasión realizando el dibujo del plano del episodio histórico conocido como la "Sorpresa de Asti" (1746) para un grabador venido de Milán, este enfermó y por la urgencia del encargo Porporati tuvo que ocuparse también de hacer el grabado, con tan buenos resultados que obtuvo una beca para estudiar en París gracias a la intervención del ministro de Estado, el conde Bogino, ante el rey Carlo Emanuele III.
Vivió en París entre 1768 y 1773 donde se dedicó de modo concienzudo al estudio del oficio; haciendo visitas a la calcografía real, a las colecciones de estampas y a los estudios de los más famosos grabadores y asistiendo al taller de Juste Chevillet (1729-1802) hasta convertirse en un especialista en grabado. En una breve estancia en Turín, grabó el retrato del rey interpretando un dibujo del pintor de la corte Dupra, como homenaje de agradecimiento a su benefactor, por el que obtuvo una generosa gratificación, un aumento de salario y la libertad de dedicarse al buril.
Louis Petit de Bachaumont, en sus Mémoires secrets, alaba un grabado de Porporati expuesto en el Salón de 1777 titulado La muerte de Abel. Está basado en una obra de Van der Werf que el grabador subtituló "Prima mors, primi parentes, primus luctus" en el que expresó de un modo intenso el miedo y la sorpresa de Adán y Eva ante el cadáver de su hijo, al tratarse de una situación que se producía por primera vez en la historia de la humanidad.
A partir de entonces los grabados que realizó no hicieron sino aumentar su fama: Venus acariciando el Amor de P. Batoni, El baño de Leda de Correggio, Le coucher de Jacques Van Loo, Maria Antonieta con una rosa en la mano de Louise Elisabeth Vigée-Le Brun; Garde à vous! (Cupido) de Angelica Kauffmann; los reyes de Cerdeña Carlo Emanuel de V. Blanseri (1771) y Vittorio Amedeo III de D. Molinari (1775), Tancredo y Clorinda de Charles van Loo, Júpiter y Leda de Correggio, la Sacerdotisa compasiva de Esprit Antoine Gibelin, y otros.
El propio Longhi le señaló como modelo de grabadores por "la precisión, la limpieza del corte, la virginidad del trabajo, la fusión y la transparencia de las tintas, la armonía del claroscuro, el equilibrio del artificio, y la constancia de estilo». (G. Longhi. La calcografía, Milán, 1830).
Fue nombrado grabador y conservador de estampas del rey y creó una escuela de grabado en Turín. En 1793 se traslada a Nápoles a petición de Vittorio Amadeo III para fundar una escuela de grabado. A su vuelta, en 1797 es nombrado responsable de la galería de Bellas Artes de Turín, ciudad en la que vivirá hasta su muerte en 1816.
LOUISE ELISABETH VIGÉE-LEBRUNLa estampa del Museo del Prado
Como comentaba al inicio, la identificación de una palabra hasta ahora no reconocida en una inscripción de una estampa del Museo del Prado me ha llevado a establecer la relación entre estos dos artistas que se conocieron en el París pre-revolucionario y cuya amistad se mantuvo a lo largo del tiempo: Elisabeth Vigée-Lebrun y Carlo Antonio Porporati.
Se trata de la estampa procedente del legado de Pedro Fernández Durán y Bernaldo de Quirós, (1931) titulada "Autorretrato de Louise-Elisabeth Vigée-Le Brun con sombrero", de autor Anónimo y catalogada con el número D2293: "Siglo XVIII. Lápiz, Sanguina, Cuadriculado sobre papel verjurado, 395 x 240 mm."
Se trata de un dibujo preparatorio para un grabado que reproduce uno de los más famosos autorretratos de Vigée-Lebrun, que ha sido objeto de frecuentes grabados y reproducciones. Es preciso señalar que existen dos versiones pintadas del Autorretrato que la pintora realiza en 1872.