lunes, 29 de octubre de 2018

ALICIENTE(S)



De nuevo, vuelvo a participar en la propuesta literaria de Ginebra Blonde.

Es increíble la labor que realiza en cada uno de los retos que propone. Me siento infinitamente agradecida por permitirme atravesar este paraíso de las letras. Esta reflexión es mi aportación.     
   





Ali, aliciente ¿qué me mueve a levantarme cada mañana cuando aún todo está oscuro? Las lágrimas se han quedado impregnadas en la almohada, y en mi rostro se percibe el surco de una riada.


¿Aliciente? ¿Qué me cautiva cada día a soportar el cansancio que me pesa todo un planeta en mi costado?

Cada día: prisas, ruido, gente, llegar a tiempo, no salir tarde. El reloj sólo tiene tres minutos que siempre me hacen llegar el último. Y en el camino me encuentro sufrientes, pobres, soledades, ecos anegados, gritos quemados, países hambrientos, cañones lejanos que llenan el mar de extraños fugaces huyendo del mal. Mujeres vestidas de rosa, otras calladas por el luto. Y este es el mundo.

Y a pesar de todo, cada día me levanto; un abrazo ha evaporado las lágrimas de mi almohada. Un rayo de luz ha iluminado mi mirada. Un beso ha borrado mis ojeras de la cara y una sonrisa ha aliviado el peso de mi espalda.

En el bolso, un libro de poemas me acompaña: "las batallas más importantes son las que peleamos en el silencio de nuestra alma". Y el traqueteo del tren me susurra que en un segundo estoy de vuelta a casa. Por el mundo que duele tanto,  rezo...


©MaiteLorenzo







Gracias, querida amiga. 

Podéis leer el escrito de todos los participantes en Paraiso de Letras



sábado, 27 de octubre de 2018

Días de otoño





Este fin de semana me voy a vestir de otoño.


He colocado el sillón al lado de la ventana para escuchar el sonido de la lluvia caer.


Estrenaré un nuevo té verde que me han regalado, aromatizado con vainilla, corteza de naranja y pétalos de flores.


Nos hará falta una mantita, pero me arroparé con la lectura de un buen libro. Os deseo un feliz fin de semana.




Los días de otoño se dibujan transparentes
sobre el manto dorado del bosque…
Los días de otoño sonríen al mundo entero.
Qué agradable conciliar el sueño sin deseo,
saciado de flores y fatigado de verdor,
y que en el cabecero luzca una guirnalda de vid roja…
El día de otoño carece ya de anhelo,
sus dedos son de un frío implacable,
y en sus sueños se ve por todas partes
cómo caen copos blancos incesantes…

Edith Södergran (Encontraste un alma)

miércoles, 24 de octubre de 2018

Érase una vez, un lugar...






que me facilita una de mis aficiones favoritas: la biblioteca.





Hoy se celebra el día de las bibliotecas, desde 1997, cada 24 de octubre. En recuerdo de la destrucción de la Biblioteca de Sarajevo, incendiada el 1992 durante el conflicto balcánico.   El incendio de 1992 destruyó centenares de miles de libros y numerosos incunables. Varios miles de volúmenes pudieron ser salvados en los primeros momentos del incendio, cuando los empleados de la biblioteca, arriesgando sus vidas, comenzaron a arrojar libros y documentos por las ventanas. Curioso relato que podéis leer aquí.



Yo ya he elegido mi libro. Abro las páginas y me  sumerjo entre sus letras. Feliz lectura



La biblioteca es el lugar que espera.
Tal vez sea la espera de todos los hombres,
porque también los hombres son allí diferentes.
O tal vez sea la espera de que todo lo escrito
Vuelva nuevamente a escribirse,
Pero de alguna otra forma, en algún otro mundo,
Por alguien parecido a los hombres,
Cuando los hombres ya no existan.
O tal vez sea tan solo la espera
De que todos los libros se abran de repente,
Como una metafísica consigna,
Para que se haga de golpe la suma de toda la lectura,
Ese encuentro mayor que quizá salve al hombre.
Pero, sobre todo, la biblioteca es una espera
Que va más allá de letra,
Más allá del abismo.
La espera concentrada de acabar con la espera,
De ser más que la espera,
De ser más que los libros,
De ser más que la muerte.
Roberto Juarroz
                                                       

sábado, 20 de octubre de 2018

Olas de sueño



Estoy tan cansada que espero sumergirme entre olas de sueño y descanso.


el primer sueño:
lo he guardado en secreto
y he sonreído.
Shôu


Feliz descanso, y no olvidéis apagar la luz.

miércoles, 17 de octubre de 2018

A veces...




A veces
se te desordena el pelo
de una manera que hace
que todo lo que esté sucediendo
en este instante
pueda esperar.

K. Iribarren ( El amor, ese viejo neón)

domingo, 14 de octubre de 2018

Día de las escritoras: Santa Teresa







«…aquel día fueron tantas las cartas y negocios, que estuve escribiendo hasta las dos, e hízome tanto daño a la cabeza, que creo ha de ser para provecho; porque me ha mandado el doctor que no escriba jamás sino hasta las doce, y algunas veces no de mi letra» (A don Lorenzo, de Cepeda, en Ávila, Toledo, 10 febrero 1577).





ENVÍO


Porque bordaste el hilo de los paños de altares,

y rizaste la cera de los blancos exvotos,

y fuiste puerto abierto para todos los mares

donde flotaran quillas de corazones rotos;

porque en la paz del huerto te sentiste hortelana,

y en tu celda (casita de Nazareth), María;

porque al pisar, sumisa, la gleba castellana,

en tu mente, Teresa de Cepeda surgía…,

con fervor de plegaria yo te brindo este canto;

si en él va puesto poco yo quise poner tanto,

que, por este motivo mereceré perdón…

¿Distintivo de gloria? ¡No tal! Las glorias nuevas

se eclipsaran al lado de la gloria que llevas:

la placa en ascua viva de tu gran corazón!


Juan Alcaide (Poesía Completa)



Feliz día de las escritoras y Feliz día de Santa Teresa

miércoles, 10 de octubre de 2018

Ruta de los patios


El próximo fin de semana se celebra en Infantes la Ruta de los patios en su sexta edición. Es increible el tesoro que esconde este pueblo mío, cada vez me sorprende más. Te invito a dar un paseo por una auténtica villa del Siglo de Oro.



¡Entrad! Esta es mi casa, aquí he pasado muchos ratos de mi infancia y juventud.










En todos ellos, mucha historia que relatar, y en alguno de ellos, poesía que recitar.
Casa de los Estudios. Autor, sabersabor.es

Esta es una perspectiva del Patio de la Casa de los Estudios. Aquí impartió clases el humanista Bartolomé Jiménez Patón, amigo de Lope de Vega y de Quevedo.
 



Patio de la Casa del Caballero del Verde Gabán, que perteneció a D. Diego de Miranda, es la casa que, según la tradición, aparece descrita por Miguel de Cervantes en el capítulo XVIII de la segunda parte de El Quijote.


 Típico patio de una casa de labranza del siglo XVI, Casa de La Pirra.

 Patio de la Casa del Arco | C.Jordá

 Patio de la Casa del Arco, se repite el esquema de casa solariega: zaguán de piedra y patio señorial de columnas jónicas.

Esto sólo es un pequeño aperitivo  de lo que se puede visitar en mi pueblo durante este fin semana.

 EL PATIO

Con la tarde
se cansaron los dos o tres colores del patio.
Esta noche, la luna, el claro círculo,
no domina su espacio.
Patio, cielo encauzado.
El patio es el declive
por el cual se derrama el cielo en la casa.
Serena,
la eternidad espera en la encrucijada de estrellas.
Grato es vivir en la amistad oscura
de un zaguán, de una parra y de un aljibe.

Jorge Luis Borges






domingo, 7 de octubre de 2018

Un día especial



Este fin de semana he tenido una gran duda. No sabía qué tarta de cumpleaños preparar para alguien muy,  muy especial.



Es tan agradecida que le va a dar igual el sabor que elija,  sé de antemano que acertaré con una tarta de chocolate.



Pensé en hacer alguna con fruta, aún hace calor,  y las tartas de mouse son muy refrescantes.



Lo importante es pasar un rato agradable en buena compañía,  festejando con un dulce, la vida.


Sabes que te deseo lo mejor y espero que recuerdes con cariño el día de cumpleaños.



"Eres la medida justa
que necesita una cerradura,
la llave que mueve el engranaje
y abre la puerta a un mundo
donde las comparaciones
no existen,
a un instante sin límites
que nos permite  ser
lo que sencillamente somos."

Ángela Castillo



Muchas Felicidades



miércoles, 3 de octubre de 2018

MAR O MONTAÑA: ESTRELLA BLANCA





Aparcó el todoterreno justo donde comenzaba el claro del bosque. Contempló la majestuosidad de la montaña que le era tan familiar. Desde la ladera, el camino parecía largo, escarpado, sinuoso y, antes de emprender la vuelta a casa, debía permanecer en silencio, realizar el sagrado ritual para dejar atrás lo que tanto había soñado y que tantos quebraderos de cabeza le habían supuesto. No, no era una huida desesperada. Más bien, era un re- encuentro con su propia identidad, con esos orígenes que tanto la agobiaron y cercenaron en su juventud, necesitando vivir aquello que ella creía libertad.






Recogió sus escasas pertenencias del coche, se vistió con la túnica de cuero rematada con flecos, ciñéndola a su cintura con una cuerda, y se colocó el collar de abalorios de colores que sus mayores le regalaron el día que decidió marcharse. Desechó la brújula, no la necesitaba, recordaba perfectamente como orientarse bajo las estrellas brillantes del cielo en la noche, y reconocía todos los indicios que la Naturaleza dejaba cada día y que aprendió a reconocer desde niña. Desplegó con sumo cuidado el viejo mapa, amarillento y ajado por el paso del tiempo; en una de las esquinas había una silueta de un animal dibujada, en otra, una estrella, ese era su nombre: Estrella Blanca.
Respiró hondo y ahogó sus lágrimas en un hondo suspiro. Empezó a susurrar la plegaria: Wanka Tanka, Gran Espíritu… y al compás de los latidos del corazón, danzaba sobre sí misma en compañía de la luz de la luna. De entre los árboles apareció, silencioso y amistoso el lobo blanco, ambos se quedaron quietos, mirada profunda y fija, reconociéndose en un abrazo espiritual. Desde ese instante, ella supo que ya estaba en casa, nada que temer, al fin libre, había regresado a su naturaleza.


(Basado en cualquier leyenda de los indios nativos de América)
Relato perteneciente a la propuesta "Mar, O Montaña"
https://varietes-ginebra.blogspot.com/2018/09/mar-o-montana.html

MUCHÍSIMAS GRACIAS, GINEBRA, POR TODO TU ESFUERZO, POR TODA TU LABOR.
AGRADECIDA DE CORAZÓN.

 

PARA TI