sábado, 1 de diciembre de 2012

Abstención electoral

No hay peor ciego...

Las pasadas municipales dejaron bastantes temas sobre la mesa: la derrota electoral de la derecha, el mal manejo del proceso por parte del gobierno, los ganadores de la elección (si es que los hubo) y bueno, el más grande de todos, la alta cifra de abstención electoral. La cual, para mi, sigue siendo un fruto más del sistema educativo que nos rige. 

Por Esteban Martínez Covarrubias

¡Y les salió el tiro por la culata! El mundo político, sentado en bases erróneas, decidió jugársela por el voto voluntario y en lugar de generar mayor participación juvenil dejaron al descubierto (más de lo que ya estaba) lo poco representativo que es el sistema "democrático" chileno. Finalmente la abstención a nivel nacional rondó el 60% , llegando en algunas comunas incluso al 70%. Cifras impresentables se miren por donde se miren. 

Creyeron que los jóvenes no votaban por mera flojera, que eliminando el trámite de inscripción estos acudirían a las urnas. ¡Error! Evidentemente no conocen el país que gobiernan e insisten en menospreciar el alcance que tiene el desigual sistema educativo chileno. No nos olvidemos que en Chile el sistema educativo de mercado ya va para los 30 años de funcionamiento. El modelo ya ha incubado por lo que podemos ver sus resultados y cuando tu como país decidiste que la calidad de la educación primaria, secundaria y superior se regiría por factores de libre mercado los resultados no podrían haber sido otros.

La educación es la llamada a generar capacidad de análisis en una población. La educación es información, es poder de decisión, por lo que si alguien no tiene acceso a ella no será capaz de realizar ninguno de los dos actos mencionados. Y bueno, eso es lo que en Chile ha ocurrido. Existe un sistema elitista, escuelas básicas que se financian con 40 o 50 mil pesos por alumnos versus colegios que reciben 150 o 200 mil pesos por persona. Esa diferencia abismal, que se presenta en Chile desde sus niveles iniciales se amplifica en cada año de crecimiento y desarrollo de los chilenos, porque bien sabemos que la educación es un proceso que suma sobre otros, es decir, si no se invierte de manera consistente en los primeros años de educación de la población difícilmente la situación podrá revertirse durante la adolescencia los jóvenes y en edad adulta ni hablar, por ende no deberíamos sorprendernos de estos resultados, están directamente relacionados. 

Si, existe desmotivación, es real que el sistema político chileno se encuentra en descrédito, que existe una crisis de ideas y está presente una sensación creciente dentro de la población de que las cosas no cambian, salga quien salga. Pero el factor educacional es mayor, porque los menores de 30 o 35 años en Chile no tienen idea donde están parados, no saben de Historia de Chile, no logran comprender procesos históricos por lo tanto menos van a generar un presente. Existe indignación en muchos de ellos pero tengo la sensación que ni ellos mismos saben de que. 

Esta vez, al mundo político, la crisis les ha reventado en la cara. Ya no se trata de mirar con pena la realidad de miles de chilenos (sus hijos no van a jardines o colegios de pobres, ni estudian en universidades para pobres así que al final del día les da igual) sino que esta vez el problema parece amenazar su territorio. ¿Entenderán de una vez lo insostenible del asunto o seguirán parchando con tal de sobrevivir?

miércoles, 3 de octubre de 2012

La imagen es todo.



El panorama político chileno ya no puede ser más decadente. Tenemos a ambas coaliciones afirmando sus esperanzas en personajes a los cuales la oportunidad de estar en La Moneda les cayó del cielo. Porque así están las cosas en Chile, tal parece que el cargo de Presidente de la República se regala al personaje más simpático del barrio. 

Por Esteban Martínez Covarrubias

Las encuestas mandan en la política nacional y estas parecen mostrar una realidad sin vuelta atrás: Michelle Bachelet y Laurence Golborne corren con ventaja para las presidenciales 2013. Para alguien como yo, o sea una persona que (ingenuamente) aún cree que la política trata de un combate de ideas esta situación ya pasó de la indignación a la tristeza.

Michelle Bachelet es una mujer a quien ya en 2005 la nominación a la presidencia se le dio sin querer. La candidata natural de la Concertación era Soledad Alvear pero de pronto en las encuestas apareció Michelle. Por simpática, espontanea, por no entrar quizás en el perfil clásico del político mentiroso. Se habló mucho de su carisma por aquellos años y probablemente aquel sea su punto fuerte, sin embargo, por muy carismática o cercana que sea una persona esta no necesariamente está preparada para dirigir a un país. Los hechos demostraron que al mandato de Bachelet le faltó siempre peso ideológico. Tuvo la oportunidad de dar un giro en la educación (cuando vivió la revolución pinguina en 2005) y simplemente no fue capaz de actuar a la altura de las circunstancias, decidió profundizar el modelo educativo de mercado y postergar con esto la crisis en el tema. En materia económica su gobierno no presentó ninguna diferencia en relación a los anteriores mandatos de la Concertación, los monopolios, tan característicos del modelo chileno, se mantuvieron siendo que Bachelet vivió , por ejemplo, una polémica de colusión de farmacias que (nuevamente) le presentaron la oportunidad de generar un cambio en favor de los chilenos, sin embargo, la mandataria optó por no ensuciarse con los poderes económicos que manejan Chile. 

Pese a todo esto y a que en los tres últimos años Michelle Bachelet no ha sido capaz de pronunciar una sola palabra acerca de la contingencia nacional, su figura sigue liderando las encuestas, señal clara de que en Chile las ideas han pasado a un plano secundario,  da lo mismo lo que el candidato piense o los intereses que defienda, en Chile las elecciones se encuentran al nivel de un programa de televisión, una especie de reality show en donde los electores deciden votar  por quien les resulta simpático. Por cierto, no se en que estuvo Leonardo Farkas al decidir no lanzarse a las presidenciales, mal no le habría ido. 

Ahora, si lo de Bachelet da para cuestionarse todo, lo de Laurence Golborne es para quedar con depresión. Y es que estamos hablando de un empresario único mérito (dije ... ¿mérito?) fue estar ubicado en el centro de la noticia tras el incidente de los mineros ocurrido hace unos años. ¿Se habrá imaginado 3 años atrás Golborne que se encontraría en este escenario? Por supuesto que no. 

Ahora, nobleza obliga a reconocer que al menos la derecha ha intentado probar otras alternativas. Es decir, desde hace mucho ellos saben que Golborne aparece como la carta de mayor popularidad pero de igual manera saben que no es su mejor carta, por algo la UDI ha insistido con Pablo Longueira y RN con Andrés Allamand y tal parece que esperarán hasta último momento para jugar una de esas dos opciones. No creo que se de una primaria dentro de la derecha, simplemente no es su estilo, pero si tengo claridad en que los dos partidos del oficialismo no quieren que Golborne sea el candidato. Optarán por él solamente si es que no existe otra posibilidad.

Mientras tanto, en la vereda opuesta el planteamiento ha sido a la inversa. La Concertación ha presentado sus clásicas candidaturas de cartón, entiéndase Juan Antonio Gómez o Ximena Rincón, pero todos bien sabemos que llevan dos años esperando (y ansiando) que Michelle Bachelet se decida y defina su candidatura. Aunque dado el nulo interés que se aprecia en las filas del PS o la DC por levantar una candidatura alternativa debemos asumir que internamente ellos deben tener claridad y efectivamente Michelle Bachelet irá como candidata.  

Estoy completamente seguro de que Arturo Alessandri, Salvador Allende, Patricio Aylwin, Eduardo Frei (padre e hijo), Ricardo Lagos o Sebastián Piñera fueron tipos que se soñaban con la banda presidencial, que se miraban al espejo cada mañana imaginando como sería aquel momento. Por un asunto de ego o por Chile da igual, el punto es que lucharon por aquello. De igual manera también estoy seguro de que ni Bachelet ni Golborne soñaron con esto, simplemente se les dio, porque así están las cosas en Chile, cualquiera puede ser Presidente, literalmente cualquiera. 

martes, 10 de julio de 2012

Cheque en blanco a Bachelet

Tropezando con la misma piedra

Por estos días andan discurseando lindo en la Concertación. Pareciese que fuera del poder el corazoncito rojo les volvió a latir. Hablan de reforma tributaria, electoral, políticas medio ambientales, educación gratuita y de calidad, además de un trabajo junto a los movimientos sociales. Sin embargo, no les creo.

Por Esteban Martínez Covarrubias ( @emartinec )

Lo imaginamos durante mucho tiempo, diseñábamos teorías al respecto y sabíamos que tarde o temprano llegaría el momento en que la Concertación dejase el poder, el tema es que ocurriría con ellos al llegar ese instante. ¿Se quebraría la coalición de una buena vez? ¿Se reinventaría en la derrota? ¿Se vendría la anhelada auto crítica o vencería en el sector una vez más la auto complacencia ? Muchos ingenuamente creímos que estando fuera del poder parte importante de la Concertación, los sectores más de izquierda basicamente, podrían analizar en calma sus errores, falencias, omisiones y a partir de ahí construir una nueva hoja de ruta que incluyese a quienes estuviesen dispuestos a luchar por ella. 

Lamentablemente en estos 2 años de gobierno de derecha he visto a los partidos de la Concertación más preocupados de como recuperar el poder que de reconstruir los cimientos de su coalición. Eso no quita, por supuesto, el que hablen precioso. ¡Si la labia de buen político no la pierden! (el carepalismo tampoco). Por estos días andan discurseando lindo, si hasta pareciese que fuera del poder el corazoncito rojo les volvió a latir. Hablan de Reforma tributaria, electoral, políticas medio ambientales, educación gratuita y de calidad, además de un trabajo junto a los movimientos sociales. Sin embargo, no les creo.

Y no les creo no solo de desconfiado que soy, no solo porque tienen un tejado de vidrio gigantesco (¡20 años en el gobierno y ahora se acordaron lo injusto que es Chile!). No les creo por su presente, por su discurso acomodado y mentiroso. 

¿Dije acomodado y mentiroso? Si. Porque déjenme decir algo: no veo a la Concertación trabajando junto a los movimientos sociales, sino que tras ellos. Se colgaron de la polémica ambientalista tras Hidroaysén siendo que los últimos 3 gobiernos aprobaron 102 termoeléctricas (21 en el mandato de Eduardo Frei, 39 en el Ricardo Lagos y Michelle Bachelet se anotó con 42), se sumaron a las movilizaciones estudiantiles siendo que estos reclaman en contra de un sistema impuesto y desarrollado por la mismísima Concertación, adhirieron a cuanta protesta colectiva se dio (Magallanes, Aysen) siendo que jamás en los 20 años escucharon a las masas. Hoy la Concertación, con tal de criticar al actual gobierno, se suma a cuanta protesta exista. ¿El objetivo? Uno solo, recuperar el poder a como de lugar.

Esto último que afirmo se ve reflejado en el reciente apoyo que el PPD le ha entregado a Michelle Bachelet frente a las futuras elecciones presidenciales. Sin tener claridad aún acerca de si la mujer se presentará o no a dichas elecciones y sin siquiera conocer la posición de Michelle Bachelet en torno a la contingencia nacional, el PPD le entrega un cheque en blanco a la ex presidenta. ¿Porqué? Solo una explicable razón: Michelle Bachelet lidera aún las encuestas de popularidad. Es decir, es la única carta que los acerca el poder. Colocan entonces a la persona por sobre el proyecto. Se siguen moviendo por las encuestas y no por principios ni convicciones. 

Y no hay más, es poder y punto. Da lo mismo lo que piense o diga Michelle, su figura siempre fue y seguirá siendo un juguetito populista que le resulta simpático a los chilenos, lo utilizarán mientras les sirva y les de resultados. Da igual si cometió errores durante su mandato que contradicen por completo las actuales propuestas del conglomerado. Todo da lo mismo, lo importante es volver. El resto se verá después, una vez re instalados en La Moneda se analizará si efectivamente se puede cumplir todo lo que están prometiendo.

Ahora, "por si acaso", vemos a la Concertación levantando candidaturas de cartón. Está Ximena Rincón, Orrego o Juan Antonio Gomez (¡era que no!). Todo esto por si Michelle decide no ir a las elecciones pero todos bien sabemos que en cuanto Michelle se decida, todos se bajan. Quizás armarán una primaria para darle validez a la candidatura, otro show más, total, todo vale en la recuperación del poder incluso el volver a tropezar con la misma piedra.

miércoles, 25 de abril de 2012

Educación: se perfecciona el modelo de mercado

Vamos... ¿bien? 

Dos noticias importantes relacionadas con educación han visto la luz durante las últimas semanas. La primera guarda relación con la entrega anual de los resultados del SIMCE 2011, la segunda con el anuncio por parte del Ministerio de Educación de terminar con el polémico crédito con aval del estado (CAE). Ambas noticias apuntan en la misma dirección: el gobierno de Sebastián Piñera profundiza de manera muy astuta, tanto en el discurso como en los actos, el actual modelo educativo de mercado. 

Por Esteban Martínez Covarrubias

Hablemos del SIMCE. Los resultados (*1) entregados recientemente muestran básicamente que en matemática los cuartos básicos tanto de liceos municipales como colegios particulares subvencionados suben (9 y 4 puntos en promedio respectivamente), mientras que en lenguaje bajan ( 3 y 5 puntos). En octavo básico no se obtuvo mayor diferencia en relación a la medición anterior (en lenguaje se subió 1 o 2 puntos, en matemática se bajó la misma cantidad). Sin embargo, la suma de estos datos se presenta ante nosotros, tanto por parte de medios comunicacionales como el gobierno, como una clara señal de avance, al punto de que el presidente ha declarado que "la calidad en nuestra educación esta mejorando y las desigualdades, las brechas entre ricos y pobres, están disminuyendo" (*2). 

¿Dará para tanto digo yo? Sobretodo considerando que si ahondamos más aún en las cifras tenemos que los promedios de colegios municipales y particulares subvencionados, tanto en cuarto como en octavo básico, rondan entre los 240 y 260 puntos. Dicho claramente, estamos hablando de que un alumno que normalmente se sacaba un 2.5 de promedio, el año pasado terminó con un 3.0. Sigue estando mal, sigue sin saber leer ni operar aritmética básica, sin embargo ahora está "menos mal que antes". ¿Estos datos nos dicen entonces de que vamos bien encaminados? ¿Da para creer que el modelo está bien y que solo necesita correcciones? ¿O simplemente son señal de que tanto dinero se le ha metido al sistema en los últimos años (sobretodo en los quintiles más pobres) que ... algo se tenía que subir? 

Por otro lado, unos días atrás recibimos el notición de que el gobierno lanzará un proyecto dispuesto a terminar de una vez por todas con el invento de Ricardo Lagos y su entonces ministro de educación Sergio Bitar: el crédito con aval del estado. Lo que en un inicio se había limitado a la reducción del interés de este ahora pasará a la eliminación del sistema como tal, creando así una entidad dependiente del estado pasará a administrar la entrega del crédito universitario. En otras palabras, lo que el gobierno ha hecho es extender el actual sistema del "fondo solidario" para cualquier tipo de institución de educación superior, pública o privada, con o sin fines de lucro. 

El paso dado por el gobierno es positivo, inteligente y acertivo. Positivo porque se preocupa del endeudado bolsillo de la clase media/baja chilena, inteligente porque entrega un calmante no menor a un sistema de financiamiento que agonizaba y le hace creer a la población chilena que soluciona el problema con esto (siguen sin preocuparse en absoluto del control de la calidad de las entidades de educación superior y sus respectivos aranceles) y acertivo porque habla de expulsar a la banca privada, de estatizar el crédito en un momento donde el movimiento estudiantil busca re articularse para enfrentar este 2012. 

Cabe la pregunta entonces... ¿porqué a la Concertación no se le ocurrió algo así? ¿Porqué fueron más papistas que el papa? ¿porqué la Concertación privatizó tanto al punto de que la derecha se ve en la necesidad de estatizar para salvar el modelo? Tengo la sensación de que la gente de la Concertación se dedicó durante 20 años a aplicar un libre mercado de manera brutal e irracional y que la derecha viene hoy a regular un poco los límites del negocio. El problema es que junto con esta regulación viene la eterna idea de "humanizar el libre mercado" y con esa idea pretenden entretenernos otros 20 años. 





sábado, 7 de enero de 2012

Inscripción automática + voto voluntario


Se viene el estallido...

Aún no está 100% aprobado, debe pasar por el tribunal constitucional pero tal parece que la inscripción automática + voto voluntario va. El tribunal tiene hasta el 31 de enero para darle el pase de manera que la modificación pueda ser aplicada en las próximas elecciones municipales a fines de 2012. Entonces... ¿se viene o no el estallido? Esperemos que si.

Por Esteban Martínez Covarrubias

Nobleza obliga. Debo partir este escrito reconociendo que me ha sorprendido por completo la decisión por parte del gobierno y el congreso de legislar en favor de la inscripción automática + voto voluntario. Se que fue promesa de campaña pero dados los números que muestran las encuestas, en donde se aprecia un claro y sostenido rechazo por parte de la ciudadanía frente a los partidos políticos, pensé que echarían pie atrás con la idea. Pensé que no cumplirían pero lo han hecho y eso hay que comenzar reconociéndolo.

Ahora, el voto voluntario representa un riesgo gigante, incluso un potencial quiebre de la "estabilidad democrática" que ostenta Chile y el mundo político ha decidido, no se si consciente o inconscientemente, asumir ese riesgo. ¿Dije quiebre? ¡Claro! Si las aguas eran fácilmente encausables con un padrón electoral inmóvil. Dicho en palabras simples: en Chile vienen votando practicamente los mismos durante los últimos 20 años. Los que se inscribieron en 1987 para votar en el plebiscito son los que han votado en todas las elecciones siguientes, con un tímido componente de renovación, demasiado débil como para generar un cambio direccional importante (alcanzó eso si para sacar a la Concertación del poder tras 20 años, algo es algo). 

Y bueno, con esta medida se "resetea" el padrón. Podrá votar quien se motive por hacer la rayita. Asunto que me parece modifica por completo el escenario político actual. Los partidos ya no tienen un cliente plenamente identificado, deberán por tanto mejorar y transparentar sus ofertas. Hoy cualquier ciudadano mayor de 18 puede ser un potencial votante, lo cual debería implicar una mejora en la calidad de nuestra democracia. 

Además, el sentido común me dice que debería producirse un importante recambio entre los electores. Por un lado deberían retirarse de manera voluntaria personas mayores y los "poco interesados" en participar (aquellos que acudían a votar solamente por temor a la multa), por otro se sumaría población joven. Es decir, el padrón se sincerará de todas maneras, respondiendo de manera clara y tangible una pregunta que muchos nos venimos haciendo desde hace años: ¿Cuántos chilenos se sienten efectivamente motivados a participar en nuestra democracia? 

Pero no solo tendremos claridad en torno a aquel dato sino que además, el voto voluntario está en condiciones de poner en jaque el sistema democrático que nos viene rigiendo desde hace ya más de 20 años. En ese sentido, la democracia tutelada, el experimento democrático  chileno post dictadura tambalea frente a los siguientes escenarios posibles:

El primero: muchísima más gente se retira del sistema que la que ingresa, es decir, el escenario actual de poca participación se agudiza.

El segundo: los niveles de participación se mantienen (o incluso aumentan) en comunas de mayores ingresos pero disminuyen notablemente en comunas de clase media/baja. Es decir, se agudiza poca participación y representatividad.

El tercero: Se produce un recambio de votantes pero cuantitativamente la participación se mantiene (6.5 millones aprox). Ahora, quienes ingresan al sistema no apoyan a la derecha ni a la Concertación, sino que a opciones alternativas, opciones que gracias al sistema binominal no son electas, es decir, la participación se mantiene pero se agudiza la poca representatividad de los sectores electos.

El cuarto: el estallido. Es el escenario más caótico de todos pero el menos probable de ocurrir a la vez. La población que se incorpora apoya a opciones alternativas a la derecha y Concertación, logrando que estas resulten electas. El sistema tambalea al incorporar fuerzas no aliadas con el orden político actual. El quiebre de las coalisiones actuales se torna inminente. 

Existe un quinto escenario, el único favorable al actual orden político: luego de la renovación parcial del padrón los resultados son similares a los que hasta ahora se registran. Es decir, la población chilena sigue apoyando a la Concertación y la derecha. El sistema se fortalece y nos olvidamos de las modificaciones profundas al modelo. 

En este sentido los asesores políticos del gobierno han sido astutos al apurar la iniciativa de manera que esta  se apruebe pronto y así pueda ser "probada" en las municipales 2012, es decir, una elección menor en relación a las presidenciales de fines de 2013. Si se llegase a dar o a preveer uno de los 4 escenarios complicados que anteriormente mencioné, está la opción de recular y volver al sistema antiguo. 

Ahora, sea como sea, me parece que vivimos como país un momento crucial, similar al que se vivió a comienzos de la década de los 90. Las puertas se están abriendo para el ansiado cambio de paradigma, para un nuevo lineamiento direccional y veremos si nuevas fuerzas emergen con la capacidad de aprovechar esta oportunidad. Algunos creen que la población chilena es muy conservadora y siempre optará por el status quo. Sin embargo, yo aún tengo fe en Chile y su destino. Creo que es necesario volver a soñar.