jueves, diciembre 30, 2010

VÍSPERAS DE AÑO NUEVO


De Plotina a su amiga Marcela. Salud.

Marcela querida, mañana sin falta hemos de ir al bosque sagrado de la diosa Strenia. ¡Voy coger ramas en abundancia, tantas como amigos y parientes tengo! Adoro las tradiciones y en todo el año no hay otra más hermosa que la de invocar a Strenia en favor de las personas queridas: que les otorgue sus dones de salud, abundancia, prosperidad y felicidad, pues ella está en condiciones de concederlos.

Iré a recogerte en mi litera y luego te quedarás en mi casa a celebrar el banquete de despedida del año que acaba. Pondremos las ramitas en agua para que conserven toda su frescura y así, al alba del primer día del año, las regalaremos como recién cogidas. ¡La primera ramita será para ti, amiga del alma!


NOTA 1: El 31 de diciembre se celebraba la víspera de la fiesta de la diosa Strenia (el 1 de enero), una diosa antiquísima, que tenía un bosque sagrado cerca de Roma. Era costumbre hacer regalos el 1 de enero, para propiciar a la diosa Strenia. Se regalaban ramitas de su bosque sagrado y, con el tiempo, también tarritos de miel, monedas y, en general, regalos pequeños, pero siempre con valor mágico y religioso. El cristianismo obligó a adelantar esos regalos al 25 de diciembre, coincidiendo con la navidad. Para conocer más detalles de esta fiesta,
Blog de Ana Vázquez

NOTA 2: Os deseo que la diosa Strenia os de toda su protección durante el 2011 y os colme de salud, felicidad y bienestar.

*Bosquecillo en la Vía Appia. Roma.
**Detalle de relieve. Mausoleo de Cecilia Metela. Roma.

martes, diciembre 21, 2010

CANDELA DE AMOR


He aquí mi regalo de Saturnalia, Marco: una candela de cera. Si alguno de tus amigos me critica arguyendo que he sido poco generosa, desmiéntelo. ¿Consideran pobre una candela cuando por tu amor me he convertido casi en una sacrílega? Sacrílega, sí, pues es a ti, y no a Febo Apolo, a quien reclamo la luz. Con esta vela te invoco, Marco amadísimo, para que ilumines para siempre mis días y amanezcas cada mañana a mi lado.

NOTA 1: Las fiestas Saturnales se celebraban desde el 17 al 23 de diciembre. Uno de los regalos tradicionales que solían hacer los clientes a los patronos y los pobres a los ricos era una vela de cera. Simbolizaba el reclamo de la luz del sol en el solsticio de invierno. El dios Apolo estaba asociado al Sol. FELICIDADES A MIS LECTORES/AS

NOTA 2: Os dejo el enlace al post Fiestas felices donde se hace referencia a esta fiesta.
*Fioccola, tipo de candela que se utiliza en Italia para indicar un lugar en fiesta. Se colocan formando un pasillo hacia el lugar de la fiesta, en las ventanas, etc. Roma.

miércoles, diciembre 15, 2010

PRESENTIMIENTO


Ay, ay, tengo un mal presentimiento. Lo husmeo en el aire. Trae una lámpara acá, Nevia. Y aviva el brasero, me ha entrado un frío de muerte. Dile a Zósimo que vaya enseguida al mercado a comprar una oveja para sacrificarla a Juno Lucina. Yo misma la llevaré para que el arúspice lea en sus entrañas la voluntad de los dioses. Se ha puesto de parto la noble Agripina y, ¡ay!, no sé. Desde que me han avisado me ha entrado mucha desazón y todo es venirme a la cabeza la imagen de una fiera sin rostro que con sus zarpas desgarra el vientre de su madre… ¡Daos prisa! Debo ir cuanto antes a la mansión de Agripina y acompañarla en el trance, no en vano fui su ama de cría…


NOTA: El 15 de diciembre del año 37 d.C. nació en Anzio el que sería emperador Nerón, único hijo de Agripina la Menor. Se dice que una adivina le predijo a ella que si su hijo reinaba, la asesinaría. Y que ella contestó: “que me mate, con tal de que reine”. Su deseo se cumplió.
Juno Lucina era la protectora de los nacimientos.

NOTA 2: Os dejo el enlace a la entrevista que me hacen en
Melibro
*Restos de la villa de Nerón en Anzio. La construyó siendo ya emperador. Foto tomada de internet.
**Grutas y restos de la villa de Nerón en Anzio. Foto tomada de internet.

lunes, diciembre 13, 2010

EN EL LUGAR MÁS SALVAJE

Los primeros rayos de sol penetraron entre las ramas y salpicaron de luz su rostro. Abrió los párpados y miró hacia el cielo. No había nubes. Esa mañana lo intentaría por última vez.

Se incorporó y apartó con cuidado las hojas de los terebintos tras los cuales se escondía. Un manantial bordeado de sauces se remansaba a sus pies. En la orilla opuesta permanecía impasible su amado: las manos apoyadas en el borde del agua, el cuerpo inclinado hacia delante y los ojos clavados en el fondo, absorto. Sobre la frente le caía un mechón de cabellos, fruncía levemente el ceño y los labios se entreabrían deseosos de besar. Un beso que quizá sería para ella si consiguiera llamarlo, hablarle…

Nunca le había pesado tanto el castigo que arrastraba por haber ofendido a la diosa Juno. Una venganza cruel. Cierto que ella misma se había excedido, aunque lo había hecho por afecto a sus amigas. ¿Quién no conocía los celos de la reina de las diosas? Su marido, el poderoso Júpiter, era muy enamoradizo y apenas desde las alturas del Olimpo veía a una ninfa hermosa – y todas lo eran – descendía de inmediato para seducirla. Muchas veces Juno, paseando por los bosques, había estado a punto de descubrir a los amantes. Y ella, para impedírselo, le había salido al encuentro y la había entretenido con su charla. Hasta que Juno se dio cuenta de la estratagema y, llena de ira, le había arrebatado la palabra: jamás volvería a hablar la primera y apenas alcanzaría a repetir las palabras de otros.

Al principio no le había dado demasiada importancia. Ahora, sin embargo, ante aquel muchacho a quien amaba con todo su corazón, le dolía la imposibilidad de hablar, esa barrera de silencio que sólo podía romperse si hablaba él. Pero él ni pronunciaba una palabra ni la veía. En realidad, Narciso no veía a nadie: sólo tenía ojos para adorar a ese joven que lo contemplaba desde dentro del agua y le ofrecía los labios cuando él le acercaba los suyos; que sonreía cuando él sonreía y, si lloraba, le respondía con lágrimas.

Si consiguiera llamar su atención, arrancarlo de su ensimismamiento, le demostraría su amor. Ya no le quedaba tiempo: llevaban muchas jornadas sin apartarse del estanque y ambos se consumían de amor estéril. Debía superar el miedo a un nuevo rechazo y actuar. Reuniendo toda su energía, dio un rodeo para acercarse al muchacho y lo abrazó por la espalda.


- ¿Quién está ahí? – gritó Narciso.
- … ahí… ahí…ahí – respondió ella.
- Quien quiera que seas, ¡suéltame ahora mismo!
- … ismo… ismo… ismo.
- ¿Eres tú, Eco? Te dije que nunca te amaría ¡Vete!
- … vete… vete…vete - alcanzó a decir la ninfa con lágrimas en los ojos.

En un instante de suprema lucidez, Eco comprendió la imposibilidad de sus amores: Narciso, enamorado de su propio reflejo, era incapaz de amar a otra persona y a ella, reducida a repetir las palabras de otro, nadie la amaría por sí misma. Deshizo el abrazo y, desesperada, huyó a través de los bosques. Cruzó sin verlos prados y ríos, atravesó simas, se adentró entre los peñascos y buscó refugio en el lugar más salvaje, oscuro y oculto de los cerros.



NOTA: Este texto fue escrito para su publicación en la revista Ratón de Biblioteca (enero-junio de 2010) de la
Fundación Germán Sánchez Ruipérez
de Peñaranda de Bracamonte. O ir directamente a la revista para curiosearla......Ratón de biblioteca
*"Una ninfa". Pintura de Feubach. Imagen sacada de Internet.
**Detalle de una pintura de Thomas Millie. Imagen sacada de Internet.
*** "Narciso", pintura de Caravaggio. Imagen sacada de Internet.
****"Eco y Narciso" pintura de Waterhouse. Imagen sacada de Internet.
*****Detalle de cabeza femenina. Exposición "La belleza del cuerpo" en el MARQ de Alicante. Foto: Rafa Lillo-

jueves, diciembre 09, 2010

ISABEL ROMANA… DE ROMANA

Esta es la caricatura que me ha hecho Pablo Pino para ilustrar una entrevista en Ilike Magazine nº 12 (pg. 42 -43 de la revista; pg. 22 del PDF). La entrevista ha sido realizada por Javier Pellicer . Ahora sí que me siento romana de verdad... Mil gracias a los dos, Javier y Pablo.

martes, diciembre 07, 2010

FUEGOS ARDIENTES

Esto piensa Corina sobre Ovidio


¿Cuál es el poder de Ovidio que, apenas me mira, enciende fuegos ardientes en mi corazón? Sus ojos, apasionados y dulces a la vez, buscan los míos y parecen interrogarme. Conozco esas miradas: hablan de amor y devoción y luego, una vez su dueño ha conseguido lo que anhela, huyen, ansiosas de otras conquistas. Y, dime, madre Venus, ¿existe en Roma un corazón más veleidoso que el de mi poeta?


NOTA: Os dejo una entrevista publicada en El Heraldo del Henares, y realizada por la buena amiga y excelente escritora Carolina Molina. Gracias, Carolina.

*Detalle de una escultura femenina que representa a la Historia, en el monumento a la reina Mª Cristina de Borbón. Madrid.
**Detalle de la fuente La Cibeles. Madrid.

miércoles, diciembre 01, 2010

JUSTO ES LO QUE PIDO

Así se expresa el poeta Ovidio pensando en Corina:

“Justo es lo que pido: que me ame la joven que recientemente me ha cautivado, o que me dé motivos para que yo la ame siempre ¡Ah! ¡He pedido demasiado!: que tan sólo me permita amarla, ¡Ojalá Citerea [Venus] haya escuchado tantas plegarias mías! Aquí tienes a alguien que será tu esclavo durante largos años; aquí tienes a alguien que sabrá amar con fe sincera.

(…) Ofrécete a mí como argumento fecundo para mis versos: surgirán versos dignos de quien los inspira. (…) También nosotros seremos cantados por el mundo entero, juntos los dos, y mi nombre estará siempre unido al tuyo.”

OVIDIO.- Amores.
Traducción de Vicente Cristóbal López

Aquí puede leerse lo que piensa Corina


NOTA: Os dejo un enlace a la revista National Geographic Historia, donde la novela “Dido reina de Cartago” aparece como bibliografía para profundizar más en el tema de los fenicios. Con el enlace podéis entrar en el artículo “Tiro, la reina de las ciudades fenicias”. El apartado de bibliografía está a la derecha de la foto del título.

*Hombre joven. Pintura mural de Anibale Carracci en el Palacio Farnese. Roma.
** Detalle de pintura mural en el Palacio Farnese. Roma.

martes, noviembre 30, 2010

CLAUDIA EN EL FORO


¡Ay, qué lejos están aquellos tiempos en que las divinidades castigaban la lascivia de los hombres transformándolos en animales! Desde que Claudia se pasea por el foro con su perrito en brazos, media Roma – yo incluido – está deseando convertirse en can.


Cristina Monteoliva ha tenido la gentileza de hacerme una entrevista y una reseña de Dido para su Biblioteca Imaginaria. Os gustará conocer su página.

*Detalle de estatua femenina con un perro en brazos. Escaparate de un anticuario en Valencia.
** Detalle de un grabado de Durero.

domingo, noviembre 28, 2010

EN MEMORIA DE HORACIO


El tiempo huyó mientras hablabas, Quinto Horacio. Sin embargo, aunque corrió deprisa, no alcanzó nunca la velocidad de tu cálamo. Afortunados nosotros que podemos disfrutar de tu poesía y dichoso tú, que has triunfado sobre el tiempo y la muerte.


NOTA 1: El 27 de noviembre del año 8 a.C. murió Quinto Horacio Flaco, uno de los poetas latinos más importantes. Uno de sus temas que más fortuna alcanzó y dejó huella en la literatura posterior fue el famoso “carpe diem”, la invitación a disfrutar del momento presente puesto que el futuro es siempre incierto. “Mientras hablamos, huye el envidioso tiempo” es el verso suyo en el que me he inspirado para este epitafio imaginario. El cálamo es el nombre del instrumento que se utilizaba para escribir.

NOTA 2: Gracias a los amigos lirianos que acudieron a recibir a Dido a la Biblioteca de l’Almodí de Lliria. Fue para mí una velada inolvidable. Gracias a Amparo Galduf – periodista y coordinadora de la mesa –, a Vicenta Cortina, representante de Fundar Lliria, y a Pilar Llorca, del club de lectura y promotora de este acto, que me acompañaron en la mesa; al Concejal de Cultura D. Juan Salvador Oliver y la Concejala de Bienestar Social, Dª Amparo Viñuales; a las bibliotecarias Dolores e Inma; a Carmen García de Dones en Acciò de Xirivella, al escultor Miguel Silvestre y su esposa Maribel, a mis amigos Jesús y Juan y a las muchas personas que nos acompañaron. Tenéis una amiga más…


*Monumento a Horacio en la ciudad de Venosa (Venusia en la época romana) donde nació en el año 65 a.C. Imagen tomada de Wikipedia.
** Detalle de relieve en el Cementerio Protestante. Roma.
***Imágenes de la presentación de Dido reina de Cartago en Lliria. Fotos: Rafa Lillo.

viernes, noviembre 26, 2010

A LA CIUDAD DE LA MÚSICA: LIRIA


“(…) Y yo también debo atender a otras personas deseosas de ayudar. Quienes están con nosotros deben sentirse parte de esta aventura. Sin el esfuerzo aunado de todos, nada puede hacerse con éxito”

Dido, reina de Cartago. Pg. 31.

Gracias a los amigos edetanos que acogerán durante unas horas a la reina.

Mientras la reina viaja, podéis leer las crónicas sobre la segunda sesión de las I Jornadas de Novela Histórica de Murcia, en la que tuve el honor de participar, en las crónicas de
Insula Litterae y de Hislibris. Fue un enorme placer compartir con isleños e hislibreños unas horas.

miércoles, noviembre 24, 2010

CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO


Ella no podía discutirte, ni contrariarte, ni ser, porque habías cifrado tu poder en golpearla, humillarla, herirla y amenazarla con arrancarle la vida. Finalmente has cumplido tu amenaza. El poder supremo de infligir la muerte sólo te ha durado un instante. Y en las manos y en los ojos te ha quedado un reguero de sangre y ningún poder. Abomino de ti, sujeto indigno de ser llamado hombre.
NOTA: El 25 de noviembre es el Día Internacional contra la violencia de género. En Valencia, a las 19,30 horas, habrá una manifestación. Concentración en el Parterre. Hemos de luchar activamente contra esta lacra social.

*Detalle de la escultura Santa Cecilia. Santa Cecilia in Trastevere. Roma. Foto: Rafa lillo.

lunes, noviembre 22, 2010

EL VALLE DE MURCIA


Así se llamaba valle que separaba la colina del Palatino de la colina del Aventino. En él existía un templo dedicado a la diosa Venus junto al cual crecía un bosquecillo de mirto. Así, por derivación de “mirto”, el templo se llamaba de la Venus Murtea o Venus Murcia. A ese templo, desesperada por haber perdido el amor de Cupido, fue a entregarse la enamorada Psique a su suegra Venus.

En consonancia con su resonancia mítica, el pasado sábado 20 de noviembre Murcia acogió, en su Museo Arqueológico (MAM), una mesa redonda sobre los mitos, dentro de las I Jornadas de Novela Histórica. En ella participamos Josep Asensi, Antonio Penadés y yo misma. Aquí, junto con mi agradecimiento a Fuensanta Niñirola como promotora y a Luis Miquel como anfitrión, os dejo unas fotos del evento.

Parte del placer fue encontrarme con queridos amigos: Isabel y amigas,
José, Isabel, Begoña, Maik pimienta, Chema, Mª Jesús y la propia Fuensanta. Gracias a tod@s.


viernes, noviembre 19, 2010

MITOS Y PÁJAROS


"¿Por qué los latinos veneran al pico-verde y todos evitan escrupulosamente a esta ave?

¿Acaso porque cuentan que Pico vio transformada su naturaleza por el veneno que le administró su esposa y, convertido en pico-verde anuncia presagios y da respuestas a quienes le preguntan? Semejante motivo es realmente increíble y portentoso.


¿Pero resulta más admisible aquellla otra leyenda según la cual no fue sólo una loba la que ofreció sus ubres a los abandonados Rómulo y Remo, sino que también un pico-verde, haciendo continuos vuelos hasta ellos, les proporcionó alimentos? En los lugares sitos al pie de las montañas y en los parajes boscosos es frecuente aún hoy día ver - como cuenta Nigidio - que donde se halla el pico-verde suele encontrarse también el lobo."

PLUTARCO: Cuestiones Romanas.

Traducción de Manuel Antonio Marcos Casquero


NOTA: Este texto viene de maravilla como prólogo a la Mesa redonda sobre los mitos y las novelas mitológicas que tendrá lugar el sábado día 20 en el Museo Arqueológico de Murcia, a la que estáis invitados. (Entrada libre).


*Pajaro carpintero. Imagen tomada de Wikipedia.

**Loba Capitolina, en los Museos Capitolinos. Roma. Foto: Rafa Lillo.

***Detalle de mosaico. Museos Capitolinos. Roma.

miércoles, noviembre 17, 2010

IMPRECACIÓN

¿Sabes que ayer, mientras limpiaba el balcón, vi pasar por la calle al nuevo esclavo de Aulo Cecina? Te juro por todos los dioses, Pánfila, que hubiera deseado que se hundiera el suelo del balcón para caer en sus brazos. Pero no tuve suerte. ¡Maldito sea Ceciliano, el constructor!



NOTA 1: La indignación de esta esclava es casi una burla. Los constructores romanos no descollaban precisamente por la solidez de las insulas (casas de pisos), sino por todo lo contrario… En Roma aparecieron los balcones hacia final del s. IV a.C. y, al parecer, la costumbre se difundió mucho, hasta el punto de convertirse en motivo de disputas entre los vecinos por estorbarse la entrada de luz, ensombrecer las calles, etc. Se construían con distintas técnicas en madera y en piedra.


NOTA 2: El sábado 20 de noviembre, a las 18 horas, en el Museo Arqueológico de Murcia (MAM) y dentro de las Jornadas sobre novela histórica actual, se celebrará una mesa redonda: "Novelas mitológicas griegas y romanas". Participaremos: Josep Asensi ("Layos"), Antonio Penadés ("El hombre de Esparta") y yo misma ("Dido reina de Cartago"). Quedáis invitados.

Os dejo el enlace a la reseña de “Dido reina de Cartago” aparecida en la página Cultura Clásica com

*Insula do vaso fálico, Conímbriga (Portugal). Podeis ver en la fachada los balcones.

lunes, noviembre 15, 2010

APOLODORO DE DAMASCO Y EL TEMPLO DE VENUS Y ROMA.


¿Quién no enmudecía de asombro y de placer al entrar en el Foro de Trajano, tu obra maestra, el conjunto monumental más hermoso de todo el imperio? Creíste que tu fama y las grandes obras que habías concebido y construido para el emperador Trajano te colocaban por encima de los demás hombres y te aseguraban el respeto de cualquiera. Que podrías expresar libremente tus opiniones y tus ideas. Y, sin embargo, Apolodoro, te equivocabas. Te dejaste llevar por la soberbia. No mediste tus palabras ni supiste calibrar el poder de la persona a quien ofendías.

Sí, hablo del emperador Adriano y del templo de Venus y Roma en cuyas trazas el propio emperador había querido tomar parte. ¡Cuánto te reíste al ver las proporciones! Dijiste, entonces, que si a las diosas se les antojaba levantarse de sus tronos para dar un paseo por la ciudad, no podrían hacerlo, so pena de romperse las cabezas en el techo de las cellas. Pagaste con la vida semejante imprudencia.


Y mira si estabas equivocado, Apolodoro de Damasco: no hay ahora mismo en Roma un templo que suscite más admiración que el de Venus y Roma ni que conmueva tanto los corazones de las personas que se acercan a verlo.



NOTA 1: Cella es el nombre de la sala – generalmente como una gran hornacina – donde se alojaban las estatuas.
Apolodoro de Damasco, gran arquitecto de Trajano, fue, entre otras grandes obras, el autor del Foro, los Mercados y la Columna de Trajano en Roma. Tras la muerte de ese emperador, sería el autor del maravilloso Panteón de Agripa, por encargo del emperador Adriano. Es posible que también proyectara el templo de Venus y Roma y que estuviera molesto por la intervención de Adriano a quien habría ofendido del modo que se ha narrado. Fue condenado al exilio y, poco después, ejecutado, según dice el historiador Dion Casio.

Lo que resta del templo de Venus y Roma ha sido objeto de una rehabilitación y acaba de abrirse al público para su visita.

NOTA 2: El sábado 20 de noviembre, a las 18 horas, en el Museo Arqueológico de Murcia (MAM) y dentro de las Jornadas sobre novela histórica actual, se celebrará una mesa redonda: "Novelas mitológicas griegas y romanas". Participaremos: Josep Asensi ("Layos"), Antonio Penadés ("El hombre de Esparta") y yo misma ("Dido reina de Cartago"). Quedáis invitados.



*Y **Vistas del Templo de Venus y Roma. Roma. Fotos: Rafa Lillo.

miércoles, noviembre 10, 2010

LA FUENTE DE LA NINFA ARETUSA



De Popilia a su nieta Lucila. Salud.

Olvidé decirte en mi última carta, querida niña, que debes visitar la fuente sagrada de Aretusa cuando llegues a Ortigia. Yo la recuerdo con mucha emoción. Declinaba ya la tarde cuando llegamos a la isla y, pese al cansancio y a la resistencia de tu abuelo, no consentí en ir a nuestro alojamiento sin haber pasado antes por la fuente. Y volví muchas veces. Hay, en la dulzura y mansedumbre de sus aguas, siempre tersas, un espejo en el que podemos mirarnos las romanas.

¿Hemos de huir siempre las mujeres? Eso me preguntaba entonces y me sigue inquietando ahora. Aretusa era hermosa y casta y no se vanagloriaba de su belleza, antes bien le incomodaba y trataba de ocultarla. Amaba la compañía de la diosa Diana y ésta la apreciaba, permitiéndole muchas veces sostenerle su aljaba y su arco. Y así la ninfa recorría los bosques y las selvas, descuidada de cualquier otro placer. Un día de calor sofocante, agotada tras una larga caminata por la espesura, se encontró a la orilla de un río. Hubiera podido contar los guijarros del fondo, tan transparente era el agua, y los sauces arrojaban sobre ella una sombra acogedora. Aretusa sintió la necesidad de bañarse. Se quitó las ropas, las colocó junto a un bosquecillo de álamos y se metió en el río.

Cerró los ojos para saborear aquel fresco placer: las ondas refrescaban sus miembros y la empujaban con suavidad; el sol, al pasar por entre los resquicios del follaje perdía calor y dibujaba hojas de sombra sobre su piel; hasta ella llegaban atenuados los rumores de la floresta. Y, de pronto, junto a su oído, oyó un extraño susurro. Se asustó, y alcanzó la orilla más cercana. Escuchó entonces, con claridad, la voz del río Alfeo: “¿Por qué huyes, Aretusa? ¿A dónde vas? Ven. Vuelve.”

Aretusa, reconociendo el deseo en el tono de la voz, emprendió una veloz carrera. Atravesó campos y ciudades, bosques, valles, montes, y Alfeo volaba tras ella y trataba de disuadirla para que pusiera fin a su huida. Sus fuerzas se agotaban y sentía el aliento de su perseguidor cada vez más cerca. Cuando ya casi el hombre tocaba sus cabellos, invocó a Diana y le pidió ardientemente ayuda. La diosa, compadecida, la envolvió en una nube para ocultarla. Pero Alfeo seguía allí, daba vueltas en torno a la nube y pronunciaba su nombre. La ninfa temblaba. Él observaba una y otra vez la tierra: las huellas de ella terminaban allí, y así, olisqueaba el aire como una alimaña, tratando de descubrirla por su aroma.

La venció el miedo. Un sudor frío le cubrió todo el cuerpo y comenzó a gotear. De los cabellos mojados escurría el agua, los pies y los brazos empezaron a destilar fluidos y, casi en un instante, todo su cuerpo se deshizo en líquido. Se dio cuenta Alfeo y, abandonando la figura de hombre que había adquirido, volvió a transformarse en río para unirse a su amada. Pero Diana, entonces, abrió el suelo, hizo caer a la líquida Aretusa en profundas cavernas y la condujo oculta bajo las olas hasta Sicilia, haciéndola resurgir a la orilla del mar, en la isla de Ortigia.


Y allí sigue, brotando dulce junto al mar bravío, huyendo eternamente de Alfeo. Lávate las manos y el rostro en sus aguas, Lucila. Y pídeles a Aretusa y a Diana que te libren de todo Alfeo. Que no permitan que nadie ejerza sobre ti violencia y seas tú, por tu propia voluntad, quien, llegado el momento, te entregues de buen grado a los brazos de tu marido.

Acuérdate de mí ante aquel mar brillante y cuídate.
NOTA 1: La fuente Aretusa es famosa desde la antigüedad. Ortigia ya no es una isla, porque ha quedado unida por un pequeño puente a la ciudad de Siracusa, de la que formaba parte.
NOTA 2: El viernes 12 de noviembre, a las 20 horas, será la presentación de la novela “Dido reina de Cartago” en la Casa de Cultura de Xàbia. ¡Quedáis invitados!


NOTA 3: Os dejo unas fotos de la VIII Jornada de Cultura Clásica de Sangut.


*Fuente de Aretusa, en la actualidad. Siracusa. Sicilia.
**Vista del mar junto a la fuente de Aretusa. Foto de Rafa Lillo.
***Detalle de escultura masculina en una fuente de Catania. Sicilia. Foto de Rafa Lillo.
****Escultura moderna representando a Aretusa y Alfeo junto a la fuente de Aretusa. Siracusa. Sicilia.
*****Restos de edificios antiguos en la orilla del mar. Siracusa (Ortigia). Foto de Rafa Lillo.



lunes, noviembre 08, 2010

EL OMBLIGO DE ROMA



¿Que te acompañe a la tienda de Antula? Estás loca. No pienso salir de casa en todo el día y si esa modista, por afamada que sea, se atreve a cortar una túnica nueva o a aceptar encargos, ten por seguro que no le saldrán bien. Y menos aún teniendo en cuenta lo cerca que está del Ombligo de la ciudad. Cierto que puede presumir de ello, pero en un día como hoy, con el Mundus abierto, ¡todos los espíritus infernales pasarán por delante de su puerta! Y tú, si tienes sentido común y un mínimo de prudencia, harás bien en quedarte aquí conmigo: mañana el Mundus volverá a estar cerrado y no correrás el riesgo de que la tijera de Antula estropee, con un mal corte, una tela tan bonita.



NOTA 1: El umbilicus urbis “ombligo de la ciudad” señalaba el centro de la ciudad, y en él se hallaba el pozo cavado por Rómulo para hacer las primeras ofrendas al fundar la ciudad. Ese pozo se llamaba Mundus y era considerado la puerta del mundo infernal. Esa puerta se abría tres veces al año: el 24 de agosto, el 5 de octubre y el 8 de noviembre y se suponía que las divinidades infernales salían a través él. Esos días se señalaban en el calendario como Mundus patet (“el mundus está abierto”) y eran considerados sumamente nefastos y peligrosísimos. No se celebraban actividades oficiales. ¡Espero que no haya sido para vosotros un mal día!


NOTA 2: El viernes día 12 de noviembre, a las 20 h. en la Casa de Cultura de Xàbia (Jávea) se hará la presentación de la novela Dido reina de Cartago. Me encantaría contar con vuestra presencia.

* Al lado del arco de Septimio Severo, justo detrás del tejadillo de pizarra, se ve una construcción redonda de ladrillo, a modo de altar, parcialmente rodeada de mármol blanco. Ese es el Umbilicus urbis y el Mundus. Foro romano. Roma.
**El Umbilicus urbis desde otro ángulo. Foro romano. Roma.

jueves, noviembre 04, 2010

CONTRA LOS FILTROS MALIGNOS



Marcia ha colgado sobre la puerta de su casa una estrella de mar empapada en sangre de zorro para protegerse de los filtros malignos. ¡La maligna es ella, por haberle arrancado a las rocas una estrella tan hermosa! Ahora, aunque hunda mi mano en el agua, ya no podré imaginar que toco el cielo.

NOTA: Esta y otras prácticas supersticiosas se utilizaban para proteger las casas, según nos informa Plinio el Viejo.

*Estrella de mar en el Oceanográfico de Valencia.

martes, noviembre 02, 2010

EN BUENA COMPAÑÍA


“(…) Dido contempló el espectáculo del amanecer sobre su ciudad, la más hermosa del mundo. O, al menos, la más amada para ella. Los tejados de las casas se extendían hasta el puerto. Brillaba el mar.

Pensó en cuántas personas se sentirían ahora mismo seguras al abrigo de sus hogares. Muchas madres se habrían levantado ya para encender el fuego y preparar un caldo con el que confortar el estómago a sus hijos; muchos hombres irían de camino a los campos, saldrían a la mar a pescar o emprenderían un viaje con las bodegas de las naves llenas de mercancías. En poco tiempo la ciudad entera estaría en pie para iniciar la rutina diaria. Sin desconfianza. Sin temores.


La reina se apartó de la ventana y permaneció en pie delante del Príncipe del Senado quien, en el transcurso de la noche, parecía haber envejecido. De pronto, le tomó las dos manos y se arrodilló ante él, mirándolo a los ojos.

- Cuando mi padre decidió que yo, como primogénita, heredase su trono, comenzó a aleccionarme. Muchas veces me repitió “Sé siempre justa, Dido. La justicia es una condición necesaria para la paz. Y busca siempre la paz, porque es el único clima en el que puede florecer la justicia”.

- Tu padre fue un hombre cabal y un rey pidadoso.

- No entregaré Tiro a un baño de sangre – afirmó la reina –. No lo haré. Y como es imposible contener la ambición de mi hermano, me marcharé de aquí. Es la única solución que encuentro para salvaguardar a mi pueblo. Huiré con cuantas personas quieran acompañarme. Algún lugar encontraré en la tierra donde construir una nueva ciudad.”


De la novela “DIDO REINA DE CARTAGO”.

Junto a la reina estuvieron, en esa hora crítica, muchas amigas. ¡Gracias, Izaskun, Marina, Virgi, Carolina, Pilar, Carmen, Amparo, Ana y tantas otras amigas! ¡Gracias a todas por acompañarla y acompañarme en esta andadura!



Presentación de la novela "Dido reina de Cartago" en la Libería de Mujeres de Canarias. Santa Cruz de Tenerife.

*Cabeza de Amazona. Museos Capitolinos. Roma
**Vista de Santa Cruz de Tenerife desde casa de Marina. Santa Cruz. España.
***Detalle de decoración mural de un palacio en La Laguna. Tenerife. España.

lunes, octubre 25, 2010

HACIA LAS CANARIAS



Tras huir de la ciudad de Tiro, la reina Dido navegó durante tres años buscando un lugar donde fundar una nueva ciudad, fuera del alcance de sus compatriotas. Contrató los servicios de un cartógrafo, buen conocedor del Mediterráneo, para que la aconsejara y la guiara. Esto dijo el cartógrafo:

“Vayamos hacia el oeste, donde no se aventuran los navegantes de tu nación por temor a los monstruos y las criaturas desconocidas. En dirección a las Columnas de Hércules. Allí comienza el mar, aunque no llegaremos tan lejos.”


Pues sí llegaremos más lejos: la reina Dido va a Tenerife a encontrarse con sus amigas de la Librería de Mujeres el jueves 28 de noviembre, a las 19,30 h. Y va sin miedo. ¡Os esperamos!

viernes, octubre 22, 2010

EL FIN DE BRUTO


Tras la derrota que le habían infligido las tropas de Octavio y Marco Antonio en la batalla de Filipos, Bruto decidió quitarse la vida arrojándose sobre su espada. Unas noches antes, se le había aparecido el espíritu de César, a quién él había asesinado junto con otros conspiradores. Así narra Shakespeare la muerte de Bruto:

“BRUTO: ¡Adiós, querido Estratón! (se arroja sobre su espada) ¡César, aplácate ahora! ¡No tuve para tu muerte la mitad de deseo que para la mía!”

W. SHAKESPEARE.- “Julio César”

NOTA 2: -Queridos amigos, este blog ha superado las 400 entradas y las 300.000 visitas. Gracias por vuestra compañía.

miércoles, octubre 20, 2010

EL BAÑO DE VENUS

De Popilia a su nieta Lucila. Salud.

Me dice tu madre que has recuperado el buen humor y, prosiguiendo vuestro viaje por Sicilia, habéis disfrutado mucho de la visita a Erice. Recuerdo muy bien cuánto esfuerzo me costó llegar hasta la cumbre para visitar el santuario de Venus, ¡y eso que han pasado veinte años…! Contemplar el mar desde aquella altura, extendido a nuestros pies hasta alcanzar el horizonte, calmo, brillante bajo la luz del sol, silencioso y rumoroso a la vez, me causó una emoción muy intensa. Supe que estaba en un lugar sagrado. Y sentí que ese mar que llamamos nuestro es también el mar de muchos pueblos y la sacralidad de esa cumbre procedía de muchas diosas.

Hay allí, en el santuario, un estanque donde dicen que tomaba el baño Venus. Cierro los ojos y puedo imaginar la luna reflejándose en el agua y la más hermosa de las diosas emergiendo de sus ondas. No es la Venus Genitrix, madre del pueblo romano: es la Venus Ericina, la que desata la pasión amorosa hasta extremos que nos hacen temblar. Insufla esa pasión que no conoce límites, la que trastoca el orden del mundo, la incontenible, la que ciega y hace sordas a sus víctimas, les arrebata la razón y las lleva a sacrificar ante su altar todo: familia, honor, patria, futuro, e incluso la vida.

Los habitantes del lugar afirman que esa ciudad fue fundada por el padre Eneas después de abandonar a la reina Dido y las playas de Cartago. ¿Y sabes lo que pensé, cuando me lo dijeron? Que nuestra Venus de Erice, o la Astarté de los cartagineses, o la Afrodita de los griegos – pues a todas ellas ha estado consagrado el santuario –, han sabido vengarse de los romanos por la conducta de Eneas. Y así, la misma pasión que sintió Dido por Eneas, la provoca en los romanos la Venus Ericina. No es un castigo pequeño.

Pero tú, querida niña, no tengas miedo. Guarda tu corazón y no permitas nunca que en él penetre la locura de Ericina. Con todo, es una diosa a la que conviene honrar y espero que le hayas ofrecido los sacrificios pertinentes para no desatar sus iras. Cuídate.



NOTA 1: La Venus Ericina [la Venus venerada en el santuario de Erice] era, efectivamente, muy temida en Roma, por representar la pasión amorosa. Era muy famoso su santuario, pues era además protectora de los navegantes.

NOTA 2: Os recuerdo que mañana se presenta en el Museo L'Iber de Valencia la novela "Dido reina de Cartago".Aquí podéis ver los detalles de la presentación

*Erice, vista desde cerca de Trapani. Sicilia.
**Vista del mar desde el lugar que se supone fue el santuario de Venus. Erice. Sicilia.
***Cisterna denominada "Baño de Venus" en la fortaleza normanda, donde se supone que estuvo el santuario de Venus, Astarté y Afrodita. Erice. Sicilia.