Observen la tapa de Clarín del día de hoy
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Si uno anda muy apurado puede pensar que Clarín está por fin contando lo que ocurre: la multitud que marchó a Plaza de Mayo en San Cayetano, "La Iglesia" (la iglesia católica sería más correcto) advirtiendo sobre el desempleo y un espacio generoso para las palabra de Scioli defendiéndose de acusaciones de corrupción. Guau, piensa el desprevenido. Es tan jodido el asunto que no pueden seguir ocultando el sol con un dedito.
Bueno, no señores. La cosa pasa por otro lado. Y ese lado tiene nombre, se llama Turner. El jueves 4 de agosto, mientras un juez intentaba meter presa a Hebe de Bonafini y en vísperas del segundo Ruidazo contra el aumento salvaje de tarifas.
Mauricio Macri se reunía con Joel Whitten “Whit” Richardson, el vicepresidente ejecutivo de
Distribución y Mercadeo de Turner Broadcasting System para América
Latina. El tema que los reunió fue el fútbol dado que Turner desea quedarse con ese negocio en Argentina, aunque mantuvieron
un estricto secreto, incluso, no consignando la reunión en la agenda oficial.
Ahora recordemos que en este terreno Turner le pisaría los callos al Grupo Clarín, quien tiene un negocio en marcha y aspira a recibir todo lo que pueda obtener de la venta del fútbol y de todo lo que tenga que ver con él.
No podemos conjeturar el contenido de la reunión con el Joel, pero sí puedo sospechar que lo discutido no le conviene a Clarín. Por eso comienza a lanzar disparos de advertencia a Macri. En este caso una columna a la derecha en la tapa del día de hoy.
No es que se hayan vuelto humanos de repente. Lo que están haciendo es lanzar jabs de izquierda avisando que, si les cagan la quintita, va el uppercut.
Es de manual el asunto, pero sirve para corroborar la manera en que se mueven los muchachos del tabloide.