Hoy me gustaría compartir con vosotros la obra del interiorista belga Michel Penneman por varias razones: la primera de ellas es porque es el artífice de algunas de las intervenciones en espacios públicos más interesantes que he visto últimamente, como el Hotel Pantone, o el White Hotel, ambos en Bruselas; la segunda, porque a pesar de que su estilo varía en cada uno de los proyectos que aborda, no faltan nunca los muebles de los fifties, sobre todo los clásicos escandinavos, muy a menudo en contraste con piezas más clásicas. En el Hotel Pantone, como no podia ser de otro modo, prima el color. Cada una de sus siete plantas está dedicada a una paleta cromática:
No cabe ninguna duda de que en el White Hotel predomina el blanco. A pesar de que observamos cierta tendencia al minimalismo, sin embargo no es un estilo frío:
En el Hotel Vintage, también en Bruselas, es donde Penneman despliega de manera más acertada la fértil combinación entre piezas de los cincuenta y tendencias más modernas. Sobresale especialmente el uso de papeles pintados de los 50 y 60.
De nuevo en Bruselas, en un edificio del siglo XIX, la Tenbosch House es una especie de B&B, u hotel-casa. Aquí el interiorista belga ha desplegado toda su sabiduría en el arte de aplicar el mix de estilos, con un diseño sólido pero simple a la vez:
Para finalizar, os dejo con las imágenes del diseño de una vivienda privada, el apartamento de un coleccionista de arte, en el que se muestra de manera espectacular el diálogo entre pinturas y esculturas con los clásicos del diseño del XX, como las sillas Tulip.
Espectacular, ¿verdad? Seguro que ya has apuntado a Michel Penneman entre tus interioristas favoritos. Yo sí.