Propagacion Vegetativa

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 20

PROPAGACION VEGETATIVA

JESMAR DANITZA LLANES GALVIS


1611543

PRESENTADO A:
JAYDA ESPERANZA PABON

UNIVERSIDAD FRANCISCO DE PAULA SANTANDER


FACULTAD DE CIENCIAS AGRARIAS Y DEL AMBIENTE
INGENIERIA BIOTECNOLOGICA
CUCUTA
2020
METODOS DE PROPAGACION VEGETATIVA
La multiplicación o propagación vegetativa es la producción de una planta a partir
de una célula, un tejido, un órgano o parte de una planta madre. Existe una gran
variedad de métodos, desde los procedimientos más sencillos (estacas) hasta los
tecnológicamente más complejos (cultivo in vitro).
Un método de multiplicación de plantas, muy utilizado por los agricultores, es la
multiplicación o propagación vegetativa, el cual no precisa de semillas para
obtener una nueva planta, se trata de aprovechar la propiedad que presentan
algunos vegetales de que una parte de la planta puede separarse y desarrollar
una nueva planta independiente.
La propagación vegetativa se conoce desde el inicio de la Agricultura con la
domesticación de muchas especies de plantas que se cultivan hasta nuestros
días. En este tipo de propagación, distintas partes de una planta, bajo
determinadas condiciones de crecimiento (luz, temperatura, humedad, nutrientes,
sanidad, etc.) pueden dar origen a un individuo completo.
La propagación vegetativa se puede realizar debido a que muchas células de los
tejidos diferenciados (maduros) de la planta, conservan la toti potencialidad, con
esta característica una célula ya adulta puede de diferenciarse (retomar la
actividad meristemática) y multiplicarse dando origen a los órganos vegetativos
(raíz, tallo y hojas).

TIPOS DE MULTIPLICACIÓN VEGETATIVA

Los métodos de propagación pueden ser clasificados como naturales, según si se


trata de estructuras propias de las plantas que le permiten reproducirse
asexualmente (bulbos, tubérculos, rizomas, estolones, hijuelos, etc.) o artificiales
si son producidas por el hombre (estaca, esqueje, injerto, acodo y cultivo in vitro).

ESTACAS O ESQUEJES

La propagación por estacas es una técnica de multiplicación vegetal en la que se


utilizan trozos de tallos, los que colocados en condiciones ambientales adecuadas
son capaces de generar nuevas plantas idénticas a la planta madre. Estas
porciones son fitómeros: es la menor porción formada por un nudo con la yema y
una porción de los entrenudos superior e inferior que permite la multiplicación.
Plantadas bajo condiciones ambientales favorables se induce a formar raíces, y
luego desarrolla el brote vegetativo produciendo así una nueva planta
independiente.
A menudo se usa esqueje para referirse a ramas jóvenes o de menor consistencia
y estaca para tallos lignificados. La capacidad de una estaca para formar un
sistema radical o caulinar adventicio depende de factores endógenos, es decir
propios del material, y de factores exógenos (ambiente). Este es el método más
importante para propagar arbustos ornamentales y varios cultivos arbustivos y
leñosos. Un ejemplo de propagación de estacas leñosas de uno o dos años son
las higueras (Ficus carica), pero se emplea para muchos frutales (vid, higuera,
manzano, olivo, etc.) y para plantas ornamentales (rosal), y un ejemplo de
propagación por estacas semi leñosas son los olivos (Olea europea).

Algunos ejemplos de propagación de esquejes son los herbáceos, de raíz y


de hoja. Los esquejes herbáceos se basan en la utilización de un tallo tierno, sin
endurecer, del año, el cual solamente es adecuado para especies de fácil
propagación como los geranios, coleos, entre otros. En algunas plantas se
propagan en cámaras de nebulización. En los esquejes de raíz se utilizan
fragmentos de raíz, los cuales una vez plantados, son capaces de regenerar
totalmente la parte aérea. Es un sistema muy bueno para plantas que se
extienden por rizomas. La propagación por esquejes de hoja se realiza solo en
plantas cuyas hojas almacenen suficientes sustancias de reserva como para poder
generar raíces, como algunas crasuláceas.
La implantación de clones selectos permite que los cultivos presenten mayor
homogeneidad, rendimiento y calidad. La propagación vegetativa se realiza por
medio de la plantación de estacas de 5 a 8 cm de longitud y de 5 a 7 mm de
diámetro) con una hoja y que sean de la brotación del año para que posea
características de juvenilidad y así facilitar su enraizamiento adventicio, o se corta
media lámina foliar para evitar el exceso de transpiración. El enraizamiento mejora
con la aplicación de hormonas de enraizamiento que se aplican únicamente en la
superficie de corte.

PROPAGACIÓN POR ACODO


El acodo es un método de propagación en el cual se provoca la formación de
raíces adventicias a un tallo que está todavía unido a la planta madre. Luego, el
tallo enraizado, se separa para convertirlo en una nueva planta que crece sobre
sus propias raíces. La rama acodada sigue recibiendo agua y minerales debido a
que no se corta el tallo y el xilema permanece intacto. La formación de raíces en
los acodos depende de la provisión continua de humedad, buena aireación y
temperaturas moderadas en la zona de enraizamiento. Existen los acodos aéreos,
de trinchera, de punta, entre otros. Esta técnica se utiliza comercialmente en
ornamentales y en cultivos como la vid, pero funciona para muchas especies.
Tipos de acodos
El acodado consiste en hacer desarrollar raíces a un tallo sin separarlo de la
planta madre. Una vez que ha enraizado se separa, obteniéndose otra planta
independiente, que vivirá con sus propias raíces.

Hay diferentes tipos de acodo:


 Acodo simple

 Acodo múltiple o en serpentina

 Acodo aéreo

 Acodo en montículo

 Acodo en trinchera

 Acodo de punta
 
Para jardinería, los 3 primeros son los más empleados: acodo simple, múltiple y
aéreo.
• Acodo simple

 Acodado simple

 
El acodo simple va bien para enredaderas (Jazmín, Bignonias, Clemátide,
Glicinia, Madreselva...) y para muchos arbustos, siempre que sea posible doblar
un tallo jóven hasta que alcance el suelo. Algunos ejemplos de arbustos que se
pueden propagar por acodo simple:

- Corylus
- Cotinus
- Daphne
- Euonymus
- Forsythia
- Magnolia
- Osmanthus
- Philadelphus
- Rhododendron
- Spiraea
- Syringa
- Etc., etc.
 
Época
 
Se suele llevar a cabo en primavera, usando ramas durmientes de un año de
edad, y se saca la rama enraizada en otoño o a finales del invierno siguiente,
antes de que se inicie el nuevo crecimiento. En clima cálido mediterráneo también
se puede acodar en otoño y sacar en la primavera del año siguiente.

El acodado puede retardarse hasta que la estación de crecimiento se encuentre


más avanzada, y hacerse una vez que las ramas de ese año han alcanzado la
longitud suficiente y se han consolidado.
Procedimiento

1. Elige un vástago largo y flexible. Se usan ramas bajas, flexibles, que se


pueden doblar fácilmente hasta el suelo. es necesario elegir ramas jóvenes,
vigorosas y flexibles, de 1 ó 2 años.

2. Hazle un corte en la zona a curvar, por la cara de abajo, de 2,5 cm de largo y


en sentido diagonal. La finalidad de esta herida es retener ahí la savia para que se
formen raíces. Esta zona del corte irá enterrada. El corte se mantendrá abierto
mediante una pequeña cuña de madera o rama (ver detalle en dibujo en color
superior).

3. En lugar de un corte, se puede extraer un anillo de corteza alrededor de la


rama, de unos 2 ó 3 cm. de longitud, como se si fuera un acodo aéreo (ver dibujo
más abajo en acodo aéreo).

4. Impregna en el corte o el anillo con polvo o líquido de hormonas de


enraizamiento y mantenlo abierto introduciéndole un palito si se hace un corte
(por ejemplo, con una cerilla).

5. Arranca las hojas que se encuentren en la parte de la rama que va a ser


enterrada, pero deja algo de follaje en la punta.

6. Se arquea la rama al suelo fijándola con una horquilla, dejando un extremo
de unos 30 ó 40 cm que se ata a un tutor vertical. Esa zona enterrada se tapa con
tierra, o mejor, con turba mezclada con la tierra.

7. Se ha de regar durante la época seca y mantener libre de malezas.

8. A finales del invierno siguiente podrás separar la rama de la planta madre


cortando por debajo de las raíces emitidas. Magnolia necesitará otro año más sin
separarlo de la planta ya que el enraizamiento es más lento.

9. Obtienes lo mismo que si hicieras un esqueje. Las ramas enraizadas las pueden
plantar en macetas para engorde o directamente en su lugar definitivo.

10. Algunos arbustos, tales como Forsythia suspensa, Zarzas, Brezos, Spiraea,


Avellano y Jazminum nudiflorum, a menudo se acodan por sí mismos
naturalmente; un regalo para el jardinero, que puede levantarlos con muchas
raíces fuertes ya formadas, separarlos de la planta original y plantarlos en el lugar
elegido.

• Acodo múltiple, compuesto, en serpentina, serpentino

 Acodo múltiple, serpentino

 
En arbustos se usa poco, es más indicado para trepadoras, como Madreselva,
Jazmines, Clematis, etc. porque tienen tallos más largos y flexibles. Muy fácil de
hacer en Poto.

Se realiza como el acodo simple, con los mismos principios, pero enterrando la
rama en varios puntos, en vez de en uno sólo. En esta forma se pueden tener
varias plantas nuevas de una sola rama.
 
Si la planta está en una maceta, se emplean otras macetas para enterrar las
distintos puntos, uno por maceta. Ejemplo: Poto.

Es importante que cada porción de tallo tenga una hoja y una yema, así podrá
crecer y producir savia nutritiva por las hojas.

Una vez enraizados se cortan cada porción y se obtienen varias plantas.

• Acodo aéreo

Acodado aéreo
Acodos aéreos

El acodo aéreo se aplica más sobre árboles, aunque hay muchos arbustos,
trepadoras y plantas de interior que lo admiten perfectamente. Esos son algunos
ejemplos:

- Acebo
- Azalea
- Camelia
- Drácenas
- Drago
- Enebro (Juniperus communis)
- Ficus
- Fotinia (Photinia serratifolia)
- Glicinia (Wisteria)
- Granado
- Hamamelis
- Hibiscus rosa-sinensis
- Higuera
- Laurel
- Lilo
- Madroño
- Magnolia soulangiana
- Magnolio
- Mirto
- Pitosporo
- Rododendro
- Tejo
- Tronco del Brasil
- Tuya
- Yucas

Época
 
La mejor época para el acodo aéreo es la primavera. La ramita enraizada se
sacará en otoño o en la primavera siguiente, antes de que se inicie el nuevo
crecimiento.
En climas cálidos, por ejemplo, de tipo Mediterráneo, también se pueden hacer
acodos al inicio del otoño y separar el acodo en la primavera siguiente.

No se debe hacer en pleno verano ni en invierno, al ser periodos de inactividad.


Lo más importante para tener éxito con los acodos es hacerlos con la planta en
plena actividad, cuando circula savia.

Las Plantas de Interior en un ambiente templado o en invernaderos pueden


acodarse casi en cualquier época del año.

Procedimiento

1. Selecciona una buena rama ó tallo. Por ejemplo, una que si desapareciese
de la planta no afectaría a su aspecto estético.

2. Se puede acodar a la vez hasta el 70% de la copa de un árbol o arbusto.

3. Hay que hacer un anillo de corteza a unos 30 cm. de la punta de la rama,


por ejemplo, o a más distancia. (Ver dibujos superiores).

4. Se efectúan con un cuchillo dos cortes paralelos separados 1 centímetro y


se extrae con cuidado la corteza de entre los dos cortes.

5. A la zona anillada se le aplica polvo de hormonas de enraizamiento. Esto


no es imprescindible, pero ayuda bastante a la emisión de raíces.

6. Seguidamente se coge un trozo de plástico transparente, se rodea con él


la ramita y se ata con una cuerda en su parte inferior, quedando como un
cucurucho. En vez de usar plástico negro, es mejor el plástico transparente para
poder ver si aparecen raíces.

7. Este cucurucho se rellena con unos puñados de turba rubia (tipo musgo,


Sphagnum) o de turba negra. La turba rubia es preferible a la turba negra porque
posee una mayor porosidad, proporcionando más aireación a las raíces.

8. Se ata fuertemente con una cuerda, para que la turba o esfagno


contacten perfectamente con el anillo de la corteza. El aspecto que queda es el de
un "morcón".
9. A continuación inyectamos agua con una jeringuilla para humedecer la
turba o esfagno.

10. Por último, se cubre todo con papel de periódico o papel de aluminio,
quedando así aislado del sol y la luz. En un acodado resulta fundamental que no
entre luz en las partes en que se desea se formen raíces.

11. La turba deberá mantenerse húmeda durante todo el proceso, pero no


demasiado mojada. Para ello, cada 15 ó 20 días se introduce agua usando una
jeringuilla. El método de la jeringuilla es mejor que andar desatando el acodo para
introducir el agua.

12. Pasados los dos primeros meses, se va destapando el papel cada 15 días
para mirar cómo va el enraizamiento. Tendremos que esperar hasta observar una
buena cantidad de raíces blancas a través del plástico.

13. En cuanto las raíces rodeen al plástico por dentro, es el momento de


separar el acodo de la planta madre con un corte limpio justo por debajo de las
raíces.

14. El tiempo de separación del acodo varía según la especie y las condiciones.

• En algunas plantas el enraizado se efectúa en 2 ó 3 meses, o menos, como


los Ficus.

• Las Camelias de 4 a 6 meses en climas templados.

• Magnolia, Acebo, Lilo, Azalea... necesitará otro año más sin separarlo de la


planta ya que el enraizamiento es más lento.

15. Se retira con cuidado el plástico sin que se desmorone el cepellón de turba
y raíces y se planta en una maceta.

16. Se ubica en un lugar fresco, húmedo, con luz pero sin sol, se riega y se
espera a que brote. Ya tenemos una nueva planta.
Etiolización

 La etiolización consiste en cubrir con una cinta opaca el trozo de corteza


de la ramita que queremos acodar. Manteniéndolo así un tiempo se transforma
en algo parecido a una raíz.

 
Etiolización

 Una rama "etiolada" emite raíces con facilidad, por lo que aumentarán las
probabilidades de éxito del acodo.

 La etiolización está especialmente indicada para árboles y arbustos de


difícil enraizamiento.

 La cinta opaca se puede hacer en cualquier época del año, por ejemplo, un
año antes de hacer el anillado para el acodo, o no, con ponerla un par de meses
antes ya vale, sobretodo en árboles y arbustos de crecimiento rápido, como los
Ficus.

 No es imprescindible poner la cinta opaca cada vez que se vaya a hacer un


acodo, se puede hacer directamente sobre una corteza normal.

• Acodo en montículo o de corte y recalce


 
Entre las plantas que es común propagar con esta técnica se encuentran:

- Patrones clonales de manzano


- Membrillero
- Grosellero
- Arándano
- Uva crespa

Para este tipo de acodado se corta la planta hasta el suelo, en la estación de


reposo (invierno), y se amontona en primavera tierra, mantillo, turba o mezcla de
ellos, alrededor de la base de los brotes nuevos para estimular la emisión de
raíces.

Cubriendo las ramas con tierra se blanquean y se promueve en ellas la formación


de raíces.

Se colocan las plantas madres separadas una distancia de 40 cm entre sí. Se


dejan crecer todo un año y a finales del invierno se cortan a ras del suelo.

A medida que pasa el tiempo, la planta madre empezará a emitir brotes. Cuando
éstos poseen unos 18 cm se aporca la base, formando un montículo, en el que los
nuevos tallos echarán raíces.

Cuando tienen 25 cm, se repite el aporcado, y nuevamente cuando miden 40 cm.


A finales de otoño del segundo año se cortan y plantan los barbados con raíces en
primavera del tercer año.

La planta madre si se cuida bien puede durar hasta 25 años.

El sustrato con que se aporca puede ser turba y tierra o incluso, serrín, de tal
forma que permita crecer a las raíces y no se encharque.

Los acodos enraizados se cortan cerca de su base para mantener baja la altura de
la planta original. Después del corte de los acodos el banquillo original se debe
dejar descubierto hasta que las nuevas ramas hayan crecido de 8 a 25 cm y
entonces se empiezan a aporcar para el nuevo año. Las ramas que no enraizan o
que lo hacen con dificultad pueden tratarse como si fueran estacas de madera
dura.

• Acodo en trinchera

Se fijan tumbados y se entierran

Emergen a la superficie los brotes


 
Los "barbados" con raíces
 
El acodado en trinchera consiste en cultivar una planta o rama de planta en
posición horizontal en la base de una trinchera o surco, y cubrir con tierra
los brotes nuevos a medida que crecen, de tal manera que se ahílen sus bases
al carecer de luz y emitan raíces.

En este procedimiento el primer paso consiste en establecer la cama madre, la


cual, como en el acodado en montículo puede usarse por varios años.

Acodos enraizados o árboles injertados de un año se plantan a una distancia de


50 a 75 cm, colocándolos en el surco con una inclinación de 30º a 45º. Los
surcos deben espaciarse de 1.20 a 1.50 m, a distancia suficiente para que
permitan labores de cultivo y apilar tierra alrededor de la planta hasta unos 15 cm
de altura. Luego las plantas se cortan a una altura uniforme -50 a 65 cm- y se les
deja crecer durante una estación.

El acodado en trinchera es, de manera principal, un procedimiento usado en los


viveros para propagar ciertos frutales cuya multiplicación es difícil de lograr
por otros métodos: Nogal, patrones de manzano y patrones de ciruelo. También
se puede practicar con árboles o arbustos establecidos, doblando las ramas o
sarmientos largos y flexibles hasta el suelo, como se hace en el acodado simple
pero colocándolas planas en la trinchera. La rama se cubre en toda su longitud,
pero dejando la punta expuesta.

• Acodo de punta

 
 
Este método de reproducción es característico de Grosellero, Zarzamora,
Frambueso... En el acodo de punta, el enraíce tiene lugar en la punta de las
ramas de la estación en curso.

Las ramas se doblan hacia el suelo y clavan a unos 7 u 8 cm de profundidad. Se


sujetan con alambres.

La punta de la rama empieza a crecer en el suelo hacia abajo pero se curva para
producir en el tallo una vuelta pronunciada en donde se desarrollan las raíces.

Los tallos de esas plantas son bienales en el sentido de que durante el primer año
son vegetativas, fructifican en el segundo y se suprimen después de la
fructificación.

En el vivero es aconsejable dejar plantas madres sólo para propagación, para lo


cual se siembran plantas sanas y jóvenes a una distancia de 3.6 m para dejar
espacio para el acodado posterior. Tan pronto como se plantan se les recorta a
una altura de 20 a 25 cm. En las ramas vigorosas que se originen se les hace un
"despuntado de verano", cortando las puntas de 7 a 10 cm una vez que han
crecido de 50 a 75 cm de altura.

La mejor época para acodar en punta es cuando sólo parte de las ramas laterales
han tomado esa forma. Si la operación se hace demasiado pronto, es posible que
las ramas sigan creciendo una vez de formar una yema terminal. Si se hace
demasiado tarde, el sistema radical será pequeño.

Será preciso esperar al año siguiente, en otoño, para proceder al trasplante.

PROPAGACIÓN POR INJERTACIÓN

La injertación es un método de multiplicación que consiste en unir porciones de


plantas de manera que formen un solo individuo El injerto es un segmento de
planta que se adhieren a otra receptiva (porta injerto o patrón) de mejores
características como resistencia a enfermedades del suelo. Así el porta injerto está
provisto generalmente de raíces y el injerto está destinado a formar la copa.

La formación de la unión del injerto y la secuencia de los pasos en la cicatrización


es la siguiente:

1. El tejido recién cortado de la púa, capaz de actividad meristemática, es


puesto en contacto íntimo y fijo con el tejido del patrón también recién
cortado en condiciones similares, de tal modo que la región del cambium
vascular de ambas partes esté en contacto estrecho. Las condiciones de
temperatura y humedad deben ser tales que estimulen la actividad de las
células recién expuestas y de aquellas que las circundan.
2. En la región del cambium, tanto del patrón como del injerto, las capas
exteriores de células expuestas producen células de parénquima que
pronto se entremezclan y enlazan; al resultado de esa actividad se llama
“tejido del callo”.
3. Algunas de las células del callo recién formado que se encuentran en la
misma línea con la capa intacta de cambium del patrón y del injerto se
diferencian hasta formar nuevas células cambiales.
4. Esas nuevas células de cambium producen tejido vascular nuevo (xilema
hacia el interior y floema hacia el exterior) estableciendo así conexión
vascular entre patrón e injerto, requisito indispensable para que la unión del
injerto tenga éxito.

Es importante mencionar que los injertos pueden transmitir enfermedades como


virus, bacterias o mico plasmas, por lo que se avanzó hacia la técnica de micro
injertos in vitro. El problema fue que no se disponen de plantas sanas, por lo que
la solución fue usar los meristemos, los cuales tienen zonas en diferenciación con
elevada actividad metabólica y aún no están completamente formados los tejidos
vasculares, por estas razones son partes de una planta infectada que están libres
del virus y se pueden reproducir in vitro.

Diferentes técnicas de injertación

MICROPROPAGACIÓN O CULTIVO IN VITRO


En esta técnica se utilizan células o pequeñas partes de tejidos u órganos
denominados explantes, los mismos son cultivados en condiciones controladas de
laboratorio. Gracias a la toti potencialidad, en un medio de cultivo prácticamente
cualquier célula con núcleo logra (después de un período de diferenciación) iniciar
el proceso formando un callo que originará nuevas plantas genéticamente iguales.

Método de cultivo in vitro


El procedimiento de cultivo de tejidos se inicia con la toma de segmentos de
plantas o explantes que se esterilizan y se cultivan en soluciones nutritivas
especiales, con frecuencia gelificadas. A estos medios se incorporan
combinaciones adecuadas de hormonas de crecimiento para obtener una
proliferación celular en el segmento. La formación de nuevas estructuras puede
ser directa: a partir de células del explante, o indirecta, formando primero un callo
o cúmulo de tejido poco diferenciado y amorfo.
El procedimiento de cultivo in vitro se aplica en una gran variedad de plantas
desde hierbas, árboles, especies comestibles y ornamentales. El cultivo de tejidos
y células vegetales tiene otras aplicaciones tales como: propagación clonal,
obtención de líneas de plantas genéticamente muy uniformes, almacenamiento o
transporte de germoplasma vegetal, producción a gran escala de plantas libres de
agentes patógenos (ej. bacterias, virus). 

APOMIXIS

VENTAJAS DE LA REPRODUCCIÓN
VEGETATIVA
La propagación vegetativa ha adquirido gran importancia y comprende un variado
conjunto de técnicas que permiten multiplicación de numerosas especies de
interés agronómico. Algunas de sus ventajas son:

 Se mantienen y propagan características deseables (alta productividad,


mayor calidad, tolerancia a insectos, resistencia a enfermedades, tolerancia a
estrés hídrico, etc.).
 Al ser individuos clonados (idénticos) su uniformidad es una ventaja en el
manejo de un cultivo.
 Se pueden acortar la etapa vegetativa, por lo que las plantas pueden entrar
más rápido a la etapa reproductiva (fructificación).
 Se pueden preservar genotipos y complejos genéticos en bancos clonales.
 Se pueden conservar genotipos superiores que determinan características
genéticas favorables (resistencia a plagas y/o enfermedades, crecimiento,
tolerancia a condiciones extremas de humedad, etc.).
Cabe destacar que la misma uniformidad de la descendencia es una desventaja
en caso de que el ambiente cambie, ya que todos los individuos pueden ser
susceptibles a nueva plaga o a cambio de condiciones climáticas.

Estaca de vid Diagrama del proceso de


enraizada Acodo aéreo. acodado

También podría gustarte