Podemos estar agradecidos, y no es que haya que ser conformistas, sino que hay que ser realistas. Tenemos suerte de haber nacido aquí.
Ya eché mano alguna vez de una frase tan inteligente, a la vez que, por lo menos para mí, cargada de ánimo para ver las cosas desde otro punto de vista: “Me quejaba de que no tenía zapatos, hasta que encontré a alguien que no tenía pies”.
Imagínate en Ghana (artículo de Lola Huete Machado, El Semanal, 20 mayo 2012), donde el ocio ya no es un lujo… pero los beneficios de los recursos no llegan completamente al pueblo: un 40 % de ciudadanos no acude a la sanidad porque no tiene medios siquiera para llegar.
También… cada 23 segundos muere en Ghana un niño por neumonía (la mayor causa de muerte de menores de 5 años en el mundo).
“En África, clase media es cuando te levantas por la mañana y tienes donde comer, donde dormir y algo que hacer” (Nana Kofi, fotógrafo Ghanés). El petróleo del país debería garantizar al menos eso, entonces Ghana sería un país ejemplo, no sólo para África.
Desde luego, que está todo fatal, pero hay que saber disfrutar lo que se tiene aunque sea poco.
Os dejo una frase, que hay que ver las cosas con alegría...
"Hay días que uno sólo necesita un abrazo... ¡y cinco millones de euros!"
Os dejo una frase, que hay que ver las cosas con alegría...
"Hay días que uno sólo necesita un abrazo... ¡y cinco millones de euros!"
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