Conceptos CONSERVACION
Conceptos CONSERVACION
Conceptos CONSERVACION
Introducción
Las verduras Según Muñoz (2010), las verduras son hortalizas, especialmente las que
poseen color verde, aunque, en general, es cualquier planta que se pueda usar como
alimento, sea en forma cruda o cocinada. Muchos investigadores hacen una calificación de
las hortalizas más como un grupo que no pertenece a una especie botánica específica y que
tienen una amplia variedad de estructuras vegetales; aunque, se pueden clasificar, de
acuerdo con Ramírez (2011), en tres categorías principales: semillas y vainas, bulbos, raíces
y tubérculos y flores, yemas, tallos y hojas.
Tener unas buenas cámaras frigoríficas para frutas y verduras es una de las principales prioridades
de todas las empresas que comercien con ellas. Las condiciones de estos productos alimenticios
deben ser siempre perfectas si no se quiere evitar que haya problemas con su consumo, y uno de los
principales elementos que influyen en ello es la temperatura tanto de las piezas como del ambiente.
En todo el proceso de conservación de estas hay muchos más elementos que forman parte de
manera activa, como son el tipo de verdura o de fruta, el trayecto que se debe cubrir para
transportarlas desde que se recolectan hasta que se almacenan y un largo etcétera. Sin embargo, la
condición térmica es la más importante y peligrosa de todas, ya que puede hacer que se
estropeen con una rapidez y facilidad pasmosa o que, por el contrario, se conserven a la perfección.
Por eso, la aplicación de frío es la técnica más habitual para que estos productos no sufran
pérdidas de calidad. Es la mejor forma de hacer que la maduración tarde más en aparecer y que, por
tanto, el género goce de un mayor ciclo de vida, que además permita su comercio sin inconveniente
alguno.
La cadena de frío es un método capaz de mantener las condiciones de los productos congelados a
una temperatura controlada. En este aspecto, la mayoría de los alimentos, entre ellos las verduras,
deben conservarse entre -25 ºC y -18 ºC, con el objetivo de que la cadena de frío no se altere.
Aunque la temperatura de un producto congelado nunca ha de ser superior a -18 ºC, hasta que un
alimento llega al congelador, recorre un largo camino al pasar por distintos centros de producción,
transporte en vehículos especiales y puntos de venta o plataformas de distribución. En todas estas
fases, el tiempo que transcurre puede jugar en contra: hay un sinfín de ocasiones en las que se puede
producir la pérdida de propiedades y valores nutritivos, sobre todo las vitaminas hidrosaludables y
termolábiles como la vitamina C. Es entonces cuando el proceso de descomposición tiende a
reactivarse y, por tanto, el producto se termina degradando.
Además, es clave tener en mente que si las verduras se han descongelado, nunca hay que
introducirlas de nuevo en el refrigerador. De hacerlo, el agua que contienen se cristaliza y termina
dañando a los propios vegetales. Y es que también pueden aparecer problemas de contaminación
microbiológica.
Este eslabón de la cadena del frío es muy importante para asegurar una adecuada calidad final del
producto. La recolección de frutas y verduras: Se deberán de realizar operaciones de pre-
refrigeración de frutos delicados, conservación a corto y mediano plazo de frutos resistentes, y
refrigeración y/o congelación de hortalizas.
El pre enfriamiento alarga la duración del producto al reducir:
http://repository.lasallista.edu.co/dspace/bitstream/10567/1763/1/Tratamientos_termicos_propiedad
es_frutas_verduras.pdf
https://www.frialsa.com.mx/la-cadena-de-frio-en-el-mercado-de-hortalizas/
http://biochemistryweb.com/la-cadena-de-frio-el-elemento-vital-para-la-conservacion-de-frutas-y-
verduras/
http://www.seguridadalimentaria.posadas.gov.ar/index.php?
option=com_content&view=article&id=83%3Acadenafrio&catid=20%3Ainformacionelboradores&
Itemid=2
http://www.seguridadalimentaria.posadas.gov.ar/index.php?
option=com_content&view=article&id=116%3Acontrolmateriaprima&catid=20%3Ainformacionel
boradores&Itemid=2
En los vegetales el agua es el elemento predominante; ello permite vislumbrar a las frutas y
verduras como pobres en energía, lo que, aunado a su gran variedad, las convierte en
alimentos perfectos para desarrollar modelos de alimentación equilibrados y variados de
aplicación en regímenes nutricionales, según señalan Paltrinieri, Berlijn y Meyer (2007).
El agua se encuentra en las frutas y verduras entre un 70% y un 90%, de acuerdo con Badui
(2006), lo que las hace jugosas. Dentro del agua disuelta están las vacuolas y dentro de
estas últimas están las sustancias solubles como por ejemplo las sales, los ácidos, los
azúcares, los pigmentos solubles y las vitaminas. Ahora, las sustancias que no se disuelven
en el agua se esparcen de forma coloidal en ella. Específicamente, y siguiendo con lo que
establece Badui (2006), en las frutas y verduras aparecen tres formas de agua: capilar, que
es la que se retiene en la delgadísima red de espacios capilares extracelulares que están en
los tejidos vegetales; de monocapa o monopelícula, que es la que se retiene y absorbe a los
puntos electrostáticos activos de las macromoléculas de los alimentos como por ejemplo los
carbohidratos complejos y las proteínas, los cuales forman presión, concentración o
cantidad de humedad sobre las superficies de las macromoléculas; y la débilmente ligada,
que es la que no se congela ni tampoco se utiliza como solvente. El deterioro y la
descomposición de los alimentos gracias a la actividad acuosa se puede dar por fenómenos
biológicos, químicos o físicos. “El deterioro biológico determinado por los procesos
fisiológicos de respiración y germinación. El deterioro físico y químico, determinado por
las alteraciones que se presentan en los alimentos como resultado de cambios físicos,
enzimáticos y químicos” (Ramírez, 2011, 27). Según Badui (2006), entre las funciones más
importantes del agua dentro de las frutas y las verduras están las siguientes:
El producto pierde agua como vapor a través de orificios naturales y àreas dañadas de ta superficie.
Los orificios naturales incluyen los estomas, que son aberturas muy pequeñas en la piel (epidermis),
que son los mismos poros a través de los cuales se intercambien otros gases como oxigeno y
dióxido de carbono. Las hortalizas de hojas pierden la mayor parte del agua a través de los estomas.
Otras vías naturales de pérdida de agua son las lenticelas (papas), las cicatrices del tallo (tomates),
hidátodos (repollo) y aún a través de la superficie aérea del producto.
En general, mientras mayor es la razón su perticie a volumen del producto (es decir, mientras mayor
es la superficie expuesta por unidad de volumen) más rápida es la ta sa de pérdida de apara.
Las hortalizas de hoja como la lechuga y el apio, por lo tanto pierden apara a mayor velocidad,
mientras que los melones y manzanos con menos superficie expuesta pierden agua más lentamente.
La betarraga (betabel) plateada y la lechuga de hojas sueltas que tienen todas las hojas expuestas, se
marchitan más rápidamente que la lechuga compacta y repollo, que sólo tienen expuestas las hojas
externas.
Las raíces almacenadas con sus partes superioros adheridas pierden agua mucho mas rápido que
aquellas con las partes su. periores removidas.
Los tomates tienen una piel relativamente impermeable y pierden humedad principal. mente a través
de la cicatriz del pedúnculo
La refrigeración es un proceso muy importante para los alimentos, ya que permite incrementar su
vida útil y en consecuencia aumenta sus posibilidades de conservación, inhibiendo durante algunos
días el crecimiento microbiano.
Las frutas y vegetales, son organismos vivos que deben mantenerse como tal durante el
almacenamiento. Con la refrigeración de estos productos se consigue aminorar drásticamente su
intensidad respiratoria, sus pérdidas de peso por transpiración, su producción de etileno y el
desarrollo de microorganismos.
La respiración es el proceso principal que transforma las reservas acumuladas en energía. Tal
actividad se manifiesta por la emisión de calor, de anhídrido carbónico y de vapor de agua, que se
obtienen principalmente de la demolición de los azúcares en presencia de oxígeno. El
comportamiento de las distintas especies de frutas y hortalizas es muy variado en lo que respecta a
la intensidad respiratoria, pero en todas ellas el denominador común es la gran influencia de la
temperatura sobre la intensidad respiratoria.
Por lo general la temperatura de conservación de las frutas y vegetales debe mantenerse entre 2 – 15
ºC, teniendo en cuenta las características intrínsecas del producto. Cuanto más bajas sean las
temperaturas, más reducida será la respiración, y en consecuencia con más lentitud se producen los
fenómenos de maduración y la senescencia. Sin embargo, la temperatura muy baja no es
conveniente, ya que se congela el agua del producto y se afectan las células del tejido, al
descongelarse el tejido no reabsorbe el agua porque las células se dañan y con ello la textura se
modifica.
Por lo tanto, la conservación de frutas y hortalizas se podrá mejorar siempre que se reduzca a los
niveles mínimos su intensidad respiratoria sin provocar daños a los tejidos o provocarles la muerte.
Las técnicas de almacenamiento que se utilizan después de la cosecha y una vez que las frutas y
verduras han sido empacadas para su comercialización en fresco, tienen el propósito de conservar la
calidad de las mismas, teniendo en cuenta las condiciones ambientales adecuadas que permitan
reducir la velocidad de los procesos vitales de estos productos, y disponer de ellos por períodos más
prolongados que los normales, además ofrecer productos frescos a mercados distantes y reducir
pérdidas durante su comercialización Dentro de las técnicas más utilizadas para la conservación de
frutas y hortalizas encontramos la refrigeración, el uso de atmósferas controladas, uso de
absorbentes de etileno, aplicación de películas cubrientes y aplicación exógena de fitorreguladores
(Parikh y col., 1990)
http://repository.lasallista.edu.co/dspace/bitstream/10567/1763/1/Tratamientos_termicos_propiedad
es_frutas_verduras.pdf
http://www.fao.org/3/x5055s/x5055s02.htm
https://www.exclusivasfrigorificas.com/2019/04/17/refrigeracion-de-frutas-y-verduras/
https://naranjasyfrutas.com/blog/2016/06/01/los-metodos-de-conservacion-de-frutas-y-hortalizas-la-
refrigeracion/
https://minalcuba.cubava.cu/2017/09/28/refrigeracion-de-frutas-y-vegetales/
http://www.fao.org/docs/eims/upload/cuba/5012/cuf0127s.pdf
3. Principios fundamentales de la aplicación específica, se refiere a describir y
explicar cómo es que la cadena de frio permite, facilita, ayuda a obtener un
producto y en la conservación, Ejemplo para elaborar un Yogurt después de
sembrar e incubar los cultivos lácteos, se debe bajar la temperatura ¿Por qué?,
¿qué pasa con una fresa que se mantiene a una temperatura ambiente de 16
°C.
El manejo poscosecha de frutas y hortalizas se ve fuertemente influenciado por la aplicación de
cadenas de frío para alargar la vida útil de los productos y así disminuir los volúmenes de pérdidas
poscosecha que se presentan en nuestro país(colombia), que en algunos casos superan el 50% de la
producción. La demanda actual de alimentos frescos hace necesario implementar sistemas de
conservación que nos permitan tener en nuestra mesa productos inocuos y de excelente calidad, y
que durante el proceso de conservación no se afecten las características nutricionales y
organolépticas que traen desde el cultivar. Se debe tener en cuenta todos los actores de la cadena,
desde los productores hasta los consumidores y el papel que juegan en la conservación de los
alimentos, ya que si un eslabón es deficiente, se pierde el trabajo hecho por el resto de eslabones.
Los métodos tradicionales de conservación de alimentos basados en tratamientos térmicos, aunque
eficaces para garantizar su seguridad, tienen algunos efectos negativos sobre el producto, como
pérdida o reducción de ciertos nutrientes o alteración de sus características sensoriales además de su
elevado costo. Por lo tanto se emplean métodos alternativos de refrigeración como el hielo seco y
geles refrigerantes que son más económicos que los sistemas refrigerante y garantizan de igual
forma un enfriamiento para le producto en un periodo de tiempo determinado.
Las fresas deben cosecharse cuando el 75 por ciento de su superficie se ha puesto roja y el fruto está
todavía firme. La fresas es muy perecedera y se deteriora dentro de los 2 o 3 días de la cosecha en
condiciones ambientales naturales.
https://es.scribd.com/doc/3503058/IMPORTANCIA-DE-LA-CADENA-DE-FRIO-EN-FRUTAS-
Y-HORTALIZAS
http://www.fao.org/3/y5771s/y5771s03.htm
Respiración
Los tejidos de las frutas luego de ser recolectados todavía respiran y desarrollan
actividades metabólicas a expensas de los componentes que contienen.
La energía necesaria se obtiene de la oxidación de azúcares y de otros sustratos, como
ácidos orgánicos, con formación de CO2 y agua.
Los vegetales con un elevado consumo de oxígeno o rápida producción de CO2 suelen ser
perecederos.
Los vegetales que presentan velocidades de respiración lentas, se mantienen en
almacenamiento sin problemas durante más tiempo.
http://www.fao.org/3/x5055s/x5055s02.htm
http://www.aulavirtual-exactas.dyndns.org/claroline/backends/download.php?
url=L0ZydXRhczIwMTcucGRm&cidReset=true&cidReq=RICIONUTRI
5. Defectos: se refiere a los fenómenos que ocurren en los materiales que ocasionan
reacciones o manifestaciones indeseables al aplicar bajas temperaturas; por ejemplo,
¿qué ocurre con una fruta climatérica que se haya sometido a bajas temperaturas?, en
que consiste el “chillinginjury”, en carnes ¿qué pasa si una vez se faena la res, esta se
enfría inmediatamente?, en que consiste en “cuttingshorting”, es decir todos los
fenómenos indeseables en las diferentes aplicaciones.
La temperatura además de la Influencia que ejerce sobre la respiración, también puede causar daño
al producto mismo. Si el producto se mantiene a una temperatura superior a los 40°C, se dañan los
tejidos y a los 60°C toda la actividad enzimática se destruye, quedando el producto afectivamente
muerto. El daño causado por la alta temperatura se caracteriza por sabores alcohólicos
desagradables, generalmente como resultado de reacciones de fermentación y de una degradación
de la textura del tejido. Ocurre con frecuencia cuando el producto se almacena amontonado a
temperaturas ambientes tropicales.
Heridas y machucones
La conservación refrigerada bajo condiciones óptimas permite reducir las pérdidas cualitativas y
cuantitativas debidas a desórdenes fisiológicos y podredumbres, retrasar la maduración y
senescencia y prolongar la vida comercial de los productos hortofrutícolas en general, con calidad
idónea para consumo en fresco o industrial (Artés, 1987 y Martínez-Jávega, 1997).
También la frigo conservación persigue entre otros fines, el uso de tratamientos cuarentenarios para
el control de insectos en frutos exportados a determinados países que lo exigen, como Estados
Unidos y Japón (Martínez-Jávega, 1997).
La temperatura constituye una de las variables más importante para la conservación de los
productos hortofrutícolas. Siendo necesario el control de esta en los locales de almacenamiento,
ya que a medida que disminuya la temperatura, se retarda la pérdida 7 de calidad de los frutos.
Sin embargo, existen limitaciones en cuanto a las temperaturas mínimas que pueden aplicarse
en la frigoconservación. Dentro de estas limitaciones se encuentra la temperatura de
congelación de los productos hortofrutícolas. Los frutos y vegetales para consumo en fresco,
deben mantener activo su metabolismo y esto solo puede conseguirse en fase líquida, por lo no
pueden ser sometidos a temperaturas inferiores a las de congelación que oscilan entre 0ºC y -
1.5ºC. La segunda limitación es que algunos de los productos de origen tropical y subtropical,
presentan sensibilidad a las bajas temperaturas que se manifiesta por diferentes alteraciones y
manchas en la piel, conocidas generalmente como lesión o daño por frío y que pueden causar
una alta pérdida de calidad comercial (MartínezJávega, 1997).
Para evitar la deshidratación junto con el empleo de las temperaturas bajas se utilizan
humedades relativas elevadas. La humedad relativa adecuada para un determinado producto
dependerá de la relación superficie/volumen de éste. A medida que esta relación es mayor, la
transpiración también lo es. Un valor de la humedad relativa entre 85 –95 % es lo aconsejable
para lograr el objetivo de la conservación (Guerra, 1996). Durante la conservación frigorífica el
control de la humedad relativa constituye un aspecto fundamental para disminuir las pérdidas de
agua. El uso de sistemas electrónicos de control y boquillas de pulverización cuarzo permiten
una perfecta nebulización con un costo razonable.
http://www.fao.org/3/x5055s/x5055s02.htm
http://www.fao.org/docs/eims/upload/cuba/5012/cuf0127s.pdf
6. Aplicación correcta de la cadena de frio por cada uno de los grupos de alimentos, es
decir cuales sería las mejores condiciones para evitar que estos defectos se presenten y
además prolongar la vida útil del alimento, se describe específicamente.
Se han desarrollado varios métodos para reducir el daños por frío, entre los que sé en encuentran el
acondicionamiento a bajas o altas temperaturas, calentamiento intermitente, inmersión en agua
caliente, empacado en atmósferas modificadas, atmósferas controladas y reguladores del desarrollo.
El acondicionamiento a moderadas temperaturas previas al almacenamiento frigorífico pueda
aumentar la resistencia al frío.. La duración del acondicionamiento debe ser la justa para producir el
efecto deseado, ya que si se prolonga en exceso, puede ir en detrimento de la calidad de la fruta
(Martínez- Jávega y col, 1987 y 1997).
Las frutas, verduras y hortalizas son productos perecederos y como tales, su distribución adopta
unas características propias, con una operativa logística adecuada a esta tipología de productos, que
en ocasiones necesita asegurar una temperatura determinada constante, es decir mantener la cadena
de frío.
En su transporte y almacenamiento debemos utilizar vehículos y medios con una serie de rasgos
comunes en su explotación, como sería la limitación de capacidad, peso y dimensiones, los
requerimientos de resistencia estructural, la necesidad de optimizar el consumo de combustible, el
cumplimiento de normas de seguridad, la capacidad de adaptación entre vehículos y mercancía y la
autonomía relativa y complementariedad con otros medios (buque-camión, camión-tren, etc.).
Estas características citadas, y que son comunes a los vehículos, condicionan a su vez aspectos tan
significativos como, el volumen de la zona de carga, la potencia de la máquina propulsora, la
disposición y protección de los espacios de carga, el bienestar y la comodidad de las tripulaciones y
la seguridad de las mercancías que se transportan.
Tratándose de alimentos deberemos responder a unos requisitos de temperatura determinados. Es lo
que se conoce como transporte a temperatura controlada. La temperatura controlada se refiere al
aseguramiento del rango de temperatura contratado con el cliente en todos nuestros procesos de
trabajo, es decir, mantener la 'temperatura' no 'enfriar'. Se busca de preservar las condiciones del
servicio desde el momento de la recogida hasta el punto de entrega final.
Para mejorar la calidad de la cadena del frío, tenemos la norma CCQI (Cool Chain Quality
Indicator), que establece un sistema de gestión de calidad a través de indicadores, centrado en
medidas preventivas orientadas a mantener las condiciones ambientales de preferencia y a las
individuales para los PTSP (Productos Perecederos y Sensibles a la Temperatura), a lo largo de la
cadena de frío.
Se trata del control profesional de la temperatura a lo largo de la cadena de suministro mediante el
uso de los medios adecuados para el manejo almacenamiento y transporte. Los fundamentos de esta
norma se basan en, por un lado proporcionar indicadores, como resultado de la evaluación
cuantitativa de la calidad de la cadena de frío para las operaciones individuales, y por el otro, la
verificación del cumplimiento de la conformidad de la calidad en la cadena de frío. Los indicadores
se han desarrollado a partir de un enfoque basado en riesgos tomando en cuenta los peligros
importantes para los PTSP. Los requisitos de la Norma deben incluirse en el sistema de gestión
documentada (manual interno) de la compañía.
La operaciones que abarca la norma son: la pre-refrigeración, el transporte en vehículo terrestre, el
almacenamiento de largo y corto plazo, las tiendas minoristas, el transporte aéreo y marítimo, con el
control de los contenedores en todas sus fases de la distribución.
En la obtención de la norma CCQI, la política de calidad de la empresa juega un papel importante.
La alta Dirección debe asegurar el establecimiento de una política para la cadena de frío que debe
ser conocida por todos los empleados y que asegure el mantenimiento de la cadena de frío,
compromiso con la formación del personal que trabaja en la cadena de frío, compromiso de mejora
continua y que sea revisada cuando tenga lugar la Revisión del Sistema por parte de Dirección.
Todos los requisitos deben estar documentados en un manual interno, donde se demuestre que la
compañía sólo aceptará productos PTSP siempre y cuando se ajusten al rango de temperatura de los
mismos. Se deben hacer mediciones de temperatura de los productos suministrados, inspección
manual de los embalajes, comprobación que todos los documentos suministrados disponen y
contienen la información requerida.
https://www.interempresas.net/Horticola/Articulos/127418-La-cadena-de-frio-en-el-
transporte-de-frutas-verduras-y-hortalizas.html
https://www.mundohvacr.com.mx/2011/09/7299/
https://es.scribd.com/doc/3503058/IMPORTANCIA-DE-LA-CADENA-DE-FRIO-EN-
FRUTAS-Y-HORTALIZAS
El frío en la producción Este eslabón de la cadena del frío es muy importante para
asegurar una adecuada calidad final del producto. Durante la recolección, las frutas
y verduras se someten a operaciones de pre-refrigeración (para frutos delicados),
conservación a corto y mediano plazo (para frutos resistentes) y refrigeración y/o
congelación (para hortalizas) El preenfriamiento alarga la duración del producto al
reducir:
• El calor del campo.
• La tasa de respiración y el calor generado por el producto.
• La velocidad de maduración.
• La pérdida de humedad (agotamiento y marchitamiento).
• La producción de etileno (gas que genera el producto durante la maduración).
• La difusión de la pudrición.
https://es.slideshare.net/scourge/cadena-de-fro-25228292