La Atención
La Atención
La Atención
Según Ballesteros (2002). “La atención es el proceso a través del cual podemos dirigir
nuestros recursos mentales sobre algunos aspectos del medio, las más relevantes o bien
sobre la ejecución de determinadas acciones que consideramos más adecuadas de entre las
posibles. Hace referencia al estado de observación y de alerta que nos permite tomar
conciencia de lo que ocurre en nuestro entorno”
https://rua.ua.es/dspace/bitstream/10045/12917/2/Tema%202.%20Atenci%C3%B3n.pdf
Según Tudela (1992) ha definido “la atención como un mecanismo central de capacidad
limitada cuya función primordial es controlar y orientar la actividad consciente del
organismo conforme a un objetivo determinado”.
Según WILLIAM (1890). “Es la toma de posesión por la mente, de un modo vívido y claro, de uno
entre varios objetos o cadenas de pensamiento simultáneamente posibles. Focalización y
concentración de la conciencia son su esencia. Implica la retirada del pensamiento de varias cosas
para tratar efectivamente otras”.
Willian james también afirmaba “todo el mundo sabe lo que es la atención. Es tomar posesión de la
mente de una forma clara y vivida de uno de los que parecen ser diferentes objetos o líneas de
pensamiento que suceden de forma simultánea. Su esencia son la localización y la concentración de
la conciencia. Implica dejar de lado algunas cosas para poder tratar de forma efectiva otras. ”
Según Johnston y Dark (1982) no existe una definición clara y universal del concepto de atención.
Existen tres dificultades básicas a la hora de acotar los estudios sobre esta. Tales dificultades
corresponden a:
Según Davies, Jones y Taylor (1984); Parasuraman y Davies (1984) Existen dos dimensiones básicas
de atención en función del carácter intensivo o selectivo de ésta y que dan lugar a diferentes tipos de
atención:
La dimensión selectiva a las dos modalidades, Atención selectiva o focalizada, Atención dividida y la
dimensión intensiva a la atención sostenida o vigilancia.
Cuando un sujeto se orienta hacia los aspectos irrelevantes del entorno nos referimos a su
actitud como ausencia de concentración o distracción.
“La atención dividida está dirigida fundamentalmente al estudio de los déficits como
consecuencia de la presentación simultánea de información o de la realización
concurrente de varias actividades. Desde un punto de vista teórico, el enfoque es de
capacidad o de recursos de conseguir los procesos o mecanismos que optimizarían el
procesamiento o la ejecución concurrente”. (Duncan, 1980)
Dimensión intensiva:
Atención sostenida: persistencia del rendimiento de la atención a lo largo del
tiempo.
Dimensión selectiva :
Atención selectiva o focal: Procesar estímulos diversos y dar respuesta a sólo
uno de ellos.
Atención Dividida:
ETIOLOGÍA DE LA ATENCIÓN
La capacidad de atención de los niños y niñas es un aspecto del temperamento. Este temperamento
varía a lo largo de un amplio rango basado en aspectos genéticos, teniendo también un peso
importante la influencia de la intervención del ambiente y el contexto en el que el niño o la niña
interactúan.
Además estos desórdenes están asociados también con déficits en el funcionamiento del Sistema
Nervioso Central, al encontrarse asociados con disfunción atencional, desde retrasos del habla y del
lenguaje a retrasos en habilidades cognitivas y adaptativas.
La memoria de trabajo y la motivación son aspectos que están íntimamente relacionados con la
capacidad para estar y permanecer atento. Para atender a una tarea, el primer requisito es tener la
“intención”, es decir, la motivación de realizarla y el segundo tener la capacidad para recordar
claramente las instrucciones que nos dirigen hacia la tarea (memoria de trabajo).
FISIOLOGÍA DE LA ATENCIÓN
Aún no es posible, especificar por completo, el mapa atencional del cerebro; pero los estudios por
imagen (Tomografía por Emisión de Positrones y Resonancia Magnética Funcional) nos permiten
conocer que existen diferentes redes neuronales encargadas de las tres principales funciones de la
atención. Mirsky (1991) y que se corresponden con los Sistemas Atencionales Anterior y Posterior y
de Alerta. Posner y Petersen (1990) ; Posner (1992).
La atención selectiva depende del sistema posterior: cortex parietal posterior, el colículo superior y el
núcleo pulvinar del tálamo (Orienting Network). El lóbulo parietal desengancha el foco atencional de
la tarea previa, el colículo superior nos permite dirigir la atención hacia el área del nuevo objetivo, a
la vez que el pulvinar restringe la entrada de información en el área indicada.
La atención sostenida está íntimamente ligada al concepto de alerta: a mayor alerta aumenta la
rapidez en la detección de los objetivos de la tarea propuesta. Pacientes con lesiones en áreas
frontales derechas tienen dificultades para mantener concentrada su atención y persistir en las tareas
encomendadas. La Norepinefrina es el neurotransmisor que parece responsable de tales dificultades
(Morrison y Floote (1988); Witte, Gordon-Lickey y Marrocco (1992).
Los estudios sobre atención normal durante los dos primeros años de vida están dirigidos hacia el
reflejo de orientación (medidos por cambios en ritmo cardiaco, el reflejo de succión o el tiempo de
fijación en el estímulo). Estos estudios evidencian que la atención está dirigida por los estímulos con
preferencia inicial por los sencillos y posteriormente hacia los más complejos. Hacia el final del
segundo año puede situarse la aparición del control voluntario del proceso atencional.