Este perro tiene un buen carácter, con gran resistencia e inteligencia. Al estar acostumbrado a vivir con los humanos es un excelente animal de compañía.
Fue descubierto por los europeos al iniciarse las expediciones polares, llevándolos entonces para su crianza al continente, principalmente a Alemania, Francia e Inglaterra, donde no tuvo ningún problema de adaptación.
Ya en periodo adulto suele tener unos 60 centímetros de talla y alrededor de 30 kilos de peso. De pelaje abundante y muy tupido, generalmente suele tener un color blanco aunque también abunda en tonos cremas.
Al ser un perro grande y fuerte, necesita espacio, necesita correr y andar, y por tanto es una de esas razas que no se deben tener en un piso porque sencillamente es una crueldad para el animal. Por eso antes de enamorarse de él (algo que es muy fácil sobre todo si son cachorros) hay que sentarse y pensar, friamente, si se le podrá tener en condiciones favorables para él (no para nosotros) para que sea todo lo feliz que sin dudarlo nos hará a nosotros.