No quiero ser roca, sino agua
que llene áridos caudales.
No veleta, sino viento guiando mi destino.
Al margen de estandartes,
ser la seña de mis pasos
descubriendo caminos de vida.
Saborear la poesía de la libertad
sin guiones de pasión,
sin ideas amordazadas.
Si para este fin debo derramar
el alma a borbotones,
no renuncio a ser fuente.
Quizá abrevadero de sedientos
quizá de mis sentimientos,
todo en mis adentros.