Hola amigos y amigas. Creo que es un buen momento para darle un descanso a este blog. La cartelera cinematográfica de este verano en España es muy flojita por decirlo de una manera suave. Pero más que eso, creo que hay que saber parar a tiempo para buscar la inspiración, el descanso, el relax e incluso ir al cine por gusto personal sin tener que escribir sobre él. Los cines de verano serán mi elección.
Pero bueno, este será un hecho anecdótico. En los próximos días además del cine, como os podréis imaginar me gustan otras cosas. Así que ahora tendré unos días para olvidarme un poco de Internet, que es maravilloso pero también muy absorbente. A esto se le podría llamar también una desconexión y nunca mejor dicho.
Pienso que las vacaciones no consisten en la mejor playa, el mejor hotel o el mejor crucero. Mi forma de ver las vacaciones, es hacer justo lo contrarío de lo que haces habitualmente. Es decir tomar un periodo de tiempo y dedicarlo a hacer cosas que supongan una novedad o un revulsivo en tu vida para volver a la realidad con fuerzas renovadas.
La búsqueda de la inspiración también es un motivo importante para darle un descanso al blog. Inspiración es una palabra preciosa porqué cuando la encuentras todo fluye con una suavidad emocionante. Cuando no aparece, el escribir se vuelve algo mecánico. La crítica de cine no es un articulo periodístico meramente descriptivo, ya que consiste en sacar las emociones que te ha transmitido una película y darles una forma que pueda emocionar o al menos interesar a la persona que lo está leyendo. Sino hablaríamos del simple resumen de una película.
Hasta la fecha de hoy, ha sido muy emocionante la cantidad de personas que se han interesado por el mundo del cine a través de este blog. Jamás cuando empecé esta aventura pensé que podría conocer a tanta gente e incluso llegar a hacer amigos por el simple hecho de escribir sobre cine. No era mi objetivo en principio, pero ahora mismo reconozco que lo mejor de este blog, sois todos vosotros. No citaré a nadie en especial, pues seguro que me olvidaría de alguien. Gracias a todos.
Como voy ha dejar los comentarios inhabilitados de esta entrada en el blog por desconexión, siempre mi correo electrónico estará a vuestra disposición en mi perfil de Google+. Se aceptan también transferencias bancarias, jamones ibéricos, declaraciones de amor, herencias que no queráis cobrar e incluso acepto colaboraciones en The New York Times, Fotogramas, Clarín o El País.
Para concluir y como soy muy intenso con el mundo del cine os voy ha dejar una lista con diez películas muy especiales para mí. Algunas las he reseñado, Y otras no me he atrevido aún. En cualquier caso son cintas que me han transmitido algo muy especial a lo largo de estos últimos años. Todas las he visto en la gran pantalla, ya sea en el cine, en festivales o en la filmoteca. El orden de la lista no determina la calidad de las películas. Un gran abrazo para todos y nos vemos alrededor del 10/15 de Septiembre.
Los puentes de Madison. De Clint Eastwood, EEUU, 1995.
Julieta. De Pedro Almodovar, España, 2016.
¡Qué bello es vivir! De Frank Capra, EEUU, 1946.
Amores Perros. De Alejandro G Iñárritu, México. 2000.
El paciente ingles. De Anthony Minghella, EEUU, 1996.
Julieta. De Pedro Almodovar, España, 2016.
¡Qué bello es vivir! De Frank Capra, EEUU, 1946.
Amores Perros. De Alejandro G Iñárritu, México. 2000.
El paciente ingles. De Anthony Minghella, EEUU, 1996.
Mararía. De Antonio Betancor, España, 1998.
Casablanca. De Michael Curtiz, EEUU, 1942.
El barbero de Siberia. De Nikita Mijalkov, Rusia, 1998.
María llena eres de gracia. De Joshua Marstson, Colombia, 2004.
El lado bueno de las cosas. De David O. Rusell, EEUU, 2012.
Casablanca. De Michael Curtiz, EEUU, 1942.
El barbero de Siberia. De Nikita Mijalkov, Rusia, 1998.
María llena eres de gracia. De Joshua Marstson, Colombia, 2004.
El lado bueno de las cosas. De David O. Rusell, EEUU, 2012.
Suelo dejar un vídeo al final de cada texto. Hoy me gustaría dejar un cortometraje patrocinado por una marca de cervezas que rodó el maestro Amenábar y que es pura luz del Mediterráneo. Metáfora del amor y la amistad. El cine como epicentro de las ilusiones por vivir, por soñar y por cumplir. Pienso que cada experiencia que vivimos tiene un sentido y poco se debe a la casualidad. ¿Todo lo vivido nos lleva a un destino? Esta pequeña historia parece tener algunas respuestas. Te invito a bucear en tus sueños y encontrar tu luz.