Ensayo Equipo
Ensayo Equipo
Ensayo Equipo
ESTUDIANTES:
CICLO: I-2023.
El pensamiento crítico es una habilidad que podemos desarrollar para resolver problemas
cotidianos, es decir, evitar el conformismo y centrarnos en resolver el problema de una
manera exclusiva, ya que, existen diversas soluciones para la resolución de un problema
determinado. Entonces, ¿Cómo identificamos una persona critica? Observaremos que, al
interactuar en un grupo específico, es aquella persona que pregunta sin pena y con
fundamentos, tiene confianza en sí misma y es flexible, toma en cuenta las distintas opiniones
de sus pares o superiores, llegando de este modo, a una reflexión de la interrogante planteada.
En esta misma reflexión nos hacemos la siguiente pregunta ¿Cuál es el momento o la
situación que abre la puerta para que un niño o adolescente quiera pensar por sí mismo y no
por obligación? Un filósofo y sociólogo dijo “Pensar libremente no es decir cualquier cosa”
(Lipovetsky, 2020).
La verdad es que, antes de la pandemia existía de parte de los estudiantes ese deseo por ser
el mejor de la clase y a la misma vez existía un pequeño hábito de lectura y reflexión, que
surgía del mismo deseo del estudiante para demostrar en clase que sabía, en este sentido, se
armaban pequeños debates, de ciertos temas, que no necesariamente eran dirigidos por el
docente. Después de la pandemia el receso de tres años en el sector educativo, dio origen a
un escenario complejo, puesto que durante ese lapso del encierro, tanto docentes y estudiantes
se vieron en la obligación de adaptarse a la nueva era de la digitalización; los docentes por
su parte, aprendieron a utilizar nuevas herramientas digitales. Para muchos fue abrumador
este cambio; para los estudiantes consideramos que fue lo mejor que sucedió, ¿por qué? La
gran mayoría solo se limitó a descargar aplicaciones como: Brainly, Mathway, photomath o
simplemente esperar la copia de aquel estudiante que sí le interesó aprender en ese lapso de
encierro por la pandemia. La mayor parte del tiempo, estos estudiantes, se dedicaron a jugar
Freefire, Parchis, Amoung Us o ver Tik Tok, este último ha marcado un hito, quizás a nivel
mundial, con el surgimiento de los “influencer” y es por esta misma causa ahora en día
muchos estudiantes piensan para que esforzarse si con hacer bailes, o hablar de temas random
les genera más ganancias que “matarse” en una carrera que quizás ni trabajaran de eso;
ciertamente tendrán razón porque es lo que estamos viviendo; en ese sentido, vemos en
nuestras aulas respuestas del modo sí y no, al solicitarles una explicación de ello solo se
limitan a decir porque sí, siendo incapaces de hacer una reflexión de unas cuantas líneas de
un texto, solo quieren leer una vez, si es que leen, y expresan: ¿para qué? ¡Si está Brainly!
Ahora nos atrevemos a decir que la situación está peor, con todas las inteligencias artificiales
que están surgiendo. Un médico graduado comento una vez: “para que pierdo el tiempo
pensando en algo, si se lo puedo preguntar a la IA, ese tiempo que utilizo en investigar algo,
lo puedo utilizar en cosas más importantes como en mi familia.” Son palabras que asustan si
todos piensan lo mismo, es por esto que pensar críticamente se esta volviendo una verdad
incómoda por la cultura de la inmediatez, una población estudiantil se está acomodando a lo
más fácil y sin esfuerzo y perdiendo la visión de desarrollar el pensamiento crítico para
enfrentarse a esta sociedad cambiante.
Las limitaciones tecnológicas, la falta del acceso al internet, falta de supervisión en el uso de
las herramientas tecnológicas de parte de los padres de familia y esto conlleva al mal uso de
ellas. Por esta razón nos lleva a confirmar que las facilidades que brinda la tecnología limitan
al crecimiento o desarrollo del pensamiento crítico de algunos estudiantes, ya que, se dedican
a copiar y pegar información y no a crear contenidos, es decir se está dando un mal uso a la
tecnología.
Los docentes pueden lograr el desarrollo del pensamiento crítico en los estudiantes, de una
forma estratificada y respetando el estándar de desarrollo del estudiante, sin embargo, es
necesario que toda la comunidad educativa esté en plena sintonía y con la disposición de
apoyar en esta tarea. A través de la comprensión lectora, se puede desarrollar esta habilidad,
implementando estrategias y metodologías activas que promuevan la motivación y el interés
por la lectura. La comprensión lectora se puede definir como: la habilidad que posee un
individuo para interpretar, analizar, y evaluar la información. En pocas palabras, es
comprender lo que se lee o lo que se escucha, dándole un motivo y un fin a las cosas. Implica
que el estudiante debe comprender un concepto y su significado, interrelacionando la corteza
cerebral con el hipocampo para formular sus propias conclusiones, y así dejar de preguntarse:
“¿Y eso, para que me sirve en la vida?”
Si estamos hablando de una estratificación por niveles donde el docente empiece desde la
primera infancia hasta la educación superior. Es necesario afirmar que la comprensión lectora
debe ser el resultado del trabajo, dominio y aplicación de otros contenidos relacionados. Por
ejemplo: conocimiento y el uso adecuado de los signos de puntuación, la identificación de la
tipología textual, así como la utilización de diferentes técnicas para el enriquecimiento del
vocabulario. Además, es necesario que los estudiantes conozcan los niveles o las categorías
de la comprensión lectora, las cuales permiten medir la capacidad de interpretación de un
texto por parte de un lector, los niveles de comprensión lectora que se manejan en el ámbito
educativo son: nivel literal, nivel inferencial y nivel crítico. Sin embargo, para lograr que el
estudiante desarrolle esta competencia, se hace menester que también el docente domine esta
habilidad.
Algunos métodos que pueden utilizarse en la escuela para ayudar a promover el dominio de
estos niveles, serían: lectura de textos y formulación de preguntas literales, inferenciales y
críticas. También se pueden plantear preguntas abiertas que requieran que los estudiantes
reflexionen, analicen y justifiquen sus respuestas, esto permitirá pensar de manera crítica y
tener argumentos para defender sus propios puntos de vista; organizar debates y discusiones
sobre temas de su interés, con esto se logrará que además de fomentar el pensamiento crítico,
evalúen las diferentes perspectivas y acepten los diversos puntos de vista de sus compañeros;
proporcionar a los estudiantes problemas o estudios de caso complejos que requieran análisis
para su resolución. Al desarrollar estas actividades, es necesario que los docentes consideren
los estándares de desarrollo y aprendizaje. Además, los ritmos de aprendizajes, necesidades
e intereses de cada estudiante.
Es importante destacar que el pensamiento crítico tiene una estrecha relación con la
comprensión lectora, ya que, en la medida que el individuo logre interpretar, analizar, y
evaluar un texto, estimulará y fortalecerá el pensamiento crítico.
De este modo la era actual se distingue de las demás, por el fácil acceso a la información,
solo es necesario que el estudiante tenga la voluntad de investigar sobre determinado tema la
internet le tendrá las respuestas, sin embargo, el estudiante debe analizar la información que
necesita y en su juicio es la correcta. Para esto debe existir un trabajo continuo desde la niñez
en cuanto al criterio de que es la verdad y lo correcto, he ahí que decimos que el desarrollo
del pensamiento crítico en los estudiantes fomenta la habilidad de cuestionar y analizar
diferentes perspectivas, lo cual es fundamental para el desarrollo de ciudadanos responsables
y comprometidos con la sociedad.