Actividad Evolución y Mutación
Actividad Evolución y Mutación
Actividad Evolución y Mutación
UNA MUTACIÓN: es el cambio en la secuencia de un nucleótido o en la organización del ADN (genotipo) de un ser
vivo, que produce una variación en las características de este y que no necesariamente se transmite a la descendencia. Se
presenta de manera espontánea y súbita o por la acción de mutágenos. Este cambio estará presente en una pequeña
proporción de la población (variante) o del organismo (mutación). La unidad genética capaz de mutar es el gen, la unidad
de información hereditaria que forma parte del ADN. En los seres pluricelulares, las mutaciones solo pueden ser
heredadas cuando afectan a las células reproductivas. Una consecuencia de las mutaciones puede ser, por ejemplo, una
enfermedad genética. Sin embargo, aunque a corto plazo pueden parecer perjudiciales, las mutaciones son esenciales para
nuestra existencia a largo plazo. Sin mutación no habría cambio, y sin cambio la vida no podría evolucionar.
La definición que en su obra de 1901 "La teoría de la mutación" Hugo de Vries dio de la mutación (del latín mutare =
cambiar) era la de cualquier cambio heredable en el material hereditario que no se puede explicar median te
segregación o recombinación. Más tarde se descubrió que lo que De Vries llamó mutación en realidad eran más bien
recombinaciones entre genes. La definición de mutación a partir del conocimiento de que el material hereditario es el
ADN y de la propuesta de la doble hélice para explicar la estructura del material hereditario (Watson y Crick, 1953), sería
que una mutación es cualquier cambio en la secuencia de nucleótidos del ADN. Cuando dicha mutación afecta a un solo
gen, se denomina mutación génica. Cuando es la estructura de uno o varios cromosomas lo que se ve afectado,
mutación cromosómica. Y cuando una o varias mutaciones provocan alteraciones en todo el genoma se denominan,
mutaciones genómicas.
MUTACIÓN SOMÁTICA:
Es la que afecta a las
células somáticas del
individuo. Como
consecuencia aparecen
individuos mosaico que
poseen dos líneas celulares
diferentes con distinto
genotipo. Una vez que una
célula sufre una mutación,
todas las células que
derivan de ella por
divisiones mitóticas
heredarán la mutación
(herencia celular). Un
individuo mosaico
originado por una mutación
somática posee un grupo de
células con un genotipo
diferente al resto, cuanto
antes se haya dado la
mutación en el desarrollo
del individuo mayor será la proporción de células con distinto genotipo. En el supuesto de que la mutación se hubiera
dado después de la primera división del cigoto (en estado de dos células), la mitad de las células del individuo adulto
tendrían un genotipo y la otra mitad otro distinto. Las mutaciones que afectan solamente a las células de la línea somática
no se transmiten a la siguiente generación.
Mutaciones bioquímicas o nutritivas: Son los cambios que generan una pérdida o un cambio de alguna función
bioquímica como, por ejemplo, la actividad de una determinada enzima. Se detectan ya que el organismo que presenta
esta mutación no puede crecer o proliferar en un medio de cultivo por ejemplo, a no ser que se le suministre un compuesto
determinado. Los microorganismos constituyen un material de elección para estudiar este tipo de mutaciones ya que las
cepas silvestres solo necesitan para crecer un medio compuesto por sales inorgánicas y una fuente de energía como la
glucosa. Ese tipo de medio se denomina mínimo y las cepas que crecen en él se dicen prototróficas. Cualquier cepa
mutante para un gen que produce una enzima perteneciente a una vía metabólica determinada, requerirá que se suplemente
el medio de cultivo mínimo con el producto final de la vía o ruta metabólica que se encuentra alterada. Esa cepa se llama
auxotrófica y presenta una mutación bioquímica o nutritiva.
Mutaciones de pérdida de función: Las mutaciones suelen determinar que la función del gen en cuestión no se pueda
llevar a cabo correctamente, por lo que desaparece alguna función del organismo que la presenta. Este tipo de mutaciones,
las que suelen ser recesivas, se denominan mutaciones de pérdida de función. Un ejemplo es la mutación del gen hTPH2
que produce la enzima triptófano hidroxilasa en humanos. Esta enzima está involucrada en la producción de serotonina en
el cerebro. Una mutación (G1463A) de hTPH2 determina aproximadamente un 80 % de pérdida de función de la
enzima, lo que se traduce en una disminución en la producción de serotonina y se manifiesta en un tipo de
depresión llamada depresión unipolar.
Mutaciones de ganancia de función: Cuando ocurre un cambio en el ADN, lo más normal es que corrompa algún
proceso normal del ser vivo. Sin embargo, existen raras ocasiones donde una mutación puede producir una nueva función
en el gen, generando un fenotipo nuevo. Si ese gen mantiene la función original, o si se trata de un gen duplicado, puede
dar lugar a un primer paso en la evolución. Un caso es la resistencia a antibióticos desarrollada por algunas bacterias (por
eso no es recomendable abusar de algunos antibióticos, ya que finalmente el organismo patógeno irá evolucionando y el
antibiótico no le hará ningún efecto).
Tipos de mutación según el mecanismo causal
Según el mecanismo que ha provocado el cambio en el material genético, se suele hablar de tres tipos de mutaciones:
mutaciones cariotípicas o genómicas, mutaciones cromosómicas y mutaciones génicas o moleculares. En el siguiente
cuadro se describen los diferentes tipos de mutaciones y los mecanismos causales de cada una de ellas
Transición
Por sustitución de bases
Transversión
génica o molecular (por inserciones o deleciones de bases)
Inversiones
Mutación cromosómica Deleciones o duplicaciones
Translocaciones
Poliploidía
genómica
Aneuploidía
Hay una tendencia actual a considerar como mutaciones en sentido estricto solamente las génicas, mientras que los otros
tipos entrarían en el término de mutaciones cromosómicas.