02 05 2021 Escuela Dominical

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ESCUELA DOMINICAL

DOMINGO 02/05/2021
LECCIÓN
MATEO 13: 1 AL 9 y 18 al 23
TEMA
PARÁBOLA DEL SEMBRADOR
TEXTO DE MEMORIA
GÁLATAS 6: 8

Porque el que siembra para su carne, de la carne


segará corrupción; mas el que siembra para el
Espíritu, del Espíritu segará vida eterna.
Gálatas 6: 8

INSTRUCCIONES PREVIAS
Como ya es habitual, cada domingo antes de
comenzar el tema de hoy, es recomendable preguntar,
y sobre la lección estudiada la semana pasada,
¿Dónde estuvo? Mateo 12: 46 al 50
¿Cuál fue el nombre de la lección? La madre y los
hermanos de Jesús.
¿Cuál fue el texto de memoria? El texto fue:
Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que
seamos llamados hijos de Dios; por esto el mundo no
nos conoce, porque no le conoció a él.
1 Juan 3: 1
En lo posible, siempre intenté repasar otros textos
aprendidos en lecciones anteriores. O pregunten si
alguien recuerda algún otro texto. Este ejercicio, si se
realiza cada semana, ayudará a que sus alumnos se
preparen para enfrentar una nueva clase, y así poder
responder las preguntas del profesor. Además esto
ayuda a retener y reforzar las enseñanzas aprendidas.
ES MUY IMPORTANTE; Que usted como profesor,
entienda que este estudio es sólo un bosquejo o una
guía de apoyo, que le ayudará a desarrollar su clase.
Pero la mejor guía y el mejor estudio lo encuentra
usted en su Biblia, por lo tanto antes de enseñar
"LEA SU BIBLIA"

INTRODUCCIÓN
Gracias al Señor por darnos esta oportunidad de
poder estudiar las escrituras, y la verdad es que entre
más uno estudia las escrituras, y entre más conoce de
la palabra de Dios, vamos también viendo los cambios
que producen la palabra de Dios en las personas, y no
son por insinuación o por estrategia humana, y eso es
lo que confirma aún más que tenemos que ir a la
biblia, y profundizar en ella. Tenemos que seguir
enseñando y predicar las escrituras, porque allí está el
poder que necesitamos para enfrentar y mejorar
nuestra vida.
Hasta aquí hemos visto los doce primeros
capítulos de Mateo, y como bien saben ustedes, la
forma en que Mateo ordena su material, tiene que ver
con esa oposición creciente que se venía dando, sin
embargo el Señor Jesucristo sigue demostrando a
través de sus obras, sus hechos, y sus enseñanzas,
que en realidad él era el Mesías, a pesar de la
oposición, y de esa permanente rebeldía de parte de
los judíos, y particularmente de los de los fariseos.
Ahora llegamos al capítulo 13 donde comienza un
nuevo discurso, que tienen que ver en este caso con
una serie de parábolas.
El día de hoy vamos a ir profundizando y ver cuál
sería la razón por la cual el Señor Jesucristo cambio la
forma de enseñar, en forma literal y directa, a hacerlo
a través de palabras, que es una forma de lenguaje
para poder enseñar lo que él quería transmitir.
Jesús mismo interpretó dos de las parábolas,
entonces no es necesario que nosotros empecemos a
cabecearnos tratando de ver qué significa, porque aquí
tenemos la interpretación directa, como es la parábola
del sembrador, y la parábola del trigo y la cizaña, y no
necesitamos hacer conjeturas respecto a qué significa.
Y para poder entender ¿Qué son las parábolas?
necesitamos ir comentando cuál es el propósito que
tenían, por tanto vamos a abocarnos primero a el
significado de la palabra PARÁBOLA la palabra que se
tradujo como parábola o parabolé en griego: y aquí
está lo interesante o difícil de poder identificar, porque
es una gama muy amplia, no es sólo un tipo específico
de relato o historia, sino que se le da este nombre a
muchas referencias que se hacen en el antiguo
testamento, por ejemplo: se refiere algunos proverbios
que le llama parábola, o se traducen como parábola a
comparaciones alegorías fábulas adivinanzas historias
dichos populares que encarnan algunas verdades, o
sea es muy amplio el significado de parábola, pero en
cuanto al sentido por el cual se da ahora en el nuevo
testamento, la palabra parábola, aparece casi el doble
de veces que en el antiguo testamento. Por ejemplo:
Lucas 4: 23 Él les dijo: Sin duda me diréis este refrán:
Médico, cúrate a ti mismo; de tantas cosas que hemos
oído que se han hecho en Capernaum, haz también
aquí en tu tierra.
Este refrán se traduce como parabolé, o un
proverbio, o un dicho popular, para que lo entendamos
mejor en la biblia este era un dicho popular, “médico
curarte a ti mismo” pero se utilizaba la palabra
parábola allí, por eso es que no necesariamente es
como tan restrictivo el sentido de la palabra parábola;
otra manera también se usaba, como una alegoría,
Juan 10: 6 Esta alegoría les dijo Jesús; pero ellos no
entendieron qué era lo que les decía. Lo que les decía
ahí, aparece traducida como alegoría, pero es la
palabra muy similar de la misma raíz que parábola,
también se traduce en Mateo 13: 35
Para que se cumpliese lo dicho por el profeta,
cuando dijo: Abriré en parábolas mi boca; Declararé
cosas escondidas desde la fundación del mundo. Ahí
está la palabra directamente; y eso es un dicho
profundo y oscuro, es decir un poco difícil de
interpretar, esto fue dicho en el antiguo testamento, y
lo transcribe Mateo aquí.
Y una comparación ilustrativa como en Mateo 15:
14 Dejadlos; son ciegos guías de ciegos; y si el ciego
guiare al ciego, ambos caerán en el hoyo.
Eso es una parábola que aparece en diferentes
formas, lo que nosotros tenemos en nuestra cabeza
como concepto de parábola es como una historia
general ¿Cierto? ¡¡Así tomamos siempre el concepto
de parábola!! Pero aquí estamos viendo que pueden
ser sentencias cortas, frases pequeñas, dichos
populares, es decir tenía una serie de posibilidades.
Entonces la parábola es una figura del lenguaje
que puede señalar un dicho, proverbio, alegorías,
símbolo, imagen no verbal, etcétera; para transmitir
una enseñanza, o para esconder una enseñanza, y
quiero repetir este último concepto; parábola es una
figura del lenguaje, que puede transmitir una
enseñanza, o esconder una enseñanza; y eso es lo
que nosotros acabamos de ver en estos versículos.

TEMA

Comenzaremos este estudio viendo como las


parábola tenían la intención de mostrar una
enseñanza, y por otro lado de ocultar o velar. Dos
cosas que parecen contradictorias, pero que la
mencionan las escrituras, y eran necesarias según la
audiencia que había en ese momento.
Hay dos formas de poder presentar este estudio,
una tiene que ver con hacerlo en forma natural
versículo a versículo, es decir nos tocaría entonces
comenzar con el versículo 1 hasta el 9 para ver la
primera parábola pero como se darán cuenta ustedes,
más adelante hay un paréntesis explicativo de parte
del Señor Jesucristo que seguramente no es
cronológico, ¿y porque decimos que no es
cronológico? Porque los que preguntan en el versículo
10 son los discípulos, sin embargo las primeras cuatro
parábolas no fueron para los discípulos, sino para la
multitud, según lo que indica el versículo 2: Y se les
juntó mucha gente, y entrando él en la barca se sentó,
y toda la gente estaba en la playa. Ahí comenzó a
enseñar la parábola del sembrador, la parábola del
trigo y la cizaña, la parábola de la semilla de mostaza,
y la parábola de la levadura; estas cuatro parábolas
como vimos en la introducción, fueron dirigidas
exclusivamente o específicamente hacia la multitud,
por tanto en este caso vemos un paréntesis, que
seguramente es una pregunta que los discípulos le
hicieron cuando él ya había dado las parábolas
después de haber terminado, y Mateo la coloca aquí
entremedio con el propósito de clarificar el propósito
de las parábolas, y esto es lo que la semana siguiente
vamos a tratar, es decir del versículo 10 al versículo
17. Pero ahora vamos a ver la palabra del sembrador
completa, es decir su presentación y su explicación,
me refiero a los versículos 3 al 9 y luego del 18 al 23
Nosotros podemos preguntar ¿Cuál es el sentido
de estudiar estos versículos si Jesús lo explico? De
hecho la parábola del Sembrador él la mencionó en
los versículos 3 al 9 y la explicación está en los
versículos 18 al 23, y obviamente también nosotros
somos como los discípulos, a veces nos cuenta
entender, y necesitamos por supuesto estudiar más en
profundidad lo que el Señor transmitió en la parábola
del sembrador, ya que nos facilita la comprensión lo
que Jesús explicó en esta parábola, entonces vamos a
profundizar en algunas cosas en el día de hoy, como
vemos Jesús explica el significado de la parábola
debido a una petición de sus discípulos según
Consigna en Lucas 8, este es uno de los textos
paralelos de este párrafo y podemos ver ahí que dice:
Lucas 8: 9 Y sus discípulos le preguntaron, diciendo:
¿Qué significa esta parábola?
Luego también en Marcos, podemos entender el
mismo sentido, dice Marcos 4: 13 Y les dijo: ¿No
sabéis esta parábola? ¿Cómo, pues, entenderéis
todas las parábolas? Y eso implica que los discípulos
le habían preguntado previamente, entonces la razón
por la cual el Señor explica esta palabra, está
claramente establecida en los textos paralelos, por eso
en Mateo 13: 18 Jesús se dirige a sus discípulos para
darle la explicación.
El Señor les habla directamente a los discípulos
que habían oído la parábola, pero necesitaban
entender su significado, del mismo modo hoy nosotros
los creyentes necesitamos no sólo leer las escritura,
sino también entenderlas, leer la palabra no significa
que automáticamente la vamos a entender,
necesitamos una explicación, necesitamos que el
Espíritu Santo nos ayude a comprender lo que quiso
decir Cristo, y cuál es la intencionalidad por la cual se
escribió esa parábola, y más aún necesitamos también
de maestros, y por eso la Biblia dice en Efesios 4:11
Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros,
profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y
maestros, para la edificación del cuerpo de Cristo; para
poder enseñar también, guiados por el Espíritu Santo;
eso no significa que cada creyente no pueda estudiar
en forma particular, sino que significa que el Señor
dejó esos instrumentos para servir en la iglesia; como
Apóstoles, Profetas, Evangelistas, Pastores, y
maestro. Necesitamos escuchar la palabra y también
necesitamos entender la palabra de Dios, esto hace la
diferencia entre el crecimiento espiritual, y el
estancamiento espiritual, una persona no crece
mientras no entiende la palabra y la apropie para sí
mismo, tal vez pueden tener una comprensión
intelectual correcta, acertada de la palabra, pero no
necesariamente una comprensión espiritual de la
misma, y eso es necesario, y es imprescindible para
que pueda haber crecimiento espiritual.
En esta parábola Existen tres cosas que es
necesario puntualizar y clarificar antes de comenzar el
desglose de los versículos; ¡¡Como es una parábola
tomada de la agricultura!! Se pueden distinguir tres
cosas claramente.
Primero EL SEMBRADOR: Sin duda la semilla no
cae ahí por casualidad, sino que alguien la siembra,
ahora Mateo no hace referencia en los versículos que
hemos dado lectura, quién es el Sembrador, pero poco
más adelante en el versículo 37 en el contexto de otra
parábola dice quién es ese Sembrador. Mateo 13: 36
37 Entonces, despedida la gente, entró Jesús en la
casa; y acercándose a él sus discípulos, le dijeron:
Explícanos la parábola de la cizaña del campo.
37 Respondiendo él, les dijo: El que siembra la buena
semilla es el Hijo del Hombre. Podemos comprender
que el Sembrador es el que estaba presentando la
enseñanza, el que estaba predicando el Evangelio del
reino, de tal manera que el Sembrador, es el Señor
Jesucristo.
Luego está LA SEMILLA. No sólo está el
Sembrador, sino también la semilla, y que el que la
estaba esparciendo es el Sembrador, según Mateo es
la palabra del reino, como podemos ver en el
versículo 19: Cuando alguno oye la palabra del reino
y no la entiende, viene el malo, y arrebata lo que fue
sembrado en su corazón. Este es el que fue sembrado
junto al camino.
Así lo dice Mateo: cuando alguno oye la palabra
del reino; ahora Lucas es mucho más claro y directo.
En el mensaje paralelo de este mismo relato Lucas 8:
11 y 12 Esta es, pues, la parábola: La semilla es la
palabra de Dios
Lucas dice que la semilla es la palabra de Dios,
por tanto no tenemos ninguna posibilidad de
equivocarnos al respecto para identificar la semilla,
que es sin duda la palabra de Dios.
Y el tercer elemento es LA TIERRA. Tenemos el
Sembrador, la semilla, y finalmente la tierra, donde va
a ser sembrada la semilla. Mateo dice qué es el
corazón del hombre versículo 19 Cuando alguno oye
la palabra del reino y no la entiende, viene el malo, y
arrebata lo que fue sembrado en su corazón. Este es
el que fue sembrado junto al camino.
Todos los tipos de tierra que aparecen aquí, son
tipos de corazones, de la actitud de las personas
frente a la palabra cuando son confrontados con ella,
cómo reaccionan, de qué manera responden ellos, y
es muy importante que podamos entender que en la
parábola del Sembrador, el énfasis no está en el
Sembrador, ni en la semilla; el énfasis está en el tipo
de suelo dónde cae la semilla que el sembrador
esparce. Es una parábola para explicar los cuatro tipos
de terreno o corazones en los que es depositada la
semilla, la palabra de Dios; y la reacción que éstos
tienen ante el mensaje cuando lo escuchan.
Ahora si el sembrador es Jesús, el hijo de Dios,
por consecuencia cada creyente en Cristo, ahora es un
sembrador, a quién se le ha ordenado id por todo el
mundo y predicar el evangelio a toda criatura;
Entonces ahora ¿Quiénes son los sembradores?
¡¡Nosotros!! Todo creyente es un sembrador de la
palabra de Dios, que va esparciendo la semilla.
Sin embargo debemos tener en cuenta algo muy
importante, para que esto tenga un resultado
adecuado, para qué la semilla produzca fruto, no
depende del sembrador, en este caso no depende de
nosotros, sino que está en la semilla, la semilla misma
tiene el poder para transformar el corazón de las
personas, para llegar y producir fruto, porque el fruto
no lo produce el sembrador, los que esparcimos la
semilla, sino que la semilla lleva en sí mismo la vida.
Eso lo sabemos incluso del punto de vista de la
agricultura. Entonces eso significa que el poder para
cambiar el corazón y producir frutos en esa tierra, en el
corazón del hombre, está en la semilla misma, Qué es
la palabra de Dios. 1 Pedro 1: 23 Siendo renacidos, no
de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la
palabra de Dios que vive y permanece para siempre.
¿Se fijan? ¡¡Ahí está muy claro quién es el que
produce el nuevo nacimiento!! (La palabra simiente es
la misma que semilla) no de simiente corruptible, sino
de incorruptible, por la palabra de Dios que vive y
permanece para siempre. A veces se piensa que
nosotros somos los que podemos persuadir a alguien,
o convencer a alguien a través de argumentos, y una
serie de otras cosas para que puedan llegar al
conocimiento de la verdad, y eso es completamente
imposible, tal vez podamos convencer a alguien, pero
no podemos transformar a nadie, solamente la palabra
de Dios que cae en un terreno fértil, es la que produce
ese fruto de cambio y de transformación. Entonces los
sembradores somos los que llevamos el mensaje de
vida cuando predicamos el evangelio, pero el poder no
está en nosotros, sino en el mismo mensaje.
Recuerde entonces el Sembrador es el mismo
Señor Jesucristo, y por mandato, cada uno de
nosotros somos llamados a sembrar. La semilla es la
palabra de Dios, el evangelio de salvación. La tierra es
el corazón de las personas donde cae esa semilla.
Otro detalle importante a recordar, que la semilla es
perfecta, de tal manera que el problema no está en el
sembrador en este caso Jesús, ni en la semilla que es
la palabra de Dios, porque ambos son perfectos, el
problema está en el corazón de las personas, que es
el tipo de tierra del que habla este estudio.
Y ahora entramos a desglosar la última parte, es
decir ver los tipos de tierra que es lo que Señor
Jesucristo se refiere aquí, cuatro tipos de tierra con
resultados diferentes según la receptividad que tengan
a la semilla que le es sembrada.
Primero: LA SEMILLA QUE CAYÓ JUNTO AL
CAMINO
Mateo 13: 3 - 4 y 19 Y les habló muchas cosas
por parábolas, diciendo: He aquí, el sembrador salió a
sembrar.
4 Y mientras sembraba, parte de la semilla cayó junto
al camino; y vinieron las aves y la comieron.
19 Cuando alguno oye la palabra del reino y no la
entiende, viene el malo, y arrebata lo que fue
sembrado en su corazón. Este es el que fue sembrado
junto al camino.
Si nosotros vemos el versículos 4 dice mientras
sembraba parte de la semilla cayó junto al camino,
para entender este versículo debemos tener en cuenta
este detalle ¿De qué manera sembraban en ese
entonces? ¡¡Esparciendo la semilla, lanzándola al aire!!
y obviamente una parte de la semilla cayó junto al
camino, y esa semilla que cae en un lugar endurecido
por el paso de la gente, no puede encontrar tierra apta
para que se hunda la semilla, porque la semilla tiene
que profundizarse, para que pueda producir fruto, en
este caso era imposible, la semilla queda en la
superficie, no penetra la tierra porque está endurecida
por el tránsito de las personas, de manera que
cualquier semilla que cae en ese lugar, difícilmente
podrá brotar. Notemos que dice: que oye la palabra,
esa es una característica de los cuatro tipos de
corazones o suelos que mencionó Jesús en está
parábola, todos oyen la palabra, no es un asunto que
no escuchan el mensaje del Evangelio, sino que oyen
la palabra, pero resulta que aquí no la entiende, no
hay una comprensión, y por lo mismo tampoco hay un
interés, al no entender lo que escuchan, pierden el
interés. No sé si ustedes les pasa lo mismo, cuando
comienzan a leer un libro, y no lo entienden, ¿Qué es
lo que hacemos? ¡¡Lo cerramos y lo dejamos de leer!!
¿Cierto? Se nos provoca una falta de interés, pero
ahora si al leer el libro lo entendemos ¿Qué es lo que
pasa? todo lo contrario ¿Verdad? Nos entusiasmamos
con la lectura, y por así decirlo devoramos ese libro
¿Verdad? Bueno en el caso de este ejemplo, es un
corazón que recibe la palabra, pero esa persona no
entiende. Puede tener una comprensión intelectual de
lo que significa, pero no entiende espiritualmente, en
consecuencia no puede reaccionar adecuadamente
frente a lo que escucha, y no es que no haya sido
expuesto a la palabra, sino que simplemente no
comprende, carece de entendimiento, para aceptar la
necesidad de la palabra de Dios en su vida. Hay gente
que escucha el evangelio, y dice bueno eso está bien
para ti, pero para mí no, yo estoy bien así como estoy.
No comprenden la urgente ni la necesidad por Dios,
porque no comprende que va rumbo al infierno, y que
en cualquier momento se acaba su vida, y junto con
eso, se acaba también la posibilidad de poder creer en
el Señor Jesucristo, entonces esa persona tiene un
corazón endurecido, no tiene ningún interés de la
palabra de Dios. Pablo dice en 1 Corintios 2: 14 Pero
el hombre natural no percibe las cosas que son del
Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las
puede entender, porque se han de discernir
espiritualmente.
¿Cómo va a entender si no tiene el espíritu? ¡¡Y
sin el espíritu es imposible entender la palabra de
Dios!! Entonces esta semilla que cayó junto al camino,
representa a ese tipo de personas que al oír la palabra
no tienen una comprensión o entendimiento y en
consecuencia la semilla no pueda dar frutos en ese
tipo de suelo. Pero aquí no solo es que no tienen
comprensión ya que aquí aparece un segundo
elemento que no podemos pasar por alto; fíjense que
no es solo una situación interna, sino también es una
situación externa qué obra en esa persona.
Versículo 19 Cuando alguno oye la palabra del reino y
no la entiende, viene el malo, y arrebata lo que fue
sembrado en su corazón. Este es el que fue sembrado
junto al camino.
Cuando alguno Oye la palabra el reino y no la
entiende; ¡¡Fíjense!! Ahí está la situación interna, de su
propia comprensión; viene el malo literalmente es
maligno, viene Satanás eso es lo que literalmente está
diciendo, y arrebata lo que fue sembrado en su
corazón, y aquí está la situación externa, alguien
externo le quita lo que le fue sembrado. Esto es
comparado con las aves de los cielos, si nosotros
comparamos el versículo 4 ahí el Señor Jesucristo
dice: Y mientras sembraba, parte de la semilla cayó
junto al camino; y vinieron las aves y la comieron. Esto
es lo que está simbolizando la explicación del mismo
Señor Jesucristo, y no está diciendo que las aves son
el maligno, ¡¡NO!! Es que vino el maligno y le arrebato
la semilla a esta persona, no sólo tiene el corazón
endurecido, sino además su entendimiento está en
tinieblas espirituales; veamos 2 Corintios 4: 4 en los
cuales el dios de este siglo cegó el entendimiento de
los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del
evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de
Dios.
Pueden que esta persona pueda llegar a tener un
poquito de interés pero viene el enemigo y quita eso
para que no le resplandezca la luz del evangelio,
entonces hay un elemento interno natural en la
persona que no puede entender, y en elemento
externo que es el enemigo, el diablo que viene y obra
en esa persona robándole lo que fue sembrado, en
palabras simple para que lo entendamos bien, Satanás
siempre está presente cuando se predica la palabra, y
su tarea es quitar esa semilla para que no produzca
fruto en el corazón de la persona.
Sin embargo también se puede aplicar a un
creyente en su proceso de santificación, recordemos
que el creyente por así decirlo, pasa por tres etapas
que van una tras otra, la primera en la Justificación:
que es el momento de creer, allí la persona es
justificada, la justicia de Cristo es puesta a su favor, en
su cuenta por así decirlo. Luego de viene la
Santificación qué es el proceso natural que viene
después de la justificación, es donde nos vamos
limpiando y transformando por medio de su palabra
que obra en nosotros, en la santificación estamos
siendo librados del pecado. Y finalmente viene la
Glorificación: Qué es el proceso final de la
justificación y la santificación, ya no hay condenación
para los que están en Cristo Jesús, ya ha sido quitada
la culpa del pecado, y del castigo, en la glorificación ya
estamos completamente librados del pecado.
En segundo lugar versículo 5 - 6 - 20 y 21 Parte
cayó en pedregales, donde no había mucha tierra; y
brotó pronto, porque no tenía profundidad de tierra;
6 pero salido el sol, se quemó; y porque no tenía raíz,
se secó.
20 Y el que fue sembrado en pedregales, éste es el
que oye la palabra, y al momento la recibe con gozo;
21 pero no tiene raíz en sí, sino que es de corta
duración, pues al venir la aflicción o la persecución por
causa de la palabra, luego tropieza. Este
es el otro tipo de suelo, otro tipo de corazón, la semilla
que cayó en pedregales ¿Qué característica tiene este
tipo de tierra? es que es poco profunda, no había
mucha tierra dice el Señor en el versículo 5, al hablar
de esta de este tipo de suelo. Entonces no tenía la
capacidad de profundizar las raíces, de tal manera que
una semilla que cae allí brotara rápidamente, pero con
la misma rapidez se secara, porque cuando va
creciendo un poco más, necesita la profundidad de
tierra pero no hay más tierra, hay pedregales,
entonces en consecuencia se seca y se muere. Eso es
lo que pasa del punto de vista de la agricultura, la
explicación que da Señor, que este tipo de personas
oyen la palabra, y en el momento la reciben con gozo,
porque dice esto es lo que yo necesito, y hasta puede
haber lágrimas, esta persona puede estar totalmente
emocionada por recibir la palabra en ese momento.
Estos, a diferencia de los anteriores, están dispuestos
a escuchar, no son indiferentes, por el contrario son
personas entusiastas, y reciben la palabra con alegría.
Pero no calculan el costo de seguir a Cristo, como el
mismo lo dijo, estas personas no son verdaderos
creyentes, son creyentes superficiales, pero la obra de
Dios no ha sido hecha en sus corazones; ¿Cuánto de
este tipo de personas frecuentan las iglesias?
Personas que son convencidas pero no convertidos,
hay un convencimiento de tipo emocional, de tipo
humano, nada más que eso; ¿Qué es lo que lo deja en
evidencia? vamos a ver lo que dice él mismo Señor
Jesucristo; versículo 20
Dice: este es el que oye la palabra, y al momento la
recibe con gozo, ¡¡Pero!! Aquí está el problema, esto
lo deja en evidencia, no tienen raíz en sí, sino que es
de corta duración, pues al venir la aflicción o la
persecución por causa de la palabra, luego tropieza.
¿Qué es lo que lo deja en evidencia? ¡¡Las
aflicciones, las dificultades!! Es decir cuando viene
alguna situación conflictiva en su vida por causa de la
palabra, esa persona empieza a dudar de su relación
por Cristo, y empieza a decir pero si yo hice esto, pero
yo hice esto otro, todo lo basa en sí mismo ¿se fijan?
¡¡Y resulta que estoy pasando por esto, por esto otro!!
Y empieza a cuestionar la bondad y el amor de Dios;
en un momento estaba muy arriba, con mucha
emoción, y resulta que cuando vienen las aflicciones,
como dice la palabra: viene la persecución por causa
de la palabra, luego esta persona tropieza, o se le
acaba el entusiasmo.
cuando comienzan a asediarlo las demás personas, y
empiezan a cuestionar su profesión de fe, ahí se ve sí
esa persona es genuinamente o no, porque el Señor
ha permitido o mejor dicho ha traído a la iglesia
persecución en diferentes etapas de la historia de la
iglesia, porque esa es la manera de purificar la iglesia,
Esa es la manera que queda en evidencia quién es, y
qué no es, por qué en tiempo de paz y de tranquilidad
donde no pasa nada cierto es muy fácil decir yo amo a
Cristo, pero cuando vienen la aflicción la persecución
allí se rebela lo que hay en el corazón de la persona.
Un creyente Genuino también puede pasar
por esto en ciertas circunstancias, la mejor manera
ilustrar esto, es comparar la vida cristiana con una
maratón y no con una carrera de 100 metros planos,
¿Cuál es la diferencia? ¡¡Una carrera de 100 metros
planos muy corta!! ¿Pero una maratón…? son 42
kilómetros. Ejemplo una persona como Usain Bolt
¿Puede correr la maratón? ¡¡NO!! Porque está
preparado para distancias cortas, pero en el
maratonista sabe que tiene que ir de a poco, tiene que
ir midiendo sus fuerzas para poder llegar. Bueno está
es la diferencia, una persona que recibe en el
momento con gozo la palabra, cree que es una carrera
de 100 metros planos la carrera cristiana, y no es así,
es una maratón, la vida cristiana es una maratón,
requiere un esfuerzo constante y decidido, no importa
los obstáculos que encontremos en la carrera, la meta
nuestro fin; recuerden lo que dice el Apóstol Pablo:
Filipenses 3: 13 y 14 Hermanos, yo mismo no
pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago:
olvidando ciertamente lo que queda atrás, y
extendiéndome a lo que está delante,
14 Prosigo a la meta, al premio del supremo
llamamiento de Dios en Cristo Jesús. Él sabía que
tenía que extenderse y cuando habla de eso es
cuando la persona hace su último esfuerzo y echa el
pecho hacia adelante para poder tocar con el pecho la
cinta de la meta, hay una un esfuerzo muy grande,
todos los músculos concentrados con el propósito de
llegar a la meta, no es algo fácil, el verdadero creyente
sabe que la senda de la cruz es la que conduce a la
gloria, no se puede llegar a la Gloria por el camino
ancho y pavimentado, se llega por el camino la cruz,
donde habrá aflicción, dificultades. El Apóstol Pablo le
dijo a Timoteo que todos los que quieren vivir
piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución,
de tal manera que hay aflicciones, eso es
absolutamente seguro, no es una posibilidad para el
creyente, es una realidad, pero el creyente sabe que
ese es el camino correcto, la otra persona dice: NO ya
no quiero seguir andando por este camino, y se vuelve
atrás.
El tercer tipo de tipo de corazón, es la semilla que
cayó entre espinos. Versículos 7 y 22 Y parte cayó
entre espinos; y los espinos crecieron, y la ahogaron.
22 El que fue sembrado entre espinos, éste es el que
oye la palabra, pero el afán de este siglo y el engaño
de las riquezas ahogan la palabra, y se hace
infructuosa. Esta semilla cayó en esta tierra brota,
¿Pero que había en ese lugar ya? ¡¡Espinos!!
Entonces la tierra es fértil para producir, para que la
buena semilla produzca, pero juntamente también,
para que la mala semilla produzca, esta tierra recibe la
buena semilla pero los espinos crecen más y
finalmente terminan ahogándola, haciéndola
infructuosa. Los espinos son comparados con dos
cosas propias de las preocupaciones humanas, que
Señor Jesucristo describe como afanes, o
preocupaciones; Hay hacer la salvedad: “una
preocupación es natural” “una fan para un creyente no
debe estar” Filipenses 4: 6 Por nada estéis
afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones
delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de
gracias.
Dice por nada estéis afanosos, ¿Y qué dijo el Señor
en Mateo 6:25? Por tanto os digo: No os afanéis por
vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de
beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No
es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el
vestido?
26 Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni
siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre
celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más
que ellas? Es decir el Señor Jesucristo le da mucha
importancia al afán y está diciendo: el problema del
afán es una preocupación excesiva que nos lleve a
colocar precisamente la mirada donde no debemos
colocarla. Lo primero que dice que los afanes de este
siglo, por decir los afanes mundanos, los afanes de
esta tierra, no permiten que la semilla fructifique,
porque sí la palabra es buena pero su mirada no está
puesta en las cosas de arriba, sino en las de la tierra,
entonces muchas veces la preocupación mayor de un
creyente, es casi similar a la preocupación de un no
creyente, y eso no puede ser, porque tenemos
expectativa diferentes, porque tenemos una visión
diferente a través de los cuales interpretamos las
cosas. Pero en el caso de estas personas, de este
corazón, los afanes de este siglo ahogan la semilla.
Estas son las cosas en las que la mente se centra,
causando afanes. Pero que dice la Biblia 2 Corintios
4: 18 No mirando nosotros las cosas que se ven, sino
las que no se ven; pues las cosas que se ven son
temporales, pero las que no se ven son eternas. Esto
es una paradoja, ¿Lo notaron? ¡¡Viendo las cosas que
no se ven!! ¿Cómo puede ser eso? Porque está
hablando ¡¡No de los ojos físicos!! ¡¡Sino que está
hablando los ojos espirituales!! Que el creyente tiene
por el Espíritu Santo que lo mantiene con su mirada
puesta en las cosas que valen la pena, las cosas que
trascienden, las que no se terminan con el uso, ni se
desgastan, sino que permanecen para siempre. Pero
el excesivo afán por las cosas de esta tierra, causa
una especie de cauterización de la conciencia hacia la
palabra de Dios, pierde su sensibilidad, y no reacciona
adecuadamente cuando escucha la palabra, y
entonces puede estar escuchando todo el tiempo la
palabra, pero si no hay reacción, hay que preocuparse,
a lo mejor estoy presente físicamente, pero estoy
ausente espiritualmente, porque mi cabeza y mi
corazón están puestos en otras cosas, estoy pensando
lo que tengo que hacer después, o estoy orando, pero
estoy pensando al mismo tiempo en otras cosas, mi
mente y mi corazón no están puestos en el mismo
lugar, y eso es peligroso, pero el afán de este siglo y el
engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se hace
infructuosa. Lo que tenemos acá, es precisamente
eso, una persona que oye la palabra pero el afán de
este siglo el afán por las cosas de esta tierra hacen
que la palabra de Dios no produzca Fruto. Y no es que
no tengamos que preocuparnos por ciertas cosas, eso
es normal que nos preocupemos, sino en el sentido de
afanarnos por esas cosas, como si fuera lo principal.

La segunda situación que menciona el versículo


22 dice: y el engaño de las riquezas, ahogan la
palabra; este otro de los espinos que menciona, ¿A
qué se refiere? ¡¡No a la riqueza en sí; si no al engaño
que produce la riqueza!! Tiene que ver con andar
errante, en el sentido de ser seducido y ser llevado a
pensar que eso es lo más importante en esta vida.
Hay un afán por la riqueza, desde niño, ¿Quién no
ha hecho promesas de niño a su madre? pero la
riqueza en sí no es problema, el problema está en
querer hacerse rico, buscar y afanarse al extremo. 1
Timoteo 6: 9 y 10 Mire lo que dice: Porque los que
quieren enriquecerse caen en tentación y lazo, y en
muchas codicias necias y dañosas, que hunden a los
hombres en destrucción y perdición;
10 Porque raíz de todos los males es el amor al dinero,
el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y
fueron traspasados de muchos dolores.
¡¡Miren!! los que quieren “Ese es un deseo” ¡¡El
amor al dinero!! “Eso es un sentimiento” El cual
codiciando algunos, se extraviaron de la fe; miren otra
vez menciona otra palabra, codiciando, se extraviaron
de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores. Por
eso el Señor Jesucristo dice: no se puede servir a dos
señores, ¡¡Y otra vez!! “no significa que un cristiano no
pueda tener cosas” significa que un creyente no tiene
que colocar su mirada y como objetivo de su vida, eso
no tiene que ser el propósito de su vida.
Lucas Agrega una tercera razón, y ¿Cuál es la
razón que agrega Lucas? Lucas 8: 14 La que cayó
entre espinos, éstos son los que oyen, pero yéndose,
son ahogados por los afanes y las riquezas y los
placeres de la vida, y no llevan fruto.
Los placeres de la vida otra vez digo cuando el
creyente desea lo mismo que alguien inconverso,
entonces hay un problema grave, y uno tiene que
revisar su cristianismo. En tu presencia hay plenitud de
gozo; delicias a tu diestra para siempre.
Otro salmo hermoso dice: Una cosa he
demandado a Jehová, ésta buscaré; Que esté yo en la
casa de Jehová todos los días de mi vida, Para
contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en
su templo.
Ese debería ser el verdadero placer del creyente.
Versículos 8 y 23 Pero parte cayó en buena tierra, y
dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta
por uno.
23 Mas el que fue sembrado en buena tierra, éste es el
que oye y entiende la palabra, y da fruto; y produce a
ciento, a sesenta, y a treinta por uno.
Este es el cuarto tipo de corazón, o de tierra, la
semilla que cayó en buena tierra, esta semilla cayó en
tierra fértil, debidamente preparada y dispuesta, estas
personas no sólo escuchan la palabra de Dios, sino
también la entienden ¡¡Y aquí está la clave!! “entiende
la palabra” recuerdan en el primer suelo, “no
entienden” ¿Pero cómo puede llegar a esa
comprensión? Dicho entendimiento no procede sí
mismo, sino que es por la obra del Espíritu Santo.
Este tipo de terreno fue preparado previamente
por Dios Ablandado por Dios, y él dio la semilla,
seguro de que iba a producir fruto. Ahora esto es
importante; no todos los frutos son iguales, hay
semillas sembradas en buena tierra, uno produce a
100 otro a 60 a 30 por 1 es decir hay uno que produce
al 100% frutos otro que es un 60% o un 30% y en que
radica esta diferencia, si todos son buena tierra, y la
semilla es perfecta, ¿Por qué esta diferencia? lo que
pasa es que todo esos terrenos son buenos, todos
esos corazones están preparados por el Señor, en
todos esos corazones cae la buena semilla y produce
frutos, todos esos corazones son de creyentes
genuinos, pero hay algunos que producen más frutos,
y otros que producen menos ¿Y de quién es la
responsabilidad? ¡¡Del creyente!! ¿Entienden la
diferencia? ¡¡Todos son creyentes!! el que produce al
100, a 60, y a 30 por 1, pero algunos produce mucho
más frutos, y esto se debe a la exclusiva
responsabilidad del creyente, y es por nuestra
obediencia a la palabra, la obediencia es personal, por
eso necesitamos reaccionar adecuadamente a la
palabra del Señor, esto tiene que haber motivado
mucho a los discípulos, porque ellos posteriormente
Iban hacer los sembradores que iban a salir a predicar
el evangelio, y entonces el Señor le está diciendo a
pesar qué hay terrenos que no van a producir frutos, y
otros que aparentemente van a producir frutos, pero se
darán cuenta que van a haber terrenos que si van a
producir frutos, van a ver personas que si van a recibir
la palabra de Dios, Entonces su trabajo no va a ser en
vano, y eso iba a motivar seguramente a los
discípulos, pero al mismo tiempo les iba a llevar
hacerse la siguiente pregunta: ¿Qué tipo de terreno
soy yo? ¡¡Y esa es una muy buena pregunta, que cada
uno de nosotros debemos hacernos!! Creo que todos
nosotros nos inclinamos o queremos identificarnos por
el cuarto terreno, Pero ¿Qué pasa cuando la palabra
de Dios viene y choca una, dos, tres y sigue chocando
en un terreno duro, donde no puede producir frutos,
donde la semilla no echa raíz? ¿Qué pasa cuando
recibimos la palabra, y aparentemente estamos dando
frutos? ¡¡Pero nuestro corazón todavía está pensando
de qué manera yo puedo hacer esta cosa para lograr
esto!! Esa semilla que se ahoga por los afanes de esta
vida, esta pregunta se las quiero dejar planteada para
que cada uno la pueda responder en su corazón.
Finalmente llegamos al versículo 9. El que tiene oídos
para oír oiga. ¿Se fijan? ¡¡Lo que Jesús hace con
estas palabras es estimular el pensamiento!! Estimular
la reflexión más interna de la persona, entonces quiere
llevarnos a una reflexionar interiormente, nuevamente
se repite en el versículo 43: Entonces los justos
resplandecerán como el sol en el reino de su Padre. El
que tiene oídos para oír, oiga. Estas palabras, que
únicamente son utilizadas por el Señor, parecen
subrayar algo importante. Es como si Él estuviera
diciendo, “Ahora pongan atención, estas palabras no
son optativas”.
Obviamente, esta oposición incluye a gente que
rechaza el conocimiento de su palabra, al estar
demasiado preocupadas con las distintas
circunstancias terrenales. Al haber escogido poner
énfasis en las cosas de este mundo, Él proclama que
los justos resplandecerán como el sol en el reino de
Dios.

EL QUE TIENE OÍDOS PARA OÍR OIGA

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