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TEMA

AMO

Higiene general e individual. La


higiene del entorno familiar y
escolar. El control de esfínteres, sus
trastornos y abordaje

1. INTRODUCCIÓN

La educación es la base de casi todas las conductas del ser humano y los hábitos
M dudables también se aprenden. Poco a poco, de forma paulatina, las familias deben
inculcar a sus hijos e hijas estos hábitos para que desde pequeños sepan cómo cui-
«i,ir.c y gocen de un estado de bienestar y una buena calidad de vida.
I <i adopción de buenos hábitos higiénicos debe fomentarse desde la infancia, ya
i|in- .1 los pequeños no sólo les proporciona seguridad y aceptación social, sino que es
un importante mecanismo de prevención de diversas enfermedades, como infecciones
• 11 i >K;|, ojos, oídos, dientes, genitales, nariz, uñas, estómago e intestinos.
HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL

En el ciclo de la Educación Infantil tiene gran importancia la adquisición de buenos Dentro de este concepto de salud, las medidas de prevención e higiene van a
hábitos de higiene ya que, como hemos dicho, estos hábitos no sólo contribuyen al adoptar un papel fundamental. Estas medidas se dirigen a lograr que las personas de-
cuidado del propio cuerpo y del entorno, sino que son fundamentales en el proceso sarrollen estilos de vida con normas y comportamientos que contribuyan a conservar y
de autonomía del niño. El autocuidado y la higiene servirán, además, para iniciar la mejorar la salud individual y colectiva. Su aplicación responde, como hemos visto, a un
comprensión de los principales procesos fisiológicos, como la respiración, la digestión, concepto de salud que no se limita a la ausencia o curación de enfermedad, sino que
el descanso, etc. abarca también la prevención, la educación y la promoción de la salud.
La intervención educativa deberá estar dirigida, por tanto, a ayudar a cada niño a Existen diferentes tipos de higiene general:
realizar autónomamente los hábitos de higiene corporal, a utilizar los lugares, los objetos y
los materiales adecuados; a cumplir con las normas de comportamiento establecidas en - Higiene ambiental: está referida a la calidad de los factores que influyen
cada situación... en nuestro entorno y que repercuten directa o indirectamente sobre nuestro
estado de salud. La infancia se considera un grupo de riesgo frente a ciertos
La Educación para la Salud (EPS) en los centros escolares ha sido considerada agentes externos como la contaminación ambiental, dada la inmadurez de su
como uno de los campos de innovación de la reforma educativa en curso en España, sistema inmunológico y el aún desconocimiento u olvido de prácticas higiéni-
y cobra cada vez mayor importancia como área de trabajo pedagógico en la educación cas preventivas.
reglada y en la educación social (no reglada).
A la hora de desarrollar la Educación para la Salud, entre cuyos contenidos encon- - Higiene alimentaria: los nuevos estilos de vida introducidos en nuestra so-
tramos la adquisición de hábitos saludables, será clave la cooperación entre el centro ciedad, han aportado también una modificación de los hábitos alimentarios.
docente, la familia y la comunidad, a la vez que se potencie la colaboración con los La incorporación a nuestra alimentación de dietas rápidas e hipercalóricas
o el consumo abusivo de bollería y precocinados con altas cantidades de
centros sanitarios de la zona, ya que su experiencia puede ser decisiva a la hora de
grasas, entre otros, ha empeorado significativamente el estado nutricional
llevar a cabo cualquier iniciativa en esta materia.
de los niños, siendo necesaria una revisión y educación de los hábitos ali-
mentarios.

2. HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL - Higiene mental: tiene como objetivo favorecer las capacidades y condiciones
del individuo que le permitan su desarrollo personal y su integración en el en
torno.
2.1. HIGIENE GENERAL
- Higiene epidemiológica: su objetivo son las enfermedades transmisibles y tío
La higiene es la parte de la medicina que estudia los medios para mantener la sa transmisibles. Se encarga de establecer las causas, mecanismos de aparición,
lud, permitiendo el funcionamiento normal del organismo y optimizando las relacione! y los procedimientos para conservar, incrementar o restaurar la salud frente a
entre el hombre y el medio en el que vive, evitando las repercusiones nocivas que ésto estas enfermedades.
puede tener sobre nuestro organismo.
- Higiene personal: es el conjunto de medidas que favorecen el aprendizaje
La higiene, en general, se ocupa de los aspectos globales de la relación del sor sobre el aseo personal y el cuidado del cuerpo.
humano con su habitat, dirigidos a conservar la integridad de las diversas funciones tlol
organismo y a incrementar la salud del mismo.
La OMS define la salud como un estado de bienestar físico, psíquico y social y no sólo 2.2. HIGIENE PERSONAL EN LA INFANCIA
como la ausencia de enfermedad. Esta definición supone un gran avance frente a otrm
visiones clásicas del concepto de salud: por una parte, el concepto de salud propuesto
Dentro de la higiene personal es conveniente hacer un apartado referido a la
ya no es algo relacionado exclusivamente con la dimensión físico/biológica del ser, sino
hif.iene específica infantil que, aun siendo paralela a la del adulto, presenta peculia-
que surge del modelo interaccionista en la cual las decisiones y posturas que adojilH
ridades propias del periodo evolutivo del niño. Es en la infancia cuando la adquisición
cada individuo respecto al medio en que se desenvuelve tendrán gran relevancia. Por otra
do hábitos tiene más posibilidades de arraigarse y desarrollarse, de consolidarse, au-
parto, esta nueva definición adopta un carácter positivo al no limitarse a "la ausencia dn
tomatizarse y asegurarse para su práctica en la edad adulta. Este conjunto de pautas
oiilermedad" con lo que adquiero un nuevo significado en el ámbito educativo.
HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL AMD HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL

se encuentran encaminadas hacia el análisis y la planificación de las medidas que Higiene de las manos
conservan y fomentan la salud y previenen las enfermedades en la infancia. Estas
medidas concretas incluyen: Las manos son las principales "herramientas" con las que el niño juega, toca, ex-
plora..., convirtiéndose también en los principales focos de infección. Los niños deben
convertir en un acto automático su higiene, especialmente en momentos como antes y
Higiene de la piel después de comer, tras el empleo del cuarto de baño, después del juego o tras el uso
de material plástico (pinturas, ceras blandas, cola...).
La piel es la barrera natural de nuestro organismo frente a la penetración de microor-
ganismos nocivos para nuestra salud. Además recibe sensaciones térmicas, dolorosas, Las manos se deben lavar con jabón, frotando una contra la otra para eliminar los
de presión y de contacto. En la piel se pueden acumular secreciones sudoríparas y restos restos de suciedad. Las uñas se cuidarán especialmente, comprobando su limpieza y
de epidermis (fruto de la descamación de la piel) que, al mezclarse con la suciedad del longitud y recortándose, desde el nacimiento del niño, con unas tijeras adecuadas. Es
exterior, generarán un campo de cultivo para bacterias y hongos nocivos para nuestra importante una buena higiene de las uñas para evitar arañazos y daños así como la
salud. En casos extremos, pueden llegar a aparecer parásitos como pulgas y piojos que acumulación de suciedad debajo de ellas.
provoquen reacciones con sus picaduras y mordiscos.

Las medidas higiénicas para evitar lo anteriormente dicho son el lavado de manos Higiene de los pies
y la práctica habitual del baño o ducha que, acompañado de estímulos positivos, será
interiorizado fácilmente como pauta por el niño. Los pies son una parte especialmente sensible del cuerpo. En ellos se acumulan
numerosas glándulas sudoríparas y sebáceas, que producen acumulaciones de secre-
En la ducha o baño es recomendable el uso de jabones o geles neutros que no ciones favorecidas por la falta de ventilación que provoca el calzado. Estas condiciones
varíen el pH de la piel, afectando a su hidratación y a la pérdida de grasas protectoras facilitan la aparición de ampollas, rozaduras, micosis y olor desagradable. Para evitarlo,
naturales que provoquen descamación y picores. los pies se deben lavar diariamente, secándolos sobre todo entre los dedos para evitar
humedades.
La duración del baño, durante los cuatro primeros meses de vida, debe ser de
unos dos o tres minutos, que se podrán ir alargando progresivamente hasta los cinco También es conveniente el uso de un calzado transpirable (en la medida de lo
minutos o más. Tras el baño es fundamental secar bien la piel, sobre todo en las zonas posible) y el uso de medias o calcetines, preferiblemente de algodón, que se deberán
interdigitales y en los pliegues, donde es más fácil la proliferación de bacterias por la cambiar a diario.
acumulación de humedad.
En cuanto al cabello, es necesario un buen lavado, peinado o cepillado, con peines Higiene bucodental
limpios de uso individual. No debe recogerse el cabello cuando aún esté húmedo o
sin desenredar. El cuero cabelludo infantil es altamente sensible, por lo que se deberá La higiene bucodental es un hábito a desarrollar desde la primera infancia. Los
revisar en busca de heridas, descamaciones o parásitos regularmente como medido dientes y la superficie de la lengua se deben cepillar al menos después de cada comi-
de precaución. da, eliminando así los restos de comida que, al fermentar, pueden provocar procesos
infecciosos como las caries. Para ello se empleará un cepillo dental suave y, una vez
La práctica diaria del baño no debe convertirse en un castigo o tarea aburrida, sino sepa el niño enjuagarse, una pasta dental infantil para dar mayor eficacia al cepillado.
que debe ser un momento de placer, juego y relajación para el niño. Junto al cepillado se adoptarán otras medidas higiénicas relacionadas con la alimen-
tación, y el uso del chupete.
Merece especial atención la zona de los genitales, ya que son las zonas corporales
más próximas y con más contacto a las heces y la orina. Estas zonas se deben lim- La alimentación del niño es un factor de gran influencia en la higiene de la cavidad
piar cada vez que se vaya al baño. Para ello se utilizará el papel higiénico, limpiando bucodental. Los restos de comida que se introducen en los espacios interdentales no
de delante hacia atrás en el caso de las niñas. La zona genital se limpiará, además, provocan los mismos efectos en función del alimento que se trate: así, alguno de ellos
diariamente con agua y jabón neutro, prestando especial atención a los pliegues de la como las golosinas y dulces, pastas..., se transformarán en azúcares que favorecen la
piel en esta zona, separando los labios mayores en el caso de las niñas y bajando lo nparición de la placa de sarro y las caries dentarias. Para evitarlo, no debemos abusar
piel del prepucio en el caso de los niños. do la ingestión de este tipo rio alimentos y, en caso de tomarlos, limpiar cuanto antes
los dientes.
HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL
HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAI

En cuanto al uso del chupete, siempre debemos asegurarnos de que está limpio
recomendable, además, que las prendas sean sencillas y fáciles de poner y de quitar
antes de que el niño lo introduzca en su boca. Por otra parte su uso no debe ser indis-
para que, poco a poco, el niño pueda realizar estos procesos de manera cada vez más
criminado, ya que un abuso de él puede acarrear conductas infantiles en edades más
autónoma. Es importante también, adecuar la cantidad de ropa con la que vestimos
avanzadas y deformaciones de la zona maxilofacial y los dientes.
al niño a las condiciones climáticas reales, evitando abrigarles demasiado o, por el
Los hábitos de higiene bucodental vienen reforzados por campañas desde la es- contrario, dejar que pasen frío.
cuela en las que se enseñan las pautas correctas del lavado.
Respecto al calzado, éste debe ser cómodo, a ser posible de materiales naturales
(piel, algodón...), debe recoger bien el pie evitando terceduras y malas posiciones o
Higiene de oídos, nariz y ojos desviaciones de la columna y, por último, debe estar ajustado a las medidas de longi-
tud y anchura del pie.
Son un posible y frecuente foco de infección ya que los niños no ponen cuidado al
tocarlos con las manos. Respecto a la higiene de los oídos, es conveniente extraer el Los zapatos deben mantenerse limpios tanto por dentro como por fuera, por lo que
exceso de cera que se almacena en los oídos, mediante palillos farmacéuticos o agua se deberán cepillar y, en caso necesario, fregar su interior para eliminar posibles restos
tibia pero, en ningún caso, con objetos punzantes o afilados que pudieran dañar el de tierra, piedras, sudor...
órgano. Es también conveniente evitar los ambientes con exceso de ruido y evitar los
grandes estruendos, aunque sean momentáneos, ya que pueden provocar la pérdida
de capacidad auditiva de la persona. Higiene en el centro educativo
La nariz debe mantenerse limpia de secreciones, por lo que resulta importante Aunque en este aspecto ahondaremos más adelante, apuntaremos que ya desde
enseñar al niño desde temprano la correcta eliminación de mucosidades a través de la infancia es imprescindible que el niño colabore en tareas para mejorar el uso y con-
su expulsión voluntaria (sonado). servación de espacios higiénicos comunes. Nos referimos a aspectos como la limpieza
de las aulas, la ventilación adecuada o el mantenimiento del mobiliario.
Dado que el oído, la nariz y la garganta están comunicados, se deberán controlar las
posibles infecciones de cualquiera de los tres, ya que se pueden propagar al resto con
suma facilidad. Por otra parte, también es importante vigilar el peligro de introducción de
cuerpos extraños tanto en la nariz como en los oídos. 3. LA HIGIENE EN EL ENTORNO FAMILIAR Y ESCOLAR
En cuanto a la higiene del sistema visual, se debe prevenir la exposición a ambien- El tratamiento de la higiene general y personal como un aspecto más dentro del
tes o medios con exceso o defecto de luz o con condiciones higiénicas adversas (polvo, concepto general de "educación para la salud" implicará la acción conjunta de un gru-
contaminación...) que provoquen irritaciones en los ojos e incluso conjuntivitis. po extenso de agentes que actúan sobre el niño: familia, escuela y comunidad.
Es recomendable también no someter a los ojos a situaciones de fatiga y, de ma- En el ámbito escolar, se plantean como objetivos específicos del área incluidos en
nera periódica y rutinaria, realizar revisiones médicas que permitan detectar y corregir los diferentes diseños curriculares autonómicos, que los niños:
cualquier tipo de anomalía con la mayor brevedad posible, evitando su repercusión en
otras áreas. - Conozcan los aspectos principales que inciden o pueden incidir en la propia
salud, como son las funciones del cuerpo, factores que afectan positiva o ne-
gativamente a la salud y los medios que tenemos para mantenerla y mejorarla.
Higiene del vestido y del calzado
- Tomen conciencia de la necesidad de cuidar la propia salud y adopten las me-
El vestido y el calzado cumplen funciones relevantes en lo que se refiere a In didas necesarias para mantenerla y mejorarla.
higiene de las personas. Las prendas elegidas deben favorecer la termorregulación,
la transpiración y protección de la piel frente a los agentes del medio. Por ello, es - Adquieran y consoliden hábitos higiénicos básicos adecuados a su edad.
preferible el uso de prendas fabricadas con fibras naturales (algodón, lino, lana) frento Este proceso de aprendizaje comenzará, en realidad, en la etapa de socialización
a otras de procedencia sintética (licra, elastán...). En la etapa infantil, nos debemoi primaria cuyo agente principal, la familia, es la responsable de transmitir normas, valo-
asegurar de que el vestido no dificulte el funcionamiento del aparato digestivo, respl« res y hábitos para una correcta higiene desde la primera infancia, así como de cuidar
rnlorio o circulatorio y que, en ningún cnso, dificulte la facilidad de movimientos. I -t y preservar a sus hijos, en In medida de lo posible, de enfermedades y accidentes.
HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL
HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL

El comedor se considera uno de los puntos cruciales en el que se deben tomar me-
Aunque no es parte explícita del epígrafe, también cabe reseñar la influencia que
didas en la prevención de riesgos para la salud. En él, se deberá cuidar especialmente
en esta cuestión tienen los diferentes medios de comunicación que rodean al niño,
la conservación y manipulación de alimentos siguiendo las normas expuestas en la nor-
especialmente, el caso de la televisión. Es conveniente supervisar los programas y la
mativa vigente y siempre contando con profesionales cualificados. Por otra parte, cada
publicidad que ven los niños habitualmente, porque en ellos es muy posible que se
comensal deberá disponer de sus propios utensilios en la mesa (cubiertos, vaso, plato,
estén transmitiendo al niño conceptos erróneos relacionados con la salud, el bienes-
servilleta) evitando así que, al compartir, se puedan producir contagios de infecciones o
tar y la higiene. En definitiva, la salud y dentro de ella los aspectos relacionados con
virus. La comida tampoco se deberá compartir de un plato a otro entre los comensales.
la higiene, siendo tarea de todos, se convierten en un objetivo básico de la escuela
Ésta será servida por profesionales, empleando los utensilios adecuados y siguiendo las
infantil, ya que desde ella se favorecerá la adquisición de capacidades que mejorarán
normas higiénicas recogidas en la legislación.
la respuesta del niño al entono (no siempre saludable), una mayor autonomía y la po-
sibilidad de un estilo de vida adulto con hábitos que le comporten una mayor calidad. Los aseos y cambiadores se deberán mantener limpios en todo momento, siendo
Junto a estos aspectos relacionados con el aprendizaje de objetivos y contenidos importante su limpieza al menos dos veces a lo largo de la jornada. Los utensilios em-
curriculares en el que cabrá concretar los diferentes elementos curriculares (objetivos, pleados en la higiene personal de cada niño deberán ser de uso individual, evitando
contenidos, metodología, criterios de evaluación) y el desarrollo de las habilidades que compartir toallas, peines, cepillos, esponjas..., focos habituales en la transmisión de
favorezcan su autonomía en esta área; se debe considerar otra vertiente de la higiene infecciones. Se deberá disponer, además, de una serie de productos higiénicos adapta-
escolar y familiar: la relacionada con la higiene del entorno, con el estado y caracterís- dos a la edad del niño, que eviten posibles agresiones, irritaciones o alergias en su piel.
ticas del medio que rodea al niño. Estas dos vertientes se encuentran ligadas entre sí Pero, como hemos visto, la higiene en el entorno familiar y escolar son dos cuestiones
ya que, entre otros aspectos, el cuidado e higiene del entorno formará parte del tema estrechamente ligadas y, en el aspecto del cuidado y mantenimiento de la higiene del en-
transversal "la Educación Medioambiental", contenido presente a lo largo del currículo. torno también se establecerán una serie de relaciones que debemos cuidar. Se comprende
El centro escolar, en todo momento, debe cuidar las condiciones higiénicas de sus que en la inmensa mayoría de los casos no se van a poder elegir las condiciones ideales
instalaciones y materiales, procurando conservarlas y mejorarlas en la medida de lo de la casa, en cuanto a higiene de los niños se refiere. Pero sí se podrá, dentro de unos
posible. Es importante que el niño, a lo largo de su estancia en las instalaciones esco- límites impuestos por factores económicos y sociales, adaptarla lo más posible a tales con-
lares, perciba coherencia entre los hábitos y normas que se le exigen y las condiciones diciones. Desde la escuela, como compensadora de déficits y reforzadora de conductas
ambientales que le rodean. Para ello, el centro debe contar con una serie de recursos positivas, se deben llevar a cabo acciones conjuntas con la familia. Se debe informar a la
que le permitan ofrecer sus instalaciones en condiciones óptimas de higiene en cual- familia de los hábitos trabajados y adquiridos en la escuela, pedirles que colaboren y, en
quier momento cumpliendo así esta doble función: asegurar un entorno higiénico que caso necesario, hacerles advertencias específicas respecto a la higiene y los hábitos dd
cuide la salud del niño y favorecer la adquisición y refuerzo de los hábitos de aseo o niño en el hogar. Por último, desde la escuela se debe establecer una serie de contacto!;
higiene adquiridos por él. Para que estas condiciones se den es básico disponer do con la familia relacionados con este tema que se dirijan hacia los siguientes aspectos: es-
una serie de recursos en el centro. Entre ellos, consideramos como básicos disponer, lablecer líneas comunes de actuación, permitir la información fluida en ambas direcciones
en primer lugar, de los servicios de limpieza necesarios. Otra medida básica será dotar y proporcionar a la familia información y recursos para mejorar su higiene en el hogar a
los espacios del mobiliario adecuado para depositar la basura (animando al niño a iravés de charlas, escuelas de padres, campañas informativas...
colaborar en la recogida de ellos) contemplando aspectos como su ubicación y distri-
bución, cantidad, acceso por parte de los niños, que sean atractivas y llamativas, quo
en los espacios exteriores sean móviles en función de las condiciones climáticas (por 4. HIGIENE Y SALUD
ejemplo, que se puedan situar en zonas de sombra en verano y de luz en invierno) o
que se adecúen al tipo de residuos que deben contener. Para motivar su uso se puede Como vimos en el epígrafe 2, entendemos por higiene la parte de la medicina que
implicar a los niños proponiéndoles la elaboración de carteles para indicar su ubica- estudia los medios para mantener la salud, permitiendo el funcionamiento normal del
ción, pedir su uso o simplemente decorarlas. organismo y optimizando las relaciones entre el hombre y el medio en el que vive,
Aun siendo importante el cumplimiento de estas condiciones óptimas de higienw ovitando las repercusiones nocivas que éste puede tener sobre nuestro organismo.
en todos los espacios del centro, existen una serie de zonas donde la higiene debuta La higiene forma parte importante, por tanto, del concepto de salud propuesto por
ser aún más escrupulosa dado el tipo de actividades que en ellas se realiza. Nos re- l,i OMS en el que, además de definir salud como la ausencia de enfermedad, se alude
ferimos concretamente al comedor, /onas de alimentación, los aseos y cambiadores. ,il término desde el completo oslado de bienestar físico, psíquico y social.
HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL AMD AMD HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL

Desde el punto de vista de los educadores, tan importante será el concepto de


salud como el considerar los factores que influyen en ésta. Según Lalonde, el nivel S°C'edad muestra patrones de conducta Alimentaria cada vez más caracte-
s, cuantitativamente, por un consumo excesivo de alimentos, superior en térmi-
de salud de una comunidad viene determinado por la interacción de cuatro variables:
nos generales, a las necesidades energéticas, y cualitativamente, por un ?p'o de d ^
poco variada y donde recaen proteínas y grasas. Este cambio en los hábitos alimente
1. La biología humana nos, abandonando en parte la dieta mediterránea propia de nuestro país ha provocado
entre otras consecuencias, un aumento de los casos de obesidad infantil sSrtaS
Es de tipo genético y determinará la constitución del individuo, sus rasgos, su re- del Ministerio de Sanidad, el 40% de los n,ños y jóvenes fdo fdtSe años
sistencia o predisposición innata a padecer determinadas enfermedades siempre en en nuestro pafe, sufre problemas de sobrepeso (E/ País, octubre de 2005) Estos PS
condiciones salubres y sin contar con los factores exógenos o ambientales. btemas de sobrepeso pueden provocar enfermedades cardiovasculares, hipertenstón

2. El medio ambiente el níño obeso más posibi ídades de ser- «


Existe un número creciente de enfermedades infantiles asociadas a la calidad del
entorno donde reside el niño. Los factores que originan numerosas enfermedades
crónicas se acumulan en el organismo desde las primeras etapas de la vida, incluso a
La educación en unos hábitos de vida saludables en la infancia favorecerá un buen
partir del desarrollo embrionario del feto. crecimiento y la buena calidad en la salud del adulto. ia, Drecera un buei «
Los niños son más vulnerables al entorno que los adultos ya que sus sistemas inmu-
nológico, digestivo, respiratorio y neurológico no están maduros. Este aspecto, junto a 4. El sistema de asistencia sanitaria
sus patrones de conducta como gatear o colocarse objetos en la boca, que implican una
mayor exposición a los agentes contaminantes, disponen la necesidad de asegurarles, La calidad, cobertura y el grado de gratuidad de las estructuras administrativas
desde su concepción hasta la adolescencia, de un ambiente y entorno protegido. los servicios médicos y farmacéuticos, así como los recursos humanos y
relacionados con la salud, son elementos clave en la prevención
La OMS, consciente de la particular vulnerabilidad de los niños a los factores am
la promoción de la salud infantil y adulta. El mayor o menor
bientales, ya en 2003 desarrolló de manera prioritaria una línea de investigación en
determinará una mayor o menor posibilidad de disfrutar de
este sentido. Las instituciones españolas, uniéndose a esta línea de actuación, han
creado una red específica de investigación y protección del medio ambiente, la rod La contribución que reaman estos factores a la salud no es similar, sino que el "es
INMA (Infancia y Medio Ambiente) que reúne diferentes grupos de investigación quo irlo de vida significa un 40%, el "medio ambiente" un 30% ei "sistema de asistencia
dirigen sus estudios hacia el análisis del papel de los contaminantes ambientales mrtl sanitaria" un 20% y la "biología humana" un 10% aproximadamente
importantes en el aire, el agua y la dieta, y sus efectos en el desarrollo de los niños. lores están muy influenciados por factores socia.es, como lo
sobre interacciones entre factores socioeconómicos y salud
Desde otros ámbitos, la contaminación también ha adquirido la categoría de cuín»
tión prioritaria, siendo cada vez más necesarias medidas globales que conduzcan ni Junto a estos factores, existen otros aspectos que pueden incidir negativamente
desarrollo sostenible del planeta. Estas medidas, establecidas a modo de comproml' «•-i la salud mfantil como son la violencia y maltrato infantil, tanto en su vertiente física
sos entre los diferentes países, van destinadas a la reducción y reparación del irrptdo «nal o sexual como en la negligencia o abandono, y ,a vlolencia eTJártS
medioambiental abordando cuestiones como el uso indiscriminado de energías no rono
vables, la tala abusiva de grandes superficies de bosque, la contaminación de las njíiinn
dulces y saladas, la destrucción de la capa de ozono, la extinción de especies... y Irt» La protección y promoción de la salud infantil, además de ser una obligación social
propias repercusiones que tiene la contaminación sobre las personas. ¡" .cativa y moral es una indicación normativa integrada en el pntoSSSSSS
In practica socioeducativa de la salud (incluyendo la parte relativa a la higiene) está
........ucionalizada y respaldada por una serie de normas y leyes de diferente alcance
3. La alimentación y el estilo de vida
En el ámbito internacional, la Convención sobre los Derechos del Niño apro-
El estilo de vida está configurado por el conjunto de hábitos, situaciones mudumill
bada por la Asamblea de la Naciones Unidas en 1989 insta en su artículo
bruñíales y relaciones que la persona establece con el entorno, siendo parte i
24, a todos los sectores de la sociedad, en especial a padres e h,jos a quo
le de ól In alimentación, la aclividiid física o el tiempo de ocio.
conozcan los prmcpos bnsicos de la salud, las medidas de prevención cfcAic -
HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL
HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL

cidentes y recomienda que tengan acceso a la educación pertinente y al apoyo Siguiendo a Fernández Gutiérrez en 1994, se pueden establecer unas estrategias
necesario en la aplicación de esto conocimientos. adecuadas para la adquisición de hábitos:
- En nuestro país, la Constitución expresa en su artículo 43, el derecho a la - Concretar el número de hábitos a aprender simultáneamente.
protección de la salud y la competencia de los poderes públicos en la edu-
cación sanitaria. El Ministerio de Salud concreta, además, una serie de ca- - Ser coherentes entre el nivel de exigencia al niño y el ejemplo que el adulto
pone en práctica.
pacidades a desarrollar por los niños y niñas en la educación infantil y que,
posteriormente, se recogen y desarrollan en la diferente normativa educativa. - Valorar positivamente el esfuerzo realizado en la adquisición del hábito.
Estas capacidades son:
Repetir frecuentemente los ejercicios de adquisición pero sin llegar a repe-
* Conocer su propio cuerpo y sus posibilidades de acción. tirlos interminablemente durante días provocando el tedio del niño o, por el
contrario, dejando intervalos muy largos entre los elementos que componen
* Adquirir progresivamente una autonomía en sus actividades habituales. la secuencia total del hábito a adquirir que provocarían la pérdida de la visión
global del proceso.
En definitiva, el conjunto de la sociedad formado por Gobierno y Administraciones,
empresas, instituciones, entidades y ciudadanía en general, son parte activa del com- Siguiendo a Cornelias se puede establecer una serie de fases en la adquisición de
promiso por la promoción de la salud promoviendo acciones que favorezcan la adop- hábitos:
ción de estilos de vida saludables y de la prevención de la salud, reduciendo los fac-
tores de riesgo a contraer posibles enfermedades o neutralizando las consecuencias. 1. Preparación. Se debe preparar al niño motivándolo e implicándolo en la par-
ticipación a través de la comunicación afectiva.
La escuela, como parte de la sociedad y agente educativo y de salud, debe adoptar
2. Aprendizaje propiamente dicho. Para que ésta se realice pautadamente,
un papel activo en estos términos mejorando los hábitos y costumbres de los alumnos
exigiéndole cada vez más precisión, se pueden seguir los siguientes pasos:
y coordinándose en su intervención educativa con la familia y demás comunidad con el
descomponer el hábito en ejercicios fundamentales, realizar cada ejercicio
fin de optimizar la salud tanto del centro como del entorno que rodea al niño.
hasta que el niño intente realizarlo por sí mismo y, finalmente, conectar con
el siguiente ejercicio sin abandonar la secuencia adquirida hasta el momento.
3. Automatización. Se favorecerá la repetición por parte del niño hasta que llegue a
5. ADQUISICIÓN DE HÁBITOS DE HIGIENE EN LA
su ejecución sin la supervisión o estímulo del adulto, consiguiendo así una autono-
INFANCIA mía real.
4. Consolidación. El niño ya será capaz de realizar el hábito en contextos dife-
5.1. PROCESO DE ADQUISICIÓN DE HÁBITOS rentes al que lo ha aprendido, generalizando sus actuaciones y aumentando
las pautas de autocontrol necesarias para la ejecución de la conducta.
Los hábitos son una serie de conductas, de actitudes que tienden a repetirse en
determinadas situaciones, porque se han automatizado por la repetición de los ejerci- A lo largo del proceso de adquisición existen una serie de requisitos que se deben
cios que lo conforman. Cuando se adquiere un hábito no se necesita del pensamiento cumplir para una adquisición correcta de los hábitos. Éstos son: seguridad y apoyo en
para realizarlo, pudiendo emplearse así esa energía en otros aprendizajes. Los hábitos lir. relaciones afectivas entre los miembros de la familia, autoridad razonable en las
van a servir al niño para aumentar su autonomía; interiorizar valores, normas y acli exigencias, comunicación fluida que facilite al niño comprender lo que se pretende y
ludes de su cultura; conductas concretas relacionadas con grupos sociales a los que 1.1 dualidad y, por último, constancia y sistematización que faciliten que las normas no
pertenece. Los hábitos se adquieren y modifican a lo largo de toda la vida, creando vnríen a lo largo del proceso.
destrezas o habilidades que se pueden usar y adaptar en diferentes situaciones.
Durante el aprendizaje de los hábitos el niño necesita del refuerzo del adulto, 5.2. LOS HÁBITOS DE HIGIENE EN LA INFANCIA
para comprender el proceso de adquisición y automatizarlo. Una vez adquirido oí
hábito podrá realizarlo sin estímulo ni supervisión, es decir, de forma totalmenln Las normas de higiene para la infancia se pueden confundir con las normas de
nulónoma. En este proceso de adquisición será fundamental exigir al niño corroe- hif.K.'Me para la población en general: baño, lavado de manos, cepillado de dientes,
ción y autonomía siempre en función de su madurez, posibilidades y capacidndos, (icmuido, control de esfínteres.... Pero, al referirnos al niño, muchas de estas normas
ilHx'ri ser matizadas on función de su edad y necesidades de desarrollo y educación.
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Las normas de aseo del niño deben ser adecuadas a sus necesidades de limpieza, propia y la de los demás niños, por lo que hay que favorecer que el niño pueda llegar
tanto de higiene corporal diaria como las necesidades de aseo producidas por la eje- a ellas a partir de las posibilidades que tiene todo su cuerpo.
cución de actividades. Las medidas de aseo personal pasarán por tres fases:
Los hábitos a iniciar o consolidar durante los 2-4 años son: aprender a sen-
- Una primera fase pasiva en la que el niño recién nacido se dejará asear. tarse y levantarse del orinal/retrete, aprender a lavarse las manos y secárselas,
aprender a usar la papelera, aprender a controlar los esfínteres, solicitar ayuda
Una segunda fase de colaboración, en la que el niño empieza a colaborar en
cuando se sienta cansado y aprender a dejar utilizar los espacios del aseo.
su propio aseo. En los primeros periodos el adulto le lavará ayudado por él,
pasando a otro periodo en el que él mismo se lavará prestándole el adulto una - Los hábitos a iniciar o consolidar durante los 3-6 años son: aprender a
mínima ayuda. limpiarse después de defecar u orinar, aprender a utilizar el papel higiénico,
aprender a tirar de la cadena, aprender a enjabonarse y enjuagarse, aprender a
- La fase activa, en la que se llega a una independencia progresiva en el aseo
usar la toalla y secarse, aprender a sonarse la nariz y usar el pañuelo, aprender
personal pero bajo la vigilancia y supervisión del adulto.
a lavarse la cara y manos, aprender a mantener limpios los espacios que se usen
Los hábitos relacionados con la higiene tienen dos vertientes: una de relación y otra como son las aulas, los pasillos, el patio, etc., aprender a usar las papeleras y
de educación. cubos de basura, aprender a cepillarse los dientes, aprender a taparse la boca o
girar la cabeza cuando se tose o estornuda y aprender a valorar la pulcritud y la
En el aspecto de la relación es fundamental subrayar el carácter que adquiere la buena presencia.
limpieza como recurso para crear una imagen positiva del propio cuerpo a partir del
contacto que los adultos establecen y el trato que dispensan. En lo tocante a los hábitos en esta etapa, se debe tomar conciencia de los ries-
gos de no seguir determinadas medidas higiénicas y el gusto por realizar las medidas
En el aspecto de la educación es necesario hacer notar la riqueza de placeres quo higiénicas automáticamente.
la higiene proporciona al cuerpo, la abundancia de sensaciones que pone en activo y
su significación para la salud psicofísica, así como la cantidad de valores y actitudes HITOS EVOLUTIVOS CON RELACIÓN A LA HIGIENE
que transmite en los hábitos que están relacionados con ella.

Todos estos hábitos hay que educarlos. La higiene es una actividad que propicio Comprende que debe lavarse las manos.
la relación entre individuos: el niño y el adulto. Es uno de los momentos y situaciones 1-2 años Se inicia en el aprendizaje de lavarse las manos.
de personalización más importantes para el niño, por lo que es necesario concederlo Coopera, de alguna manera, en el baño.
tiempo y mantener la calma para que el contacto con el cuerpo del niño sea a la vo/ Coopera en la limpieza de las manos.
placentero y gratificante. Coopera en el baño.
2-3 años Aunque le cuesta, comprende que hay que lavarse la cabeza.
Hay niños que tienen miedo al baño o al retrete, ya sea porque se lo han inculcado
Le cuesta el control de las uñas.
o porque ellos mismos se lo imaginan, por lo que es preciso prever actividades que
Comprende la higiene bucal.
ayuden al niño a mantener una coherencia entre la imagen mental y la realidad. Estas
actividades pueden ser, por ejemplo, juego simbólico en el baño con muñecos. Le cuesta aceptar el control de las uñas, especialmente de los pies.
Acepta mejor el control de las uñas de las manos.
Siempre se debe valorar el esfuerzo logrado por el niño en su aseo. Debemos dar Participa activamente cuando se baña.
al niño la sensación de que le creemos muy capaz de llegar a dominar tareas tan sim- Se lava correctamente las manos.
ples y necesarias para la vida como llegar a lavarse o limpiarse por sí solo, favoreciendo Le cuesta secarse bien.
así el refuerzo de su autonomía. 3-4 años
Puede no controlar correctamente la suciedad de brazos, muñecas, entre los
Hay que dejar al niño que vaya al cuarto de baño cuando lo desee y no imponerlo dedos, etc.
horarios para evacuar o lavarse siempre que vaya aceptando las normas de uso para Le cuesta la higiene más específica: orejas, oídos, dientes.
lodos. La higiene proporciona, por otra parte, situaciones para experimentar sensacio Sabe que ha de lavarse uñas y manos después de ir al WC, pero hay que
nos, así como la posibilidad de aprender la propia anatomía y las diferencias entro In controlarlo.
r

HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL AMD HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL

- Sabe lavarse las manos sin control. - Empieza a resolver solo las necesidades por la noche.
- Necesita ayuda para finalizar bien el baño, pero es más independiente. - Sabe resolver sus necesidades durante el día.
- Sabe que ha de lavarse las manos antes de las comidas y, en muchos casos, - Se limpia más correctamente al terminar sus necesidades.
después. - Puede aguantar durante un tiempo más prolongado.
4-5 años 4-5 años - No tira siempre de la cadena, pero sabe que tiene que hacerlo.
- Sabe que ha de lavarse los dientes y lo hace pero es preciso el control.
- Si es un niño, hace pipí de pie.
- Acepta el cuidado de las uñas.
- Normalmente ya no hay accidentes de noche.
- Aún tiene problemas con el pelo, si es largo.
- Pide que se le despierte si aún no controla completamente.
- Acepta mejor lavarse las manos después de usar el WC. - Acepta el cuidado con la dieta si tiene dificultad en controlar.
- Empieza a peinarse, si tiene el cabello corto. - Durante la noche se espabila solo sin ayuda.
- Se controla las uñas o pide ayuda. 5-6 años - Se limpia al salir del WC con bastante corrección.
- Se lava los dientes. - Tira de la cadena, aunque hay que controlarlo.
5-6 años - Desea bañarse solo, sin ayuda. Cornelias, M.J.: Los hábitos de autonomía. Proceso de adquisición, ed. CEAC, 2000
- Requiere poco control para lavarse las manos después del WC.
- Sabe que debe lavarse las manos antes y después de las comidas, pero pre-
cisa control.
6. LOS MOMENTOS DE HIGIENE MOMENTOS
EDUCATIVOS
- Aprendizaje del control de las heces.
- Inicialmente indica la necesidad después de ser evacuado. A lo largo de la Educación Infantil, especialmente el primer ciclo, la programación
1-2 años - Aprende a controlarlo de forma correcta. se condiciona a las necesidades de los niños, de tal manera que los ejes alrededor de
- Puede controlar el pipí durante el día. los cuales se estructura, derivan en parte de estas necesidades. En este período las
- Puede haber descuidos por distracción. actividades relacionadas con el cuidado de los niños (higiene, afecto, alimentación y
descanso) organizan el tiempo y la vida del aula. La calidad de la interacción diádica
Controla los esfínteres durante el día.
que se establece entre el bebé y el educador en estos momentos se constituye como
Hay pocos descuidos.
un motor de su desarrollo, aportando así una nueva dimensión a las actividades que
No siempre controla las circunstancias, por lo que debe favorecerse que vayn tradicionalmente se han considerado "rutinas de cuidado del niño". Pero aun teniendo
2-3 años
periódicamente al WC. en cuenta el carácter reiterativo de estas rutinas no podemos dejar de lado su carácter
Puede controlar por la noche, pero en la mayoría de los casos debe levantar educativo. Sin prisa, los niños aprenderán a ajustar sus ritmos al ritmo del grupo, de
se para evitar accidentes. manera que se facilite la atención de todos y cada uno de ellos.
Controla el pipí durante el día sin accidentes.
El juego de mirada, las caricias, las palabras que se comparten en estos momen-
En general, controla el pipí de noche, puede levantarse, o hay que despertarlo, los, hacen que el encuentro entre la criatura y el educador vaya más allá del simple
En caso de despertarlo, lo acepta para evitar accidentes. • icto higiénico, convirtiéndose en un contexto de desarrollo y diálogo. También alre-
Suele bajarse la ropa para ir al WC. dedor de las necesidades individuales de higiene del niño se desarrollan una serie de
3-4 años Sabe retener las heces si las circunstancias lo requieren. Actividades que se centran fundamentalmente en contenidos del área de identidad
Le cuesta contener el pipí, aunque es capaz. y autonomía personal. A media que el niño se desarrolla y ejerce un mayor control
'.obre su cuerpo las actividades relacionadas con el cuidado son cada vez más cru-
Va a menudo solo al WC y empieza a limpiarse al terminar con una cficncln
rales en el camino hacia su autonomía y la configuración de una auto imagen po-
inestimable.
Mliva. A través de las actividades relacionadas con la higiene, el niño podrá explorar
Sabe que tiene que tirar de la cadena. los objetos que le rodean, conocer a los otros y a sí mismo; puede poner en juego
MIS sistemas de comunicación, afirmarse, colaborar, rechazar y tomar iniciativas. En
oslas situaciones ampliamente procedimentales (lavarse las manos con agua y ja-
V

HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL

bón, peinarse...) los niños aprenden también conceptos asociados y desarrollan de- Lo enunciado previamente es lo cronológicamente esperable pero se debe te-
terminadas actitudes: los niños incorporan conocimientos y pautas culturales que le ner en cuenta que existen variaciones las cuales dependerán, como hemos visto, del
ayudarán a crecer y desarrollarse como una persona única dentro de su grupo social. aprendizaje y el condicionamiento.

Por último, hemos de recordar que para que el niño aprenda a realizar acciones Es importante recordar que el aprendizaje debe ser elástico y sin carga emotiva. El
de aseo y limpieza de manera autónoma, identificando el momento en que son nece- condicionamiento debe evitar actitudes negativas en el niño como son el castigo o el
sarias hemos de tener en cuenta que existan ciertas condiciones. El niño debe lograr enfado si no desea orinar o usar el retrete. El control de esfínteres debe ser, por tanto,
cierto desarrollo a nivel motor (rotar las manos para enjabonarlas, cerrar y abrir el gri- un proceso natural y sin presiones.
fo), controlar el propio cuerpo (colocar el cepillo de dientes de manera correcta dentro
de la boca, saber que es necesario expulsar el aire por la nariz para sonarse...), com- Por otra parte, la adquisición del control de esfínteres no debe convertirse nunca
prender las consecuencias de la situación (ganas de ir limpio, saber que sus dientes en una competición entre niños, para ver cuál es el que antes deja los pañales. Es
se pueden dañar...), mostrar interés por participar con la persona adulta y también por frecuente ver a familiares felices o frustrados porque su hijo dejó antes o después los
ser autónomo. Junto a estas características disponer de un aula preparada para el tra- pañales que sus hermanos u otros niños que toman como referencia. Esta actitud
bajo con niños de estas edades facilitará enormemente que los momentos de higiene puede resultar negativa y contraria al correcto desarrollo del proceso.
se conviertan en momentos educativos que contribuyan al desarrollo integral del niño. En cuanto a los factores ambientales se recomienda aprovechar la época de ve-
rano o de calor para que el niño con edad adecuada deje sus pañales, tanto diurnos
como nocturnos, pero siempre respetando los tiempos del niño/a.
7. EL CONTROL DE ESFÍNTERES: SUS TRASTORNOS A lo largo del proceso, incluso cuando parece que el niño ha conseguido controlar los
Y ABORDAJE esfínteres tanto durante el día como la noche, ocasionalmente pueden ocurrir pérdidas
urinarias generalmente en forma involuntaria ante situaciones como fiebre, infecciones o
El control de esfínteres depende del desarrollo y maduración muscular y del Sis- problemas en el hogar (mudanzas, fallecimientos, discusiones, etc.). Esto es transitorio
tema Nervioso Central junto a un adecuado desarrollo cognitivo, motor y afectivo. Así y bajo ningún concepto debe reprochársele al niño. Como veremos a continuación, no
como el niño a medida que transcurren los meses va adquiriendo el sostén cefálico, se debe hablar de enuresis hasta que el niño no controla esfínteres urinarios más allá
se sienta, camina, habla, etc., lo mismo sucede con el control esfinteriano para la de los 5 ó 6 años y de encopresis si mancha la ropa con materia fecal por debajo de los
micción y la defecación. 4 años de edad.
Existen a su vez otros factores que son importantes en la adquisición de este con-
trol como el aprendizaje y el condicionamiento. Como vimos en el epígrafe 6, existen
7.1. LA ENURESIS
una serie de hitos relacionados con este proceso de adquisición que el niño irá lo-
grando paulatinamente a diferentes edades: control de la orina y las heces, ir al baño,
limpiarse... Aproximadamente, y a modo de ejemplo, podemos decir que: La enuresis es un trastorno que consiste en la pérdida involuntaria de orina más
allá de la edad en que se consigue el control vesical (4-5 años como edad extrema).
- Entre los 15 y los 18 meses, el niño será capaz de avisar al adulto de que so Es importante comprobar que estas pérdidas no se producen por un problema orgánico
ha orinado (pauta inicial del control de esfínteres). ya que, en este caso, estaríamos hablando de incontinencia y no de enuresis.
- Entre los 18 y los 24 meses, el niño es capaz de avisar sobre su deseo de La enuresis, según el momento del día en que se produzca, se puede clasificar en
orinar dando ya tiempo a llevarlo al baño. enuresis diurna, nocturna o mixta (en caso de que se produzca tanto de día como en
las horas de sueño). Por otra parte, podemos hablar de enuresis primaria, si el niño
- Entre el segundo y tercer año de vida se considera que el niño presenta un
nunca ha conseguido controlar la orina, o secundaria, si después de un periodo de
nivel de desarrollo global suficiente para retirar el pañal ya que éste puedo ir
control es de nuevo incapaz de retener la orina.
al baño por sí sólo o con ayuda de un adulto. Las niñas tienen una tendencln
a alcanzar las pautas madurativas un poco antes que los varones, pero ésti Aunque la enuresis suele mejorar espontáneamente con el paso del tiempo, es im-
no es una regla de oro. El pañal nocturno puede alargarse un poco más, hasti portante determinar la causa del problema o el factor que la ha podido desencadenar
que el niño sea capaz de retener durante más horas. con el fin de dar una respuesta o tratamiento al niño que le ayude a superarla.
HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL . HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL

Algunos de los factores que predisponen al niño a padecer enuresis son: proble- - La relacionada con el estreñimiento del niño. En algunos casos, el estre-
mas físicos (tamaño pequeño de la vejiga, musculatura débil...); cambios emocionales ñimiento crónico en el niño, puede provocar una distensión del colon y la con-
(factor psicológico relacionado con situaciones críticas); el factor hereditario; un ciclo siguiente pérdida del tono muscular, con lo cual se producen esas pérdidas.
de sueño muy profundo, el inicio tardío de la adquisición del hábito o la presencia de
otros trastornos a los que la enuresis va asociada. - La relacionada con una enseñanza no adecuada del control de esfínteres.
Unos malos hábitos de aprendizaje pueden ser la causa de la encopresis: pre-
El tratamiento de la enuresis puede ser activo o pasivo. siones excesivas o rigidez al exigir que el niño controle a una edad aún temprana
1. El tratamiento activo abarca, según los casos, la administración de una me- para hacerlo.
dicación apropiada que permita, entre otras repuestas, la dilatación de la ve-
La aparición de la encopresis también puede ir ligada a otro tipo de trastornos
jiga; la práctica de una serie de técnicas orientadas a desarrollar el control
como la depresión infantil, trastornos en la motricidad, crisis epilépticas, anomalías del
vesical; así como la aplicación de ciertas conductas que previenen la enuresis
lenguaje, manipulación de excrementos e, incluso, coprofagia.
nocturna: antes de acostarse la siesta o por la noche debemos restringir al
niño la ingesta de líquidos, llevarle a hacer pis y realizar personalmente y, en Así pues, lo más importante será en primer lugar identificar la causa que la pro-
caso de que se haga pis en la cama, la limpieza de ésta. Siempre que se le- duce.
vante seco deberemos utilizar refuerzos positivos: alabanzas, felicitaciones...
El tratamiento dependerá de si es algo ocasional o más recurrente. El primer paso
En algunos casos también resulta efectiva la terapia conductual mediante el será ser visitado por el pediatra, quien determinará cómo proceder y si es necesaria o
uso de pequeños dispositivos de alarma que se activan al contacto con la hu- no la visita a un especialista. En el ámbito familiar y escolar la intervención debe ser
medad, despertando al niño y deteniendo la micción. de carácter preventivo, enseñando a los niños los hábitos necesarios y desarrollando y
ejercitando la ejecución de éstos en edades adecuadas, sin presiones inadecuadas y
2. El tratamiento pasivo, defendido por un número menor de especialistas,
autoritarias. Una vez pasada la edad óptima para adquirir estos hábitos, posiblemente
consiste en esperar lo suficiente sin intervenir hasta que la irregularidad se
se requerirá la intervención de especialistas. Dentro de las técnicas de modificación de
normalice. Esto debe ocurrir siempre antes de la adolescencia.
conducta que se pueden emplear en estos casos, se encuentran la combinación de
En cualquier caso, nunca se debe ridiculizar ni castigar a un niño por este hecho, reforzamiento positivo y sobre corrección.
ya que ello muy al contrario de hacerle reaccionar, le puede provocar importantes pro-
Si la causa de la encopresis se encuentra en la fobia que sienten algunos niños a
blemas emocionales.
defecar, se pueden emplear técnicas que disminuyan su ansiedad y con ello su pro-
blema.
7.2. LA ENCOPRESIS
Recomendaciones para facilitar el control de esfínteres en la
Según la OMS, la encopresis se puede definir como:
familia y la escuela
"...un trastorno de eliminación, cuya característica esencial consiste en
la evacuación repetida de heces en lugares inadecuados (por ejemplo, ropa o a) Actividades para incitar su interés.
suelo) cuando el niño ha superado los 4 años de edad o un nivel de desarrollo
equivalente. Como criterio de exclusión, se establece que la incontinencia no - Acompañar a la zona de aseo a otros niños que ya están iniciados en el
debe ser únicamente consecuencia del efecto ocasionado por la ingestión de control de esfínteres y que observe qué y cómo lo hacen.
ciertas sustancias (laxantes) o por la presencia de una enfermedad médica.
Para hablar de encopresis, además, el problema debe suceder como mínimo - Aproximación al conocimiento del orinal y del inodoro pequeño y adaptado
una vez al mes durante un período continuado de tres meses." (abertura de la tapa adaptada a la edad y características físicas).
La encopresis al igual que la enuresis, se divide en primaria y secundaria, y en - Realización de micciones y deposiciones con una cierta frecuencia en un
nocturna y diurna. Existe otro tipo de subdivisión, en función de su etiología: grupo pequeño de varios niños a la vez.
La relacionada con problemas disocíales. Se manifiesta cuando el niño
Manifestarles aprobación cuando se mantienen un tiempo "secos" y reali-
defeca en lugares inapropiados de forma voluntaria aun teniendo control esfin
zan una deposición en el lugar y momento indicados.
toriano.
HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL
HIGIENE GENERAL E INDIVIDUAL

b) Actividades de automatización y consolidación.


das a niños menores de dos años dispondrán de áreas diferenciadas para el
Utilizar el servicio en varios momentos a lo largo del día (que se irán espa- descanso y la higiene del niño.
ciando, siempre a las mismas horas, cada dos-tres horas máximo, hasta
que el niño tenga autonomía para pedirlo o realizarlo de modo autónomo), b) Un patio de juegos, de uso exclusivo del centro, en ningún caso inferior 150
asociados a alguna actividad de rutinas cotidianas, como puede ser a la metros cuadrados, que se incrementará en 50 metros cuadrados por unidad
entrada a clase, antes de la hora del desayuno, después de jugar en el en el caso de que el centro cuente con un número de unidades superior a seis.
patio, antes de la comida, antes de la siesta, al levantarse de la siesta... c) Un aseo por aula, que contará con las instalaciones adecuadas en función del
- Se estimulará el uso del papel higiénico y la cadena del WC. número de alumnos.

- Al principio será el educador quien siente al niño en el orinal o inodoro a d) Una sala de usos múltiples de 30 metros cuadrados, que, en su caso, podrá
las mismas horas recordándole lo que debe hacer. ser usada de comedor.
- Durante el periodo de entrenamiento se le deberá vestir con ropa cómoda, e) Un aseo personal separado de las unidades y de los servicios de los niños, que
que se ponga y quite con facilidad. contará con lavabo, inodoro y una ducha.
- Coincidiendo con estaciones de temperaturas menos rigurosas se podrán
f) Un despacho de dirección, una secretaría y una sala de profesores para cen-
retirar los pañales para que el niño pueda hacer pipí de modo más rápido, tros con seis o más unidades.
cómodo y, si ocurre algún incidente, evitar enfriamientos.
Estará atento a las manifestaciones que evidencian que el niño necesita g) Junto a estas normas prescriptivas, las instalaciones dedicadas a higiene per-
evacuar. sonal deben seguir unos criterios específicos recogidos a continuación:

- El control del pipí nocturno no se iniciará hasta que no se haya conseguido - El acceso a los espacios de aseo debe ser sencillo, sin barreras arquitec-
el del diurno. Se evitará que tome abundantes líquidos antes de acostarse. tónicas, ni grandes distancias al aula.
- Ir al baño antes de dormir. - El número de inodoros y lavabos ha de ser suficiente para el uso fluido de
los niños.
- Despertarlo para que haga pipí cada dos-tres horas, e ir espaciando el ho-
rario y reduciendo el número de veces, hasta que aguante toda la noche. - Los espacios de aseo dispondrán de suelo antideslizante así como de una
buena iluminación y ventilación.

8. CRITERIOS PARA LA ORGANIZACIÓN DE LOS - Las zonas de cambio y aseo dispondrán de espejos irrompibles para que
los niños puedan reconocer su estado de higiene personal.
ESPACIOS DE HIGIENE PERSONAL x

- Los sanitarios estarán adecuados al tamaño de los niños facilitando así la


Los requisitos mínimos en los centros infantiles, según el RD 1.537/2003, de 5 de autonomía en su uso.
diciembre, con relación a la higiene personal, refieren en el artículo 4:
- Se dispondrá de toallas, cepillo y vaso, así como peines y esponjas para
"Los centras docentes deberán reunir las condiciones higiénicas, acústi-
uso individual. Deben disponer de un espacio específico de almacenaje.
cas, de habitabilidad y de seguridad que se señalen en la legislación vigente,
además de los requisitos que se establecen en este Real Decreto. Los espa- Lo mismo sucederá con los pañales, las mudas y la indumentaria personal
cios en los que se desarrolle la práctica docente habrán de tener ventilación
de uso exclusivo para cada niño.
e iluminación natural."
- El papel y las toallas deben tener fácil acceso y reunir las condiciones hi-
Los centros que impartan educación infantil deben ubicarse en locales de uso giénicas y de seguridad adecuadas.
exclusivamente educativo, con acceso independiente desde el exterior y contar, como
mínimo, con las siguientes instalaciones y condiciones: Por último, todas las zonas de cambio y aseo deben reunir condiciones de fácil
linipicva que aseguren unas condiciones higiénicas óptimas. Para que esto se dé,
a) Un aula por cada unidad, con una superficie de 2 metros cuadrados por puesto oslas zonas se deberán revisar con bastante frecuencia, y limpiarse las veces que sea
escolar y que tendrá, como mínimo, 30 metros cuadrados. Las salas destinn nu<;i;sario.

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