Módulo 19: Práctica Forense de Derecho Administrativo y Fiscal
Módulo 19: Práctica Forense de Derecho Administrativo y Fiscal
Módulo 19: Práctica Forense de Derecho Administrativo y Fiscal
Nombre
Unidad #. Nombre
Sesión #. Nombre
Guía de actividades
Módulo 19
Práctica forense de derecho
administrativo y fiscal
Unidad 3
El juicio contencioso administrativo y el
amparo en materia administrativa y fiscal
Sesión 4
Jurisdicción administrativa y juicio de
nulidad
Texto de apoyo
Índice
Presentación.......................................................................................................................................... 3
Tribunal Federal de Justicia Administrativa ............................................................................................ 4
Jurisdicción ........................................................................................................................................ 7
Organización .................................................................................................................................... 10
Competencia .................................................................................................................................... 14
Partes .............................................................................................................................................. 18
Demanda ......................................................................................................................................... 20
Contestación de la demanda: ........................................................................................................... 29
Ampliación de la demanda ............................................................................................................... 32
Contestación a la ampliación de la demanda ................................................................................... 33
Posibilidad de una segunda ampliación de la demanda ................................................................... 34
Medidas cautelares y suspensión de la ejecución del acto impugnado ............................................ 34
Plazos y notificaciones ..................................................................................................................... 37
Cierre................................................................................................................................................... 42
Fuentes de consulta ............................................................................................................................ 43
Presentación
Jurisdicción administrativa
Fuente: Pixnio
Por otra parte, conocerás la naturaleza del proceso jurisdiccional administrativo por medio del cual,
toda persona que resulte agraviada en su esfera jurídica por un acto o resolución emitida por cualquier
autoridad de la administración pública, puede tramitar la anulación que corresponda, así como acceder
a la reparación o restablecimiento del derecho subjetivo conculcado.
Se identificarán los elementos que en la práctica forense constituyen los requisitos para incoar la
acción tendiente a la satisfacción de las pretensiones del demandante, a través de la excitación y
consecuente desahogo del juicio contencioso administrativo, a la par de las actuaciones inherentes
que las otras partes deben realizar conforme a su rol en el proceso. Lo anterior, a fin de poder
aplicarlos en la tramitación eficaz de la demanda, su contestación y sus posibles ampliaciones,
considerando los plazos rectores, las causales de improcedencia y sobreseimiento, las reglas para las
notificaciones, así como la posibilidad del trámite de medidas cautelares y la suspensión de la
ejecución del acto impugnado conforme a la Ley Federal de Procedimiento Contencioso
Administrativo.
El juicio contencioso administrativo federal es un medio de defensa del que disponen los particulares
cuando la administración pública a través de sus autoridades, emite una resolución que de manera
definitiva afecta negativamente su esfera jurídica. Antes de profundizar en la dinámica del proceso, se
abordará de manera particularizada al órgano jurisdiccional competente en la materia administrativa
(que como se dijo en sesiones anteriores, incluye en la fiscal), identificando su naturaleza y estructura
jurídica: el Tribunal Federal de Justicia Administrativa (TFJA).
Éste es un órgano joven, cuya consolidación jurídica ha implicado muchos esfuerzos, pues
precisamente su naturaleza compleja ha causado intensos debates desde el principio. Empezando con
la problemática que existe con relación al principio de división de poderes, principal característica de
los Estados modernos y que ha estado presente en México durante todo su desarrollo constitucional.
Si el poder judicial conoce de los conflictos entre los particulares y la administración pública, ¿tendría
éste supremacía sobre el poder ejecutivo al ordenarle cómo resolver dichas cuestiones? Al respecto,
existían dos posturas que, a la postre, configuraron los principales sistemas jurisdiccionales
administrativos del mundo: el sistema anglosajón y el sistema francés.
El sistema anglosajón pugnaba porque los tribunales de justicia administrativa pertenecieran al poder
judicial. Mientras que el sistema francés consideraba que los órganos encargados de la jurisdicción
administrativa, debían residir dentro del poder ejecutivo. Fueron muchas las causas por las cuales el
Sistema Mexicano se alineó al modelo francés. En lo particular, se considera de utilidad destacar la
afinidad del gobierno mexicano de ese entonces por la cultura francesa y del reforzado
presidencialismo. Así como tener en cuenta lo expuesto por José Ovalle:
Es común sostener que los dos sistemas tradicionales de justicia administrativa -el inglés y el francés- se
originaron en una manera diversa de interpretar el principio de separación de poderes. De acuerdo con
estas ideas, el sistema francés de tribunales administrativos encuadrados fuera del poder judicial y dentro
del Ejecutivo, surgió debido a que se entendió que el principio de la separación de poderes impedía al
poder judicial interferir, así fuera juzgando, en los asuntos propios de la administración; en cambio, el
sistema inglés, que somete las controversias administrativas a la jurisdicción ordinaria como si se tratase
de asuntos comunes, encuentra su explicación en una interpretación diversa del mismo principio, según la
cual a la administración no le corresponde en ningún caso juzgar ni aun cuando se trate de conflictos sobre
actos administrativos, de los cuales debe conocer, por tanto, el poder judicial.
Es claro que cada sistema de justicia administrativa surgió condicionado, más que por una diversidad de
interpretaciones teóricas, por el contexto histórico y político que prevalecía en cada país. En la monarquía
constitucional inglesa, limitada por el poder del parlamento, no hubiera sido posible el sistema francés,
establecido bajo el Estado autoritario de Napoleón, aunque con antecedentes en la Revolución Francesa.
En todo caso, la diversidad de interpretaciones justifica, pero no condiciona, cada uno de estos dos
sistemas tradicionales (Ovalle, 1982:238).
1. 31 de agosto de 1936: Se publica en la sección segunda del Diario Oficial de la Federación la Ley
de Justicia Fiscal, expedida por el presidente Lázaro Cárdenas, en uso de sus facultades
legislativas extraordinarias para la organización de los servicios públicos hacendarios.
Alineado al sistema francés, dicha ley creó el Tribunal Fiscal de la Federación, órgano
perteneciente al poder ejecutivo, constituyéndose como un tribunal de justicia delegada y no
retenida. Es decir, sus resoluciones eran dictadas en representación del poder ejecutivo con plena
autonomía y competencia para reconocer la legalidad o declarar la nulidad de actos o
procedimientos administrativos, pero sin tener el poder de pronunciar mandamientos dirigidos a
obtener la ejecución de sus resoluciones, pues en caso de no darse cumplimiento a sus
sentencias, se acudiría al juicio de amparo. Como resultado, se tuvo un tribunal de simple
anulación pues sus sentencias sólo se limitarían a la anulación del acto administrativo impugnado,
los cuales exclusivamente eran en materia fiscal. Se integró por quince magistrados elegidos por
el presidente de la república, designándose a cada uno como presidente del tribunal cada año.
2. 31 de diciembre de 1938: Se publica el primer Código Fiscal de la Federación que deroga a la Ley
de Justicia Fiscal. En éste no existieron adiciones trascendentes, pues prácticamente se insertó lo
relativo al tribunal en su título cuarto: De la fase contenciosa del procedimiento tributario. Se
retoman a continuación solamente los siguientes eventos cruciales en el desarrollo de dicho
tribunal:
- 1966: Primera Ley Orgánica del Tribunal Fiscal de la Federación. Le otorga plena autonomía
para dictar sus fallos.
- 1967: Se reforma la fracción I del artículo 104 de la Constitución para darle sustento jurídico a
los Tribunales de lo Contencioso Administrativo. En 1987 el contenido de éste pasaría a la
fracción XXIX-H del artículo 73.
- 1978: Aparece la segunda ley orgánica del tribunal. Entre sus novedades, destaca la
desconcentración de este órgano al dividirse la competencia del territorio nacional en salas
regionales.
- 2000: En virtud del decreto por el que se reforman diversas disposiciones fiscales publicado en
el Diario Oficial de la Federación, el tribunal cambia su denominación por “Tribunal Federal de
Justicia Fiscal y Administrativa”.
De esta manera, hoy en día se cuenta con un órgano jurisdiccional localizado dentro del ámbito del
poder ejecutivo, gozando de las más amplias facultades constitucionales para controlar la legalidad y
regularidad de los actos y resoluciones de la función administrativa federal, tutelando de manera
completa e integral los derechos de los particulares, no sólo a través de la confirmación, modificación o
anulación de los actos de las autoridades administrativas, sino también mediante el efectivo
resarcimiento de la esfera jurídica de los particulares.
A pesar de que se encuentra fuera del poder judicial, el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la
Nación (Pleno de la SCJN, 2011), sostiene que se reconoce constitucionalmente como un tribunal de
lo contencioso-administrativo, cuya función en los términos más amplios que el Derecho permite, es la
de dirimir conflictos que se susciten entre la administración pública y los particulares, órgano creado,
estructurado y organizado mediante leyes expedidas por el Congreso de la Unión y dotado de
autonomía plena para fallar con el fin de garantizar su imparcialidad e independencia (Tesis: 897).
Jurisdicción
El artículo 73, fracción XXIX-H de la Constitución, establece como atribución del Congreso de la Unión,
expedir leyes que instituyan tribunales de lo contencioso administrativo, dotados de plena autonomía:
…para dictar sus fallos y que tengan a su cargo dirimir las controversias que se susciten entre la
administración pública federal y los particulares, su funcionamiento, el procedimiento y los recursos
contra sus resoluciones.
No obstante, dicho precepto normativo se debe de interpretar también, como el otorgamiento a los
tribunales contenciosos administrativos de una competencia amplia, tal y como lo resolvió el Cuarto
Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Primer Circuito:
De la interpretación literal y teleológica del precepto supracitado, se colige que los tribunales contencioso
administrativos están dotados de autonomía para dictar sus fallos y tienen como finalidad dirimir
cualquier controversia que se suscite entre la administración pública federal y los particulares, sin que el
numeral restrinja, delimite o acote dicha facultad, razón por la cual, debe entenderse que su competencia
es amplia en tanto resuelva controversias entre los particulares y los entes gubernamentales, numeral
constitucional cuyo alcance y contenido se extiende y permea a las reglas competenciales de su ley
orgánica en razón del principio de supremacía constitucional, ya sea que el Tribunal Federal de Justicia
Fiscal y Administrativa actúe como órgano jurisdiccional de mera anulación o de plena jurisdicción.
En efecto, la competencia del citado tribunal debe ser entendida de forma amplia y genérica para no
desproteger sino privilegiar el derecho de acceso a la justicia previsto en el artículo 17 constitucional de
manera que se haga efectivo el derecho fundamental a la impartición de justicia por tribunales de forma
pronta, completa e imparcial, sin que sea óbice lo que normas secundarias puedan señalar, pues son
derrotadas por el mandato constitucional que establece una competencia amplia del citado tribunal.
Aunado a lo anterior, debe atenderse al hecho de que según los criterios emitidos por el Poder Judicial
de la Federación, el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa es actualmente un tribunal de
plena jurisdicción, y no sólo de simple anulación, por lo que es evidente que cuenta con plenas
facultades para emitir una sentencia que defina, establezca y declare cuáles son los derechos subjetivos
de las partes en el conflicto (SCJN, 2006).
El modelo de jurisdicción del actual Tribunal Federal de Justicia Administrativa (TFJA) es mixto. Por
regla general, tiene plena jurisdicción, lo que significa que el tribunal está obligado a conocer, decidir
en toda su extensión y tutelar el derecho subjetivo del accionante en sus sentencias, pudiendo ordenar
la reparación del derecho subjetivo del actor lesionado por el acto impugnado, por lo que su alcance no
sólo es el de anular el acto, sino también el fijar los derechos del recurrente y condenar a la
administración a restablecer y hacer efectivos tales derechos. En su sentencia, además de anular el
acto o resolución que conoció, deberá dictar una nueva sentencia para no dejar incierta la situación
jurídica del administrado.
libre de los motivos de ilegalidad estudiados, pero no exenta de la constatación de que el particular
realmente tenga legitimidad a la restitución del derecho o a la devolución pretendidos.
Por excepción, en casos extraordinarios, la jurisdicción del tribunal será de mera anulación, lo que
significa que su labor se reducirá a restablecer el orden jurídico violado, es decir, controlar la legalidad
del acto y tutelar el derecho objetivo, limitándose la sentencia a anular el acto impugnado ante el
tribunal. Ello puede ocurrir en dos supuestos:
Cuando el TFJA no tuviese los elementos jurídicos indispensables para emitir un pronunciamiento
completo: En esta hipótesis los efectos de la nulidad deben ser para que la autoridad demandada
resuelva al respecto.
Cuando la resolución impugnada haya nacido del ejercicio de una facultad discrecional de la
autoridad:
En estos casos, el TFJA deberá informar a la autoridad cuando tenga que emitir un acto en sustitución
del impugnado, el sentido en que debe respetar los derechos del demandante, lo que de paso evita la
promoción interminable de juicios de nulidad respecto de una misma materia, pues estando vinculada
la autoridad a proceder en determinado sentido, no podrá reiterar en los mismos términos, el acto
impugnado ni estará en posibilidades de seguir otro camino que le lleve a una nueva violación a los
derechos del gobernado.
Asimismo, como todas las autoridades mexicanas, el TFJA está obligado, como
parte de su jurisdicción, a realizar el control difuso de constitucionalidad y
convencionalidad de las normas en los asuntos que conozca.
Organización
Tercera
sección
Sala Superior Pleno General
Primera y
Pleno
segunda
Junta De jurisdiccional
sección
Gobierno y Ordinaria
Administración
Auxiliares
Salas
Especializada
regionales
Mixtas
Para conocer sobre las atribuciones específicas del personal y de las áreas que en
concreto conforma el TFJA, consulta la siguiente dirección:
Sobre el sistema precedentes, tesis y jurisprudencia del tribunal, es preciso consultar los artículos 68,
69 y 70 de la LOTFJA.
Sala Superior: Se integrará por dieciséis magistrados, todos conforman el Pleno General y dos de
ellos la Junta de Gobierno y Administración, mismos que no formarán parte de ningún otro órgano
del TFJA. De los catorce que ejerzan funciones jurisdiccionales, se elegirá un presidente, que lo
será también del Tribunal.
Artículo 8. La Sala Superior tendrá cada año dos períodos de sesiones; el primero comenzará el primer
día hábil del mes de enero y terminará el antepenúltimo día hábil de la primera quincena del mes de julio;
el segundo comenzará el primer día hábil del mes de agosto y terminará el antepenúltimo día hábil de la
primera quincena del mes de diciembre.
Los integrantes de la Sala Superior serán nombrados por el Presidente de la República con la
aprobación de la Cámara de Senadores, durando en su encargo quince años improrrogables.
Funcionará, respectivamente, en:
- Un Pleno General: Se integra por el Presidente del Tribunal, por los trece magistrados que
integran las Secciones de la Sala Superior y por los dos magistrados que integran la Junta de
Gobierno y Administración. Sus debates serán ordinariamente públicos y bastará la presencia
de la simple mayoría de los magistrados para que sean válidos y serán presididos por el
Presidente del Tribunal, quien en caso de empate tendrá el voto de calidad. Sus facultades se
encuentran establecidas en el artículo 16 de la LOTFJA y sobre las sesiones ordinarias y
extraordinarias, en el artículo 12 de la LOTFJA.
- Un Pleno Jurisdiccional: Se integra por el Presidente del Tribunal y por los diez magistrados
integrantes de la primera y segunda secciones de la Sala Superior. Basta la presencia de siete
de sus miembros para realizar las votaciones respectivas. Resolviendo por unanimidad o
mayoría de votos, absteniéndose de hacerlo únicamente los magistrados impedidos. En caso
de empate, el proyecto se reservará para la siguiente sesión. Si subsiste el empate, se
desechará el proyecto, ordenándose se proponga uno nuevo que contenga las consideraciones
respectivas. Si aun así persiste el empate, el Presidente del Tribunal tendrá el voto de calidad.
Los disensos de los magistrados podrán registrarse en votos particulares. Sus facultades se
encuentran establecidas en el artículo 17 de la LOTFJA, mientras que sus sesiones ordinarias y
extraordinarias se encuentran normadas por 12 de la ley citada.
- Tres Secciones:
o Primera y segunda: Cada una se integra por cinco magistrados de la Sala Superior, a los
cuales les corresponde resolver de materias administrativa y fiscal. Sus facultades se
encuentran establecidas en el artículo 18 de la LOTFJA, mientras la normatividad de sus
resoluciones y votación se indican en el artículo 19 de la citada ley.
o Tercera: Se integra por tres magistrados del Pleno General, los cuales conocen de
responsabilidades administrativas relativas al Sistema Nacional Anticorrupción. Sus
facultades se encuentran establecidas en el artículo 20 de la LOTFJA, y artículo 9-Bis del
RITFJFA, mientras que la normatividad de sus resoluciones y votación, por el artículo 11
de la LOTFJA.
Salas Regionales: Se encuentran integradas por tres magistrados y su competencia material será
sobre los supuestos del artículo 3 y 35 de la LOTFJA. El territorio nacional se divide en regiones,
cuyos límites se establecen en el RITFJFA como se verá más adelante. Estas salas pueden ser:
o Propiedad intelectual.
o Ambiental y de regulación.
o Juicios en línea.
o Comercio exterior.
o Resolución exclusiva de fondo.
Por otra parte, existen salas auxiliares que apoyan a las salas regionales con
carácter de ordinarias o especializadas en el dictado de las sentencias definitivas,
diversas a las que se tramiten en la vía sumaria (artículos 40 y 41 de la LOTFJA).
La asignación de los asuntos será por turno. Para sus sesiones, las que serán
ordinariamente públicas, es indispensable la presencia de los tres magistrados,
resolviendo por mayoría de votos.
Sus presidentes serán designados por los magistrados que integren la sala en la
primera sesión de cada ejercicio, durando un año en el cargo sin poder ser
reelectos para periodos inmediatos siguientes.
Competencia
La competencia del Tribunal Federal de Justicia Administrativa (TFJA) es amplia, pudiendo conocer de
manera ordinaria sobre cualquier conflicto entre la Administración Pública y los particulares, dada la
amplitud del artículo 73 fracción XXIX-H, de la Constitución. Su competencia formal se encuentra
establecida en dos normas jurídicas:
Artículo 3
Competencia formal del TFJA
Artículo 38
- “Los decretos y acuerdos de carácter general, diversos a los reglamentos, cuando sean
autoaplicativos o cuando el interesado los controvierta con motivo de su primer acto de
aplicación” (fracción I).
- Actos o resoluciones de autoridades fiscales federales y organismos autónomos (crédito u
obligación fiscal, negativa de devolución, multas y cualquiera que cause agravio).
- Actos o resoluciones relativas a pensiones militares o civiles, con cargo al erario federal o al
ISSSTE.
- Los actos que se originen en licitaciones públicas y los que tengan por objeto un contrato
administrativo.
- Negativas, improcedencias, insatisfacciones o repeticiones en materia de responsabilidad
patrimonial del Estado.
- Los requerimientos de pagos de garantías.
- Comercio exterior.
- Las que pongan fin a un procedimiento, instancia o expediente, en términos de la Ley Federal
de Procedimiento Administrativo.
- Las resoluciones de recursos administrativos.
- Actos o resoluciones que se funden en tratados internacionales comerciales o para evitar la
doble tributación.
- Negativa ficta y de expedición de constancias de positiva ficta.
- Resoluciones definitivas que impongan sanciones administrativas a servidores públicos.
- Resoluciones de la Contraloría General de Instituto Nacional Electoral, en términos de la Ley
General de Instituciones y Procedimientos Electorales.
- Las resoluciones y sanciones emitidas por la Auditoría Superior de la Federación, en términos
de la Ley de Fiscalización y Rendición de Cuentas.
Finalmente, es preciso apuntar que la jurisdicción de las salas regionales del TFJA
dependen de la ubicación del domicilio fiscal del particular; pues éste delimitará ante
qué sala se deberá acudir, con las excepciones de: las Salas Especializadas y la
Sala Superior.
El juicio contencioso administrativo federal o juicio de nulidad (al que se refieren los últimos párrafos
del artículo 3° y 2º de la LOTFJA y LFPCA, respectivamente), es el proceso jurisdiccional
administrativo mediante el cual de manera ordinaria un particular y extraordinariamente una autoridad
administrativa, acude ante el Tribunal Federal de Justicia Administrativa en el que a través del ejercicio
de la acción, busca la satisfacción de su pretensión. En éste, el Tribunal ejercer su jurisdicción
siguiendo el proceso establecido en la Ley Federal de Procedimiento Contencioso Administrativo.
Conviene recordar los elementos constitutivos de todo proceso:
Acción: Es la facultad abstracta que posee una persona para acudir a un órgano jurisdiccional a
desahogar el proceso establecido en la normatividad adjetiva de la materia, para regular el tipo de
asunto que se trate a través del ejercicio de su jurisdicción.
Pretensión: Es la manifestación de la voluntad que motiva a la acción y que busca la declaración,
constitución, modificación, ejecución, nulidad, protección, extinción, condena o aseguramiento de
un derecho a favor del actor.
Proceso: Es el conjunto de actos concatenados y progresivos entre sí, sancionados por una norma
adjetiva específica, que inicia con el ejercicio de la acción por aquel que tiene la necesidad jurídica
de satisfacer su pretensión respecto de otro sujeto, cuyos intereses son contrarios a dicha
pretensión y que concomitante al actor, podrá ejercer su derecho a oponer las defensas y
excepciones que correspondan. Estos actos se desarrollan ante un órgano jurisdiccional que
regulará desde una posición supraordinada, la integración de los elementos jurídicos y fácticos
necesarios para la decisión del conflicto, atendiendo a las disposiciones y límites que configuran
las garantías de legalidad y el debido proceso que a las partes les protegen. Lo anterior, con el
objetivo de resolver conforme a Derecho, el conflicto jurídico derivado de la contraposición de
intereses de las partes.
Jurisdicción: Es la potestad para conocer y resolver los conflictos sobre la interpretación o
aplicación de una norma jurídica, misma que es otorgada por el Estado Mexicano a determinados
órganos (juzgados, tribunales y la corte), para cumplir con las funciones públicas de preservación
del orden público, tutela de la esfera jurídica de los individuos y la colectividad, así como
garantizar el bienestar común. En otros términos, es la función que tienen los órganos
jurisdiccionales de impartir justicia.
Implica una relación entre las partes a) particular y b) administración con un conflicto preexistente que
determina su situación jurídica y un juez ante quien se aducen pretensiones de nulidad de un acto
administrativo conducente a que sea declarada, únicamente su ineficacia o, además, la existencia,
amplitud y contenido de la violación de un derecho subjetivo, lo que implicará, en su caso, restituir al
titular
Partes
De acuerdo con el artículo 3 de la LFPCA las partes de este proceso son las siguientes:
El tercero: Es la persona que tenga un derecho incompatible con la pretensión del demandante.
Es el sujeto que tiene interés de que prevalezca el acto o resolución motivo de impugnación del
demandante.
Demanda
Conforme al artículo 13 de la LFPCA los particulares que promuevan el proceso, podrán presentar su
demanda mediante juicio en la vía tradicional:
…por escrito ante la sala regional competente o, en línea, a través del Sistema de Justicia en Línea, para
este último caso, el demandante deberá manifestar su opción al momento de presentar la demanda. Una
vez que el demandante haya elegido su opción no podrá variarla. Cuando la autoridad tenga este
carácter la demanda se presentará en todos los casos en línea a través del Sistema de Justicia en Línea.
Por otra parte, es muy importante recordar que la competencia territorial de las salas depende del
domicilio fiscal del demandante, de acuerdo a lo dispuesto por el artículo 34 de la LOTFJA, el cual ha
sido citado anteriormente.
Sobre las excepciones a las que se refiere dicho artículo, es necesario consultarse
las tesis jurisprudenciales emitidas por el TFJA correspondientes.
Sobre los requisitos de la demanda, éstos se encuentran localizados en el artículo 14 de la LFPCA que
a continuación se cita:
I. El nombre del demandante, domicilio fiscal, así como domicilio para oír y recibir notificaciones dentro
de la jurisdicción de la Sala Regional competente, y su dirección de correo electrónico.
Cuando se presente alguno de los supuestos a que se refiere el Capítulo XI, del Título II, de esta Ley, el
juicio será tramitado por el Magistrado Instructor en la vía sumaria.
II. La resolución que se impugna. En el caso de que se controvierta un decreto, acuerdo, acto o
resolución de carácter general, precisará la fecha de su publicación.
III. La autoridad o autoridades demandadas o el nombre y domicilio del particular demandado cuando el
juicio sea promovido por la autoridad administrativa.
IV. Los hechos que den motivo a la demanda.
V. Las pruebas que ofrezca.
En caso de que se ofrezca prueba pericial o testimonial se precisarán los hechos sobre los que deban
versar y señalarán los nombres y domicilios del perito o de los testigos.
En caso de que ofrezca pruebas documentales, podrá ofrecer también el expediente administrativo en
que se haya dictado la resolución impugnada.
Se entiende por expediente administrativo el que contenga toda la información relacionada con el
procedimiento que dio lugar a la resolución impugnada; dicha documentación será la que corresponda al
inicio del procedimiento, los actos administrativos posteriores y a la resolución impugnada. La remisión
del expediente administrativo no incluirá las documentales privadas del actor, salvo que las especifique
como ofrecidas. El expediente administrativo será remitido en un solo ejemplar por la autoridad, el cuál
estará en la Sala correspondiente a disposición de las partes que pretendan consultarlo.
VI. Los conceptos de impugnación.
VII. El nombre y domicilio del tercero interesado, cuando lo haya.
VIII. Lo que se pida, señalando en caso de solicitar una sentencia de condena, las cantidades o actos
cuyo cumplimiento se demanda.
[…]
Respecto a los errores u omisiones de la demanda, cuando en ésta se omita el nombre del
demandante o los datos precisados en las fracciones II y VI, el magistrado instructor la desechará por
improcedente y cuando se trate de los datos previstos en las fracciones III, IV, V, VII y VIII, el
magistrado instructor requerirá al promovente para que los señale dentro del término de cinco días,
apercibiéndolo que de no hacerlo en tiempo, se tendrá por no presentada o por no ofrecidas las
pruebas, según corresponda.
Si en el lugar señalado por el actor como domicilio del tercero, se negare que sea éste, el demandante
deberá proporcionar al tribunal la información suficiente para proceder a su primera búsqueda,
siguiendo al efecto las reglas previstas en el Código Federal de Procedimientos Civiles.
Por otra parte, cuando no se señale dirección de correo electrónico, no se enviará el aviso que
corresponda.
Considerando los numerales para la redacción del escrito de demanda, se presenta a continuación las
siguientes consideraciones:
- Nombre y/o denominación del demandante, seguido de la abreviación latina versus (Vs.) que
significa “contra”.
- La mención a la autoridad demandada.
- La clase de juicio, así como la vía que corresponda.
- El asunto.
Éstos son útiles, tanto para el demandado como para la autoridad en la identificación clara del
escrito, ya que esa es su finalidad. Algunos litigantes también suelen agregar algunos datos del
acto impugnado, como el número de expediente del cual deriva y el fondo del mismo.
2. Órgano del TFJA a quien se dirige: Se atiende a lo dispuesto por el artículo 13 de la LFPCA. Es
muy importante que el impetrante dirija correctamente su demanda, pues como se ha señalado, la
competencia de las salas corresponderá de manera ordinaria a la ubicación del domicilio fiscal.
Para determinar la competencia y la denominación que se debe de colocar en este campo, se
proponen las siguientes directrices generales:
- Consultar el artículo 23 del (RITFJFA) para verificar si la materia del objeto de la demanda es
alguna relativa a:
o Propiedad intelectual.
o Juicios en línea, ambiental y de regulación.
o Comercio exterior.
o Juicio de resolución exclusiva de fondo.
o Responsabilidades administrativas.
- Enseguida, se acudirá al análisis del contenido del artículo 22 del RITFJFA para ubicar la
denominación de la sala a la cual se tiene que dirigir. En los casos en que exista más de una
sala, por ejemplo, si se trata de la región del noroeste III donde existen dos salas, de acuerdo a
lo dispuesto por el artículo 25 del mismo Reglamento se escribirá: Sala Regional del Noroeste III
en Turno, para que el sistema del TFJA sea el que asigne el asunto a la primera o segunda
sala. En las subsecuentes promociones, se dirigirá a la sala que se haya asignado, pudiéndose
incluir, la ponencia correspondiente.
- Si el demandante se encuentra en alguno de los supuestos de excepción del artículo 34 de la,
es necesario aclarar la competencia de la sala ante la que se promueva en el cuerpo de la
demanda, realizando las explicaciones que sean necesarias, así como presentando las
documentales que acrediten la configuración de la excepción.
3. Nombre del recurrente: Se cubren los requisitos de la fracción I del artículo 14 de la LOTFJA,
recordando que sólo puede aparecer un solo demandante, salvo en los casos de conexidad donde
se deberá de designar a un representante común.
En uso de la facultad del artículo 5º de la LFPCA se pueden designar a personas para que puedan
recibir notificaciones y consultar el expediente, así como a un licenciado en Derecho para que
pueda impulsar el proceso, el cual deberá encontrarse acreditado como tal ante el TFJA. Si no lo
está, el profesionista propuesto quedará autorizado sólo para recibir notificaciones, pudiendo con
posterioridad acreditar su calidad y volverse a autorizar.
4. Objeto del escrito: Se señala sintéticamente el acto reclamado y la autoridad demandada, la fecha
de notificación de la resolución combatida y la vía propuesta para el desahogo del juicio. Se
cumple igualmente con lo establecido en el artículo 13 de la LFPCA respecto a señalar la vía que
el demandante propone, refiriéndose también a la oportunidad de la demanda, sobre lo cual debe
señalarse que se presenta dentro del término establecido en el mismo numeral.
5. Fundamentación del objeto del escrito: Es el párrafo conector con la exposición analítica de los
elementos requeridos por el artículo 14 de la LFPCA. Para facilitar el análisis de la demanda a los
funcionarios jurisdiccionales, se recomienda copiar y pegar las fracciones del citado artículo, para
que sobre dicha estructura se desarrollen los elementos de la demanda.
Por otra parte, se debe exponer secuencialmente el desarrollo de los hechos que desembocaron
en el acto o la resolución impugnada. Considérese que se pueden agregar los puntos o
subapartados necesarios. Una recomendación útil para no saturar a éstos es un
hecho/circunstancia/evento por punto, a menos que dos o más estén íntimamente relacionados
entre sí, y un hecho no pueda entenderse sin el otro, o que en caso de separarlos, dificultaría la
continuidad del hilo narrativo.
Puede llegar a ocurrir que no se sepa o recuerde alguna fecha en concreto, en este caso se
sugiere alguno de los siguientes elementos para la narración:
Como cierre de este apartado, se puede exponer un punto en el que se explique, sin entrar a la
argumentación de fondo todavía, para qué se acude al órgano jurisdiccional y cuál es la situación,
calidad o acto que se está persiguiendo con el juicio.
Comparten características íntimas con figuras de otras materias como los agravios,
motivos de inconformidad y los conceptos de violación, por lo que se puede concluir
que para su estudio práctico son sinónimos jurídicos, sin dejar de observar que, el
término técnico correcto y que, por tanto, se deberá de utilizar en esta materia es el
de “conceptos de impugnación”. La necesidad de aclarar esto radica en que se puede
emplear las explicaciones, conceptualizaciones y reglas que la jurisprudencia y la
doctrina han creado sobre agravios y conceptos de violación de forma válida, gracias
al modelo interpretativo de la analogía.
Para una comprensión integral de esta parte que es la más importante de la demanda (pues de
ésta depende el éxito de la labor del litigante), se exponen a continuación diversos casos
específicos de razonamientos comunes efectivos a plantear. Destacándose que la clasificación
que se expone es un esbozo analítico de algunos elementos forenses, ya que hasta el
momento no ha habido esfuerzo, ni en la praxis ni en lo teórico, por sostener rigor en las
categorías. Únicamente se les llama como “inoperantes” de manera genérica, de tal manera
que, más allá de un estudio de clasificación, lo que a continuación se propone es un catálogo
de qué es lo que no se debe de hacer en este apartado de la demanda, de lo cual se sugiere
también confrontar con jurisprudencia:
- Son inoperantes:
- Son insuficientes:
- Son inatendibles:
- Son infundados:
Por último, es preciso tener presente las causales previstas por la propia LFPCA en
el artículo 51, por las que un acto o resolución administrativa podrá ser declarada
ilegal.
8. Nombre y domicilio del tercero interesado: Es muy importante no omitirlo, ya que si voluntaria o
involuntariamente se le excluye del asunto no anotando los generales que solicita la LFPCA;
puede ser que el tercero se entere en una etapa avanzada del proceso y al momento de
apersonarse, consiga que se declare alguna reposición o en el peor de los casos, que se pierda
todo lo actuado.
9. Puntos petitorios: Al tener como fin que el demandante señale con amplia precisión qué es lo que
espera que suceda con la tramitación del juicio, es preferible aprovechar el espacio para hacer
hincapié en la pretensión esencial. En los casos donde se demanden ciertas cantidades, se
recomienda de modo determinante, abrir un apartado específico para exponer de manera
sintetizada las operaciones que calculan los importes que se pretenden obtener.
Una vez ingresada la demanda, si esta cumple con todos los requisitos y cuenta con las documentales
necesarias, la Sala resolverá su admisión, junto con las instrucciones necesarias para que, a cada
autoridad demandada, se les emplace y se les corra traslado, así como al tercero interesado.
Contestación de la demanda:
II. Las consideraciones que, a juicio de la demandada, impidan se emita decisión en cuanto al fondo o
demuestren que no ha nacido o se ha extinguido el derecho en que el actor apoya su demanda.
III. Se referirá concretamente a cada uno de los hechos que el demandante le impute de manera expresa,
afirmándolos, negándolos, expresando que los ignora por no ser propios o exponiendo cómo ocurrieron, según
sea el caso.
Establece la estructura que se deberá de seguir para la contestación de los hechos. Al respecto, se
pueden emplear las siguientes fórmulas de acuerdo a cada caso en particular:
Si un hecho aducido por el actor en su demanda contiene elementos que son ciertos, pero otros
que no lo son: Se explicará cuál o cuáles hechos son los que se aceptan, así como los que se
niegan, agregando la explicación necesaria de estos últimos.
“Respecto al hecho marcado como “3”, resulta parcialmente cierto, ya que es cierto
que el acto se emitió por Z, pero no es cierto que se haya emitido en X; porque en
realidad, se dictó en fecha Y […]”.
IV. Los argumentos por medio de los cuales se demuestra la ineficacia de los conceptos de impugnación.
V. Los argumentos por medio de los cuales desvirtúe el derecho a indemnización que solicite la actora.
Como las de la demanda, éstas deberán relacionarse con los hechos, así como con las excepciones y
defensas que se hagan valer.
VII. En caso de que se ofrezca prueba pericial o testimonial, se precisarán los hechos sobre los que deban versar
y se señalarán los nombres y domicilios del perito o de los testigos.
Por otra parte, los documentos que son necesarios presentar junto con la contestación de la demanda,
son citados en el artículo 21 de la LFPCA:
I. Copias de la contestación y de los documentos que acompañe para el demandante y para el tercero
señalado en la demanda.
II. El documento en que acredite su personalidad cuando el demandado sea un particular y no gestione
en nombre propio.
III. El cuestionario que debe desahogar el perito, el cual deberá ir firmado por el demandado.
IV. En su caso, la ampliación del cuestionario para el desahogo de la pericial ofrecida por el demandante.
V. Las pruebas documentales que ofrezca.
Las autoridades demandadas deberán señalar, sin acompañar, la información calificada por la Ley de
Comercio Exterior como gubernamental confidencial o la información proporcionada por terceros
independientes, obtenida en el ejercicio de las facultades que en materia de operaciones entre partes
relacionadas establece la Ley del Impuesto sobre la Renta. La sala solicitará los documentos antes de
cerrar la instrucción.
Artículo 23.- Cuando haya contradicciones entre los hechos y fundamentos de derecho dados en la
contestación de la autoridad federativa coordinada que dictó la resolución impugnada y la formulada por el
titular de la dependencia u organismo desconcentrado o descentralizado, únicamente se tomará en cuenta,
respecto a esas contradicciones, lo expuesto por éstos últimos.
Ampliación de la demanda
Artículo 17. Se podrá ampliar la demanda, dentro de los diez días siguientes a aquél en que surta efectos
la notificación del acuerdo que admita su contestación, en los casos siguientes:
En el escrito de ampliación de demanda se deberá señalar el nombre del actor y el juicio en que se
actúa, debiendo adjuntar, con las copias necesarias para el traslado, las pruebas y documentos que en
su caso se presenten.
Cuando las pruebas documentales no obren en poder del demandante o cuando no hubiera podido
obtenerlas a pesar de tratarse de documentos que legalmente se encuentren a su disposición, será
aplicable en lo conducente, lo dispuesto en el tercer párrafo del artículo 15 de esta Ley.
Si no se adjuntan las copias a que se refiere este artículo, el Magistrado Instructor requerirá al
promovente para que las presente dentro del plazo de cinco días. Si el promovente no las presenta
dentro de dicho plazo, se tendrá por no presentada la ampliación a la demanda. Si se trata de las
pruebas documentales o de los cuestionarios dirigidos a peritos y testigos, a que se refieren las
fracciones VII, VIII y IX del artículo 15 de esta Ley, las mismas se tendrán por no ofrecidas.
impute de manera precisa al demandado, salvo que por las pruebas rendidas o por hechos notorios
resulten desvirtuados.
En ninguna parte establece la LFPCA que sólo proceda una vez. Si bien, las partes en el juicio
contencioso administrativo están obligadas a expresar la totalidad de los hechos en que se funden sus
pretensiones, así como a anexar con la demanda y con la contestación, los documentos que ofrezcan
como pruebas (salvo los casos en que se puede ampliar la demanda con la correlativa contestación),
puede darse el caso en que la contestación de la ampliación, se exhiban por la parte demandada
nuevas pruebas no conocidas por el actor y que necesariamente se le deba de dar oportunidad de
atacar para que no quede en estado de indefensión.
Debido a que los actos administrativos por naturaleza se presumen legales, son ejecutables de
manera inmediata. Para evitar su cumplimiento, la ley otorga la posibilidad de que las partes previa
satisfacción de una serie de requisitos y condiciones, lo soliciten al magistrado instructor.
De esta manera, las medidas cautelares son mecanismos procesales tendientes a garantizar los
derechos del impetrante, mediante la conservación de determinadas circunstancias materiales y
formales, con el fin de evitar la afectación que podría causar la dilación de la tramitación de la secuela
procesal.
Positivas:
Artículo 26. El Magistrado Instructor podrá decretar medidas cautelares positivas, entre otros casos, cuando,
tratándose de situaciones jurídicas duraderas, se produzcan daños substanciales al actor o una lesión
importante del derecho que pretende por el simple transcurso del tiempo
Negativas:
[Se solicitará cuando] sean de difícil reparación los daños o perjuicios que se causen al solicitante con la
ejecución del acto impugnado (inciso “b” de la fracción I, del artículo 28 de la LFPCA).
Sobre las reglas de las medidas cautelares, se sugiere la consulta de los artículos 24,
24-Bis y 28 de la LFPCA:
Identificados sus tipos, se señala a continuación el trámite a seguir para aplicar las medidas cautelares
positivas:
1. Se tramitan mediante incidente con los requisitos establecidos en el artículo 24 Bis de la LFPCA.
En caso de error u omisión de los requisitos, se tendrá por no solicitadas.
2. La admisión se hará en las siguientes veinticuatro horas de su presentación, corriéndosele
traslado a la parte demandada, requiriéndole un informe.
3. La demandada rendirá el informe dentro de las siguientes setenta y dos horas de que surta
efectos la notificación. Si no rinde el informe o éste no se refiere a los hechos que específicamente
impute el promovente, los hechos se tendrán por ciertos.
4. Dentro de los cinco días siguientes al que se haya recibido el informe, o en que haya vencido el
término para presentarlo, el magistrado instructor resolverá de manera definitiva, decretando o
negando las medidas cautelares solicitadas.
5. Mientras no se dicte sentencia definitiva, el magistrado instructor que hubiere conocido del
incidente, podrá modificar o revocar la resolución que haya decretado o negado las medidas
cautelares, cuando ocurra un hecho superveniente que lo justifique. En los casos en los que las
medidas cautelares puedan causar daños a terceros, el magistrado instructor las ordenará
siempre que el actor otorgue garantía bastante para reparar, mediante indemnización, los daños y
perjuicios que con ellas pudieran causarse si no obtiene sentencia favorable en el juicio; conforme
al artículo 27 de la LFPCA.
6. La autoridad demandada podrá obligarse a resarcir los daños y perjuicios que se pudieran causar
al particular en cuyo caso, el tribunal considerando las circunstancias del caso, podrá no dictar las
Ahora bien, respecto al trámite a seguir para las medidas cautelares negativas, se presenta los
siguientes pasos:
1. Se tramitará mediante incidente, observando los requisitos establecidos en las fracciones I y II del
artículo 28 de la LFPCA. Tratándose de créditos fiscales o que pudieran ocasionar daños o
perjuicios a terceros, se deberá otorgar garantía. En los demás casos, se concederá determinando
la situación en que habrán de quedar las cosas, así como las medidas pertinentes para preservar
la materia del juicio principal, hasta que se pronuncie sentencia firme.
2. La solicitud podrá formularse desde la demanda o en escrito posterior, ante la sala que conozca
del juicio. El incidente se tramitará mediante cuerda separada.
3. La admisión se hará en las siguientes veinticuatro horas de su presentación, corriéndosele
traslado a la demandada y requiriéndole un informe.
4. La demandada rendirá el informe dentro de las siguientes cuarenta y ocho horas de que surta
efectos la notificación. Si no rinde el informe o éste no se refiere a los hechos que específicamente
impute el promovente, los hechos se tendrán por ciertos.
5. Dentro de los cinco días siguientes al que se haya recibido el informe o en que haya vencido el
término para presentarlo, el magistrado instructor resolverá de manera definitiva decretando o
negando la suspensión.
6. Mientras no se dicte sentencia definitiva el magistrado instructor que hubiere conocido del
incidente, podrá modificar o revocar la resolución que haya concedido o negado la suspensión
definitiva, cuando ocurra un hecho superveniente que lo justifique.
7. Cuando el solicitante de la suspensión obtenga sentencia favorable firme, el magistrado instructor
ordenará la cancelación o liberación de la garantía otorgada. En caso de que la sentencia firme le
sea desfavorable, a petición de la contraparte o en su caso, del tercero, y previo acreditamiento de
que se causaron perjuicios o se sufrieron daños, la sala ordenará hacer efectiva la garantía
otorgada ante la autoridad.
Plazos y notificaciones
Plazo es el marco temporal señalado para que se efectúe alguna actuación con eficacia y validez.
Estos marcos temporales se encuentran definidos en la Ley Federal de Procedimiento Contencioso
Administrativo:
apersone a
juicio
Plazo para la Treinta días Contados a partir del siguiente a aquél en que surta
contestación de efectos el emplazamiento.
la demanda
Plazo para la Diez días Siguientes a aquél en que surta efectos la notificación
contestación a del acuerdo que admita la ampliación. (Artículo 19
la ampliación de LFPCA)
la demanda
Plazos para los Para su despacho: Un Siguiente a aquél en que la actuaría reciba el acuerdo en
exhortos día que se ordene.
(artículo 73 de la Para acordar la Siguientes a aquél en que se reciba.
LFPCA) recepción de los que
se reciban: Tres días
Para su diligenciación: Siguientes a aquél al que se acuerde su recepción. A no
mínimo cinco días. ser que lo que haya de practicarse exija necesariamente
mayor tiempo, caso en el cual, la Sala requerida fijará el
plazo que crea conveniente.
Existen también plazos respecto de las medidas cautelares y para la prueba pericial,
los cuales se abordan en los apartados del Módulo correspondiente, para guardar
uniformidad en el estudio.
Ahora bien, para el cómputo de estos plazos se deberá atender a las reglas que fijan los términos.
Dichas reglas se encuentran contenidas en el artículo 74 de la LFPCA que establece:
I. Empezarán a correr a partir del día siguiente a aquél en que surta efectos la notificación.
II. Si están fijados en días, se computarán sólo los hábiles entendiéndose por éstos aquellos en que se
encuentren abiertas al público las oficinas de las Salas del Tribunal durante el horario normal de labores.
La existencia de personal de guardia no habilita los días en que se suspendan las labores.
III. Si están señalados en periodos o tienen una fecha determinada para su extinción, se comprenderán
los días inhábiles; no obstante, si el último día del plazo o la fecha determinada es inhábil, el término se
prorrogará hasta el siguiente día hábil.
IV. Cuando los plazos se fijen por mes o por año, sin especificar que sean de calendario se entenderá en
el primer caso que el plazo vence el mismo día del mes de calendario posterior a aquél en que se inició y
en el segundo caso, el término vencerá el mismo día del siguiente año de calendario a aquél en que se
inició. Cuando no exista el mismo día en los plazos que se fijen por mes, éste se prorrogará hasta el primer
día hábil del siguiente mes de calendario.
Ahora bien, la notificación es el medio procesal por el cual se le da a conocer a una persona: un
hecho, acto o resolución dictado dentro de un procedimiento o proceso, con la consecuencia directa de
producir efectos en la esfera jurídica del notificado, de los interesados relacionados en el asunto o de
ambos.
Artículo 67. Las notificaciones únicamente deberán realizarse personalmente, o por correo certificado con
acuse de recibo, cuando se trate de las resoluciones siguientes:
I. La que corra traslado de la demanda, en el caso del tercero, así como el emplazamiento al particular
en el juicio de lesividad a que se refiere el artículo 13, fracción III de esta Ley;
II. La que mande citar al testigo que no pueda ser presentado por la parte oferente.
[…]
El Magistrado Instructor podrá, excepcionalmente, ordenar la notificación personal, por oficio o por correo
certificado con acuse de recibo a las partes, atendiendo a su situación concreta, para lo cual deberá
fundar y motivar esa determinación en el acuerdo respectivo.
Sobre las reglas generales de las notificaciones, se tienen los siguientes artículos de la LFPCA:
Artículo 70.- Las notificaciones surtirán sus efectos, el día hábil siguiente a aquél en que fueren hechas.
Artículo 71.- La notificación personal o por correo certificado con acuse de recibo, también se entenderá
legalmente efectuada cuando se lleve a cabo por cualquier medio por el que se pueda comprobar
fehacientemente la recepción de los actos que se notifiquen.
Artículo 72.- Una notificación omitida o irregular se entenderá legalmente hecha a partir de la fecha en
que el interesado se haga sabedor de su contenido.
Para la diligenciación de una notificación o el desahogo de alguna prueba que deban practicarse en un
lugar distinto a la circunscripción territorial de la sede de la sala regional que conozca del juicio, se
practicarán mediante exhortos, de acuerdo a las reglas establecidas en el artículo 73 de la LFPCA. Por
otra parte, las autoridades auxiliares en la diligenciación de los exhortos son los siguientes:
La Sala Regional del TFJA competente de la circunscripción territorial donde se haya a practicar.
Los Juzgados o Tribunales del Poder Judicial de la Federación.
Los Órganos Jurisdiccionales del Poder Judicial de la entidad federativa donde se haya de
practicar.
El consulado mexicano más próximo a la ciudad en la que deba desahogarse.
Por otra parte, sobre la improcedencia del juicio se establecen sus causas en el
artículo 8° de la Ley Federal de Procedimiento Contencioso Administrativo, mientras
que las causas del sobreseimiento se encuentran indicadas en el artículo 9º de la
citada ley, de las cuales es necesaria su consulta.
Cabe destacar que el sobreseimiento del juicio podrá ser total o parcial, haciendo
referencia a que una vez actualizada una de las hipótesis normativas contempladas
para el sobreseimiento del juicio, éste podrá ser declarado de manera total o parcial..
Cierre
Cierre
Fuente: Flaticon
En esta sesión has comprendido que la naturaleza del proceso jurisdiccional administrativo sancionado
por la Ley Federal de Procedimiento Contencioso Administrativo, resuelve los conflictos a través de la
interpretación, aplicación y operación del sistema jurídico administrativo, constituyéndose como el
medio más importante de defensa contra los actos de la administración pública.
Sobre este último punto, se identificaron y caracterizaron, los elementos que en la práctica forense
resultan indispensables para el trámite de la demanda, la contestación de la misma, su ampliación, la
contestación a la ampliación de la demanda y la posibilidad de una segunda ampliación, además de
comprender y aplicar la normatividad que regula la dinámica de: las medidas cautelares, tanto las
positivas como la negativa que se refiere a la suspensión del acto reclamado, los plazos, términos y
notificación, así como las causales de improcedencia y sobreseimiento del juicio de nulidad.
Fuentes de consulta
Fuentes de consulta
Fuente: Flaticon
Jurisprudencia
Tesis: 897. Apéndice de 2011. Novena época, T. II. Procesal Constitucional 1. Común Primera
Parte - SCJN Séptima Sección - Procedencia del amparo directo, p. 1003.
Tesis: 2a./J. 90/2012 (10a.). Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Décima época.
Libro XII, septiembre de 2012, Tomo 2, p. 1176.
Tesis: VI.3o.A.228 A. Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Novena época, t. XXII,
agosto de 2005, p. 1825.
Tesis: I.9o.A.102 A (10a.). Gaceta del Semanario Judicial de la Federación. Décima época. Libro
50, enero de 2018, Tomo IV, p. 2286.
Tesis: I.4o.A. J/45. Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Novena época, t. XXIV,
septiembre de 2006, p. 1394.
Legislación