La Expropiación en El Perú

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LA EXPROPIACIÓN EN EL PERÚ

Cada cierto tiempo, la palabra “expropiación” adquiere relevancia en el debate


político peruano. Algunas grandes obras, como la ampliación del aeropuerto
Jorge Chávez, han requerido la aplicación de esta figura jurídica. Pero ¿qué
significa exactamente esta palabra? ¿Cuándo es legalmente aplicable? A
continuación, buscaremos explicarlo.
La expropiación es un mecanismo regulado en el ordenamiento peruano por
medio del cual, el Estado, es decir, las entidades administrativas que
representan al Estado, adquieren determinado bien inmueble que tiene como
presupuesto la necesidad pública o la seguridad nacional. Dicho mecanismo
ha sufrido variaciones y cambios a nivel legislativo y legal a lo largo de
distintos gobiernos en nuestro país, y ahora, esta institución se encuentra
regulada en el DL 1192, Ley de Adquisición, expropiación, Transferencia de
Inmuebles Estatales y Liberación de Interferencias. Sin embargo, ¿qué sucede
cuando una entidad administrativa, es decir, el Estado, limita las facultades
otorgadas por el derecho de propiedad que un privado tiene sobre determinado
bien, al punto de conseguir que dichas facultades sean inexistentes, sin tomar
el bien como propiedad suya, es decir, ¿sin ejecutar una expropiación forzosa
per se? Aquí, el ordenamiento peruano se ve limitado para dar una respuesta,
ya que dicha figura no existe en nuestra regulación; sin embargo, ha surgido
una cuestión jurídica importante: ¿Es esta situación algo permitido o
permisible en el ordenamiento jurídico peruano? ¿Debería encontrarse
regulado o debería basarse en regulaciones de otros países? En efecto, la
figura hasta el momento mencionada ha sido parte de pronunciamientos
diversos por nuestro Tribunal Constitucional; sin embargo, se debe notar que
mucha de la doctrina que ha sido utilizada para poder resolver este tipo de
situación que involucra a la expropiación indirecta, viene de fuentes
extranjeras, principalmente tratados y acuerdos internacionales. Estamos pues
ante una figura que origina del derecho internacional pero que ha encontrado
de facto una aplicación en nuestro fuero interno y que se le conoce como
expropiación indirecta. En el presente estudio, se realizará un iter, en primer
lugar, sobre las bases y fundamentos de la propiedad como derecho
fundamental en el Perú, puesto que es el derecho que la figura de la
expropiación indirecta afectaría. El análisis que debemos realizar sobre la
propiedad no solamente debe versar sobre la propiedad en sí misma y las
facultades que otorga sino también, el contenido esencial del mismo, y la
incidencia que tiene del derecho de propiedad en la economía peruana; es
decir, hasta qué punto se puede ejercer el derecho de la propiedad y si desde
este primer análisis, algún fundamento que permita la ejecución de la
expropiación indirecta como medida limitativa, o, por el contrario, determinar
que la propiedad es un derecho cuya restricción no es posible de realizar
mediante la figura precitada. Una vez se haya terminado de analizar el
contenido constitucional del derecho de propiedad, es menester analizar la
figura de la expropiación, tanto directa como indirecta. ¿Cuál es la diferencia
entre ambas figuras jurídicas? Las respuestas que podamos obtener no solo
nos ayudarán a tener un definición más clara y más acabada de la
expropiación indirecta, sino que, además, señalarán la diferencia esencial del
por qué existe una regulación específica para la expropiación directa y no para
la expropiación indirecta, determinando así factores importantes para
responder la pregunta sobre la legalidad y legitimidad de esta última figura
jurídica. Finalmente, con los conceptos, definiciones y directrices doctrinarias
que se hayan obtenido hasta este punto de nuestro estudio, podremos
adentrarnos a analizar las sentencias formuladas por el Tribunal
Constitucional sobre casos particulares en los cuales se ha llegado a la
conclusión que la actuación de la Administración Pública ha usado la figura de
la expropiación indirecta. En el análisis a dichas sentencias, verificaremos no
solo la decisión tomada por el Tribunal Constitucional, sino también, si la
misma se ajusta al ordenamiento jurídico constitucional y si aplica de manera
correcta las figuras jurídicas correspondientes. Como se puede ver, el presente
trabajo no solamente hace frente a una problemática ya existente en nuestro
país, sino que, aún más, es una problemática que tiene implicancias prácticas
sustantivas y, posiblemente, dañinas de aplicarse indiscriminada o
erróneamente. En la opinión de quien escribe, toda limitación, ya sea está
permitida o pueda permitirse, debe ejercerse con el mayor de los cuidados a
los derechos de las personas que afecta, sobre todo si se trata de una relación
totalmente asimétrica como lo es la del Estado con sus administrados. El
poder que emana de la Administración Pública, sobre todo cuando se trata de
potestades que limitan derechos fundamentales debe estar claramente regulado
y reglamentado por el ordenamiento jurídico, a fin de evitar daños ilícitos
sobre los derechos de las personas, y, en específico, sobre el derecho de
propiedad y las facultades que emanan de este, tal como podría suceder en los
casos de expropiación indirecta. Es por ello que también, como materia de la
presente investigación, es necesario dar alternativas y soluciones desde la
doctrina y normativa vigente en el ordenamiento jurídico peruano, en caso de
que la expropiación importe un daño ilícito al derecho de propiedad de las
personas y con la finalidad de que el administrado pueda ver su derecho
protegido y amparado no solo por las leyes administrativas, sino también por
la Constitución.

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