Concepto de Servicio Público-1

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Concepto de Servicio Público

Maurice Hauriou; “un servicio técnico prestado al público de una manera regular y
continua para la satisfacción de una necesidad pública y por una organización pública,”
Bielsa “toda acción o prestación realizada por la administración pública activa, directa
o indirectamente, para la satisfacción concreta de necesidades colectivas, y asegurada esa
acción o prestación por el poder de policía”
Corail “una empresa creada por las autoridades públicas y dotada de medios
exorbitantes al derecho común, en vista de dar satisfacción a una necesidad de interés
general.”

 El primer elemento que distingue a esta noción de las más antiguas es el criterio de
que ni la actividad legislativa ni la actividad jurisdiccional se considera “servicio
público” en sentido estricto; o sea, que sólo puede hablarse de “servicio público”
dentro de la actividad administrativa.
 El segundo elemento es que no toda la actividad de la administración pública
constituye servicio público, sino sólo una parte de ella.
Ahora bien, establecido que la actividad estatal sólo puede considerarse servicio
Público en ciertos casos de la actividad de los órganos administrativos, se aclara que no es
necesario que la administración misma, mediante sus propios medios y personal, asuma
la prestación del servicio público: El servicio público puede ser prestado tanto directamente
por la propia administración, como indirectamente a través de un concesionario.
“Público es el servicio... cuya gestión es asumida, ya por la administración directamente, ya
por una persona o entidad por su encargo o con su colaboración.”
La administración pública asume, con carácter excluyente, una actividad, ya sea
administrativa propiamente dicha o una actividad industrial o comercial, cuyo ejercicio estará
vedado, por consiguiente, a las personas (particulares).
Policía Administrativa
La búsqueda de la armonía en la convivencia social conlleva a que el Estado como el
directo encargado de preservar el orden público haya creado organismos que en sus diferentes
actividades se encarguen de preservar los derechos en equidad. De tal forma la policía
administrativa, es aquella autoridad que ejecuta las acciones encaminadas a limitar los actos
de los particulares por razones de interés general, manteniendo en armonía el interés público
y el interés privado.
Cuando hablamos de policía administrativa, nos referimos a la naturaleza del poder
de policía enfocado en la función administrativa que ejercen las autoridades administrativas,
cuya naturaleza limita y orienta sustancialmente la función policial.
El término "sustancialmente" nos indica que todas las intervenciones que implican la
aplicación de las normas y que no terminan en un proceso judicial, son competencia de la
policía administrativa.
Entonces, cómo la policía administrativa es la herramienta ejecutiva, que tiene
encomendado el correcto funcionamiento del orden público, es decir las condiciones que
permiten la prosperidad general y el goce de los derechos y libertades dentro de
un ambiente coherente de valores y principios.
CORTE CONSTITUCIONAL: "La policía administrativa es el conjunto de medidas
coercitivas utilizables para la administración para que el particular ajuste su actividad a un
fin de utilidad pública y lograr de esa manera la preservación del orden público".

La actividad de fomento.
Se entiende por fomento la actividad administrativa que se dirige a satisfacer
indirectamente ciertas necesidades consideradas de carácter público, protegiendo o
promoviendo y sin emplear la coacción, las actividades de los particulares o de otros entes
públicos que directamente las satisfacen.
Se trata de actos propios de justicia distributiva ya que se adjudican o distribuyen
ventajas ya sea de índole honorífica o económica pero que en todos los casos pertenecen a
los llamados bienes comunes.
Se utilizan regulaciones públicas en actividades regidas por el derecho privado, dando
origen a relaciones jurídicas donde el poder público no puede interferir en el derecho de
propiedad sobre el bien o la empresa que constituye el objeto del fomento.
El concepto de fomento reposa sobre la idea de la conveniencia de que el Estado
proteja o promueva determinada actividad de las que resulta un beneficio a la comunidad.
Implica una intervención subsidiaria del Estado que ampliación de los derechos de los
administrados, frente a una situación de insuficiencia de la iniciativa particular, estimulando
su realización por los particulares en lugar de efectuarlo directamente.
La actividad de fomento se fundamenta también en una idea principal o núcleo central
como lo es la actividad de estímulo, a través de la cual existe la posibilidad, por parte del
Estado, de incentivar, estimular o promover a través de diversas técnicas (por ejemplo,
subsidios. Subvenciones, becas, etc.), un sector de la actividad económica o social de las
persona, para que satisfagan necesidades públicas o se estimen aquellas actividades de
utilidad general.
Por tanto, el fomento es la modalidad de intervención administrativa que consiste en
dirigir la acción de las personas hacia fines de interés general mediante el otorgamiento de
incentivos diversos (R. Parada)
La publicatio
(Grado de participación del estado en la prestación de servicios públicos)
Consiste en la reserva expresa que hace el ordenamiento jurídico al Estado de una
actividad o de la titularidad de ciertos bienes. Es un requisito necesario para que la actividad
pueda ser considerada un servicio público, o para que los bienes ingresen al dominio público.
Trasladar la regulación de una determinada actividad desde el derecho privado al derecho
público, como por ejemplo que el Estado asuma la propiedad de una empresa privada”
Ello implica que no hay actividades públicas o privadas por naturaleza. No hay más
servicios públicos que aquellos que el legislador califique como tal.
Una vez "publificado", los particulares carecen de título para operar en el mismo
ámbito o sector de actividad, salvo que se lo confiera expresamente la propia administración,
en virtud de una concesión o autorización.
Peña, llama la atención sobre la cuestión de la calificación legal de ciertas actividades
como servicios públicos, refiriéndose al concepto de “publicatio” “(…) que consiste en la
legitimación para la intervención administrativa en las actividades de los ciudadanos,
intervención que en un grado de mayor intensidad pueda implicar la reserva al sector público
de un conjunto de actividades (…)” (Peña Solis, 2002: 337).
Así la “publicatio” admite ciertos matices de la siguiente manera:
Máxima: casos en los que el Estado se reserva a la administración pública tanto la titularidad
como el ejercicio de una determinada actividad. (Ej.: )
Media: la administración pública se reserva la titularidad de una determinada actividad pero
no así su ejercicio, el cual puede ser desempeñado bajo el régimen de concesiones a los
particulares. (Ej.: servicio de salud)
Mínima: casos en los cuales la administración se reserva sólo la titularidad de una parte de
la actividad (régimen de servicios compartidos) Villar (1999). (Ej.: transporte público)
Ciertamente, la calificación de una actividad como servicio público, en ocasiones no
es sencilla, por ejemplo, en el caso venezolano, la Constitución y las leyes suelen referirse a
los servicios públicos de manera muy amplia, lo que dificulta el proceso hermenéutico. Peña
Solis (2002) hace el señalamiento de que ni la Constitución de 1961, ni tampoco la de 1999
“(…) contienen disposiciones expresas que tracen o permitan trazar unos lineamientos
generales sobre servicios públicos (…)” “(…) se limitan a realizar meras referencias, en
forma coyuntural a ciertas actividades, calificándolas como servicios públicos” (Peña Solis,
2002: 322-323).

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