Filosofía Del Espacio y El Tiempo
Filosofía Del Espacio y El Tiempo
Filosofía Del Espacio y El Tiempo
La filosofa del espacio y el tiempo es la rama de la filosofa que trata de los aspectos
referidos a la ontologa, la epistemologa y la naturaleza del espacio y el tiempo, lo que se
conoce tambin como cosmologa filosfica. Si los problemas vinculados al espacio y al
tiempo tradicionalmente han sido centrales en los sistemas filosficos, desde
los presocrticos hasta Bergson y Heidegger, la llamadafilosofa analtica o positivismo
lgico, en ejercicio de su crtica del mtodo cientfico y la metafsica tradicionales, los ha
estudiado con particular inters desde sus comienzos.
ndice
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1Cuestiones bsicas
2Modelos histricos[1]
o
2.1En la Antigedad
3Realismo y anti-realismo
4Absolutismo y relacionismo
o
4.1Leibniz y Newton
4.2Mach
4.3Einstein
4.3.1Espacio y tiempo
5Convencionalismo
6.3Estructuras histricas
7.1Solucin de la causalidad
7.2Solucin de la termodinmica
7.3Solucin de la no simetra
9Dualidades en fsica
10Presentismo y eternalismo
11Endurantismo y perdurantismo
12Bergson y el existencialismo
13.1Henri Poincar
13.2Kurt Gdel
13.3C. G. Jung
13.4Norbert Elias
13.5Ilya Prigogine
13.6Stephen W. Hawking
14Referencias
15Notas
16Vase tambin
17Enlaces externos
Cuestiones bsicas[editar]
Aunque no se limita a ellas, la filosofa del espacio y el tiempo se ocupa de las siguientes
cuestiones:
Cmo se explica el flujo incesante y unidireccional del tiempo (la flecha del tiempo).
Busto de Aristteles.
Los conceptos de universo, espacio y tiempo, tal y como hoy los entendemos, tienen su
origen en los grandes pioneros de la ciencia surgidos en la poca renacentista,
losKepler, Galileo y Francis Bacon, quienes abrieron camino, con el
sustento racionalista de Descartes, a los grandes tericos de la materia en la Era Moderna.
El siglo XIX[editar]
Una de las aportaciones ms importantes realizadas al estudio del tiempo en el siglo XIX
es obra de F. W. J. Schelling, una de las figuras relevantes del llamado idealismo alemn.
La obra clave para el estudio de esta cuestin en este filsofo es Las edades del
mundo (Die Weltalter), un texto que no fue publicado en vida del autor y del que tenemos
tres versiones muy similares (de 1811, 1813 y 1815) aunque diferentes en algunos
aspectos importantes. En este trabajo Schelling pretende conocer el tiempo premundano
(vorweltlichen Zeit), es decir, el tiempo anterior a la creacin del mundo. Sin embargo, esto
no es posible porque no tenemos fuentes directas; utiliza, por lo tanto, fuentes indirectas;
estas consisten en el autoconocimiento del ser humano (mtodo antropomorfista) y en
discursos divinos revelados, bsicamente en el Antiguo Testamento. Su investigacin le
lleva a la conclusin de que el verdadero pasado es el pasado anterior a la creacin del
mundo y el verdadero futuro es el postmundano.6 Defiende un concepto orgnico del
tiempo, donde cada ser posee su propio tiempo interno y critica una concepcin objetivista
de la temporalidad.7 Su estudio del tiempo debemos situarlo dentro de una concepcin
teolgica, ya que identifica el pasado con el Padre, el presente con el Hijo y el futuro con el
Espritu; elabora, de esta forma, un sistema trinitario que se identifica con cada una de las
manifestaciones de la divinidad defendidas por la religin cristiana.
El eterno retorno[editar]
El concepto circular del tiempo, muy extendido, como se ha visto, en todas las pocas y
regiones, tiene sus races, por una parte, en las ideas
de eternidad e inmortalidad delAntiguo Egipto, donde el escarabajo era
considerado smbolo de la renovacin eterna de la vida. El modelo de universo cclico es
tambin muy importante dentro de las doctrinas orientales hinduista y budista, a travs de
su nocin de la rueda de la vida o samsara, que representa un ciclo sin fin de nacimiento,
vida y muerte, del cual es necesario liberarse.
Estas ideas fueron retomadas en Occidente por los filsofos pitagricos y estoicos, entre
otros. En el Renacimiento los alquimistas representaban el ouroboros, el smbolo por
excelencia de la eterna repeticin.
La repeticin incesante fue esgrimida por pensadores muy posteriores como Giambattista
Vico, con su teora de los cursos y recursos (ciclos) interminables de la historia, yFriedrich
Nietzsche, con su concepto del eterno retorno de lo idntico, en el que, a diferencia de la
visin cclica del tiempo, no se trata de ciclos ni de nuevas combinaciones en otras
posibilidades, sino de que los mismos acontecimientos se vuelven a repetir en el mismo
orden, tal cual ocurrieron, sin posibilidad de variacin.
El pensamiento de que esta vida, tal como la hemos vivido, tendr que ser revivida otra vez, y una
cantidad innumerable de veces, que no habr nada nuevo y que tanto las cosas ms grandes como
las ms pequeas volvern para nosotros en la misma sucesin y en el mismo orden, este
pensamiento es tal que puede sumir en la desesperacin al hombre aparentemente ms fuerte. [y
sin embargo] hay que alcanzar la voluntad de querer que retorne todo lo que ya ha sucedido, de
querer en lo sucesivo todo lo que acontecer. Hay que amar la vida y a nosotros mismos ms all
de todo lmite para no poder desear otra cosa que esta eterna y suprema confirmacin. 8
Cientficos actuales como John Richard Gott, con su teora de los universos
autogenerados, Roger Penrose, con su cosmologa cclica conforme, Peter Lynds que
supone la repeticin infinita del tiempo, y Henri Poincar, con su teorema de la recurrencia,
contemplan, cada cual a su manera, una visin circular e interminable del tiempo y el
universo que viene a coincidir llamativamente, en lo fundamental, con la de las culturas
antiguas.
Realismo y anti-realismo[editar]
La dualidad realismo-idealismo es heredera de algunas de las ideas mencionadas
anteriormente. Una postura tradicional del pensador realista en ontologa es que el tiempo
y el espacio tienen una existencia aparte de la mente humana. El idealista, en cambio,
niega o duda de la existencia de los objetos con independencia de la mente. Algunos
antirealistas que a pesar de serlo mantienen el punto de vista ontolgico de que los objetos
fuera de la mente existen, dudan sin embargo de la existencia independiente del tiempo y
del espacio.
El filsofo idealista alemn Immanuel Kant, en su obra central y ms conocida, Crtica de
la razn pura, describi el tiempo y el espacio como formas puras a priori de la
sensibilidad: se trata no de conceptos, sino, en efecto, de formas de la sensibilidad que
suponen condiciones apriorsticas, o necesarias, para cualquier posible experiencia, ya
que posibilitan la percepcin de los sentidos. (Su funcin es complementada por
las categoras, nociones tambin a priori, como causalidad, sustancia, etc., que permiten
que comprendamos lo que percibimos con los sentidos.) Para Kant, ni el espacio ni el
tiempo se conciben como sustancias, sino que ms bien se trata de elementos de un
armazn o estructura sistemticos que utilizamos para organizar nuestra experiencia. As,
las medidas espaciales se utilizan para cuantificar hasta dnde se encuentran los objetos
separados, y las medidas temporales para comparar cuantitativamente el intervalo entre (o
la duracin de) los acontecimientos.
Otros idealistas, tales como J. M. E. McTaggart, en su controvertida obra Unreality of
Time (La irrealidad del tiempo) han mantenido que lo que entendemos por "tiempo" es una
simple ilusin (vase El flujo del tiempo, ms abajo).
Los autores propuestos aqu son en su mayor parte realistas en el sentido aludido. Por
ejemplo, el filsofo Gottfried Leibniz sostuvo que lo que l denomin mnadas exista
independientemente de la mente del observador.
Absolutismo y relacionismo[editar]
Leibniz y Newton[editar]
La gran discusin se establece a la hora de definir las nociones de espacio y
de tiempo como objetos verdaderos por s mismos (absolutismo), o si su existencia
depende de la de otros objetos reales (relacionismo o relacionalismo). Comenz entre los
fsicos Isaac Newton (a travs de su portavoz, Samuel Clarke) y el mencionado Gottfried
Leibniz, y se encuentra recogida en el archivo de la correspondencia Leibniz-Clarke.
Discutiendo contra la posicin del absolutismo, Leibniz propone una serie de experimentos
mentales a fin de demostrar que es contradictorio afirmar la existencia de hechos tales
como localizacin y velocidad absolutas, con lo que se anticip en casi 250 aos a las
tesis fundamentales de la fsica moderna. Estas discusiones tienen mucho que ver con dos
principios centrales de su filosofa: el principio de razn suficiente y la identidad de
indiscernibles. El principio de razn suficiente sostiene que de cada hecho hay una razn
que es suficiente para explicar de qu manera y por qu razn es tal cual es, y no de otra
manera distinta. La identidad de indiscernibles indica que si no hay forma de demostrar
que dos entidades son diversas entonces son una y la misma cosa (o dicho de otra
manera, dos objetos son idnticos, o el mismo, si comparten todas sus propiedades).
Leibniz propone en su ejemplo dos universos distintos ubicados en el espacio absoluto. La
nica diferencia perceptible entre ellos es que el segundo est colocado cinco pies a la
izquierda del primero. La posibilidad del ejemplo slo tiene sentido si existe una cosa tal
como elespacio absoluto. Leibniz, sin embargo, la descarta, pues, si un universo se hallase
ubicado en un espacio absoluto no tendra razn suficiente, dado que dicho universo
podra haberse hallado en cualquier otro lugar. Del mismo modo se contradira la identidad
de indiscernibles, por cuanto existiran dos universos juntos y perceptibles en todas sus
formas e indiscernibles uno del otro, lo que es una contradiccin en s mismo.
La rplica de Clark (y Newton) a Leibniz viene reflejada en el llamado "argumento del
cubo" (bucket argument): al llenar de agua un cubo colgado de una cuerda y dejarlo
reposar, se observar que la superficie del agua ser plana, pero si se hace girar el cubo
sobre s mismo la superficie se volver cncava. Si se detiene el giro, el agua continuar
girando libremente en su interior, y mientras que las vueltas continen la superficie seguir
siendo cncava. Dicha superficie cncava no es al parecer atribuible a la interaccin del
cubo y el agua, puesto que el agua es plana cuando el cubo est quieto, llega a ser
cncava cuando comienza a girar y lo sigue siendo cuando el cubo queda inmvil.
En esta respuesta, Clarke afirma la necesidad de la existencia del espacio absoluto para
explicar fenmenos como la rotacin y la aceleracin, los cuales no es posible explicar con
argumentos puramente relacionistas. Clarke arguye que puesto que la curvatura del agua
ocurre en el cubo que rota