Es cierto que nuestros pensamientos nos juegan malas pasadas. Cuando menos te lo esperas estás preocupado por miles de cosas, si no es una es otra.Y cuando resuelves algún asunto importante que te tenía loco la cabeza surge otro que lo reemplaza. El caso es que la mente no descansa, está ansiosa por cavilar, por hacer lo único que sabe hacer: pensar y pensar. Ante esto se me ocurren dos soluciones: tratar de parar el pensamiento o tratar de enfocarse hacia los pensamientos positivos.
Hoy me vi por un instante pensando en que sentido tiene la vida para una persona de 46 años, pasas revista a lo que haces, lo que has hecho, lo que puedes hacer, lo que te queda por hacer, lo que eres, como eres y como no eres y cientos de preguntas que no habría tiempo ni espacio para contestar. ¿Y para que tanta pregunta? ¿Porque tanta pregunta?.
Hay está nuestra mente y nuestro pensamiento, siempre incansable. Gracias que mi tendencia a la pereza me dice que me olvide de pensar, que me relaje y que sienta el momento presente, lo que fue ya pasó y lo que vendrá no existe ahora.
13 comentarios:
Sabia conclusión esa de relajarse y vivir el momento presente.
El corazón no puede dejar de latir, como el pulmón no puede dejar de respirar y la mente no puede parar de pensar; pero no somos el latido, ni somos la respiración y por tanto no somos los pensamientos, aunque esto último si que tenemos la torpeza de caer con bastante freceuencia y creernos que somos nuestros pensamientos.
Cada cual se buscará sus trucos y sus recursos para gestionar su propio laberinto, pero yo en concreto suelo fijarme en la naturaleza para quitarme capas de la cebolla. Cuando veo a un pájaro, veo que el pájaro nace pájaro, crece pájaro y muere pájaro y en todo ese bagaje de pájaro es feliz o se siente realizado, yo en cambio nazco persona, crezco queriendo ser infinidad de cosas y dejando en un segundo o tercer plano mi percepción original de persona y veo que si no pongo remedio moriré haciendo balance de la cantidad de logros que he alcanzado o de las frustraciones que aguanto por los no logros, pero continuando en ese obviar ese ser persona que fue mi origen. Creo que, sin duda para ser felices y realizarnos, debemos fijarnos en la esencia, que es como el cuerpo para el traje, de nada sirve el mejor traje del mundo si no tiene cuerpo que lo rellene.
El eterno instante del ahora.
Viver éste ahora, disfrutar este momento, este soplo de vida. Todo tiene un ritmo. Yo pienso que nosotros somos los creadores de nuestra vida. Somos grandes actores. ¿Porqué crear momentos desagradables?.
Besos y amor
je
PD
ni buscar cinco patas al gato.
Ni marear la perdiz, etc, etc...
Hola Chencho.
"Gracias que mi tendencia a la pereza me dice que me olvide de pensar, que me relaje y que sienta el momento presente, lo que fue ya pasó y lo que vendrá no existe ahora".
Esto no es pereza es sabiduria.
Namsté
Pensamos mal cuando el pensamiento no es productivo. Como dice E. Tolle, hay que pensar para resolver los aspectos prácticos de nuestra vida, pero no para atormentarnos.
Así que, hay que economizar el pensamiento... o llevarle a la acción y a lo dvertido ;-)
No somos el pensamiento, sino el pensador del pensamiento, pero parece que no acabamos de creérnoslo ¿verdad?
Hola Chencho!
Me has dejado sin palabas como te digo en mi blog; y por cierto, te invito a que leas la contestación que ahí te he dejado. Te agradezco muy de veras tu sinceridad; me has llegado.
Y mira, al leer este post, pues decirte que precisamente ahí está la importancia de la Meditación, porque dedicar un tiempo a serenarse te va suavizando esos pensamientos que van de acá para allá sin saber donde aposentarse. Es verdad que cuando uno inicia su tiempo de meditación (especialmente si tiene problemas en ese momento) suele resultar duro y ganas dan de dejarlo porque los pensamientos no te dejan de bombardear, pero si continúas... las cosas van aclarándose y simplificándose sobremanera.
Por favor, me gustaría que le expresaras a tu hermana mi agradecimiento por esas lindas palabras con las que me define: ¡ay qué curiosidad por conocerla!
Un fuerte abrazo
Saddha: gracias por pasarte por aquí y dejar tu propia esencia.
Sede: Cierto, es como marear la perdíz.
Sankaradas: me alegra tu presencia.
Concha: Tienes razón, no terminamos de creer o habituarnos a controlar nuestros propios pensamientos. Aprecio mucha tus comentarios y más ahora que estás ocupada con tu libro.
Vivir el momento intensamente...
sabio aprendizaje ese para el alumno sabio que verdaderamente quiera aprenderlo...!
Me ha encantado tu post, Chencho.
Un abrazo.
Lo mejor que encontré después de liarme mucho....de pensar y repensar..., es vivir el aquí, ahora...intentar interesarme y ser atento en cada acción que surge, aunque sea limpiar la vajilla, el suelo, o cosas que no nos gusta mucho...y lo demás...sobra. Es ahora que hacemos mañana.
Pensar solo sirve un rato para evaluar, pero luego ACCIÓN...ATENTA. La mente es muy poderosa, puede ayudarnos o machacarnos mucho...según si la utilizamos o nos dejamos utilizar por ella...
Un gran abrazo zen amigo, mucha fuerza, mucho no pensar, y buen fin de semana!
la mejor solucion no viene del pensamiento cotidiano
saludos!
De la misma forma que otras funciones de nuestro organismo son automaticas y no les otorgamos ninguna importancia, el pensamiento como actividad cerebral, se convierte en algo que deseamos controlar.Por esoo, el sueño es reparador. Cese de la actividad cerebral, controlada.Dejemos de pre-ocuparnos, dejemos de pre-sentir.
Saboreemos todas las reflexiones anteriores,que han despertado nuevos pensamientos, y vamos a transformarlas en sentimientos y energia universal.
Lucero
Gracias por sus comentarios.
Un abrazo.
Chencho,
Te dejo mi nueva dirección http://refugioespiritual.wordpress.com/
He tenido algunos inconvenientes...Ahí explico lo que ha pasado.
Besos.
Andrea.
Cuanta verdad hay en tus palabras Alejandro.
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