Historia de dos ciudades

Historia de dos ciudades Fernando Aliata 10 A fines del milenio la inauguración del comple- Caraffa, conformando un atractivo polo cultural. tamiento de la Catedral de La Plata cerró un ci­ También Rosario en un largo proceso de cohe­ clo en el cual el gobierno provincial de Eduardo rente continuidad de políticas públicas que lleva Duhalde se había propuesto construir y fina­ más de 30 años, promovió la realización de los lizar una serie de obras para la jerarquización ya conocidos centros barriales con la participa­ de nuestra ciudad. La parcial terminación del ción de prestigiosos arquitectos de renombre Teatro Argentino y la construcción del Estadio Único marcaban, juntamente con la Catedral fi­ internacional y la extensión y reorganización de los parques costeros que cambiaron la cara nalmente concluida, la voluntad de dar realce de la ciudad y generaron nuevos polos de cre­ edilicio a una ciudad que es nada menos que cimiento e inversión. Santa Fe se destacó por la capital de la provincia más importante de la la construcción de “El Molino Fábrica Cultural" Argentina. Algunos proyectos luego no ejecuta­ con la reutilización de los paraguas, de Amando dos como el Museo de Ciencias en el predio de Williams y una serie de obras de equipamiento la Comisión de Investigaciones Científicas (CIC) coordinadas por Mario Corea Aiello que no sólo de Gonnet o la ampliación del Museo de La Pla­ abarcaron la ciudad capital sino otras ciudades ta a partir del imaginativo proyecto de Vicente y pueblos de la provincia. Aún una capital pro­ Krause -que en su momento fue publicado por vincial mucho más pequeña como Posadas, esta revista-, completaban un circuito que ten­ conjuntamente con la nueva costanera realiza­ día, tal vez desde la tan novedosa por entonces da por el ente binacional Yaciretá, inauguró un noción de “marca ciudad”, a imaginar que po­ atractivo centro cultural y la remodelación radi­ dría instaurarse la ¡dea de un nuevo futuro posi­ cal de su Legislatura. ble para La Plata en el concierto nacional. En La Plata en cambio, las mediocres adminis­ El período posterior, matizado por el equívoco traciones municipales sospechadas de corrup­ proyecto de “La Plata patrimonio de la huma­ ción, las mezquinas miras de una clase política nidad" presentado ante la UNESCO y objetado envuelta en un cortoplacismo electoralista mar­ dos veces por esta institución, marcó el inicio de caron los inicios del siglo XXI. No hubo nuevos un franco descenso de las expectativas que la edificios, no hubo obras de infraestructura, no ciudad y su clase política habían desarrollado hubo arquitecturas perdurables para celebrar el durante la década de 1990. El vertiginoso perío­ bicentenario, no hubo ¡deas que pudieran amal­ do de bonanza kirchnerista no alcanzó a La Pla­ gamar a los platenses en un proyecto común ta y si bien hubo algunas obras desarrolladas de ciudad. La administración Bruera se limitó a en principio desde la administración del gober­ reacondicionar algunas plazas con elementos nador Solá, la mayoría de ellas quedaron en los de dudoso gusto y precaria duración. papeles y la ciudad pareció invisibilizarse cada De todos modos no podemos achacar el pro­ vez más en el contexto nacional; sobre todo en blema a la sucesión de mediocres e inactivos relación a lo que sucedía contemporáneamente gobiernos municipales, la cuestión resulta más en otras ciudades importantes de la República. compleja. Algunos factores involucran a la mis­ Durante los años que siguieron a la crisis del ma estructura política de la Provincia y explican 2001, Córdoba inauguró una nueva sede de la ausencia de una gestión urbana y un proyecto gobierno, tras la demolición de la antigua para distintivo para la ciudad. La falta de recursos no generar un nuevo espacio urbano, una nueva sería una excusa en los años dorados del kirch- terminal de ómnibus contigua a la existente, así nerismo que tan bien supieron aprovechar otras como edificó su Centro Cultural Córdoba con capitales provinciales, sino en la manera en que salas de exposiciones, una nueva sede para el se maneja la organización del Estado Federal archivo provincial y la ampliación y refunciona- en la Argentina y en el fenómeno del conurbano lización de los dos sitios de arte más importan­ y su relación con nuestro territorio. Al desligarse tes de la ciudad: el palacio Ferreyra y el Museo la ciudad de Buenos Aires de la administración Figura 1. Centro Cívico del Bicentenano, Córdoba. GGMPU arquitectos y Lucio Morirn asoc. 2010. (Fotografía Adrián Mallol i Moretti). Figura 2. Ampliación del Museo Provincial de Bellas Artes Emilio Caraffa. Córdoba. GGMPU arquitectos y Lucio Morim asoc. 2007. (Fotografía Adrián Mallol i Moretti). Figura 3. Palacio Ferreyra, Museo Superior de Bellas Artes Evita, Córdoba. GGMPU arquitectos y Lu­ cio Morím asoc. 2007. (Fotografía Adrián Mallol i Moretti). 11 Figura 4. Centro Cultural de Córdoba, Córdoba, A. Cohén, I. Castañeda, I. Saal, J. Salassa, C. Nanzer y S. Tissot., 2014. (Fotografía A. Cohén) Figura 5. Centro Municipal Distrito Sur R. Ziperovich, Rosario, Á, Siza, 2002. (Fotografía del autor). Figura 6. El Molino, Fábrica Cultu­ ral, Santa Fe, M. Corea, Quijano, S. Codina, Lleonart, 2010, (Fotografía L.Muller). 12 de su periferia y delegarla en la Provincia, ha de las áreas afectadas por el emprendimiento; ¡do generando a lo largo del tiempo una estruc­ una oportunidad más perdida. tura de poder provincial que mira fundamental­ No es casual frente a esta situación general de mente a esta segunda metrópolis que rodea a desidia y desinterés del poder político en rela­ la capital nacional. No es difícil comprobarlo, ción a nuestra ciudad, sean cada vez más co­ la provincia muchas veces parece gobernarse mentados los proyectos que tienden a dividir la desde el conurbano y para el conurbano. Los provincia en varios distritos, ya que este tipo de gobernadores provienen de allí y la lógica de su administración sesgada hacia la periferia porte­ accionar está profundamente ligada a las cre­ ña, no representa a los bonaerenses y mucho cientes necesidades de un sector en el cual se menos a los platenses, ni parece tener capaci­ alojan los bolsones más pobres de la República, dad para gobernar efectivamente este extenso y pero también el grueso del electorado que pue­ complejo territorio. de decidir una elección. Prueba de ello es que Estas son en definitiva culpas o explicaciones los gobernadores, sean del signo político que externas del problema, pero las hay también pro­ sean, no viven generalmente en La Plata y no pias de la evolución de la política local. Es que parecen interesados mayormente en la ciudad. la acción sobre la ciudad parece dividirse entre La residencia del gobernador es un espacio va­ dos campos contrapuestos, entre dos ciudades cío y sería bueno hacer un cálculo del tiempo confrontadas que comparten un mismo territorio. que los mandatarios pasan residiendo en la -Por un lado, la Universidad Nacional de La Pla­ ciudad durante su mandato; seguramente muy ta, la tercera universidad pública del país que poco. La ausencia de esta presencia de peso durante este período ha vivido uno de las eta­ específico de la ciudad en la acción guberna­ pas más ricas y expansivas de su historia, a la tiva permite que aún el Banco de la Provincia que podemos denominar como una “década tenga su sede y su directorio “Casa Central” en ganada”. A partir de una política constante y una la de Capital Federal que sirve muchas veces seria planificación, la universidad se ha expan­ de despacho de gobierno para el mandatario dido, ha fundado nuevas carreras y facultades, de turno, relegando la "Casa Matriz” platense a ha ampliado su parque edilicio construyendo el un segundo plano. Que Astilleros Río Santiago, nuevo campus para las Facultades de Humani­ una de las empresas estatales más importantes dades y Psicología en el ex Batallón de Infante­ de nuestra región, se gerencia desde la city por­ ría de Marina N° 3 (BIM 3), la ampliación de las teña y que hoy navegue en el desinterés la úni­ instalaciones del Departamento de Educación Figura 7. Reestructuración del Edi­ ficio de la Cámara de Represen­ tantes de la Provincia de Misiones, A. E. Rodríguez. Posadas, 2013. (Fotografía del autor). ca obra que el gobernador Scioli pensó para la región capital: la modernización y reactivación del Puerto La Plata. Podríamos también desde esa perspectiva entender por qué el ferrocarril eléctrico -que todavía no ha llegado a la capi­ tal provincial- demoró más de cincuenta años o porqué la conexión Buenos Aires- La Plata por medio de una autopista fue la última en realizarse cuando todas las áreas cercanas a la metrópoli tenían desde muchos años antes una conexión ferroviaria y automotor acorde con la escala de la macro región metropolitana, así como un aeropuerto casi inexistente que por la jerarquía de la ciudad debería ser un tercer aeropuerto alternativo a Ezeiza y Aeroparque. Avanzando en el tema de la infraestructura, más allá de nuestra inicial intención de hablar de la arquitectura representativa y no de los problemas globales de la ciudad, podemos ar­ gumentar, en contrario de estas afirmaciones, el conjunto de obras hidráulicas en realización para alivianar el efecto de las inundaciones. Pero éstas obedecieron a una cuestión coyun- tural: tuvo que desatarse la trágica lluvia del 2 de abril de 2013 para que las autoridades mu­ nicipales, provinciales y nacionales tomaran con seriedad un problema que los expertos ve­ nían anunciando desde hacía muchos años y allí tampoco hubo ideas para que, a partir de las obras de canalización del Arroyo del Gato, se generara un tratamiento paisajístico o un parque lineal que podría haber potenciado el desarrollo 13 Nota 1. Fernando Gandotfi/ Eduardo GentHe, “Ni muros áridos, ni calles rectas. El espacio de la Universidad de La Plata 1897/1975", Revista47a!fondo, n.° 1.1997 pp. 10-17. 14 Física, así como las de la Facultad de Odontolo­ que hace realidad nuevos sueños, que admi­ gía; los nuevos edificios para las facultades de nistra sus recursos con inteligencia, ofrece un Informática, Trabajo Social, Bellas Artes y Perio­ fuerte contraste con la ciudad capital descapi­ dismo; también el único edificio cultural de im­ talizada, sin ¡deas, sin recursos genuinos con un portancia realizado durante el período: el nuevo poder político que se desentiende de su destino, Planetario y la única obra construida en ocasión que no puede mirar más allá del cortoplacismo. del Bicentenario: el pasaje urbano que integra la Por supuesto que hay que entender que ambas antigua sede de la Presidencia del originalmen­ ciudades tienen un modo de organización polí­ te denominado edificio Tres Facultades (Huma­ tica diverso y también diversos niveles de com­ nidades, Derecho y Ciencias Económicas) en el plejidad, pero el contraste entre una y otra es centro de la ciudad. demasiado significativo. También entendemos -Por otro lado, la capital provincial con su po­ que ambas estructuras institucionales no han der municipal y el poder provincial que, como marchado siempre por carriles distintos. Duran­ ya anticipamos, en los últimos años no han in­ te las últimas dos décadas hubo funcionarios tentado construir ninguna política urbana, algo que de buena fe intentaron un acercamiento que parece prolongarse con la actual adminis­ entre el poder político municipal y provincial a tración de “Cambiemos”. La ausencia de con­ partir de la firma de convenios, asesorías que tinuidad de proyectos incumplidos como el de oportunamente fueron solicitadas a la Universi­ la terminal ferro automotor -para la cual hubo dad, pero no han bastado para establecer una un concurso nacional en 2002-, la peatonaliza- alianza duradera y sólida. Todo ha demostrado ción de algunas calles, la construcción de bici ser demasiado poco, como lo prueba la trágica sendas, la restauración arbórea y de las vere­ jornada del 2 de abril de 2013, la historia de una das urbanas abandonadas a su suerte, son una aciaga catástrofe anunciada que obligó por un clara demostración de ello y comprueba la falta momento al poder político a mirar hacia esta de decisiones para generar nuevos proyectos ciudad e intentar comenzar a realizar las inelu­ e iniciativas arquitectónicas. Al mismo tiempo, dibles obras hidráulicas que la capital provincial si hubo una política en los últimos años, ésta necesita para encarar su futuro. fue en contra de los intereses comunitarios. La ¿Qué desafíos urbanos presenta La Plata? administración Bruera sólo se interesó desde ¿Qué proyecto de ciudad queremos los platen- sus inicios por fomentar el crecimiento edilicio ses para el siglo XXI? ¿Cuáles son las posibili­ a partir de la modificación del Código de Orde­ dades de construir una nueva identidad urbana namiento Urbano, excluyendo del debate a la que nos dé un nuevo protagonismo en el con­ Universidad y a los colegios profesionales, para cierto nacional? Frente a estas preguntas, fren­ fomentar una brutal especulación que desesti­ te al complejo diagnóstico que hemos intenta­ mó cualquier esfuerzo por la salvaguarda pa­ do esbozar aquí, el número de nuestra revista trimonial y generó una controversia, todavía no quiere ofrecer la experiencia de tantas investi­ saldada, con la Suprema Corte Provincial. gaciones, ejercicios de proyecto, actividades Si las analizamos en conjunto, las dos ciudades de extensión que proponen como tema a la conviven en un mismo territorio y no pueden ser ciudad y su región. Trabajos que los estudian­ más distintas. Por un lado, la universidad como tes y docentes de la Facultad hemos realizado utopía comunitaria que como afirmaron Fer­ durante los últimos años con una conciencia nando Gandolfi y Eduardo Gentile en un artículo crítica acerca de los problemas y los temas que publicado en el primer número de esta revista, hemos enumerado. nació como un huésped impensado en la ciu­ Nuestra aspiración es poder construir un ca­ dadanía planificada1. No había espacios para mino de convergencia, contribuir con nuestro la universidad en el proyecto de Dardo Rocha, modesto esfuerzo técnico - cultural para que tal la novel institución se abrió paso y comenzó a vez en un futuro no tan lejano, las propuestas darle a la ciudad un sentido y una identidad que que el mismo Estado produce en una universi­ se ha acrecentado con el paso del tiempo. Una dad pública sean escuchadas por los poderes utopía de “ciudad del saber” amplia e inclusiva públicos. Propende a que todo el caudal de co­ con sus virtudes y defectos que conocemos to­ nocimientos, de saberes, de ¡deas y proyectos dos, pero con una constante fuerza y creativi­ que propone la Universidad -y no sólo la cons­ dad, con una dinámica que mueve diariamente trucción de edificios significativos en que nos el quehacer de sus casi 120.000 “habitantes". hemos detenido al inicio del artículo- sean un Por el otro, la ciudad capital que perdió una dé­ todo con las necesidades de la región capital de cada, que muestra su decadencia edilicia fren­ la provincia. Entendemos que los modos y los te a otras ciudades aún de menor magnitud e caminos para efectivizar su realización pueden importancia; sin proyectos, sin posibilidad apa­ ser diversos y acomodarse a las distintas alter­ rente de coordinar sus fuerzas vivas, hundida en nativas políticas que la Democracia nos ofrece, una crisis de identidad, en un constante y estéril pero las bases de sustentación, las tareas a rea­ enfrentamiento de sus facciones políticas. lizar para darle a esta ciudad soñada el destino Por lo tanto, la civitas universitaria que nació en que se merece pueden y deben acordarse entre el campus del Bosque y creció constantemente, todos. ■ Figura 8. Parque del Conocimiento, Posadas. A. E. Rodríguez. 2007. (Fotografía del autor). Figura 9. Planetario de la Plata, campus UNLP, Murace. San Juan, Santinelli. Ruiz y Wlllemoés. (Foto­ grafía del autor). Figura 10. Nuevo campus de las Facultades de Humanidades y Psicología. UNLP Secretaria de Obras. Planeamiento y Servicios UNLP (Fotografía del autor) 15