He pasado unos días haciendo senderismo por Eslovenia y Croacia. Eslovenia, una pequeña Suiza en cuanto a paisaje, Croacia superando su história, de crueles enfrentamientos etnicos recientes. He estado en la costa norte, las islas de Cres, playas y paisajes todavía no contaminados por la masificación turística. La gente amable en ambos países.
El primer día cuando estábamos ascendiendo hacia el Rodica, en uno de los descansos me olvidé mi máquina fotográfica. Cuando me di cuenta estaba muy alejada del lugar y ascendiendo, imposible, para mí, volver a buscarla. El guia me comentó aquí la gente es noble, los que vienen a la montaña más. Es posible que la encuentres abajo, en información. Aunque mis esperanzas de recuperarla eran pocas, pensé, sería bonito que así fuese.
Aunque desgraciadamente, nosotr@s cuando nos encontramos algo de valor, no somos todo lo honest@s que deberíamos. Que la ciudadanía de un país sea educada en estos valores y responda, tiene mucho valor, pensé. Llegamos y la oficina estaba cerrada, había que volver al día siguiente. La ruta del día siguiente, también muy dura no nos permitió llegar a la hora, también estaba cerrada. La esperanza se mantenía, pero al día siguiente continuábamos ruta. Abrían a las 8h. de la mañana, nos íbamos a las 8:30h. el guía se ofreció para subir a las oficinas, no muy lejos del hotel, así lo hizo. Cuando volvió, me dijo, lo siento había una pero no era, por las indicaciones que le había dado, la mía. El sueño se desvaneció, es difícil aplicar la máxima no hagas a los demás aquello que no quieres que te hagan, sería tan bonito que actuásemos, la sociedad occidental que comparte este principio, según este principio, pero la teoría y la práctica, casi siempre tan lejanas una de otra que piensas, que pena que lo fastidiemos todo!
