“No olvides que es comedia nuestra vida

y teatro de farsa el mundo todo

que muda el aparato por instantes

y que todos en él somos farsantes;

acuérdate que Dios, de esta comedia

de argumento tan grande y tan difuso,

es autor que la hizo y la compuso.

Al que dio papel breve,

solo le tocó hacerle como debe;

y al que se le dio largo,

solo el hacerle bien dejó a su cargo.

Si te mandó que hicieses

la persona de un pobre o un esclavo,

de un rey o de un tullido,

haz el papel que Dios te ha repartido;

pues solo está a tu cuenta

hacer con perfección el personaje,

en obras, en acciones, en lenguaje;

que al repartir los dichos y papeles,

la representación o mucha o poca

solo al autor de la comedia toca.”

 

Fragmento de la obra de Quevedo  “Epicteto y Phocílides en español con consonantes” (1.635), considerada por muchos estudiosos como la fuente directa del tema de “El Gran Teatro del Mundo” (1.655) en Calderón de la Barca, auto sacramental y exponente del maravilloso barroco español...