Estoy
mosqueada: en los últimos días parece que no tengo derecho a vivir. ¿Pero qué
está pasando? ¿Cuándo dejé de ser una joven prometedora y pasé a ser una paria
social?
Mi
primer hándicap es la ausencia de hijos. Ni tres, ni dos, ni uno. Cero hijos, cuestión
ésta que trae a mi madre por la calle de la amargura (sólo la ausencia de novio
supera su preocupación por éste asunto) y que a algunos individuos les da
derecho a decidir que no tengo derechos que son… ¡casi inherentes a la persona!
Esta tarde he ido a comprar regalitos para mis sobrinos
(porque de eso sí que tengo, y en un número en continuo in crescendo) y en cierta tienda (no, no trates de sonsacarme, no
diré su nombre) me han ido a hacer una tarjeta de cliente con la que iba a
tener un montón de descuentos.
—… y
podrás acumular puntos y cuando… —me ha dicho la chica, con los ojos iluminados
de generosidad.
—¡Guay!
—la he interrumpido. No necesitaba escuchar más, ¡me encanta acumular puntos,
es uno de los mejores inventos del mundo!
—¿Cuántos
hijos tienes? —me ha preguntado, tecleando en el ordenador de caja.
—Ninguno
—¡tarjeta de puntos, bien!
—Oh, lo
siento, entonces no puedo hacerte la tarjeta —y me ha dirigido una mirada de
franca desaprobación.
Ni la
reclamación que he puesto (que merecería ganar el premio Pulitzer, créeme) (o
el Nobel de literatura) me ha quitado el disgusto.
Luego
está el asuntillo ese de que si me despiden y no puedo pagar la hipoteca, como
no tengo hijos no podré acceder a un alquiler social. Te confiaré una cosa:
esto me preocupa menos, porque vivo de alquiler y he decidido que cuando no
pueda con él iré al programa de Ana Rosa. A tomar viento.
Segundo hándicap: no soy lo suficientemente joven ni lo
suficientemente vieja.
Sí, lo
que lees. Cuando he llegado a casa he puesto las noticias y ha salido nuestro
presi anunciando nuevas medidas para fomentar el empleo, pero no medidas para
todos, no, éstas son especiales para los menores de 30 años y los mayores de
45. Ya, ya, ya… ¿Y con los que estamos en medio qué pasa? Porque tengo un leve
de recuerdo de cierto artículo de la Constitución que decía que:
Artículo 14
Los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer
discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o
cualquier otra condición o circunstancia personal o social.
¿No es una puñetera
discriminación que por tener algún añillo más de los 30 pero no haber alcanzado
los 45, no pueda tener acceso a la 'tarifa
plana' en las cuotas a la Seguridad Social de 50 euros durante seis meses para
emprendedores menores de 30 años, por ejemplo?
¿Qué quieren que haga, que me compre un carnet falso? ¿Qué no tenga necesidad
de trabajar? ¿Qué me alimente del aire? ¿¿Están llamándome gorda?? ¿¿¿Qué
pretenden???
Tercer hándicap: en estos
momentos no recuerdo el tercer hándicap. Cuando estaba bebiendo la primera copa
de vino lo tenía clarísimo, pero no sé en qué momento lo he olvidado… Creo que
ha sido entre la tercera y la cuarta copa. No importa, cuando lo recuerde te lo
contaré, aunque estoy segura de que lo que ya he escrito te ha puesto los
pelos de punta y ha hecho que grites “no hay derecho” (sobre todo lo de la
tarjeta de puntos) (¡es que no hay derecho!).
Te sigo, esto tiene muy buena pinta, revolución ante la absurda discriminación, jaja, yo igual sin hijos, y no suficientemente viejo ni suficientemente viejo. A buscarnos la vida! bs
ResponderEliminarJavier, bienvenido! Ya te digo, es que no hay derecho. Me veo buscando a quien me prepare tres carnets, uno con 28 años (dos añitos de tranquilidad; me pondría 23 para darme más margen, pero no creo que cuele...), otro con 45 y un mes (éste me encantaría que no colara :-P) y uno de familia numerosa :-)
ResponderEliminarSí, buscarnos la vida se nos da bien!
Besos!!!
y si no tienes pareja ni familia, a parte de la consabida mirada de lástima por tu miserable vida, resulta que eres incansable y no mereces consideración, "pero si es que tienes tiempo de sobra", "tú si que puedes hacerlo, si no tienes obligaciones", etc ¡ah! y un crédito ni lo sueñes, que tu mísero sueldo para ti solita no se compara con dos sueldos igual de míseros, que deben alcanzar para 5 personas ¿Quién le enseña matemáticas a esta gente?
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo, Valeria! Matemáticas, desde luego no se las enseña una "paria social"...
EliminarBesos!!!
estoy totalmente de acuerdo con lo que dices y me siento bastante identificada...
ResponderEliminarGeno, bienvenida al club de las parias sociales! :-)
EliminarDiscriminación por razón de edad, de estado civil, de estado procreador...yo de ti denunciaba, a esto no hay derecho
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