Tecnicas de Solución de Conflicto
Tecnicas de Solución de Conflicto
Tecnicas de Solución de Conflicto
CONFLICTO
LIC. Ps. MELISSA PALACIOS MENDOZA
¿Qué debemos tener en cuenta?
Reconocer que existe un conflicto
Identificar y etiquetar las emociones que genera ese conflicto (en ti y en los demás)
Identificar cuáles son la posibilidades que ese conflicto está obstaculizando (en ti y en los demás)
Entiende qué es lo peor que podría pasar si no se materializan esas posibilidades
Determina qué es lo mejor que podría pasar si se logra una solución del conflicto
Indaga a la otra parte para saber cómo está experimentando el conflicto
Crea una lista de mínimo 10 opciones diferentes para el conflicto que puedan funcionar para
todos
Analiza las diferentes técnicas de resolución de conflictos que tienes disponibles
Propicia un espacio donde puedas aplicar una de las técnicas y puedas exponer estas ideas
para co-crear nuevas soluciones
Analiza los resultados obtenidos y vuelve a comenzar si es necesario
¿Qué son las técnicas de solución de
conflictos?
Son métodos sistematizados para
resolver los conflictos de diversa índole
que se pueden dar en cualquier grupo
de convivencia: el trabajo, un barrio o
vecindad y también en los centros
escolares.
¿Cómo solucionar un conflicto?
Evita la competencia insana o agresiva: cuando una situación conflictiva gira entorno a una
competencia que no es del todo sana, lo mejor es desistir y evitar este tipo de competencia en
el futuro, pues por lo general no aporta nada positivo a ninguna de las partes involucradas.
Ponte en el lugar del otro: Esto no significa que vas a ceder ante las demandas de todos, sino
que procuras entender el punto de vista de la otra parte, para ayudar a resolver el conflicto.
Aquí podemos poner en práctica la máxima de las conversaciones efectiva: «escucha para
entender, no para responder».
Acepta la intención de otros para colaborar: Esto no significa que una tercera persona quiera
involucrarse en tus asuntos, pero cuando las dos partes no logran llegar a un acuerdo, lo mejor
es permitir que un tercero participe. Asegúrate de seleccionar un tercero que ya tenga los
resultados que estás buscando.
Retírate cuando debas hacerlo: Cuando un conflicto no parece tener solución o la otra parte
se niega a hallarla, lo mejor para ti y para tu salud es la retirada. Retirarse no significa perder,
significa evitar continuar con el conflicto.
Coopera: Ayudar y facilitar la búsqueda de una solución que pueda satisfacer a ambas partes
es posible cuando existe cooperación, de lo contrario es imposible que se dé la resolución de
conflictos.
Convierte la experiencia en algo positivo: Aunque un conflicto se trata de una situación
por lo general negativa, procura asumir una actitud positiva y convertirla en un cambio que
te permita crecer, mejorar tus habilidades o aprender algo nuevo, dejando de lado los
aspectos negativos de la confrontación.
Piensa creativamente: La vida es un campo infinito de opciones y posibilidades, si tienes la
mentalidad de que todo conflicto tiene infinitas soluciones tu mente estará buscando todo el
tiempo nuevas fórmulas que funcionen para ambos.
Separar a las personas del conflicto: Sí, sabemos que no es tan fácil como parece y por eso
te vamos a dejar una herramienta: Imagina cómo sería esa situación si cambias a todos los
actores de la reunión, imagina otras personas e identifica como cambia tu percepción de la
situación.
Conclusión
Una de las principales razones de la existencia
del conflicto es la incompatibilidad en las
interpretaciones que las partes hacen o tienen
sobre un tema o situación específica. La mala
calidad o poca capacidad comunicación y
conversación, suele ser la razón por la cual los
conflictos no solo no se resuelven sino que
empeoran.