La Extradición

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Universidad Mariano Gálvez de Guatemala

Ciencias jurídicas y sociales


Guatemala, Guatemala

Derecho internacional privado

Tema: Extradición

Catedrático: Manuel de Jesús Huite Montenegro

Grupo No. 4

Integrantes:
Monica Fernanda Solares Barillas carne: 7650189473
Ana Mishel Argueta Reynosa carné: 45502021063
Jairon Yovany Espadero Pérez Carné 6550-17-3852
Edgar Roberto cruz herrera carné 0501913024
Carlos Leonel Alvarado Orantes canrné 94591321233
La extradición
. Definición y naturaleza
Al hacer referencia a la extradición, es importante tener en cuenta los
siguientes elementos:
o El territorio de un Estado en donde se ha cometido un hecho delictivo.
o Un sujeto que ha cometido el hecho delictivo en dicho territorio.
o El territorio de un Estado extranjero, es decir, distinto de aquél en el que
se ha perpetrado el delito, y que sirve como refugio al sujeto que ha
delinquido, por lo que no puede llevarse a cabo el proceso penal
correspondiente o ejecutarse la sentencia respectiva.
Como una solución a esta problemática, existe una figura dentro del derecho
penal conocida como extradición, la cual puede definirse como "la entrega que
un Estado hace a otro Estado de un individuo acusado o condenado, que se
encuentra en su territorio, para que en ese país se le enjuicie penalmente o se
ejecute la pena."'
Los criterios doctrinarios que existen sobre esta institución han sido uniformes,
por cuanto los autores que han escrito acerca de ella la definen de una forma
muy similar.
Para otros autores, la extradición "es el acto por el cual un gobierno entrega un
individuo refugiado en su territorio al gobierno de otro país que lo reclama por
razón de delito para que sea juzgado, y si ya fue condenado, para que se
ejecute la pena o la medida de seguridad impuestas."2
Considero que la extradición es un acto jurídico-político por medio del cual un
Estado solicita a otro Estado la entrega de una persona que se encuentra
señalada de la comisión de un delito en su territorio. Es un acto jurídico en
virtud de que existen tratados internacionales y leyes internas de cada país que
regulan los requisitos de procedencia, así como los procedimientos para
tramitarla. Considero también que es un acto político, ya que es decisión del
gobierno de cada Estado involucrado concederla o denegarla.
En cuanto a la naturaleza de la extradición, algunos autores consideran que es
un "acto de asistencia jurídica internacional'', criterio que comparto en virtud de
que es necesaria la participación y colaboración de los Estados implicados para
evitar que el delito quede impune al refugiarse el sindicado en el extranjero con
el objeto de obstaculizar la efectiva aplicación de la ley penal.
El argumento expuesto encuentra su fundamento en el Artículo 344 del Código
de Bustamante, ya que de forma tácita, éste hace alusión a la extradición como
una forma de auxilio internacional al regular que: "Para hacer efectiva la
competencia judicial internacional en materias penales, cada uno de los
Estados contratantes accederá a la solicitud de cualquiera de los otros para la
entrega de individuos condenados o procesados por delitos que se ajusten a
las disposiciones de este título, sujeto a las provisiones de los tratados o
convenios internacionales que contengan listas de infracciones penales que
autoricen la extradición."

Antecedentes históricos
Se dice que la extradición tiene sus orígenes desde tiempos muy antiguos. El
derecho de asilo es considerado como el antecedente más significativo de la
extradición. El hecho de otorgarle refugio a un delincuente era sinónimo de
protección hacia éste y, a su vez, el asilo era repudiado bajo el argumento de
que únicamente lograba incentivar la comisión de hechos delictivos a nivel
universal, pues se garantizaba con aquella figura la impunidad y la protección a
los criminales y, de forma enérgica, autores como
Luis Jiménez de Asúa señalaban a los Estados que admitían esta práctica
como cómplices de estos sujetos, razón por la cual consideraba que la mejor
forma de prevenir el delito era mediante una figura que permitiera la
persecución y entrega de los criminales sin limitación alguna por razones
territoriales.4
Con esto, se evitaba que el sindicado o condenado saliera del territorio del
Estado donde había delinquido hacia el territorio de otro Estado con la finalidad
de evadir la acción de la justicia.

La extradición, como institución propiamente dicha del derecho penal, surge en


el siglo XVIII. Aunque algunos juristas sostienen que existen vestigios de esta
institución anteriores a esa época, entre los cuales haré mención de algunos
ejemplos: En Egipto, se ha hablado de un tratado estipulado entre Ramsés Il y
el principe Cheta, por medio del cual se comprometían a entregarse
recíprocamente los delincuentes súbditos del Estado peticionario, con la
condición de que este último tratara a los entregados con indulgencia. También
en Grecia, en donde el asilo eclesiástico era un obstáculo a la extradición, se
entregaba a los autores de delitos graves.5
Si bien los ejemplos anteriores hacen referencia a acuerdos celebrados entre
dos naciones para la entrega de delincuentes, considero que dichos convenios
no revisten el carácter jurídico de extradición propiamente dicha, pues los
mismos no hacen referencia a delitos de orden común cometidos en el territorio
del Estado que exigía la entrega de estos delincuentes, más bien contenían
delitos de orden moral y religioso, los cuales están excluidos de los tratados
actualmente vigentes.
En Roma, la extradición se practicaba como una forma de manifestación de
supremacía frente a los Estados dependientes, y frente a los otros, era la
satisfacción exigida por la ofensa causada al Estado o al ciudadano, e
implicaba la amenaza de guerra en caso de repulsa; se encontraba regulada
por tratados internacionales y se otorgaba siempre que se trataba de un delito
contra un Estado extranjero
También en España se hablaba acerca de la extradición desde tiempos muy
antiguos, tanto así que, según Jiménez de Asúa, el primer tratado de
extradición conocido con verdadero carácter de tal, es el celebrado en 1360 por
el Rey de Castilla, Pedro I, con el Rey de Portugal para la recíproca entrega de
caballeros condenados a muerte y refugiados en ambos reinos. Los Reyes
Católicos, por Pragmática de 20 de mayo de 1499, convinieron también con
Portugal un acuerdo relativo a la entrega de los delincuentes que mataban con
ballesta o con fines de robo, de los salteadores de caminos y autores de delitos
análogos. De igual forma, por Pragmática de 29 de junio de 1569, Felipe ll
pactó otro convenio con Portugal relativo a los delitos de lesa majestad, robo y
hurto, rapto, homicidio ejecutado con ballesta, arcabuz y escopeta, y
quebrantamiento de cárcel.'
En el siglo XVIII, como he mencionado, la extradición cobró mayor auge; y en
aquellos tiempos, los delitos políticos fueron el objeto principal de las primeras
extradiciones de la época, aunque más tarde estos delitos fueron eliminados de
los tratados de extradición, multiplicándose también en ese entonces los
tratados internacionales, entre los que vale la pena mencionar el celebrado
entre Francia y Suiza (1777), entre Suecia y Rusia (1721), Francia y España
(1765), por mencionar algunos. Este último se refería a delitos de robo en
caminos reales e iglesias, robos con fractura en lugares habitados, asesinatos,
incendios, envenenamientos, estupros y falsificación de moneda, y aunque en
el se disponía la entrega de los delincuentes refugiados en cualquier asilo
privilegiado, o en iglesias inclusive, no permitía imponer la pena de muerte a
estos delincuentes.
En el siglo XIX, la extradición continuó su rápida expansión en el mundo,
siendo uno de los tratados más importantes de aquella época, el pacto de
extradición celebrado entre los firmantes de la paz de Amiens en 1803. Ya en
el siglo XX y en la actualidad, es posible afirmar que son pocas las naciones
que no se hallan ligadas a muchas otras por convenios o tratados de
extradición.

Fuentes de la extradición
o Desde el punto de vista del derecho positivo, son fuentes de la
extradición los tratados, las leyes internas de cada país y la reciprocidad.

Los tratados
o Son acuerdos bilaterales o plurilaterales, es decir, celebrados entre dos
o más Estados, por medio de los cuales los Estados se comprometen a
entregarse mutuamente a los responsables de los hechos delictivos
contemplados en el tratado conforme a las condiciones y formalidades
en él establecidas; y tienen por objeto hacer obligatoria la extradición en
los casos previstos en el convenio. En la actualidad, el tratado
internacional es la regla más común en materia de extradición.
Guatemala ha suscrito y ratificado tratados internacionales en materia de
extradición con países como México, Bélgica, España, Estados Unidos,
Uruguay, Paraguay, Argentina y las naciones centroamericanas.

La ley interna
En muchos países, además de los tratados internacionales, existen leyes
internas que regulan lo relativo a la extradición y las condiciones para su
otorgamiento y tramitación, disciplinando también la actividad de los órganos
del Estado en orden a la misma.
Generalmente, coexisten con los tratados internacionales, mas no es posible
establecer jerarquía alguna entre estas normas, pues aún siendo distintas,
entre ellas existen relaciones de integración expresadas en remisiones de los
preceptos de unas a otras.
Es importante recordar que el decreto del Congreso de la República de
Guatemala mediante el cual se ratifica un tratado es el único medio por el cual
el Estado incorpora el contenido del convenio a su ordenamiento jurídico; y en
algunos casos, las leyes internas tienden a complementar las disposiciones de
los tratados internacionales. Es por ello que resalto la imposibilidad de
establecer jerarquías entre unas y otras. No obstante, como lo declaró una
sentencia del Tribunal Supremo de España de fecha 22 de junio de 1934: "El
Código Penal y las restantes leyes penales sustantivas pierden su rango
privilegiado como normas de directa aplicación cuando se trata de enjuiciar a
delincuentes entregados por un Estado extranjero en virtud de un convenio
internacional, porque en este caso la ley fundamental es el convenio de
extradición, al que deben subordinarse las restantes leyes penales.

En el caso de Guatemala, la ley interna en materia de extradición es el Decreto


No. 28-2008, Ley Reguladora del Procedimiento de Extradición, que en su
Artículo uno le otorga carácter subsidiario a la ley, regulando que: "El
procedimiento de extradición se regirá por los tratados o convenios de los
cuales Guatemala sea parte; en lo no previsto en los mismos se regirá por la
presente ley."
Pero además de dicho cuerpo normativo, al igual que en otras naciones,
algunos preceptos en esta materia se hallan incluidos en otras leyes, como la
Constitución
Política de la República de Guatemala y el Código Penal, aunque éstos regulan
esta institución de manera muy general. También existen normas de naturaleza
extradicional en los códigos procesales de otros países, mas éste no es el caso
de
Guatemala.

La reciprocidad
Excepcionalmente, la extradición también se encuentra establecida mediante
convenios o declaraciones de reciprocidad. Hay reciprocidad cuando un Estado
desea obtener la entrega de un delincuente de otro país con el que no ha
suscrito tratado alguno, o bien, porque el delito de que se trata no se encuentra
contenido en el tratado de extradición correspondiente. Para llenar estas
lagunas, los países involucrados pueden pactar que el Estado demandante se
comprometa con el requerido a conceder la extradición cuando se presente un
caso análogo en el futuro.
En caso de delito no comprendido en el tratado de extradición, considero que
esta práctica es poco acertada, puesto que si el tratado contiene una
enumeración cerrada de los delitos por los que ha de otorgarse la extradición,
la ampliación de dicha enumeración a la sazón de los países involucrados
constituye una violación al principio extradicional "nulla traditio sine lege", como
lo expondré más adelante. Cuando existe tratado de extradición, ésta no puede
concederse más que por los delitos que en el tratado figuran; y cuando no
exista convenio o tratado alguno, el asunto debe resolverse de modo diverso
entre los estados interesados, atendiendo a las necesidades y circunstancias
del caso concreto, aunque esta última posibilidad no es del todo convincente,
ya que no puede haber extradición donde no hay ley o tratado.

FUNDAMENTO JURIDICO DE LA EXTRADICION


Ley Reguladora del Procedimiento de Extradición DECRETO NÚMERO
28-2008
CONSIDERANDO:
Que la extradición, a pesar de la evolución que ha experimentado en
el ámbito internacional, carece de una regulación adecuada en la
legislación ordinaria acorde con los principios establecidos en la
Constitución Política de la República y los instrumentos
internacionales, a manera de garantizar el respeto a los principios y el
cumplimiento de las obligaciones adquiridas por el Estado de
Guatemala.
Artículo 1. Objeto y carácter subsidiario de la ley. El procedimiento de
extradición se regirá por los tratados o convenios de los cuales
Guatemala sea parte; en lo no previsto en los mismos se regirá por la
presente ley.
Artículo 2. Derechos y garantías del requerido. Durante el
procedimiento de extradición, las personas tendrán derecho a
nombrar un defensor y, en su caso, un traductor; de no hacerlo se
nombrará uno de oficio. En ningún caso, la resolución que decida el
procedimiento de extradición hará mérito sobre la inocencia o
culpabilidad de la persona sujeta a procedimiento de extradición, ni
ésta podrá ser valorada en su contra. Desde el momento en que se le
haga saber la causa que motivó su detención, el requerido y su
defensor podrán obtener copias simples de la solicitud y de la
documentación presentada por el Estado Requirente, así como de
cualquier otro documento disponible relacionado con el
procedimiento de extradición, dejándose razón en el expediente.
Artículo 8. Sujetos del procedimiento de extradición. Son sujetos del
procedimiento de extradición: a) El Ministerio Público; b) El Organismo
Judicial; c) El requerido y su abogado defensor, en los procedimientos
de extradición pasiva.
Artículo 9. Funciones del Ministerio Público. El Ministerio Público
promoverá ante los órganos jurisdiccionales las solicitudes de
extradición pasiva provenientes de los Estados Requirentes que les
hayan sido trasladados por el Ministerio de Relaciones Exteriores. En
los casos de extradición activa, el Ministerio Público promoverá las
solicitudes de extradición, que serán remitidas por la Secretaría de la
Corte Suprema de Justicia al Ministerio de Relaciones Exteriores, para
que éste a su vez, la presente al Estado correspondiente.
Artículo 10. Funciones del Organismo JudicIal. Corresponde al
Organismo Judicial, a través de los órganos jurisdiccionales
competentes decidir, con exclusividad, sobre la procedencia de la
extradición pasiva que promueva el Ministerio Público.

Artículo 11. Funciones del Ministerio de Relaciones Exteriores. El


Ministerio de Relaciones Exteriores remitirá al Ministerio Público las
solicitudes de detención provisional y formal de extradición pasiva
que formulen a Guatemala. En los procedimientos de extradición
activa remitirá las solicitudes de extradición que reciba de la
Secretaría de la Corte Suprema de Justicia al Estado correspondiente,
por el conducto respectivo. Toda información que se reciba se
comunicara al Ministerio Publico y a al tribunal que conoce del caso.
CLASES DE EXTRADICION
EXTRADICIÓN ACTIVA
 Es una presentación que generalmente se realiza por la vía
diplomática a la que se acompaña la documentación que
respalda la petición a formular.
 La documentación acompañada debe responder al tratado
aplicable al caso o a la legislación interna del Estado al que se
dirige la solicitud.

EXTRADICIÓN PASIVA
Se denomina extradición pasiva al proceso fundamentalmente jurisdiccional a
través del cual se sustancia la petición que hace un Estado a la República
Argentina para que una persona le sea entregada privada de su libertad con el
objeto de ser sometida a proceso o para cumplir una pena privativa de la
libertad ya impuesta por autoridades jurisdiccionales extranjeras.

La extradición es solicitada por un Estado a instancia de sus autoridades


jurisdiccionales.
OTRAS CLASIFICACIONES DE LA EXTRADICION
 Extradición simple: Se realiza con base en un tratado o acuerdo
bilateral entre dos países.

 Extradición multilateral: Se lleva a cabo entre múltiples países, a


menudo en el marco de acuerdos internacionales más amplios.

 Extradición por delitos comunes: Relacionada con crímenes


ordinarios, como robos o fraudes.

 Extradición por delitos políticos: Algunos países pueden negarse a


extraditar a individuos acusados de delitos políticos.

Es importante considerar que las leyes y procesos de extradición varían según


el país y están sujetos a tratados internacionales.

Principios que fundamentan la extradición


La extradición es un proceso legal mediante el cual un país solicita a
otro la entrega de una persona acusada o condenada por delitos, para
ser juzgada o cumplir una sentencia en el país solicitante. Este
procedimiento se rige por tratados internacionales o acuerdos
bilaterales entre los países involucrados. La finalidad es evitar que
una persona escape de la justicia al trasladarse a otro país.

El país receptor evalúa la solicitud de extradición basándose en las


leyes locales y los acuerdos internacionales. Algunos de los factores
que se consideran son la gravedad del delito, la existencia de pruebas
suficientes, y que el delito sea reconocido como tal en ambos países
(principio de doble incriminación). En algunos casos, se niega la
extradición si existe riesgo de que la persona sea sometida a tortura,
pena de muerte o juicios injustos en el país solicitante.

La extradición puede ser solicitada por diversos tipos de delitos, como


tráfico de drogas, terrorismo, corrupción, entre otros.

La extradición se fundamenta en una serie de principios clave que


garantizan su legitimidad y coherencia con el derecho internacional y
las legislaciones de los países involucrados. Los principales principios
que la sustentan son:

1. Principio de doble incriminación: Para que proceda la


extradición, el acto por el cual se solicita debe ser considerado delito
en ambos países (solicitante y requerido). Esto asegura que la
persona no sea extraditada por algo que no esté penalizado en el país
requerido.

2. Principio de especialidad: La persona extraditada solo puede


ser procesada o castigada por los delitos específicamente indicados
en la solicitud de extradición. No puede ser juzgada por delitos
diferentes sin la autorización del país que otorgó la extradición.

3. Principio de no entrega de nacionales: Muchos países se


reservan el derecho de no extraditar a sus propios ciudadanos. En
lugar de ello, pueden ofrecer procesarlos en su propio territorio por
los delitos cometidos en el extranjero.

4. Principio de no extradición por delitos políticos:


Generalmente, no se concede la extradición si el delito por el cual se
solicita es de naturaleza política (por ejemplo, actividades
subversivas contra el gobierno). Este principio pretende proteger a
quienes luchan contra regímenes autoritarios.

5. Principio de no discriminación: El país requerido puede


rechazar la extradición si considera que la persona será objeto de
persecución por motivos de raza, religión, género, nacionalidad,
opinión política, entre otros.

6. Prohibición de extradición con pena de muerte o tortura: Si


el país solicitante impone la pena de muerte o si existe el riesgo de
tortura o tratos inhumanos, la extradición puede ser denegada, a
menos que se brinden garantías de que esos castigos no se aplicarán.

7. Principio de reciprocidad: Los países suelen conceder la


extradición bajo la premisa de que, en caso de ser necesario, el país
solicitante también ofrecería la extradición en circunstancias
similares.

Estos principios buscan equilibrar la cooperación internacional en la


persecución de delitos con la protección de los derechos humanos y
las soberanías nacionales.
Actos o delitos que motivan la extradición
La extradición se solicita generalmente en casos de delitos graves
que tienen impacto a nivel internacional o entre diferentes países. Los
actos o delitos que más frecuentemente motivan una solicitud de
extradición incluyen:

1. Tráfico de drogas: Los delitos relacionados con la producción,


distribución o venta de drogas ilícitas son una de las causas más
comunes de extradición, especialmente cuando las actividades
criminales cruzan fronteras.

2. Terrorismo: Los actos terroristas, la financiación del terrorismo o


la pertenencia a grupos terroristas motivan extradiciones debido a la
amenaza que representan para la seguridad internacional.

3. Corrupción y delitos económicos: Los casos de corrupción,


lavado de dinero, fraude, evasión fiscal y otros delitos financieros
suelen motivar la extradición, ya que estos delitos suelen involucrar
transferencias de fondos a nivel internacional.

4. Crimen organizado: Las actividades relacionadas con mafias,


cárteles o redes de crimen organizado, como tráfico de armas, trata
de personas o contrabando, son frecuentes motivos de extradición.

5. Delitos de violencia grave: Delitos como homicidio, violación,


tortura, secuestro o agresiones sexuales también suelen ser motivo
de extradición, especialmente si el acusado ha huido a otro país para
evitar la justicia.

6. Ciberdelitos: Delitos como el fraude cibernético, el robo de


identidad, la piratería informática o la explotación sexual infantil a
través de internet, que afectan a personas y sistemas en diferentes
países, también suelen motivar solicitudes de extradición.

7. Delitos contra la humanidad y genocidio: Los responsables de


crímenes de guerra, genocidio o violaciones masivas de derechos
humanos pueden ser extraditados para ser juzgados, especialmente
en tribunales internacionales o nacionales.

8. Delitos fiscales: En algunos casos, la extradición puede


solicitarse por evasión fiscal, blanqueo de capitales o cualquier otro
delito económico que tenga un impacto considerable en la economía
del país solicitante.
Estos delitos son de interés común para la cooperación internacional
en la lucha contra el crimen, lo que justifica que los países trabajen
juntos para llevar a los responsables ante la justicia.

Delitos que no admiten la extradición


Existen ciertos delitos que, por razones legales o humanitarias, no
admiten la extradición. Estos varían según las legislaciones
nacionales y los tratados internacionales, pero en general, los más
comunes son:

1. Delitos políticos: Los delitos de carácter político, como rebelión,


sedición, subversión o traición, generalmente no son causas de
extradición. Este principio busca proteger a quienes actúan por
motivaciones políticas, especialmente en contextos de regímenes
autoritarios. Sin embargo, delitos como el terrorismo, aunque tengan
motivaciones políticas, no suelen incluirse en esta protección.

2. Delitos militares: Los delitos exclusivamente militares, es decir,


los que solo se consideran delitos dentro del ámbito castrense (como
la deserción), no suelen ser motivo de extradición, a menos que el
delito también sea reconocido en el derecho penal común del país
requerido.

3. Delitos menores: Generalmente, los delitos de poca gravedad o


con penas leves, como delitos de tráfico o faltas administrativas, no
suelen justificar una solicitud de extradición.

4. Delitos prescriptos: Si ha transcurrido el tiempo establecido por


la ley para perseguir un delito (prescripción), no se puede solicitar la
extradición, ya que la acción penal ha caducado. Esto depende de los
plazos de prescripción en cada país.

5. Delitos con riesgo de tortura o tratos inhumanos: Si existe


evidencia o riesgo de que la persona extraditada será sometida a
tortura, tratos crueles, inhumanos o degradantes, o a condiciones
inhumanas de detención en el país solicitante, se puede denegar la
extradición.

6. Delitos que conllevan la pena de muerte: Muchos países no


permiten la extradición si el delito por el cual se solicita conlleva la
pena de muerte en el país requirente, a menos que este ofrezca
garantías de que no se aplicará dicha pena.
7. Delitos relacionados con la discriminación: Si se considera
que la solicitud de extradición está motivada por razones de raza,
religión, género, orientación sexual, nacionalidad o creencias
políticas, la extradición puede ser rechazada para evitar actos
discriminatorios.

8. Delitos por los que la persona ya ha sido juzgada (non bis


in idem): Si la persona ya ha sido juzgada y condenada o absuelta
por el mismo delito en el país requerido o en otro país, no puede ser
extraditada nuevamente para ser procesada por los mismos hechos.

Estos límites se aplican para garantizar el respeto a los derechos


humanos y evitar abusos del sistema de extradición. Los países
involucrados en una solicitud de extradición deben asegurar que el
proceso se ajuste a los principios de justicia y legalidad.

La regulación legal actual de la extradición

La regulación legal actual de la extradición nacional

En el ámbito interno, las normas que contemplan la extradición y que


no contemplan
procedimiento son la Constitución Política de la República de Guatemala, el
Código Penal, el Código procesal Penal, la Ley Contra la Narcoactividad, la Ley
del Organismo Judicial, el Código de Derecho Internacional Privado, este último
constituye norma de carácter interno como los tratados y convenciones
ratificados por Guatemala y también derecho internacional y, así como la
Circular de la Corte Suprema de Justicia número 3426-B, de fecha 13 de mayo
de 1952.

En la Constitución Política de la República de Guatemala

En el pasado, la extradición la contemplaba por primera vez, la Constitución


Política de la República Centroamericana de fecha nueve de septiembre de
1921 la cual fue reformada y en ellas, se prohibió la extradición de
guatemaltecos.
Luego fue contemplada esta institución en la Constitución de 1956 en su
Artículo 48, en ésta ya se da vía a la extradición de guatemaltecos y luego en la
Constitución de 1965 siempre dejando fuera los acusados de delitos políticos y
comunes conexos, viene luego la Constitución que entra en vigor el día 14 de
enero de 1986 la cual establece:
En el Artículo 18 de la Constitución Política que “la pena de muerte no podrá
concederse en los siguientes casos: …e) A reos cuya extradición haya sido
concedida bajo esa condición”. Este principio también se encuentra consignado
en todos los tratados bilaterales y multilaterales.

El Artículo 27 de la Constitución es su segundo párrafo establece que “La


extradición se rige por lo dispuesto en tratados internacionales. De una vez nos
indica dicha norma que en cuanto a la extradición, tenemos que valernos de los
tratados tal y como estaban suscritos por Guatemala, quedaron con plena
vigencia y sin ninguna modificación, ya fueran estos bilateraleso multilaterales.

El tercer párrafo del Artículo citado, establece que: “Por delitos políticos no se
intentará la extradición de guatemaltecos, quienes en ningún caso serán
entregados a gobierno extranjero, salvo lo dispuesto en tratados y convenios
con respecto a los delitos de lesa humanidad o contra el derecho internacional”.

Opinión de Corte de Constitucionalidad:


La Corte de Constitucionalidad interpretó el tercer párrafo de este Artículo en
su Sentencia de fecha 21 de febrero de 1995, expediente número 458-94, de la
siguiente forma:

El Artículo 27 de la Constitución establece en su tercer párrafo: “Por delitos


políticos no se intentará la extradición de guatemaltecos…” Este primer
supuesto lo aplican estrictamente de conformidad con su literalidad, aplicándolo
en el sentido de que no se puede extraditar a guatemaltecos por delitos
políticos.

En el Código Penal

En el actual Código penal, Decreto 17-73 en forma muy aislada trata el tema
sobre la extradición, en su Artículo 5º. Establece: de la Extraterritorialidad de la
Ley Penal: Este código también se aplicará…3) Por delito cometido por
guatemalteco, en el extranjero, cuando se hubiere denegado su extradición, y
el Artículo 8º. Establece “La extradición podrá intentarse u otorgarse por delitos
comunes. Cuando se trate de extradición comprendida en
tratados internacionales, sólo podrá otorgarse si existe reciprocidad. En ningún
caso podrá intentarse ni otorgarse la extradición por delitos políticos, ni por
delitos comunes conexos con aquellos.”

Como puede verse, dentro del mismo Artículo encontramos las frases
“intentarse”
(extradición activa) u “otorgarse” (extradición pasiva).

Ese “otorgarse”, implica la autorización para entregar a una persona que ha


cometido un delito en otro territorio y que se encuentra en Guatemala. Es
necesario hacer énfasis en la generalidad del Artículo, el cual no define por
delitos cometidos a que personas puede otorgarse la extradición. Cabe hacer la
pregunta ¿nacionales o extranjeros?

La Ley Contra la Narcoactividad

La Ley Contra la Narcoactividad, en su parte sustantiva regula todo lo relativo a


los
delitos de Narcotráfico; define las clases de drogas, estupefacientes y
psicotrópicos; los instrumentos y objetos del delito; regula la autoría en el delito;
las penas principales, las circunstancias especiales en la aplicación de las
penas en cuanto al grado de participación; regula las medidas de seguridad, las
responsabilidades civiles; los delitos y las penas a imponerse. En su parte
adjetiva, fija el procedimiento para el enjuiciamiento de los delitos. Regula
laasistencia jurídica internacional; la extradición y el procedimiento para
tramitarse, el cual será en la vía de los incidentes.

Importantes:

Artículo 68. Extradición y Procedimiento para tramitarla.

Artículo 69. Renuncia a la extradición.

La Ley del Organismo Judicial

Esta ley en su Artículo 9º. Reproduce casi textualmente el contenido de los


Artículos 46 y 204 de la Constitución y además es la que concretamente regula
el trámite incidental, en los Artículos del 135 al 140, ya que la Ley contra la
Narcoactividad Decreto 48-92 solo indica que el trámite será en la vía de los
incidentes. En cuanto a los medios de prueba, también se estará a lo dispuesto
en los Artículos del 24 al 37 de dicha ley.

Código de Derecho Internacional Privado

En el Código de Derecho Internacional Privado, que constituye ley interna y a la


vez
regulación internacional, en su Título III contempla la extradición iniciando
desde el Artículo 334 al Artículo 381, norma vigente en nuestro ordenamiento
jurídico guatemalteco y aplicable en la actualidad.

Circulares

Es importante hacer mención y desde luego transcribir la circular que


actualmente existe para el trámite del procedimiento penal de extradición y
cuya normativa utilizan los jueces en casos concretos y que más adelante se
mencionará ya que claramente acentúa la inexistencia de una ley que regule
dicho procedimiento y su aplicación no es de carácter general por tratarse
de circular.
Esta circular está identificada con el número 3426-B del 13 de mayo de 1952,
la cual no puede enmarcarse dentro de una ley sustantiva ni adjetiva, toda vez
que no tiene carácter de ley, porque no fue emitida por el procedimiento
ordinario, es decir para que pudiera tener el carácter de ley debió haberse
emitido por el Congreso de la República. Sin embargo, esta fue emitida por la
Secretaría de la Corte Suprema de Justicia, y en apego a la doctrina, una
circular esúnicamente una indicación de cómo hacer un trabajo, como una
orden del superior jerárquico a sus subordinados y no una forma de legislar,
práctica que en lo administrativo se ha utilizado mucho en Guatemala, en una
forma errónea, dándole el carácter de ley.

No obstante, dicha circular se estuvo utilizando en los trámites de extradición


que se realizaron en los tribunales respectivos, porque concretamente no se
contaba con otra norma legal que regulara un procedimiento puramente
adjetivo, acorde con los tratados, la doctrina y con el Código Procesal Penal
guatemalteco.

Dicha circular ha sido duramente cuestionada, por los abogados defensores de


los
ciudadanos guatemaltecos extraditados, porque no solo es una orden del
superior jerárquico indicando cómo hacer un trabajo, sino que la misma no
tiene ninguna firma que la respalde, el cuestionamiento de dicha circular es por
demás ineludible a la vista de cualquier jurista.

El contenido de la misma dice así:


EXTRADICIÓN

CIRCULAR No. 3426-B

SECRETARÍA DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA

Guatemala, 13 de mayo de 1952

Señor Juez:

Con instrucciones superiores, me dirijo a usted, para manifestarle que la Corte


Suprema de Justicia, tomando nota de la diversidad de criterios con que los
tribunales tramitan los suplicatorios o requerimientos de extradición recibidos
del exterior y de la circunstancia que no existe ley específica alguna que regule
dicho trámite, ha dispuesto comunicar las siguientes recomendaciones con el
propósito de uniformar la jurisprudencia, mientras no exista una leyexpresa
sobre la materia.

Naturaleza

Las cuestiones relativas a extradición deben reputarse como incidentes,


conforme a la definición que consigna el Artículo 214 de la Ley del Organismo
Judicial, y tramitarse según los preceptos del Capítulo X de la segunda parte de
la indicada ley. Su naturaleza incidental deriva de relación inmediata con un
negocio principal (encausamiento del reo ante un tribunalextranjero).

Competencia

Mientras no haya ley que la asigne específicamente, debe entenderse que la


tienen los Jueces de Primera Instancia que ejerzan jurisdicción penal ordinaria.
En caso de suscitarse cuestión de competencia para resolver el Artículo entre
dos o más Jueces de primera instancia, deberá atenderse a lo que disponen
los capítulos III y IV, Titulo II, Libro I del Código deProcedimientos Penales y la
Ley del Organismo Judicial, en lo que fueren aplicables. De igual modo, esto es
conforme a los preceptos de la ley común, se resolverán las cuestiones
relativas o impedimentos, excusas o recusaciones.

Partes

Son partes en el incidente de extradición: el reo, el acusador privado si se


presentare o constituyere y el Ministerio Público. Este último tiene intervención
obligada (Artículo 24 inciso 1º. Decreto 512 del Congreso), por tratarse de una
cuestión que interesa directamente al Estado como organismo soberano en
relación internacional como otros, y las notificaciones que le correspondan
debe hacerse preferiblemente a su sección de fiscalía en esta capital.

Recursos

Contra el auto interlocutorio que resuelva el asunto, así como contra cualquier
otra
resolución que sea recurrible según las normas ordinarias caben los recursos
autorizados por la ley.

Trámites Previos

Conforme a los tratados de extradición, es usual que el Estado requirente


solicite previamente la captura del reo, ofreciendo pedir formalmente la
extradición dentro del plazo que al respecto fije el Convenio Internacional.
Cuando se trate de una solicitud preliminar de tal naturaleza, el Juez requerido
debe limitarse a ordenar la captura o denegarla en auto razonado.

En este último caso, si el Ministerio Público no interpusiere apelación o al


confirmarse lo resuelto, contestará el suplicatorio o requerimiento diplomático
por el conducto que le hubiere llegado, con certificación o transcripción del auto
recaído. Si por el contrario ordenase la captura del reo, una vez habido este, le
hará saber el motivo de su detención y le notificará el auto de captura,
poniendo razón de la fecha en que aquella se efectúo, desde la cual empezará
a correr el término para que el Estado requirente formalice su petitorio, hecho
que hará saberinmediatamente por el conducto respectivo al Ministerio de
Relaciones exteriores, para que éste, a su vez, lo haga de conocimiento del
estado requirente, si el petitorio de extradición formal no se recibiere dentro del
término estipulado, dictará resolución ordenando la libertad del reo, la cual hará
saber por igual conducto, y notificará al Ministerio Público.
Trámite del Incidente

Si se recibiere dentro del término la solicitud formal de extradición, se abrirá el


incidente dando vista por dos días a las partes conforme al 219 del Decreto
Gubernativo 1862, se recibirá a prueba si procediere (Art.220 Id.) y se resolverá
conforme el 221. Si el tratado de extradición aplicable consigna una tramitación
específica para el incidente, ella prevalecerá desde luego. Es en la oportunidad
de resolver el incidente cuando debe analizarse si la solicitud de
extradición reúne todos los requisitos y se encuentra o no comprendida dentro
de los casos que estipulan los tratados, evitándose la práctica errónea de
resolver a priori tales cuestiones. No es obligatorioque el Estado requirente
solicite previamente la captura y luego la extradición. Si se solicita laextradición
prima facie, es natural que tal requerimiento lleve implícito el de la captura, y en
talcaso, el juez requerido deberá resolver previamente, como es natural, si
ordena o no detención, y una vez efectuada ésta, tramitar el incidente
extraditorio en la forma anteriormente indicada en el párrafo 5º.

Ejecución de lo resuelto

El suplicatorio o requerimiento de extradición, así como las diligencias


y actuaciones originales derivadas de su trámite, deben quedar en el archivo de
tribunal. A la Autoridad o Tribunal requirente se enviará una copia certificada de
la resolución firme recaída, antecedida de la fórmula usual de hacerle saber
que en su suplicatorio o requerimiento recayó la resolución en cuestión y el
ruego final de acusar recibo, documento que se enviará a la Presidencia
delOrganismo Judicial como órgano de comunicación para su trámite
subsiguiente. El reo será igualmente puesto a disposición de dicha presidencia
si la extradición hubiese sido declarada, recomendándose en particular que se
traslade al reo a la Penitenciaría de la Capital sólo en aquellos casos en que tal
traslado coincida dentro de la ruta de conducción del mismo. Caso contrario,
deberá quedar el reo en la cárcel departamental respectiva, a disposición de
laPresidencia, para que ésta disponga su traslado en la forma más adecuada.
Rogándole acusar recibo del presente, quedo de usted. Muy atento y S.S.

Tratados Internacionales

Cabe mencionar, que en el ámbito internacional la institución de extradición


está regulada en el Código de derecho Internacional Privado, Decreto 1575 de
la Asamblea Legislativa de la República de Guatemala que adopta y aprueba la
convención de fecha 13 de febrero de 1928.

Así mismo dicha institución se regula en Convenciones y Tratados


internacionales de extradición, los cuales han sido canjeados y ratificados por
Guatemala y entre ellos están:
Tratados Bilaterales:

Guatemala celebró un Tratado de extradición con la Gran Bretaña, el 4 de julio


de 1885 y un protocolo adicional del 30 de mayo de 1914.

El 19 de mayo de 1894 celebró el Tratado de extradición con la República de


México.

El 7 de noviembre de 1885 celebró el Tratado de extradición con España y un


protocolo adicional del 23 de febrero de 1897.
El 20 de noviembre de 1897 celebró el Tratado de extradición con Bélgica y
dos
protocolos adicionales del 20 de noviembre de 1934 y del 21 de octubre de
1959.
El 20 de febrero de 1903 celebró el Tratado de extradición con los estados
Unidos de América y una convención suplementaria del 20 de febrero de 1940.

El 18 de agosto de 1989 se suscribió en Tapachula Chiapas, México, el


acuerdo entre las repúblicas de Guatemala y los Estados Unidos Mexicanos,
sobre cooperación para combatir el narcotráfico y la farmacodependencia el
cual está en vigor desde el 28 de febrero 1990, que no es propiamente de
extradición, pero regula actividades que son susceptibles de esta institución.
Acuerdo que se ajusta exactamente en cuanto a los principios y contenidos de
la Ley Contra laNarcoactividad, Decreto 48-92 del Congreso de la República.

El 19 de noviembre de 1991, fue firmado un convenio entre Guatemala y


Argentina, el cual trata sobre la prevención del uso indebido y represión del
tráfico ilícito de estupefacientes y sustancias psicotrópicas, cuyo convenio aún
está en trámite.

Convenios Multilaterales:

Tratado de extradición y protección contra el Anarquismo, el cual fue suscrito


en la
Segunda Conferencia Internacional Americana, en la ciudad de México, el 28
de enero de 1902, suscrito por 17 países, el cual fue aprobado para Guatemala
por Decreto Legislativo número 523 del 24 de abril de 1902, ratificado el 25 de
abril del mismo año, cuyo instrumento fue depositado el 6 de agosto del mismo
año, publicado el 14 de enero de 1903, fecha en la cual pasó a ser ley para el
Estado de Guatemala.

Convención de Extradición a nivel Centroamericano, suscrito en Washington el


7 de febrero de 1923, por los países centroamericanos, aprobado para
Guatemala, por Decreto Legislativo número 1391 del 14 de mayo de 1925,
ratificado el 20 de mayo del mismo año y publicado el 3 de julio también del
mismo año.
Convención suscrita en la Sexta Conferencia Internacional Americana,
celebrada en la Habana, Cuba, el 20 de febrero de 1928, aprobado para
Guatemala por Decreto Legislativo Número 1575 del 10 de abril de 1929, de
cuya convención nació el Código de Bustamante o Código de Derecho
Internacional Privado.

Convención sobre extradición suscrita en Montevideo, en la VII


Conferencia Internacional Americana, realizada en Montevideo, Uruguay el 26
de diciembre de 1933, aprobada para Guatemala, por decreto Legislativo
número 2145 del uno de abril de 1936,ratificado el 12 de mayo del mismo año,
instrumento depositado el uno de diciembre de 1967, publicado en el diario
Oficial el 2 de febrero de 1968.

Trámite actual de la extradición en Guatemala

En términos generales se dan a conocer cuales son los requisitos y el trámite


que se le da a la solicitud formal de extradición, cuáles son sus fases, plazos,
autoridades por las que debe de pasar, esto según lo manifiesta el Ministerio
de Relaciones Exteriores.

Requisitos generales para admitir una solicitud de extradición

Que el Estado requirente tenga jurisdicción para juzgar el hecho delictuoso se


le imputa al individuo reclamado;
Que el hecho por el cual se reclama la extradición tenga el carácter de delito y
sea punible por las leyes del Estado requirente y por las del Estado requerido
con la pena mínima de un año de privación de la libertad;
Que no esté prescrita la acción penal o la pena;
Que el individuo inculpado no haya cumplido su condena en el país del delito o
haya sido amnistiado o indultado;
Que el individuo solicitado no esté siendo juzgado en el Estado requerido por el
hecho que se le imputa y en el cual se funda el pedido de extradición;
Que no se trate de un delito o del que le son conexos;
Que no se trate de delito militar o contra la religión;
Que el delito se haya cometido en el territorio del Estado que pide la
extradición.

Solicitud de detención provisional con fines de extradición

Esta puede hacerse por vía telegráfica o postal. A partir de la detención del
inculpado, se tienen entre cuarenta días y tres meses la documentación de la
solicitud formal de extradición;

En la solicitud de una detención provisional se debe asegurar la existencia de


una resolución judicial de orden de detención, invocar el instrumento
internacional correspondiente y proporcionar datos personales tendientes a la
identificación del extraditable;
Así mismo asegurar que la petición formal de extradición, se presentará en el
plazo que no exceda del tiempo indicado en el Convenio o Tratado respectivo,
plazo que se cuenta a partir del momento de la notificación a la Misión
Diplomática del estado requirente sobre la detención del sujeto.

Trámite de la solicitud formal de extradición

Fase administrativa

Presentación de la solicitud formal de extradición ante el Ministerio de


Relaciones
Exteriores;
Traslado de la documentación a la Secretaría de la Corte Suprema de Justicia,
en donde se designa el tribunal que ha de conocer de la misma.

Fase judicial

Recibido el expediente de la Corte Suprema de Justicia, el juez analiza la


procedencia de la solicitud;
Si la solicitud está ajustada, el juez emite una resolución en la que le da trámite
a la misma en la vía incidental;

El juez informa al detenido de la solicitud de extradición en su contra, le permite


nombrar un defensor y corre audiencia al extraditable. Así mismo se da
audiencia a la Misión Diplomática del país requirente y al Ministerio Público por
el plazo de dos días;

Si el incidente se refiere a cuestiones de hecho, el juez, al vencer el plazo de la


audiencia, resolverá ordenando la recepción de las pruebas ofrecidas por las
partes al promover el incidente o al evacuar la audiencia, en no más de dos
audiencias que tendrán verificativo dentro de los diez días hábiles siguientes;

Concluida la fase anterior, el juez sin más trámite resuelve dentro del tercer día,
declarando la procedencia o improcedencia de la extradición.

Declarada con lugar una solicitud de extradición, el juez dentro de la


misma resolución pone al detenido a disposición del Ministerio de relaciones
exteriores, para los efectos subsiguientes.

Segunda fase administrativa

En el caso de un nacional guatemalteco, la persona solicitada, se pone a


disposición del ejecutivo para que el señor Presidente de la República, decida
la entrega del mismo, ya que normalmente no se está obligado a entregar a un
nacional.

La decisión de entrega la toma el señor Presidente de la República, mediante


Acuerdo Gubernativo en Consejo de Ministros. Decidida la entrega, la persona,
se pone a disposición del Ministerio de Relaciones Exteriores, quien se encarga
de los trámites para llevar a cabo la extradición coordinando con la Misión
Diplomática el lugar, la fecha y hora de la entrega. Conanterioridad la Misión
correspondiente a solicitud del Ejecutivo ha garantizado en nombre de
su Gobierno, que el extraditable gozará de todos los derechos y garantías de
conformidad con la Constitución de ese país; particularmente de que será
considerado inocente hasta no ser declarado culpable; que su juicio será
totalmente imparcial, que se le proveerá de un Abogado para su defensa sin
costo alguno para él en caso de no poderse pagar un defensor; que no
serájuzgado por delitos diferentes por los que se solicitó su extradición; así
como que no se pedirá en su contra ni se le aplicará la pena de muerte en el
caso de ser hallado culpable del delito que se le imputa.

CONCLUSIONES

1). No existe ley en Guatemala, que regule el procedimiento penal de


extradición, y que contengan los requisitos generales de tramitación, a la cual
se puedan adecuar todos y cada uno de los tratados y delitos contenidos en los
mismos, para evitar con elloviolaciones a los principios procesales y derechos o
garantías constitucionales.

2). La extradición es un procedimiento bien estructurado y efectivo para


combatir el crimen,cuando tratan de evadir el castigo, pero considero que es
poco funcional porque si bien es cierto, su creación fue con la intención de
evitar la fuga de delincuentes para que no quedarán impunes los delitos que
aquellos cometían; también es cierto que la mayoría de veces es considerada
improcedente, ya sea por no reunir algunos de los requisitos establecidos en
los Tratados, o bien por considerarlo como un delito de carácter político
o común conexo con aquel, y en consecuencia, esta institución no cumple a
cabalidad su cometido, pero no es un procedimiento perfecto; como en todas
las cosas se ve afectado por la indolencia, los intereses políticos y la avaricia
de los gobernantes.

3) En nuestro país la extradición establece una garantía individual de seguridad


para todo guatemalteco, de no ser entregado o extraditado a otro país,
salvo cuando así se encuentre estipulado en tratados internacionales.

4) La extradición en Guatemala, en cuanto a su tramitación, ha venido


evolucionando del Sistema Administrativo al Sistema Judicial que es el que
actualmente se utiliza.

5) La institución de la extradición, se hace necesario mantenerla para evitar la


sustracción de delincuentes comunes que aprovechando la facilidad de los
medios de transporte que existen en la actualidad a nivel internacional, se
refugien en los países más lejanos para evitar ser castigados por el Estado
ofendido o requirente.
EXPEDIENTE

SE ADJUNTA:

APELACION DE SENTENCIA DE AMPARO, EXPEDIENTE 1671-


2007 EMITIDA POR LA CORTE DE CONSTITUCIONALIDAD

CORTE DE CONSTITUCIONALIDAD: Guatemala, diez de octubre de


dos mil siete.
En apelación, y con sus antecedentes, se examina la sentencia de
catorce de mayo de dos mil siete, dictada por la Sala Primera de la
Corte de Apelaciones del Ramo Penal, Narcoactividad y Delitos
Contra el Ambiente, constituida en Tribunal de Amparo, en el amparo
promovido por Germán Chupina Barahona contra el Tribunal Quinto
de Sentencia Penal, Narcoactividad y Delitos Contra el Ambiente del
departamento de Guatemala. El postulante actuó con el patrocinio del
abogado Héctor Fernando Gutiérrez Mendoza.

ANTECEDENTES

I. EL AMPARO
A) Interposición y autoridad: presentado el cinco de diciembre de
dos mil seis, en el Juzgado Primero de Paz del Ramo Penal de Turno
Grupo “D” Nocturno del departamento de Guatemala. B) Acto
reclamado: resolución de seis de noviembre de dos mil seis, dictada
por la autoridad impugnada, en la que se ordena, bajo la
responsabilidad del Reino de España, la detención provisional del
amparista y de Pedro García Arredondo, Oscar Humberto Mejía
Víctores y Ángel Aníbal Guevara, por los delitos de Terrorismo,
Homicidio y Secuestro, previo a la solicitud formal de extradición. C)
Violaciones que denuncia: derechos a la justicia, de defensa,
principios jurídicos de debido proceso, presunción de inocencia y de
juez natural. D) Hechos que motivan el amparo: lo expuesto por el
amparista se resume: D.1) Producción del acto reclamado: a) el
veintidós de septiembre de dos mil seis, Santiago Pedraz Gómez,
Magistrado-Juez del Juzgado Central de Instrucción número uno de la
Audiencia Nacional de Madrid, emitió orden internacional de detención
en su contra, solicitando su detención y entrega a las autoridades
judiciales para someterlo a enjuiciamiento penal o de ejecución de una
pena o de una medida de seguridad privativa de libertad, derivado del
incidente ocurrido el treinta y uno de enero de mil novecientos ochenta
en la Embajada de España en Guatemala; b) en respuesta de lo
anterior, el Tribunal Quinto de Sentencia Penal, Narcoactividad y
Delitos Contra el Ambiente del departamento de Guatemala -autoridad
impugnada-, emitió la resolución de seis de noviembre de dos mil seis
-acto reclamado-, en la que se ordenó, bajo la responsabilidad del
Reino de España, su detención provisional y la de Pedro García
Arredondo, Oscar Humberto Mejía Víctores y Ángel Aníbal Guevara,
por los delitos de Terrorismo, Homicidio y Secuestro, previo a la
solicitud formal de extradición; c) a pesar que, por sufrir quebrantos de
salud, se encontraba recluido un centro médico, la señora Presidente
del Tribunal Quinto de Sentencia Penal, Narcoactividad y Delitos
Contra el Ambiente, formalizó su detención provisional, ordenándole
permanecer bajo custodia internado en dicho centro hospitalario, en
tanto esté en capacidad de ser ingresado al Centro Preventivo de la
Zona Dieciocho. D.2) Exposición de Agravios: estima violados sus
derechos constitucionales enunciados en virtud que: a) la autoridad
impugnada, con la emisión del acto reclamado, produce la amenaza
real de que el Reino de España, en el plazo de dos meses, efectúe el
trámite de extradición, situación que se traduce en la inminente
afectación de sus derechos de defensa, del debido proceso y al Juez
natural, consagrados en la Constitución (artículos 12 y 14) y en el
Código Procesal Penal (artículos 14 y 20), y principalmente, al
principio de presunción de inocencia; b) en el Tratado de Extradición
suscrito entre la República de Guatemala y el Reino de España con
fecha siete de noviembre de mil ochocientos noventa y cinco, dichos
Estados se comprometieron, recíprocamente, a entregarse los
individuos que, habiendo sido condenados, o estando perseguidos por
las autoridades competentes de uno de los mismos, como autores
principales, auxiliares o cómplices de cualquiera de los delitos que se
expresan en dicho Tratado, se hubieren refugiado en el territorio del
otro, de lo que debe interpretarse que se puede solicitar la Extradición
de una persona, cuando se den las siguientes situaciones: b.1) que el
individuo haya sido condenado o esté siendo perseguido por las
autoridades competentes; y b.2) que se hubiere refugiado en el
territorio del otro Estado, lo que no sucede en el presente caso, ya que
no se trata la extradición de un súbdito del Reino de España que
hubiera cometido delito en dicho Estado y que busque refugio o asilo
en Guatemala; c) la solicitud presentada por España no es por un
delito de lesa humanidad o contra el Derecho Internacional, por lo que
no procede la extradición aludida. D.3) Pretensión: solicitó que se le
otorgue amparo y, en consecuencia, se deje sin efecto la resolución
reclamada. E) Uso de recursos: ninguno. F) Casos de
procedencia: invocó los contenidos en los incisos a) y b) del artículo
10 de la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de
Constitucionalidad. G) Leyes violadas: citó los artículos 2º, 12, 14,
primer párrafo, 27, tercer párrafo, 203, primer párrafo, y 204 de la
Constitución Política de la República de Guatemala; 4 del Código
Penal; y 7, 14, 20, 37, 38 y 39 del Código Procesal Penal.

II. TRÁMITE DEL AMPARO


A) Amparo provisional: no se otorgó. B) Terceros interesados:
a) Fiscalía de Casos Especiales y Violaciones de los Derechos
Humanos del Ministerio Público; b) Pedro García Arredondo; c) José
Efraín Ríos Montt; d) Oscar Humberto Mejía Victores; y e) Ángel
Aníbal Guevara Rodríguez. C) Informe circunstanciado: la autoridad
impugnada informó: a) el treinta y uno de octubre de dos mil seis,
proveniente de la Secretaria de la Corte Suprema de Justicia se
recibió un expediente remitido por el Ministerio de Relaciones
Exteriores, conteniendo la solicitud de detención provisional, previo a
formalizar extradición de los señores José Efraín Ríos Montt, Ángel
Aníbal Guevara Rodríguez, Germán Chupina Barahona, Oscar
Humberto Mejía Víctores y Pedro García Arredondo requerida por el
Reino de España, por los delitos de Terrorismo, Homicidio y
Secuestro; b) el seis de noviembre de dos mil seis, se accedió a dicha
solicitud, excluyendo al señor José Efraín Ríos Montt, y se giraron las
órdenes respectivas en contra de los demás mencionados, a la
Dirección General de la Policía Nacional Civil, la que puso a
disposición de ese Tribunal al señor Germán Chupina Barahona, quien
se encontraba en el Centro Quirúrgico Fátima, ubicado en el Municipio
de Villa Canales del departamento de Guatemala; c) el ocho de
noviembre de dos mil seis, el Tribunal se constituyó a dicho lugar y se
le hizo saber el motivo de su detención y, en auto de esa misma fecha,
se formalizó la misma, dejándolo recluido en dicho centro con la
custodia respectiva; d) dentro del expediente se planteó
inconstitucionalidad en caso concreto por parte de José Efraín Ríos
Montt, la cual fue declarada sin lugar, pero mandándose a suspender
el expediente de extradición. D) Pruebas: no hubo. E) Sentencia de
primer grado: el tribunal consideró: "...Con relación al argumento del
amparista de que la autoridad impugnada, al emitir la resolución de
fecha seis de noviembre de dos mil seis dentro del expediente de
extradición identificado con el número DOS GUIÓN DOS MIL SEIS (2-
2006), lo sitúa en una inminente afectación a sus derechos de
defensa, debido proceso, y al principio del Juez natural consagrados
en los artículos 12 y 14 de nuestra Carta Magna y 14 y 20 del Código
Procesal Penal, al haber ordenado su detención con fines de
extradición por delitos que según el solicitante corresponde conocer a
un Juez de la República de Guatemala, esta Sala estima que no le
asiste la razón al solicitante, toda vez que de conformidad con lo
establecido en el párrafo segundo del Artículo 27 de la
Constitución Política de la República de Guatemala ”La extradición se
rige por lo dispuesto en los tratados internacionales‟ y en el presente
caso, existe un Tratado Internacional vigente entre la República de
Guatemala y el Reino de España, suscrito el siete de noviembre de mil
ochocientos noventa y cinco y publicado en el Diario Oficial el diez de
junio de mil ochocientos noventa y siete, el cual en su artículo II
numerales 1 y 15 contempla entre los delitos por los cuales se puede
solicitar la extradición: los de Homicidio y Secuestro, ilícitos que se le
atribuyen al solicitante del amparo en la causa penal incoada en el
Reino de España y que motivó la presente solicitud de extradición en
su contra. Por otro lado, con relación a la orden de detención con fines
de extradición ordenada en contra del amparista, la misma se
encuentra regulada en el artículo VIII del referido Tratado de
Extradición signado entre los Estado de Guatemala y España, el cual
determina el procedimiento que debe ventilarse en una solicitud de
extradición, de lo cual se deduce que la referida orden de detención
fue emitida conforme a derecho. Ahora, con relación al argumento del
solicitante, de que el caso suyo no se encuadra en ninguno de los
supuestos establecidos en el artículo I del Tratado de Extradición
firmado entre Guatemala y España, al manifestar que él no ha sido
condenado ni está siendo perseguido por las autoridades competentes
del Reino de España, por no haber cometido delitos en el territorio
español y en el segundo caso, por no haberse refugiado en el territorio
de ninguna de las altas partes contratantes, ya que expresa que no
buscó refugio ni asilo en Guatemala, por ser guatemalteco por
nacimiento y tiene su residencia en este país; esta Sala considera que
el amparista realiza una interpretación restrictiva del Artículo I del
Tratado de Extradición signado entre la República de Guatemala y el
Reino de España, toda vez que su caso si se enmarca en uno de los
presupuestos indicados en la referida disposición legal, por razón de
que el amparista está siendo perseguido por la otra parte contratante,
sindicado en un Órgano Jurisdiccional español de cometer delitos que
tienen el carácter de extraditables de conformidad con el relacionado
Tratado, y al respecto, esta Sala estima que el supuesto establecido
en el artículo I del relacionado tratado, referente al caso de las
personas perseguidas por las autoridades de una de las dos partes
contratantes, como autores principales, auxiliares, o cómplices de los
delitos a que se hace referencia en el Tratado respectivo, no se refiere
con exclusividad a los casos de delitos cometidos dentro de la esfera
jurisdiccional del Estado requirente, ya que, en aplicación a los
principios generales de Extraterritorialidad de la ley penal, al solicitante
se le atribuyen delitos que pueden ser materia de conocimiento por
parte de un órgano Jurisdiccional de España, al haber sido cometidos
contra ciudadanos españoles dentro de su respectiva sede
diplomática, y que bajo ese contexto, si pueden ser considerados
ilícitos cometidos en el territorio de la parte requirente, ya que de
acuerdo al tratadista Alfred Verdross, citado por Jesús Guadalupe
Luna Altamirano en su libro: La Extradición en México y en otros
países, página ciento tres (103): „Territorio es aquel sobre el cual el
Derecho Internacional reconoce a un Estado la soberanía territorial, y
agrega: territorio en sentido amplio abarca la tierra firme sobre la que
se asienta el Estado con sus aguas interiores, el fondo del mar y el
subsuelo marítimo, permanentemente ocupados, además del mar
territorial, para el derecho internacional, territorio es el espacio
terrestre (suelo y subsuelo), el aéreo, los mares (plataforma
continental, mar territorial, mar patrimonial), las naves (aéreas y
marítimas), y aquel donde se ubican las representaciones diplomáticas
de cada país en el extranjero, donde ejerce su soberanía, la cual debe
entenderse como el poder de actuación exclusiva que el Estado tiene
sobre un territorio, con los únicos límites que el derecho internacional
haya fijado‟. De lo anteriormente considerado, se deduce que el
amparista realizó una interpretación restrictiva del artículo I del
Tratado de Extradición signado entre la República de Guatemala y el
Reino de España, indicar que su caso no está contemplado en la
referida disposición del citado Tratado, situación que conduce a esta
Sala a la convicción de que la autoridad impugnada actuó en el ámbito
de sus funciones jurisdiccionales al emitir la resolución que constituye
el acto reclamado, en consecuencia de lo anterior, se arriba a la
conclusión de que no se ha conculcado ningún derecho al peticionante
del amparo, razón por la cual, la presente Acción Constitucional de
Amparo deviene improcedente...”. Y resolvió: "...I) IMPROCEDENTE
EL AMPARO promovido por GERMAN CHUPINA BARAHONA contra
el Tribunal Quinto de Sentencia Penal, Narcoactividad y Delitos contra
el Ambiente; II) Se condena en costas al postulante y se impone al
abogado patrocinante Héctor Fernando Gutiérrez Mendoza la MULTA
de Quinientos quetzales, que deberá hacer efectiva en la Tesorería de
la Corte de Constitucionalidad dentro de los cinco días de que este
fallo cause ejecutoria, o en caso contrario su cobre se deberá hacer en
la vía legal correspondiente...".

III. APELACIÓN
El postulante apeló por estimar que la argumentación del Tribunal de
Amparo de primera instancia, no está ajustada a derecho, por lo que
solicitó que se declare con lugar el recurso de apelación y se revoque
la sentencia venida en grado.
IV. ALEGATOS EN EL DÍA DE LA VISTA
A) El accionante no alegó. B) Ángel Aníbal Guevara Rodríguez,
tercero interesado, manifestó que: a) la autoridad recurrida, al dictar
el auto impugnado, violó derechos constitucionales, puesto que omitió
la aplicación del Tratado de Extradición, específicamente, en calificar
la competencia del Tribunal que la solicita, circunstancia fundamental
de procedibilidad que tuvo que realizar el tribunal de oficio, y de esta
forma dispone el inicio de una persecución penal, sin respetar las
normas constitucionales del derecho de defensa y de un debido
proceso; b) el siete de noviembre de mil ochocientos noventa y cinco,
el Estado de Guatemala suscribió con el Reino de España un Tratado
de Extradición, aprobado por medio del Decreto Legislativo 357 de
diecinueve de abril de mil ochocientos noventa y siete,
comprometiéndose ambos Estados a entregarse, recíprocamente, los
individuos que habiendo sido condenados o estando perseguidos por
las autoridades competentes de una de las dos Altas Partes
Contratantes, como autores principales, auxiliares o cómplices de
cualquiera de los crímenes o delitos que se expresarán en el artículo
siguiente, se hubieren refugiado en el territorio de la otra, en tal
sentido, se concluye que el analizar la competencia y definición de un
Tribunal, de acuerdo con el Tratado de Extradición mencionado, el
Estado de Guatemala no tiene obligación ni compromiso alguno de
entregar a los guatemaltecos requeridos por el Gobierno de España,
cómo tampoco España tendría obligación de entregar a Guatemala
ninguno de sus súbditos, cuando el delito no fue cometido en el
territorio del Estado que lo solicita; c) el tratado de extradición, que se
refiere exclusivamente a quienes “se refugien” en el otro Estado,
expresión que pareciera excluir a los ciudadanos del Estado requerido
quienes no podrían ser “refugiados” en su propia patria, por tanto en el
presente caso no se puede decir que es refugiado en Guatemala,
puesto que siempre ha vivido en este país. Solicitó que se revoque la
sentencia apelada y se otorgue amparo. C) La Unidad de Casos
Especiales y Violaciones a Derechos Humanos del Ministerio
Público señaló que la Sala Primera de la Corte de Apelaciones del
Ramo Penal, Narcoactividad y Delitos Contra el Ambiente, constituida
en Tribunal de Amparo, al emitir la resolución apelada, resolvió con
estricto apego a las leyes y en aplicación del artículo 27 constitucional,
segundo párrafo, ya que: a) el tratado de extradición celebrado entre
el Estado de Guatemala y el Reino Español, el siete de noviembre de
mil ochocientos noventa y cinco,adicionado el veintitrés de febrero de
mil ochocientos noventa y siete, se convierte en ley de aplicación
nacional, en el cual, en su artículo XI se regula que en casos urgentes
cada uno de los dos gobiernos, apoyándose en una sentencia
condenatoria o en un mandamiento de prisión, podrán, por el medio
más rápido y aún por teléfono, pedir y obtener la prisión del acusado o
el condenado, bajo condiciones de presentar, lo más pronto posible, el
documento cuya existencia se ha puesto, por lo que se advierte quela
autoridad impugnada actuó en el ámbito de sus funciones
jurisdiccionales al emitir la resolución que constituye el acto
reclamado; b) en el presente caso, debe imperar el principio de que
las relaciones internacionales se basan en la buena fe, confiando cada
uno de los Estados en las decisiones y en que los actos efectuados
por los países se realizan en cumplimiento de las normas nacionales e
internacionales. Solicitó que se confirme la sentencia apelada y que se
deniegue el amparo analizado. D) La Fiscalía de Asuntos
Constitucionales, Amparos y Exhibición Personal del Ministerio
Público indicó que: a) en el Tratado de Extradición suscrito en
Guatemala, el siete de noviembre de mil ochocientos noventa y cinco,
aprobado por el Decreto Legislativo 357 de diecinueve de abril de mil
ochocientos noventa y siete, se refiere a una serie de delitos que
enumera el artículo II del mismo, y que para el caso sub judice, tienen
que ser del conocimiento de un tribunal del orden penal competente
de primera instancia, en donde han de desvanecerse los ilícitos que le
sean sindicados; b) por lo que, el tribunal de amparo debe examinar
los hechos, analizar las pruebas y actuaciones y todo aquello que
formal, real y objetivamente resulte pertinente, examine todos y cada
uno de los fundamentos de derecho aplicables, hayan sido o no
alegados por las partes. Solicitó que se dicte la sentencia que en
derecho corresponde.

CONSIDERANDO
-I-
El principio de definitividad, previsto en el artículo 19 de la Ley de
Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad, implica la
obligación de que previamente a pedir amparo en los asuntos
judiciales y administrativos que tengan un procedimiento establecido
en la ley, se debe hacer uso de los recursos ordinarios que contempla
la legislación que norma el acto reclamado. Esto obedece a razones
de seguridad y certeza jurídicas porque el amparo, por su naturaleza
subsidiaria y extraordinaria, no puede constituirse en vía procesal
paralela a la jurisdicción ordinaria, por medio de la cual los presuntos
agraviados persigan la satisfacción de una pretensión que puede ser
tramitada de conformidad con el procedimiento señalado en la ley que
rige el acto.
-II-
En el presente caso, Germán Chupina Barahona promueve amparo
contra el Tribunal Quinto de Sentencia Penal, Narcoactividad y Delitos
Contra el Ambiente del departamento de Guatemala, señalando como
acto reclamado la resolución de seis de noviembre de dos mil seis,
dictada por la autoridad impugnada, en la que se ordena, bajo la
responsabilidad del Reino de España, la detención provisional del
amparista y de Pedro García Arredondo, Oscar Humberto Mejía
Víctores y Ángel Aníbal Guevara, por los delitos de Terrorismo,
Homicidio y Secuestro, previo a la solicitud formal de extradición, ya
que considera que se violan sus derechos a la justicia, de defensa,
principios jurídicos de debido proceso, presunción de inocencia y de
juez natural, porque con la emisión del acto reclamado, se produce la
amenaza real de que el Reino de España, en el plazo de dos meses,
efectúe el trámite de extradición, sin que se haya examinado la
competencia del Tribunal, y aplicando equivocadamente en el Tratado
de Extradición de mérito, en virtud que el mismo sólo es aplicable a
individuos que, habiendo sido condenados, o perseguidos por las
autoridades competentes de uno de los mismos, como autores
principales, auxiliares o cómplices de cualquiera de los delitos que se
expresan en dicho Tratado, se hubieren refugiado en el territorio del
otro, y no a un guatemalteco que se encuentre en su país; además,
estima que la solicitud presentada por España no es por un delito de
lesa humanidad o contra el Derecho Internacional.
Esta Corte, del estudio del memorial de amparo presentado, establece
que, el amparista señala como acto reclamado la resolución por la
cual la autoridad impugnada ordena su detención provisional por los
delitos de Terrorismo, Homicidio y Secuestro, previo a la solicitud
formal de extradición, expresando como motivo de agravio la amenaza
de ser extraditado sin haberse examinado la competencia del Tribunal,
y aplicando, según su criterio, equivocadamente el Tratado de
Extradición de mérito; al hacer el estudio correspondiente, esta Corte
advierte que el amparista, previo a acudir a esta vía constitucional
debió impugnar la resolución contra la que ahora reclama, y que a su
juicio le causa agravio, para que la misma jurisdicción ordinaria agote
la posibilidad de defensa del ahora amparista antes de acudir a esta
vía. Lo anterior evidencia la falta de cumplimiento del principio de
definitividad del acto reclamado, establecido en el artículo 19 de la Ley
de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad, lo cual
determina la notoria improcedencia de la acción constitucional
planteada.
Es importante señalar que el motivo de agravio expresado por el
amparista, es decir, la amenaza de ser extraditado sin haberse
examinado la competencia del Tribunal, y aplicando, según su criterio,
equivocadamente el Tratado de Extradición de mérito, no deriva
directamente del acto reclamado, y es, precisamente, lo que el
Tribunal Penal deberá analizar, valorar y resolver en la tramitación de
la extradición aludida, por lo que, se evidencia que no concurre la
conexidad necesaria entre el acto reclamado y la amenaza de causar
agravio al postulante, pues la detención del amparista no generó el
proceso de extradición, y siendo que uno de los efectos de la
procedencia del amparo es dejar en suspenso o sin efecto, en cuanto
al reclamante, el acto impugnado, el amparo resulta prematuro pues
no hay materia sobre la cual deba resolverse, por estar pendiente de
obtenerse una decisión del Tribunal competente en definitiva; de esa
cuenta, el amparo es notoriamente improcedente, y habiendo resuelto
en ese sentido el tribunal a quo procede, en consecuencia, confirmar
la denegatoria del amparo, contenida en la sentencia apelada, pero
por las razones aquí consideradas, con la modificación en el monto de
la multa impuesta al abogado patrocinante.

LEYES APLICABLES
Artículos citados y 265, 268 y 272 inciso c) de la Constitución Política
de la República de Guatemala; 1o, 5o, 6o, 8o, 27, 42, 44, 46, 47, 60,
61, 62, 63, 64, 149, 163 inciso c), 185 y 186 de la Ley de Amparo,
Exhibición Personal y de Constitucionalidad y 17 del Acuerdo 4-89 de
la Corte de Constitucionalidad.

POR TANTO
La Corte de Constitucionalidad, con base en lo considerado y leyes
citadas, resuelve: I) Confirma la sentencia apelada, con la
modificación de que la multa impuesta al abogado patrocinante,
Héctor Fernando Gutiérrez Mendoza, es de un mil quetzales
exactos. II) Notifíquese y, con certificación de lo resuelto, devuélvanse
los antecedentes al tribunal de origen.
ANALISIS
En el expediente detallado con anterioridad se encuentra el proceso y
la forma en que se llevo a cabo la Apelación de Un Amparo en
Materia de Extradición:
Esto inicia por una resolución que se impugna la cual es emanada del
Reino de España pidiendo la orden de captura de varios ciudadanos
guatemaltecos, los delitos de Terrorismo, Homicidio y Secuestro,
previo a solicitar la extradición de una manera formal a la cual el
Tribunal guatemalteco otorgo la orden de captura no así la orden de
extradición definitiva.
Reclamándose como derechos violados por los postulantes los
siguientes: derechos a la justicia, de defensa, principios jurídicos de
debido proceso, presunción de inocencia y de juez natural, motivada
esta solicitud por un hecho ocurrido en la embajada de España en
nuestro país, esta resolución en nuestro país se le dio tramite siempre
dejando en responsabilidad del Reino de España la solicitud y acá se
ordeno la detención de los implicados.
La solicitud indicaba que en un plazo de dos meses se tendría que
enviar a los acusados a España con lo cual se violaban los derechos
antes mencionados de los implicados los cuales están consagrados en
nuestra Carta Magna, solicitud basada en Tratado de Extradición
suscrito entre la República de Guatemala y el Reino de España con
fecha siete de noviembre de mil ochocientos noventa y cinco, la
solicitud presentada por España no es por un delito de lesa
humanidad o contra el Derecho Internacional, por lo que no procede la
extradición aludida, ya que los delitos que se les imputaban no
estaban contenidos en ese tratado bilateral entre las dos naciones en
cuestión. (Indicado esto por el interponente)
Pero el tratado en su artículo II numerales 1 y 15 contempla entre los
delitos por los cuales se puede solicitar la extradición: los de Homicidio
y Secuestro, ilícitos que se le atribuyen a los procesados. Alegando el
interponente que el no cometió ningún delito en territorio Español y
que el no busco asilo en Guatemala, ya que el radica en este país por
ser guatemalteco de origen. Indicando la autoridad impugnada que el
amparista esta haciendo una interpretación restrictiva del tratado pues
la sede Diplomática de España en nuestro país en base a la
legislación en materia de derecho internacional indica que la sedes
diplomáticas son tomadas como territorio del país de donde provienen.
Se planteo un amparo por parte de los interesados el cual no fue
otorgado por la Justicia Guatemalteca, según el solicitante
corresponde conocer a un Juez de la República de Guatemala el
hecho que se le imputa.

La Sala estimo que no le asiste la razón al solicitante, toda vez que de


conformidad con lo establecido en el párrafo segundo del Artículo 27
de la
Constitución Política de la República de Guatemala: „La extradición se
rige por lo dispuesto en los tratados internacionales‟ y en el presente
caso, existe un Tratado Internacional vigente entre la República de
Guatemala y el Reino de España.
Los interponentes en su argumentación hacen el análisis de que el
Estado de Guatemala no tiene obligación ni compromiso alguno de
entregar a los guatemaltecos requeridos por el Gobierno de España,
cómo tampoco España tendría obligación de entregar a Guatemala
ninguno de sus súbditos, cuando el delito no fue cometido en el
territorio del Estado que lo solicita. Argumentando asi mismo que el
tratado indica que es cuando los perseguidos se refugien en uno de
los países signatarios y ellos no pueden ser refugiados por estar en
territorio nación que es su nación de origen.
Se argumentan los postulantes que dicha orden fue enviada del reino
de España pidiendo su captura inmediata sin tener ellos el derecho de
defensa ni de debido proceso pues la solicitud pedía la extradición de
ellos hacia España, sin dar tiempo ni termino a defenderse, lo cual es
un derecho Constitucional.
Solicitan los interponentes que el tribual de amparo debe examinar los
hechos, analizar las pruebas y actuaciones y todo aquello que formal,
real y objetivamente resulte pertinente, examine todos y cada uno de
los fundamentos de derecho aplicables, antes de ordenar la
extradición, para que exista un debió proceso y no ordenar la
extradición inmediatamente sin analizar lo antes detallado.
La Corte de Constitucionalidad de nuestro país en su análisis
respectivo indica que el interponente en base al principio de
definitividad de la Ley de Amparo y Exhibición Personal, era necesario
que impugnara la resolución donde se ordena su captura, en el órgano
jurisdiccional correspondiente y no acudir a la vía Constitucional sin
antes realizar esa impugnación en el juzgado respectivo, por lo cual el
amparo es improcedente. Esto fundamentado en que el Tribunal no
había ordenado la extradición sino solo la captura y estar pendiente el
proceso de extradición definitiva, entonces no hay porque atacar la
solicitud de extradición si el Tribunal guatemalteco no la ha
confirmado.
En base al análisis que antecede concluimos que el Amparista debió
realizar sus alegatos en el Órgano Jurisdiccional correspondiente
antes de realizarlo por la vía constitucional, y su ampara se basa en la
improcedencia de la extradición, y esta aun no había sido otorgada en
definitiva, por lo cual su recurso era improcedente, ya que atacaba una
orden de extradición que no había sido confirmada por nuestros
órganos jurisdiccionales, de debió atacar de esta manera si el Tribual
hubiera ordenado la extradición inmediata luego de su captura, y esto
no era así, asimismo se debía impugnar en primer término en el
Tribunal correspondiente.

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