Salud Mental Fasc 11

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ABC CON LA EDUCACIÓN

SALUD MENTAL PARA LA


FORMACIÓN INTEGRAL
Reconocido por resolución DGFPE N.º 1078/2023 del MEC (150 h reloj)

Doctores psiquiatras Viviana Riego Meyer, Noelia Ruiz Díaz y Marcelo O’Higgins

Adicciones al consumo de sustancias y conductuales


El campo de la psiquiatría clínica, la psicología médica y la medicina de las adic-
ciones utilizan varios términos fundamentales para describir y entender el com-
portamiento asociado al uso de sustancias. Aquí definimos y diferenciamos los
siguientes conceptos:

Consumo nocivo. Se refiere a un patrón de consumo de sustancias que es dañino


para la salud del consumidor. Puede llevar a enfermedades físicas o psicológicas.
Se centra más en el daño a la salud que en las consecuencias sociales o legales.

Abuso de sustancias. Describe un patrón de uso de sustancias que lleva a con-


secuencias significativamente adversas en diversas áreas de la vida de una per-
sona, como problemas legales, sociales, laborales o de salud. El abuso implica un
uso continuado a pesar de la presencia de problemas relacionados y no necesa-
riamente incluye la dependencia física o psicológica.

Ambos términos describen patrones de consumo problemático, pero desde pers-


pectivas ligeramente diferentes.

Dependencia. Describe un patrón complejo de comportamiento, incluyendo la


necesidad intensa de consumir la droga, dificultades para controlar su consumo,
persistencia en su uso a pesar de las consecuencias perjudiciales, una mayor prio-
ridad otorgada al uso de la droga sobre otras actividades e intereses y, a menudo,
el desarrollo de tolerancia y síndromes de abstinencia. La dependencia indica una
condición física y psicológica más grave que el abuso de sustancias.

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La principal diferencia entre abuso de sustancias y dependencia de sustancias radica


en que mientras el abuso puede ser episódico, no siempre conlleva dependencia físi-
ca, la dependencia implica un vínculo físico y psicológico con la sustancia, que requie-
re a menudo tratamiento especializado para su superación.
Adicción. Es un trastorno cerebral crónico y recurrente caracterizado por la búsqueda
y el uso compulsivo de drogas, alcohol o comportamientos como el juego, a pesar de
las consecuencias adversas. Es una forma severa de dependencia.
Craving. Se refiere al intenso deseo o ansia por consumir una sustancia específica.
El craving es un componente psicológico significativo de la adicción que puede ser
desencadenado por diversos factores, como el estado de ánimo del individuo, la pre-
sencia en un entorno asociado al consumo anterior o incluso el pensamiento sobre la
sustancia. Este fenómeno puede ocurrir en cualquier etapa de la adicción, incluso des-
pués de largos períodos de abstinencia y es una de las principales causas de recaída.
Abstinencia. Describe los síntomas físicos y psicológicos que ocurren cuando una
persona que ha estado consumiendo una sustancia de manera regular y prolongada
reduce o detiene su consumo. Los síntomas de abstinencia varían según la sustancia
y pueden incluir ansiedad, irritabilidad, temblores, náuseas, insomnio, depresión y, en
casos graves, condiciones potencialmente mortales.
Tolerancia. Ocurre cuando, después de usar repetidamente una sustancia, el individuo
necesita una mayor cantidad de esta para lograr el efecto deseado o nota un efecto
reducido con el uso continuo de la misma cantidad.
Drogas. Son sustancias químicas que alteran el funcionamiento del cerebro, afectan-
do a las sensaciones, el estado de ánimo, la conciencia y el comportamiento. Pueden
ser legales (como el alcohol y el tabaco) o ilegales (como la cocaína y la marihuana).

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Tipos de adicciones
Pueden clasificarse principalmente en dos grandes categorías: adicciones a sustan-
cias y adicciones conductuales. Aquí se describen algunas de las adicciones más
comunes dentro de estas categorías:
Adicciones a sustancias
1. Alcoholismo. El alcohol es una de las sustancias más ampliamente abusadas en
el mundo. A pesar de ser legal en muchos países, el abuso del alcohol puede llevar a
graves consecuencias de salud física y mental, así como impactos negativos en las
relaciones sociales y laborales.
2. Tabaquismo. Adicción a la nicotina presente en los productos de tabaco, que con-
lleva un fuerte deseo de fumar y síntomas de abstinencia al intentar dejarlo. El taba-
quismo está directamente relacionado con enfermedades respiratorias, cardiovascu-
lares y varios tipos de cáncer. Dentro de esta adicción en específico debemos hablar
de los cigarrillos electrónicos.
Los cigarrillos electrónicos, también conocidos como e-cigarrillos o sistemas electró-
nicos de administración de nicotina (SEAN), son dispositivos diseñados para simular
el acto de fumar tabaco sin quemar hojas de tabaco reales. Funcionan calentando un
líquido para generar un aerosol, o «vapor», que el usuario inhala. Este líquido general-
mente contiene nicotina, propilenglicol, glicerina vegetal y saborizantes.
Tipos de cigarrillos electrónicos

POD MOD PU JD POD MOD VAPE MOD BOX MOD BOX MOD DISPOSABLE

Representan diferentes tipos de cigarrillos electrónicos, cada uno etiquetado con su nombre respectivo: sistema Pod Mod, un Vape Pen clásico, un
Box Mod avanzado y un cigarrillo electrónico desechable. Cada imagen destaca el diseño y las características únicas de cada tipo de dispositivo.

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Impacto en la salud. Aunque se promocionan como una alternativa menos dañina al


tabaco tradicional, los cigarrillos electrónicos no están exentos de riesgos para la sa-
lud. Pueden contener sustancias nocivas, como formaldehído y acetaldehído, aunque
en concentraciones menores que los cigarrillos convencionales. El impacto a largo
plazo de su uso sigue siendo objeto de investigación, pero estudios indican potencia-
les riesgos para la salud cardiovascular y respiratoria. Además, existe preocupación
por los efectos del consumo crónico de nicotina, especialmente en adolescentes, cuyo
uso puede afectar el desarrollo cerebral. Los cigarrillos electrónicos que contienen
nicotina presentan un riesgo significativo de dependencia.
Efectividad del vapeo para dejar de fumar
La evidencia sobre la efectividad del vapeo para dejar de fumar es mixta. Algunos
estudios sugieren que los cigarrillos electrónicos pueden ser efectivos como herra-
mienta de cesación para fumadores adultos que buscan dejar el tabaco, ofreciendo
una alternativa para satisfacer la necesidad de nicotina sin los muchos carcinógenos
presentes en el humo del tabaco. Sin embargo, otros estudios piden cautela debido a
la variabilidad en la calidad y la concentración de nicotina en los dispositivos de vapeo,
lo que puede influir en su efectividad. Los jóvenes o no fumadores también presentan
el riesgo de desarrollar una nueva dependencia a la nicotina a través del vapeo.
3. Adicción a drogas ilícitas. Incluye la dependencia de sustancias como la cocaína, he-
roína, metanfetaminas, éxtasis (MDMA), LSD y otras drogas ilegales que alteran la mente.
Cannabis (marihuana). Aunque la percepción del riesgo asociado al consumo de
cannabis ha disminuido y su legalidad ha aumentado en varios lugares, su consu-
mo puede conducir a problemas de salud mental, dependencia y dificultades en
el funcionamiento social. Es más, muchas publicaciones actuales han relacionado
el consumo de cannabis y las intoxicaciones con cannabis con mayor riesgo de
desarrollar trastornos psicóticos (entre ellos un mayor riesgo para el desarrollo de
esquizofrenia) por lo que su consumo tiene consecuencias potencialmente graves
para la salud mental y física.
Cocaína y crack. Estimulantes potentes que pueden causar una fuerte dependencia
psicológica y física. El uso regular de cocaína está asociado con problemas cardio-
vasculares, neurológicos y psiquiátricos.
Metanfetaminas. Incluyendo el «cristal meth», estas sustancias son estimulantes
poderosos con un alto potencial de adicción. El abuso de metanfetaminas puede
causar daños severos a la salud, incluyendo problemas dentales, de la piel, y altera-
ciones cerebrales.
4. Adicción a medicamentos recetados. Dependencia de medicamentos que inicial-
mente fueron recetados por un médico para una condición legítima, como opioides
(para el dolor), ansiolíticos (para la ansiedad) y estimulantes (para el TDAH).

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Opioides. Estos incluyen tanto los analgésicos recetados (como la morfina, la oxi-
codona y el fentanilo) como las drogas ilegales (heroína). La crisis de opioides, es-
pecialmente en los Estados Unidos, ha llevado a un aumento significativo en las
sobredosis y las muertes relacionadas con estas sustancias.
Benzodiazepinas. Usadas médicamente para tratar la ansiedad y el insomnio, estas
sustancias pueden ser adictivas y su retiro debe ser cuidadosamente monitoreado
por profesionales de la salud.
Adicciones conductuales
1. Adicción al juego (ludopatía). Es un trastorno de control de impulsos que se carac-
teriza por la incapacidad de resistir los impulsos de jugar, a pesar de las consecuen-
cias negativas. Los signos y síntomas más comunes de la adicción al juego incluyen:
a. Preocupación por el juego. Pensar constantemente en experiencias pasadas de
juego, planificar la próxima sesión de juego o pensar en formas de obtener dinero
para jugar.
b. Necesidad de jugar con cantidades crecientes de dinero para alcanzar el nivel de
excitación deseado.
c. Intentos fallidos de controlar, reducir o detener el juego.
d. Inquietud o irritabilidad al intentar dejar de jugar.
e. Juego como forma de escapar de problemas o de aliviar sentimientos de desespe-
ranza, culpa, ansiedad o depresión.
f. Perseverar en el juego a pesar de las consecuencias negativas, como la pérdida de
relaciones significativas, oportunidades laborales, educativas o financieras.
g. Mentir a familiares, terapeutas u otros para ocultar la magnitud de la implicación
en el juego.
h. Actos ilegales como fraude, robo o falsificación para financiar el juego.
i. Arriesgar o perder relaciones significativas, trabajo y oportunidades educativas o de
carrera debido al juego.
j. Confiar en otros para obtener dinero que alivie una situación financiera desesperada
causada por el juego.
El reconocimiento de estos signos es crucial para la intervención temprana y el trata-
miento. Las estrategias de tratamiento pueden incluir terapia cognitivo-conductual,
programas de autoayuda y apoyo y, en algunos casos, medicación.

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2. Adicción a la comida. Comportamiento compulsivo hacia el consumo de alimen-


tos, a menudo relacionado con la búsqueda de consuelo o una respuesta a emociones
negativas.
3. Adicción al trabajo (workaholismo). Necesidad compulsiva de trabajar constante-
mente, lo que afecta la salud, la felicidad y las relaciones interpersonales.
4. Adicción a internet y a los videojuegos. Uso compulsivo de internet y/o videojue-
gos que interfiere con la vida cotidiana y las responsabilidades.
5. Adicción al sexo. Comportamiento sexual compulsivo que domina la vida del indi-
viduo, afectando sus relaciones y actividades diarias.
6. Adicción a las compras. Impulso irresistible de realizar compras de manera fre-
cuente y en exceso, a menudo para aliviar el estrés o las emociones negativas.
Cada tipo de adicción requiere un enfoque específico para el tratamiento, que puede
incluir terapia, medicación y apoyo grupal, entre otras intervenciones.
Criterios para diagnosticar el abuso de sustancias
El diagnóstico del abuso de sustancias se basa en criterios establecidos por manuales
de diagnóstico como el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales
(DSM), publicado por la Asociación Americana de Psiquiatría. A partir de la quinta edi-
ción (DSM-5), el término «abuso de sustancias» ha sido reemplazado por el concepto
más integrador de «Trastorno por uso de sustancias», que engloba tanto el abuso
como la dependencia de sustancias bajo un único diagnóstico continuo. Los criterios
incluyen un conjunto de comportamientos mal adaptativos relacionados con el uso de
la sustancia que lleva a un deterioro o sufrimiento clínicamente significativo.
¿Cómo manejamos nuestras adicciones?
Manejar las adicciones es un proceso complejo que requiere compromiso, tiempo y,
a menudo, apoyo profesional. Aquí tienes algunas estrategias que pueden ayudar en
este proceso:

Manejo de adicciones

Reconocimiento y apoyo Tratamiento y grupo de apoyo

Reconocimiento Busca apoyo Tratamiento Grupos de


del problema profesional médico apoyo

Reconocer la existencia Terapias y ayuda Manejo de Participación


de la adicción especializada desintoxicación en AA o NA
y síntomas de
abstinencia

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Manejo de adicciones

Desarrollo personal Metas y apoyo

Desarrollo de
Establecimiento Evitar Establecer Apoyo de
habilidades y Prevención
de una rutina desencadenantes metas amigos y
estrategias de de recaídas
saludable realistas familia
afrontamiento

Aprender Mejora de la Identificar y Fijación de Comunica- Planificación


habilidades salud física y evitar situacio- objetivos para la ción y com- ante posibles
saludables mental nes de riesgo recuperación prensión recaídas

Manejar una adicción es un camino hacia el bienestar que puede presentar desafíos,
pero con el apoyo y las estrategias adecuadas, la recuperación es posible. Es impor-
tante recordar que buscar ayuda es un signo de fuerza, no de debilidad.
Estrategias de prevención para las adicciones
La prevención de las adicciones es un enfoque multifacético que abarca desde la in-
tervención temprana hasta la educación y el cambio comunitario. Algunas estrategias
efectivas son:
1. Educación y concienciación. Informar a la población sobre los riesgos y conse-
cuencias del abuso de sustancias y las adicciones comportamentales es fundamen-
tal. Esto incluye programas en escuelas, comunidades y medios de comunicación que
aborden los efectos nocivos del consumo de drogas, alcohol y el desarrollo de adic-
ciones comportamentales.
2. Programas de habilidades para la vida. Enseñar a los jóvenes a manejar el estrés,
a resistir la presión de grupo y a resolver conflictos de manera efectiva.
3. Intervenciones tempranas. Identificar y ofrecer apoyo a individuos en riesgo de
desarrollar adicciones.
4. Acceso a servicios de salud mental. Facilitar el acceso a servicios de salud mental
y programas de asesoramiento puede ayudar a abordar las causas subyacentes de las
adicciones, como trastornos de ansiedad o depresión.
5. Políticas públicas y regulaciones. Limitar el acceso a sustancias adictivas a través
de restricciones de edad, impuestos y regulaciones sobre publicidad y disponibilidad.
6. Entornos seguros y de apoyo. Crear entornos seguros y de apoyo en familias, es-
cuelas y comunidades que promuevan estilos de vida saludables.

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7. Promoción de actividades alternativas. Fomentar la participación en deportes, ar-


tes, y otras actividades recreativas como medios positivos para el manejo del tiempo
libre y la construcción de relaciones interpersonales saludables.
8. Fortalecimiento comunitario. Involucrar a la comunidad en la creación de un
ambiente que desaliente el abuso de sustancias y promueva la salud y el bienestar
general.
La prevención efectiva de las adicciones requiere un enfoque coordinado de tra-
bajo que incluya a individuos, familias, escuelas, comunidades y el gobierno para
reducir los factores de riesgo y promover factores protectores en todos los niveles
de la sociedad.

En el Paraguay existen escasos centros tanto públicos como privados dedicados


al tratamiento de adicciones a sustancias y adicciones comportamentales. La
oferta de servicios puede variar desde atención psicológica y psiquiátrica hasta
programas de rehabilitación integral. También cabe mencionar a los grupos
de apoyo, como Alcohólicos Anónimos (AA) y Narcóticos Anónimos (NA), que
operan en varias partes del país. Estos grupos brindan un espacio de apoyo
mutuo para personas que buscan superar su dependencia de sustancias.

Fuentes:
1. GUILLEM, F.C. (2024). Cómo implementar un programa de deshabituación tabáquica en atención primaria. FMC-Forma-
ción Médica Continuada en Atención Primaria, Elsevier. Recuperado de https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/
S1134207223002530
2. MAÑAS-PADILLA, M.C. (2024). Alteraciones conductuales y cognitivas inducidas por cocaína: beneficios del enriquecimiento
ambiental. Recuperado de https://riuma.uma.es/xmlui/handle/10630/30418
3. DE ALVISO, A.D., DÍAZ, V.E.A., FLECHA, Á.B.A., ... (2023). Conocimiento y practica del uso de los cigarrillos electrónicos de los
habitantes del Barrio Salinas de la ciudad de Ñemby. Ciencia Latina Revista Científica Multidisciplinar. Recuperado de https://
www.ciencialatina.org/index.php/cienciala/article/view/8842

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Fecha: 28/3/24

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