Disertación
Disertación
Disertación
1. Concepto
La disertación es un ejercicio de reflexión personal que busca responder a una
pregunta planteada. Es a la vez un ejercicio informado, argumentadas a través de
palabras o referencias de diversas fuentes de autores reconocidos en la materia.
Consta de 3 etapas: problematizar, argumentar y concluir. En los ejercicios
universitarios la mayoría de docentes no exigen conclusiones, dado que han
planteado que para concluir se requiere un nivel de educación aún superior como
el doctorado.
2. Cuenta historias
Seguro tampoco te dijeron que las presentaciones o slides no son un
telepronter y que únicamente las necesitas como apoyo. No te preocupes,
es un error muy frecuente y estamos a tiempo de cambiarlo.
Te sugiero que comiences con una historia para construir tu tema, algo que
te hace muy feliz o una anécdota. También puedes usar una situación
política o económica. Involucra a tu público, esto ayudará para que no
pierdas atención y quieran seguir escuchándote. Somos seres humanos y
estamos conectados por emociones, así que transmite emociones.
3. El lenguaje corporal
La comunicación no verbal también es muy importante en un discurso y es
uno de los factores que más influyen en la confianza que se transmite al
público. El cuerpo dice mucho de lo que siente el orador. Dependiendo de lo
que se quiera decir, adoptar el lenguaje corporal adecuado puede marcar la
diferencia en los objetivos. En general, lo ideal es mantener el cuerpo
erguido, prestar atención a los gestos y articular las palabras con calma y
autoridad.
4. El tono
El tono de tu voz será importante para atraer o distraer la atención del
público. Te sugiero manejar un tono entre lentos y altos, no vayas tan
rápido. Las pausas durante las frases te ayudan a conectar tus ideas,
relajarte y lo más importante, tener la atención de un auditorio completo.
5. Manejar la voz
La entonación es un aspecto crucial en los discursos: hay que evitar que las
frases declarativas suenen como preguntas o que la voz se escuche baja y
áspera. El orador debe controlar el ritmo mediante la respiración para que el
volumen y el tono sean los adecuados y el discurso sea interesante de
seguir.