Sentencia No. T-578:92
Sentencia No. T-578:92
Sentencia No. T-578:92
T-578/92
SERVICIOS PUBLICOS DOMICILIARIOS-Finalidad/DERECHO AL
SERVICIO DE ACUEDUCTO
Los servicios públicos "domiciliarios" son aquellos que se prestan a través del sistema de
redes físicas o humanas con puntos terminales en las viviendas o sitios de trabajo de los
usuarios y cumplen la finalidad específica de satisfacer las necesidades esenciales de las
personas. El servicio público es el género y el servicio público domiciliario es especie de
aquél. Y en segundo lugar se concluye que el acueducto es un servicio público
domiciliario. Así pues, la conexión de redes de acueducto y alcantarillado en un predio
que lo habilite para ser ocupado posteriormente por las personas, no cumple con el
requisito relacionado con la satisfacción inmediata de las necesidades, ya que si bien se
trata de un servicio público domiciliario (servicio de agua), su limitación o el
incumplimiento en la prestación del servicio por el Estado, los particulares o las
comunidades organizadas no constituye vulneración o amenaza de un derecho
constitucional fundamental por no encontrarse vinculada directamente la persona, el ser
humano, sino la persona jurídica que contrató.
DERECHO A LA SALUBRIDAD PUBLICA/DERECHO AL SERVICIO DE
ALCANTARILLADO/DERECHOS FUNDAMENTALES
El agua constituye fuente de vida y la falta del servicio atenta directamente con el derecho
fundamental a la vida de las personas. Así pues, el servicio público domiciliario de
acueducto y alcantarillado en tanto que afecte la vida de las personas, la salubridad
pública o la salud, es un derecho constitucional fundamental y como tal ser objeto de
protección a través de la acción de tutela. En este caso el servicio de acueducto no cumple
con la finalidad de satisfacer las necesidades esenciales de las personas naturales, pues en
este caso la conexión o la habilitación del predio para la construcción posterior de las
viviendas beneficiaría a una persona jurídica para las cuales no constituye derecho
constitucional fundamental.
PERSONA JURIDICA-Derechos Fundamentales
Son también objeto de tutela los derechos constitucionales fundamentales de las personas
jurídicas, no per se, sino que en tanto que vehículo para garantizar los derechos
constitucionales fundamentales de las personas naturales, en caso concreto, a criterio
razonable del Juez de Tutela.
ACCION DE TUTELA-Improcedencia
En el caso concreto, el camino adecuado no es la acción de tutela, ya que existen otros
medios judiciales de defensa claramente establecidos en la ley. No es procedente porque
no se presenta el perjuicio irremediable, ya que el sujeto activo del derecho constitucional
fundamental al servicio público domiciliario de acueducto no existe, como quiera que la
urbanización se encuentra aún deshabitada.
REF: EXPEDIENTE Nº T-1848
Peticionario: Carlos Alfonso Rojas Rodríguez.
Procedencia: Juzgando 2º Penal del Circuito de
Fusagasugá.
Magistrado Ponente:
ALEJANDRO MARTINEZ CABALLERO
Santa Fe de Bogotá D.C., noviembre tres (3) de mil novecientos noventa y dos (1992).
Y
POR MANDATO DE LA CONSTITUCION
Ha pronunciado la siguiente
SENTENCIA
I. ANTECEDENTES
Con base en los artículos 86 de la Constitución Política y 33 del Decreto 2591 de 1991, la
Sala de Selección correspondiente de la Corte Constitucional escogió, para efectos de su
revisión, la acción de tutela de la referencia.
Por reparto le correspondió el presente negocio a esta Sala, la cual recibió formalmente el
expediente el día tres de agosto del presente año.
De conformidad con el artículo 34 del Decreto 2591, esta Sala de Revisión de la Corte
entra a dictar sentencia de revisión.
1. Solicitud.
La Urbanizadora Brisas del Bosque Ltda. por medio de su Gerente Carlos Alfonso Rojas
R., solicitó a la Asociación de Usuarios del Acueducto Rural de Veredas del Norte de
Fusagasugá -ACUAVENORTE-, y a la División de Saneamiento Básico del Fondo de
Acueductos y Alcantarillados del Departamento de Cundinamarca, la instalación del
servicio de acueducto y la conexión del mismo para 78 predios, en el municipio de
Fusagasugá.
Concedida y aprobada la solicitud por la junta directiva de ACUAVENORTE, de
conformidad con el concepto técnico que permitía la incorporación al sistema de
Acueducto Regional de las Veredas del Norte a partir del ramal denominado "línea 7", la
sociedad urbanizadora procedió a cumplir con los pagos ordenados, por un total de
veinticinco millones, trescientos cincuenta mil pesos ($25.350.000).
Al observar el retardo en la instalación, la Sociedad formuló la correspondiente solicitud al
jefe de la División de Saneamiento Básico del Fondo de Acueducto y Alcantarillado del
Departamento de Cundinamarca -FAAC-, Iván Ferro Betancourt y a ACUAVENORTE,
representada por el Sr. Héctor Caicedo, recibiendo categóricas negativas. Por este
incumplimiento acudió a la acción de tutela, ya que la Asociación considera que se le está
vulnerando su derecho fundamental al servicio público domiciliario de acueducto.
La sociedad "Brisas del Bosque Ltda.", llevó a cabo una negociación con la Asociación de
Usuarios del Acueducto Rural de Veredas del Norte de Fusagasugá -ACUAVENORTE-,
para la conexión del servicio de acueducto a la urbanización de la firma constructora
ubicada en la vereda Cucharal del Municipio de Fusagasugá.
Ante el incumplimiento del contrato y la suma cancelada por la conexión del servicio de
agua, la firma constructora instauró la acción de tutela a fin de lograr la instalación de la
red del acueducto en la urbanización para continuar con la construcción de las viviendas.
2. Fallos.
2.1. Fallo del Juzgado Primero Penal Municipal de Fusagasugá (providencia de
enero 20 de 1992).
El Juzgado 1º Penal Municipal de Fusagasugá negó la solicitud del peticionario por los
siguientes motivos:
1. Al establecer si el derecho para el cual se pide la protección es o no fundamental, se
concluye que, como está concebido en la demanda, el derecho al agua pierde su carácter
fundamental porque no se encuentran involucradas personas sino predios.
b. La legalización sobre la negociación de las conexiones nuevas se llevó a cabo por la
línea 7, que es un comité de trabajo, que no tiene personería jurídica y menos capacidad
para celebrar contratos.
c. Las personas que llevaron a cabo las negociaciones con el accionante fueron el jefe de la
División de Saneamiento del FAAC y el presidente de la línea 7 de ACUAVENORTE,
quienes no tenían facultad para obrar.
d. Por la carencia de facultades se entenderá que obraron a título personal y así mismo se
obligaron, dejando a salvo la responsabilidad de las entidades acusadas.
Del análisis de las pruebas aportadas deduce el Juzgado Primero Penal Municipal que, la
negociación realizada no se encuentra claramente definida, calificándola de "oscura", por
que no existe documento que establezca exactamente la obligación y porque
aparentemente la urbanización Brisas del Bosque, no está incluida en las veredas asociadas
inicialmente a ACUAVENORTE.
Del oficio enviado por el Instituto Geográfico "Agustín Codazzi" se desprende que la
urbanización Brisas del Bosque efectivamente pertenece a la vereda "El Cucharal", vereda
asociada a ACUAVENORTE, contrapuesto a lo que opinó el juez de primera instancia.
Igualmente el juzgado estableció la capacidad del acueducto y una vez establecida la
existencia de la negociación y la negativa de conceder el servicio público de acueducto por
parte de ACUAVENORTE se ocupó de establecer si en el caso concreto se trataba de la
protección de un derecho constitucional fundamental.
Consideró el Juez del Circuito que la naturaleza del mismo reclamo conlleva a que se trate
de un derecho fundamental por tratarse de un servicio público prestado por particulares,
con fundamento en el artículo 42, numeral 3º del Decreto 2591 de 1991 que hace
referencia a los servicios públicos domiciliarios cuando estuviere encargado de la
prestación del servicio una entidad particular.
Con los fundamentos enunciados, el Juzgado Segundo Penal del Circuito de Fusagasugá
revocó en todas sus partes la providencia del Juzgado Primero Penal Municipal por medio
de la cual se denegó el derecho de tutela impetrado por el Sr. Carlos Alfonso Rojas
Rodríguez y en su lugar dispuso admitir la acción de tutela en contra de José Ramón
García Velásquez como representante legal del Acueducto de Veredas del Norte de
Fusagasugá -ACUAVENORTE-, y como consecuencia de lo anterior ordenó llevar a cabo
las conexiones en número de setenta y ocho (78) a la Urbanización "Brisas del Bosque" en
el término de dos meses.
1. Competencia.
Es competente esta Sala de Revisión de la Corte Constitucional para proferir sentencia de
revisión del fallo dictado por el Juzgado Segundo Penal del Circuito de Fusagasugá
(Cundinamarca), con fundamento en los artículos 86 inciso tercero y 241 numeral noveno
de la Constitución Política, en concordancia con los artículos 33, 34, 35 y 36 del Decreto
2591 de 1991; además, su examen se hace por virtud de la selección que de dicho fallo
practicó la Sala correspondiente, y del reparto que se verificó en la forma señalada por el
Reglamento de esta Corporación.
2. De la procedencia de la acción de tutela contra acciones u omisiones de los
particulares.
La Asociación de Usuarios del Acueducto de las Veredas del Norte de Fusagasugá -
ACUAVENORTE-, es una asociación que no cuenta con el reconocimiento del Estado y
por ende no posee personería jurídica.
El caso que ocupa a esta Sala de Revisión está comprendido en lo establecido en el inciso
final del artículo 86 de la Constitución y en el artículo 42 del Decreto 2591 de 1991, por
tratarse de una acción de tutela contra una asociación privada, más exactamente contra la
Junta Directiva de la Asociación de Usuarios del Acueducto Rural de Veredas del Norte de
Fusagasugá "ACUAVENORTE", que es una asociación de carácter civil, sin ánimo de
lucro, regulada por el Código Civil, ello además por cuanto la intervención del Fondo de
Acueducto y Alcantarillado de Cundinamarca FAAC, que si es una instancia de derecho
público, tan sólo se limitó a asesorar técnicamente a la organización particular.
La Carta Política -Capítulo 5 del Titulo XII, artículos 365 a 370-, se ocupa de la "Finalidad
social del Estado y de los Servicios Públicos", y allí se determina que estos servicios son
inherentes a la finalidad social del Estado, uno de cuyos deberes primordiales es el de
asegurar su prestación eficiente a todos los habitantes del territorio nacional.
Los valores de convivencia, trabajo, justicia, igualdad, conocimiento, libertad y paz
plasmados en el Preámbulo de la Constitución deben armonizar con otros valores
consagrados en el inciso primero del artículo 2o. de la Constitución en referencia a los
fines del Estado: el servicio a la comunidad, la prosperidad general, la efectividad de los
principios, derechos y deberes, la participación, etc. Todos ellos establecen fines a los
cuales se requiere llegar. La relación entre dichos fines y los medios adecuados para
conseguirlos, depende, por lo general, de una acción política que le corresponde
preferentemente al legislador. No obstante el carácter programático de los valores
constitucionales, su enunciación no debe ser entendida como un agregado simbólico, o
como la manifestación de un deseo o sin un querer sin incidencia normativa, sino como un
conjunto de propósitos a través de los cuales se deben mirar las relaciones entre los
gobernantes y los gobernados, para que, dentro de las limitaciones propias de una sociedad
en proceso de consolidación, irradien todo el tramado institucional.
Como consecuencia de estos planteamientos, la Constitución estableció en su artículo 365
una vinculación esencial entre el Estado social de derecho y la prestación de los servicios
públicos, así:
RESUELVE: