Música Barroca

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MÚSICA BARROCA.

El período barroco en lo que a música se refiere comprende de 1600 a 1750. Aquí


surge la música como la conocemos actualmente. Las grandes obras musicales
divididas en movimientos, cada movimiento contiene en su mismo nombre el carácter
y el tempo con el que deberá ejecutarse, por ejemplo, para los movimientos rápidos:
Allegro, allegro molto espressivo, Allegro ma non troppo, allegro molto appasionato.
Allegro vivace, etc. Allegretto. Para los movimientos lentos: Adagio, Adagio molto
cantabile, adagietto. Andante, Largo, Lento, Larguetto, etc.

En el período barroco surgen tres grandes aportaciones a la música:

1.- Bajo continuo: Se trata de un sistema de cifrado armónico que permitía simplificar
la escritura instrumental y liberar a la voz principal de las servidumbres del
contrapunto, en pocas palabras, se trata de un simple acompañamiento. Consiste en
una forma de cifrado armónico, y su origen lo encontramos en el período barroco. Al
emplear esta técnica, el compositor escribe una línea de bajo que generalmente
cuenta con números (cifras) anotados que indican a los intérpretes qué acordes deben
ser construidos en las voces superiores.

El bajo continuo es ejecutado por uno o varios instrumentos, típicamente un


instrumento polifónico y armónico, es decir, que sea capaz de producir polifonía, por
ejemplo, los instrumentos de teclado, el clavecín o el órgano u otros como el arpa o el
laúd, con la voz de bajo simultáneamente a cargo de un instrumento de tesitura grave
como el violoncello, el contrabajo, viola da gamba o fagot.

2.- Música Tonal: Sistema musical que encontramos tanto en la música culta como en
la música popular. Lo podemos comparar con el sistema solar, en donde los planetas
están supeditados al sol, pero con movimientos independientes e individuales. Cada
uno de los planetas sigue su propia órbita sin chocar entre sí, de esta misma manera
funciona en la música el sistema tonal, hay una nota tónica o dominante, y en torno a
ella giran todas las demás, pero con total independencia.

La música tonal es fácil de escuchar, tiene líneas melódicas fácilmente reconocibles e


identificadas por nuestro oído de tal manera que la podemos memorizar y repetir sin
dificultad, por ejemplo, las Cuatro Estaciones de Antonio Vivaldi, la Sinfonía No.40, o la
Pequeña Serenata, ambas de Mozart, la Obertura Orfeo en los Avernos de Jacques
Offenbach, los ejemplos son evidentemente inagotables.

La música atonal, en cambio, carece de líneas melódicas lo que dificulta o hace


imposible memorizar y repetir este tipo de música, por ejemplo, Yellow Shark de Frank
Zappa, Gruppen o Prozession, ambas de Karlheinz Stockhausen.

3.- Concerto Grosso: Forma instrumental barroca de origen italiano basada en la


contraposición de un pequeño grupo de solistas llamado concertino, que son
acompañados por un ensamble instrumental de mayor tamaño llamado Tutti o Ripieno.

El grupo de solistas se llama concertino, y generalmente son tres o cuatro, mientas


que el ripieno o tutti son alrededor de 12 o 13 músicos. En el período barroco todavía
no existía la orquesta como la conocemos actualmente, eran sólo pequeños
ensambles instrumentales.

Ejemplos de Concerto Grosso:

1.- Johann Sebastian Bach – Concierto de Brandemburgo No. 5 BWV 1050.

2.- Georg Friedrich Haendel – Concerto Grosso en sol mayor, Op.6, No.1

3.- Arcangelo Corelli – Concerto Grosso No.9 en fa mayor para dos violines, cuerdas y
bajo continuo.

En el período marroco también surgieron las grandes casas de laudería, como los
Amati, los Stradivarius, y los Guarnerius. Los mejores fabricantes de instrumentos de
cuerda son de este período, lo que hizo que los grandes compositores del barroco
tuvieran un interés creciente en la composición de obras instrumentales.

REPERTORIO BÁSICO DEL BARROCO.

MÚSICA SACRA.

Georg Friedrich Haendel – Oratorio el Mesías.

Antonio Vivaldi – Gloria.

Johann Sebastian Bach – La Pasión según San Mateo, BWV 244. La Pasión según
San Juan, BWV 245. El Magnificat en mi bemol mayor BWV 243ª.

MÚSICA INSTRUMENTAL.

Johann Sebastian Bach – La Ofrenda Musical, BWV 1079. Ciclo de los seis conciertos
de Brandemburgo. El arte de la Fuga, BWV 1080.

Antonio Vivaldi – Las Cuatro Estaciones que pertenecen a un conjunto de conciertos


para violín que llevan el nombre de Il Cimento dell’armomnia e dell’inventione, y
agrupados como Op.8.

Georg Friedrich Haendel – Suite de la Música Acuática. La obra completa está


formada por tres suites cuyos números de catálogo son: HVW 348, HVW 349 Y HVW
350. Y la Música para los reales fuegos de artificio. Concerto Grosso en la mayor, Op.6
No.11.

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