Red Line
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Red Line
by xxstfo
-Smut.
-Lenguaje Explícito.
01.
...
Bufó cansado de tanto leer la misma frase en cada capítulo del libro. En realidad no
era como ese libro lo planteaba todo, no es que lo estuviese criticando pero el
también tenía sus distintos puntos de vista y este, era el momento indicado para
comentar.
El miedo no significa ser un perdedor, sin embargo, esto depende de que tanto
podemos llegar a convivir con el. ¿Por qué? Sencillo, para la vida de Jungkook habían
dos tipos de personas. Los que tenían miedo y se dejaban dominar por el, esos eran
los perdedores y los que tenían miedo pero avanzaban sin ver atrás, esos eran nada
más y nada menos que los ganadores.
Esto era como leer un libro por tres noches y darte cuenta al cuarto día que hubiera
sido mejor leerlo con despacio y elegancia porque de lo rápido que lo leíste no
entendiste ni un puto coño el punto principal. Suspiró pasando sus manos por su
cabello castaño y apoyó su espalda de una mejor forma en el sillón de la oficina de
uno de sus amigos. Aun que fuera un alfa de alto rango siempre habían superiores
delante suyo, y esa no era la excepción. Mucho menos cuando se trataba de Kim
Namjoon, su mejor amigo.
Las malas lenguas decían que todo en la vida de Jungkook había sido tan fácil como
matar a un chupa sangre, pero no era cierto, de hecho, su linea de entrenamiento fue
una de las más difíciles en todo el cuartel general y el bosque que les correspondía.
Pero él no tenía tiempo para ir a partirle el culo a todos los hijos de puta que
hablaban mierdas de él por una simple razón, le valía un coño.
"No puedes fumar aquí, Jungkook." Miró al chico rubio que se sentaba a la par suya
quitando su cigarrillo de sus manos.
Seokjin siempre había sido el omega perfecto para Namjoon. El de carácter terco
siempre había dicho que eso de las parejas destinadas era una mierda, pero cuando
había olido y visto al omega se había vuelto un completo idiota lame culos.
"Hyung."
Quiso reírse por el ceño fruncido del mayor. No respondió, solo se levantó y se
despidió de lejos del mayor saliendo de la oficina. Miles de preguntas cruzaban por su
mente, figurativamente. No buenas, porque sabía que Namjoon solo mandaba a
llamarlo cuando realmente necesitaba uno de esos favores en donde casi terminaban
cortándole el cuello y cuando volvía casi entre la vida y la muerte lo único que recibía
era un bien hecho, sabía que podía contar contigo.
"Hola Cachorro."
"Soy mayor." Corrigió ofendido. Jungkook sonrió ampliamente sabiendo
perfectamente que a los bebés de las manadas odiaban que fueran llamados así, de
hecho, aun que fuera mayores si sus habilidades eran mierda aún se consideraban
cachorros.
"¿Pasó algo?" Preguntó algo confundido. Namjoon no iba allí si no era porque algo
sumamente importante se había presentado. Jungkook paró sus pensamientos y se
fijó en un rasguñó leve que tenía el mayor en su cuello blanco y automáticamente
supo lo que había pasado allí.
Los cachorros tenían ese jodido problema, no saber cuando parar o cuanto tolerar a
algún toca pelotas. De hecho, por eso Jungkook detestaba a morir cuidar o
entrenarlos, porque siempre, pero siempre, terminaban en golpes o pequeñas
guerrillas por las cosas más estúpidas que pudieran existir.
"No fue mi culpa." Se defendió el mayor. "Fue culpa del pelo azul o verde como sea,
ese que se hace llamar Yoongi."
Jungkook sonrió por lo tierno que se miraba el mayor haciendo pequeños pucheros
para defender sus errores.
"Ya lo sabemos Jungkook." Me cortó. "Namjoon hyung está allí, puede encontrarlo si
gusta. Yo tengo que irme a limpiar el rostro y volver a práctica." Se despidió
rápidamente dejándome con la palabra en la boca. Faltándome poco para hacerle
retroceder y obligarle a pedir una disculpa por su carácter de mierda, pero yo no era
Namjoon en ese aspecto, bueno sí, admitía que era un hijo de puta aveces pero no
siempre y además era menor que él.
Dejé pasar su cobardía y me dirigí a paso rápido al cuartel de los cachorros. Crucé por
la puerta de hierro, cerrándola detrás mío y me dirigí camino recto hasta llegar a una
puerta tapada con una cortina delgada. Me adentré a este hasta que divisé a mi
amigo estar hablando con un chico bajo pelirrojo y mierda, que sentí ese impulso de
saber quien cojones era el chico que estaba de espaldas. Omega, pensé para mis
adentros. El olor del pequeño gritaba a campo abierto que era un puto omega y que
aún no estaba marcado. Sonreí, y no sabía del porque lo hacía.
Me acerqué hechando un leve vistazo a los cachorros que jugaban entre ellos y otros
al fondo como las parejitas y mi mirada paró en una en especial. Jimin, el alfa e hijo
de uno de los alfas más grandes de esta zona y Yoongi, el omega terco que decía
odiar a Park pero en realidad todos sabíamos que no era así como el decía plantearlo
pero parecía que Jimin aún no entendía.
"Me ahogas." Lo aparté sonriendo por la sonrisa que este traía en su cara. "¿Por qué
sonríes tanto?" Lo miré extrañado.
"El chico que mirabas en son de comerle el culo será tu nuevo acompañante para tu
misión."
Me retiré confuso con el ceño fruncido. ¿Tenía que ser una broma? Volteé el rostro
apreciando el buen culo que el omega tenía. Su cintura pequeña, piernas largas y
delgadas, mierda. Tragué duro. No iría a una misión con el calienta pollas que tenía
en frente.
"No." Lo fulminé con la mirada. "Prefiero ir con esos dos pedazos de saber-qué."
Señalé a Jimin y a Yoongi.
"Jungkook." Colocó sus manos en mis hombros. "No es una pregunta, es una orden."
Bufé enojado. Si antes dije toca pelotas me refería a de esos toca pelotas que te
joden la vida a morir. Reí con algo de jugueteo entre risa y lo volví a ver.
"¿Cachorro?" Fruncí el ceño. Tratando que mi enojo no se notara en mis palabras pero
fue imposible.
"¿Tu eres?"
Me preguntó con algo de ironía Lo miré seriamente y mierda, que sonrojado, sudado
y con mechones de cabello sobre su frente por el duro entrenamiento lo hacía verse
más follable.
Me sentí ofendido por la pregunta absurda del muñeco mimado. Lo miré enojado y le
gruñí, haciendo que saltara en su lugar.
"Me debes respeto cachorro." Escupí las palabras con algo de ironía en ellas.
Cierto, el tío podía tener buen culo pero nadie, absolutamente nadie podía verme de
menos. De hecho, las diferentes clases se lo evitaban, pero parecía que necesitaba de
alguien que le enseñara las reglas tales y como eran.
Bufó pesado, dándome la espalda sin dirigirme la palabra y se alejó de mi. Por más
que tratara de no verle el culo era algo inevitable, y algo me decía follale. Sabiendo
que eso me conllevaría a miles de mierdas.
02.
Me sonrió juguetón. Mi día había comenzado como una mierda solo al pensar en que
tenía que hacer una misión con el nene mimado del cuartel general y no solo eso, el
gran problema era que las ganas de empotrarlo contra una pared y hacerle las cosas
más sucias que existían en mi mente no me hacía falta.
Lo miré sonriendo mientras decía esas palabras. No es que estuviera en contra que
me dijeran señor, solo que aún no estaba tan viejo que digamos. Fruncí el ceño
notablemente y lo acorralé contra el muro de uno de los oscuros pasillos y gruñí.
"No es mi culpa que tengas ganas de follarme pero no tengas los testículos para
hacerlo."
Sentí mi ego bajo. Era como esa mierda que solo lees en libros donde el alfa no
aguanta tener cerca a su omega destinado, la diferencia era que Jungkook no creía en
cuentos de bebés o eso pensaba hasta hace cuatro días atrás.
"No quiero romperte el culo bonito que te cargas." Gruñí con el ego tocado.
Bajó la mirada, empujándome para poder salirse de mi agarre, cosa que no detuve.
Se alejó meneando las caderas obscenamente y se dio media vuelta para verme
fijamente.
Me miró con el ceño fruncido. No respondí y seguí mi camino, lo último que deseaba
era arrancarle la cabeza a un toca pelotas y mucho menos a alguien de nuestra
propia raza.
Salimos del cuartel y nos dirigimos al amplio bosque, por la puesta del sol podríamos
decir que eran casi las cinco de la tarde, ya que era poca la luz que entraba al bosque
por los árboles frondosos y robustos.
Caminamos más de diez kilómetros sin dirigirnos la palabra. Taehyung caminaba algo
torpe, tropezando contra piedras y a veces su rostro chocaba con algún arbusto. El
chico era más que inestable. De hecho, creo que ni le propia palabra era digna de
describir lo estúpido que era el cachorro.
Gruñí enseñando mis dientes enojado. Este dio un leve salto en su lugar
sonrojándose. Parecía una chica de quince años tratando de no calentarse con el
primer tío caliente que se le cruzara en frente.
Ambos nos quedamos en silencio sin mover ni un dedo. Podíamos olfatear el olor
repugnante de los putos chupa sangre en toda la zona. Ya que su olor era tan fuerte
como nuestro mismo olor, la diferencia que ninguno de los dos lados querían olerse y
mucho menos en una zona contraria.
Iba a empujar su mano para que me soltara pero su agarre estaba fuerte a mi brazo
y fue de esas veces hijas de puta en las que quieres follar a alguien tan duro hasta
dejarlo cojear, la mierda es que el cachorro era virgen. Aun que eso era lo que más
me daba igual.
"Lindos labios." Susurré sobre ellos. Gruñendo cuando este pasó su lengua por ellos y
me miró sonrojado. "Tu olor me vuelve loco." Lo pegué más a mi cuerpo.
Por un instante había olvidado que probablemente había chupa sangres en el lugar
pero me estaba valiendo mil mierdas en estos instantes.
Me acerqué a sus labios dando una leve lamida sobre ellos, mientras el peli rojo
cerraba sus ojos y dejaba hacer.
Di otra lamida rápida sobre sus carnosos labios. Acerqué mí nariz a su cuello y lo
olfateé, tenía ese impulso por hacerlo mío a toda costa.
"Los dos sabemos que quieres ser follado duro por mi. Así que, ¿por qué hacerte el
difícil?"
Vacilé con el ceño fruncido. No estaba dispuesto a perder más mi tiempo con
muñecos mimados de papi y mami como Kim Taehyung. De hecho, el sexo no era tan
malo después de todo.
Iba a lamer sus labios una segunda vez hasta que escuchamos el carraspeó grave de
alguien detrás de nosotros. Volteamos inmediatamente y nos llevamos un gran susto
al ver el ceño fruncido de Namjoon.
Baja pollas.
Pasó por mi lado chocándome el hombro y lo miré algo cabreado. La pequeña mierda
aún no sabía a respetar a sus superiores y se lo enseñaría a toda costa, y si implicaba
follarle haciéndole saber cada una de ellas lo haría cuantas veces posibles pudiera.
"Regresa."
Le ordené mientras lo miraba alejarse de nosotros. Esta no era hora para andar de
culo valiente como él lo estaba haciendo.
"No eres nadie para obligarme."
"¡Soy un alfa y estoy en cargo de tu pequeño culo!" Gruñí enojado. Sintiendo que el
animal interior quería salir y hacerle entender que aun que no nos soportáramos
jamás nos iría bien.
"¿Un qué?"
No lo dejé terminar cuando tenía mi cuerpo sobre el suyo. Evitando que este se
moviera. Coloqué mis brazos al lado de su cabeza, ladeando la mía un poco para así
obtener una mejor visibilidad de los labios semi abiertos del chico que me volvía loco
con solo su aroma, figurativamente.
"Un...al...alfa."
Este apartó sus manos inmediatamente y me miró tiernamente y prometo, que las
ganas de comerle esa linda boca me volvía loco.
"Esos lindos labios alrededor de mi polla, ¿qué dices?" Sentí los brazos de Namjoon
apartarme de golpe del contrario.
"Déjense de dirty talk o sex talk y sigan con su puta misión." Nos ordenó a lo cual
ninguno de los renegamos.
03.
No todo lo que nos rodea es tan cierto, de hecho, a veces no podemos confiar en
nuestras propias sombras, pero ese no era el caso de Jungkook. Sin embargo, sabía
lo difícil de confiar en alguien pero lo fácil que era quebrantar eso.
Se sentía tan débil, que lo último que se acordaba fue de Namjoon gritar su nombre
mientras peleaba con unos chupa sangre y caer al suelo por la perdida de sangre
repentina que había tenido. Se acuerda de haber visto a Taehyung correr donde él
con los ojos rojos y llorosos. Diciéndole que todo iba a estar bien, que no se
preocupara y por primera vez en su vida como alfa había sentido esa impotencia por
no proteger a un omega, su omega.
Trató de levantarse siendo una muy jodida idea. Tomó su cuello por inercia y gruñó
adolorido, mierda. Que el dolor que sentía no podía ser más mierda que la misma
mierda. Sintió la puerta abrirse y giró la cabeza rápidamente esperando que fuera
Taehyung el que entrara pero no, era el toca pelotas de Namjoon.
Este se aproximó al lado de la camilla blanca del menor y se sentó en una silla. El
ceño fruncido lo haría más viejo y de eso Jungkook estaba cien por ciento seguro.
"Eres un canalla."
"¿Y taehyung?"
Fue lo primero que pudo preguntar porque sí, sentía ese deseo de verle y saber que
estaba bien. Porque aun que fuera un puto los alfas tenían su punto débil, los omegas
y el de él era Kim Taehyung.
Namjoom tocó el tabique de su nariz estresado. No podía creer que después de esa
perdida de sangre el hijo de puta que tenía en frente siguiera con vida. Por un
instante en la pelea había jurado que lo había perdido y casi, pero casi, muere de
susto. Pero al haberlo llevado donde la enfermería de Jin se había dado cuenta que no
era así, sin embargo si había quedado con bastante perdida de sangre y sus heridas
curarían más lento por la falta de liquido.
Sonrió, porque le alegraba saber que el menor aunque dijera que Taehyung no era su
omega destinado era pura mentira. Porque ambos sabían que se necesitaban el uno
al otro y Namjoon sabía que a Jungkook le estresaba no oler al omega y saber que
aún estaba a su disposición.
"¿Dónde está?"
"Está durmiendo." Le dijo sincero. Mientras el menor fruncía el ceño sin entender
nada. "No ha dormido absolutamente casi nada durante tres días."
"¿Por qué?"
"¿Por qué? ¿En serio?" Lo miró irrirado el mayor. Quién no podía creer lo idiota que a
veces era el menor. "Por ti imbécil."
Jungkook tuvo el impulso de sonreír pero no quería que su dientes terminaran en las
manos del mayor. No aún, porque sabía que las ganas no le hacían falta.
"No sabes cuanto ha llorado por ti." Lo miró algo asombrado. "Si ha preguntado
veinte veces por como sigues son pocas."
Jungkook iba a reír hasta que la puerta les llamó la atención. Ambos voltearon a ver y
miraron a Taehyung entrar, y no lo dudo dos veces para correr a los brazos del menor
y sonreir sin soltarle del cuello.
"Tranquilo." El alfa tomó el rostro del omega entre sus manos y lo olfateó
intensamente.
"¿Sabes cuanto te extrañé?" Lo miró algo triste. Haciendo un tierno puchero con sus
labios y Jungkook no pudo controlarse y pasó su lengua obscenamente por ellos.
Dandos leves lamidas sin besarlo.
"Lo sé, bebé." Lo tomó de la cintura masajeandola lentamente.
"Okay..." Namjoon tosió incómodo. "Si queréis follar decidme para dejarlos solos."
"Tsk."
La habitación quedó en silencio y volteo a ver al peli rojo. Sus ojos estaban rojos,
hinchados y algo llorosos. Jungkook se acercó a ellos y los lamió. Sintiéndose culpable
por el estado sentimental del menor.
"Pero...hace..."
"¿Y?"
"Déjame hacerlo."
Jungkook sonrió al sentir las manos traviesas del más bajo viajar por su pene casi
erecto.
"Eres tan buen niño." Sintió las manos de Jungkook atravesar por su cabello
lentamente.
Taehyung lamió por encima del bóxer negro. Lamió y mordió levemente, posicionando
su mano para dar leves masajes de arriba hacia abajo. Observando las expresiones
excitantes del menor.
Taehyung bajo el bóxer hasta sus rodillas, observando el pene duro, ancho y largo del
peli negro. Tragó duro, acaso ¿sería posible que eso de ese tamaño entrara en él?
Pensó nervioso.
El menor asentó como el omega virgen que era. Acercó sus labios a la polla semi
erecta del menor y lamió el glande, succionando la cabeza duramente sin soltarla por
varios segundos. Y los gemidos del contrario le alentaban a llegar a más.
Dejó la polla que estaba entre sus labios con un sonido obsceno para posicionar una
de sus manos en la longitud de la polla erecta del alfa para luego dar leves masajes
desde la base hasta la punta, hiendo cada vez más rápido y la metió en su boca,
tratando de tragar todo lo que podía a su paso. Porque el trozo de carne salada que
sentía en su boca le volvía loco.
Arqueó la espalda al sentir las caderas del menor moverse en su boca, cada vez
siendo más fuertes mientras era tomado del pelo para controlar su estabilidad.
Sintió unas pequeñas lágrimas recorrerle sobre sus mejillas por las profundas y
repentinas penetraciones en sus boca. Dio leves arcadas cuando el glande del menor
toco su campanilla, colocando sus manos en las piernas de Jungkook para que este lo
hiciera de una manera no tan animal.
Jungkook le guiñó el ojo y mierda, que Taehyung juró que por instantes sus piernas
temblaron por el coqueteo sin rodeos del más alto.
Jungkook lo tomó del cabello y lo guió hasta su polla roja y dura. Indicándole que
abriera la boca y sacara su lengua, y así lo hizo. Mientras el menor masturbaba su
pene de arriba a abajo rápidamente murmurando palabras obscenas. Taehyung pasó
la lengua por la punta del pene de Jungkook y miró la mirada seria del menor y cerró
los ojos fuertemente sintiendo el semen casi tibio del menor caer sobre su nariz y
labios. Trató de tragar todo lo que pudo, sintiendo el sabor salado del liquido blanco
entre su lengua y dientes.
Jungkook tomó al mayor de los hombros levantandolo para verle más de cerca.
Sonrojado se miraba tan hermoso. Acerco sus labios a los de Taehyung y lo besó.
Lentamente sin llegar a ser un beso con ganas de follarle.
Taehyung lamió los dedos de Jungkook, pasando su lengua húmeda por sobre estos,
succionandolos obscenamente.
El peli rojo dejó de lamer los dedos de Jungkook y se acostó a la par de Jungkook.
Sintiendo los brazos del menor abrazarle fuertemente.
"Primero tienes que descansar." Rio coqueto, besando el hombro del menor.
Tres semanas, tres putas y jodidas semanas habían pasado después del problema
que había tenido Jungkook. De hecho, ya había vuelto a ser el mismo hijo de puta
que todos conocían y no sabía si sentirse halagado por los comentarios sobre él o
encabronado por estos. Pasó de paso ignorando a todos los que se encontraba en su
camino, está era de esas veces en que no podía concentrarse en su trabajo por una
sola razón. Mejor dicho, por una sola persona, Kim Taehyung.
El mar humor que tenía se basaba en él y lo sonriente que podía llegar a ser con el
resto. Lo peor de todo que aún no lo había marcado como tenía que ser, porque si
habían tenido roces calientes pero no llegaban a más porque el mayor no estaba
preparado aún.
Levantó el rostro encontrándose con el capitán del cuartel, Namjoon. Su pelo había
cambiado de rubio a casi blanco así como el pelo de su animal.
Le preguntó el omega al alfa, sabiendo que bajo las reglas ningún omega podía
ponerle un dedo encima a excepción si eran parejas y el cuerpo de Taehyung no
gritaba Jungkook encima.
Algunos cachorros que iban pasando quedaron viéndolos con los ojos abiertos por lo
que el mayor había hecho. Jungkook lo miró encabronado y lo tomó de la muñeca
aproximándolo a su cuerpo y susurrando con su aliento tibio sobre la oreja del peli
rojo.
"Basta."
Le gruñó. Haciendo que el mayor se sobresaltara un poco. Taehyung iba a decir algo
pero decidió cerrar la boca y mirar a los cachorros con el ceño fruncido. Haciéndolos
regresar a sus labores.
Namjoon no dijo nada, solo observó la actitud posesiva del alfa que no quería quitar
sus manos de la cintura del omega y sonrió, como el idiota que era.
"Nadie te lo va a quitar."
Trató el peli blanco de poner sus manos en la cintura de Taehyung y mierda, que fue
muy mala idea. Porque lo que recibió fue un gruñido áspero y celoso de parte de su
amigo.
"Tranquilo." Apartó su mano rápidamente. "Yo tengo mi pareja a la que follar todas
las noches." Le reprochó duro.
Namjoon puso su cara de pocker y lo vio pensando en que cojones decir. Porque
sabía que tocar lo que un alfa consideraba suyo era lo peor de lo peor.
"Iré a arreglar unos papeles." Mintió. No quería lidiar con los celos absurdos del
menor.
Jungkook solo lo vio alejarse y se insultó a si mismo por la acción inmadura que había
tenido contra su mejor amigo. Pero fue algo que hizo por inercia. Solo con pensar en
otras manos que no fueran las suyas sobre Kim Taehyung lo ponían de mal humor.
"Silencio."
"¿Cita?"
"Si. A nosotros los omegas no nos gustan que nos traten como cosas para
simplemente follar, Jungkook."
Y sí, él quería tener los huevos para invitar a Taehyung a salir pero ese no era su
estilo. Bajó la mirada para ver los ojos hechos un atajo de fuego en el mayor y lo
besó. Así como esos besos de improviso, porque él sabía que el peli rojo amaba esos
tipos de besos.
Taehyung sonrió entre el beso y pasó sus manos por la cabellera del alfa. Pegándolo
más a su cuerpo para sentir su duro torso entre sus manos y mierda. Que quería
verle sin camisa sobre su cuerpo.
Jungkook paso su lengua por sobre el labio inferior del mayor, pidiendo permiso para
entrar en su lengua, cual no tuvo que esperar demasiado ya que fue recibido de
inmediato. Lo besó fuerte, sintiendo la sangre de los labios del mayor mezclarse con
la saliva del uno al otro. Explorando la cavidad bocal del contrario como si de un dulce
se tratase. Jungkook iba a tomarlo del trasero hasta que sintió las manos del mayor
apartarlo de golpe y gruñó enojado.
Masculló con el rostro sonrojado y sus labios hinchados. Mierda, quería tenerlo de
rodillas como había hecho la vez pasada.
Jungkook no lo pensó dos veces y lo tomó de la muñeca jalándolo por todo el pasillo.
Ignorando las miradas de otros sobre ellos. Lo único que pensaba era tan simple y
sencillo, follarlo y marcarlo como suyo.
Subieron los escalones de dos en dos pasando por el lado de Seokjin quien los miró
con el ceño fruncido pero decidió no hacer ninguna pregunta sobre lo que harían,
porque ya sabía a lo que iba Jungkook.
El alfa pasó por varios cuartos hasta llegar a la puerta de su habitación. Buscando la
llave de esta la cual estaba jugándole una mala pasada porque ninguna encajaba en
ella.
"Jungk..."
"Mierda."
Masculló enojado. Sintiendo las manos de Taehyung obligándole a verle al rostro y
besándolo. Jungkook olvidó por un momento abrir la puerta y atrajo al mayor a su
cuerpo. Besándolo, causando más que algún otro sonido obsceno.
Taehyung se tropezó con sus propios pies cayendo en la cama, ¿cuando habían
llegado hasta allí? Se pregunto a sí mismo. Quitó su suéter color blanco y la tiró al
suelo sin importarle dónde había caído. Jungkook se subió encima suyo y besó su
quijada, bajando lentamente hasta su cuello causando leves escalofríos en el mayor.
"Jungkook..."
Gimoteo tiernamente. Porque sí, querías sentir al mayor lo más pronto posible.
Le dijo el alfa mordiendo uno de sus rosados pezones. Jugueteo con el un poco,
jalándolo, succionándolo y mordiendo hasta sacar un gemido casi ronco del mayor y
así siguió, pasando de uno a otro sin darle espacio de gemir abiertamente. Pasó su
lengua por todo el abdomen del mayor hasta llegar a su ombligo. Sabiendo
perfectamente lo sensible que podían llegar a ser las personas en esa zona, por lo que
pasó su lengua por el causando que el omega levantara sus caderas y las bajara
nuevamente.
"Solo...hazlo."
"Hazlo."
Jungkook sonrió y desabrochó el pantalón pegado del mayor. Quitándolo con todo y
bóxer, dejando las hermosas y firmes piernas del mayor a su vista. Se aproximó a
ellas y empezó a depositar pequeños besos sobre la pálida piel del mayor. Causando
pequeños gemidos de la hermosa boca del contrario.
El mayor gruñó cuando sintió los dientes del menor sobre sus muslos.
Lo escuchó decir casi ronco por la excitación. Jungkook no lo pensó dos veces y jugo
a la separación de los glúteos del mayor. Separándolos y uniéndolos descaradamente.
Para luego acercar su rostro a la entrada rosada del mayor y dar una leve lamida.
Causando una contracción en el peli rojo. Lamió una segunda vez, lamiendo todo el
redondel húmedo del mayor, causando más que algún otro sonido obsceno al
momento de su lengua tocar la pequeña, estrecha y linda entrada del omega, quién
gimoteaba tiernamente y gemía el nombre del alfa causando un pequeño escalofríos
en la punta de la polla del más alto.
"Quiero escucharte." Le quito la almohada el peli negro. Sonriendo por la tierna cara
que tenía el mayor. "Joder Taehyung. Te ves tan hermoso." Se aproximó a su nuca
para depositar un largo beso en esta y prosiguió a meter un dedo en la entrada
húmeda del omega. Quien se removió por la repentina intromisión.
Jungkook no era de los que esperaba a preparar el omega muy bien que se diga, por
lo que metió un segundo dedo, dilatando poco a poco, haciendo movimientos de
tijeras con sus dos dedos. Mientras el mayor trataba de controlar su respiración
porque sí, el sexo no era tan placentero como muchos decían.
"Duele." Dijo casi sin voz. Su frente se encontraba sudada por los nervios que tenía y
se acordó de lo grande y grueso que era Jungkook, haciendo que tragara fuerte.
"Será por unos instantes." Insertó un tercer dedo. Sabiendo lo grueso que era su
propia polla.
Estuvo dilatándolo por varios instantes, causando más que un gemido ahogado del
mayor. Quién no dejaba de morder una almohada y no por dolor, si no por vergüenza
porque era su primera vez desnudo ante la vista de alguien más.
"¿Listo?" El menor salió de su trance y negó con la cabeza. Causando una sonrisa en
Jungkook. Definitivamente se miraba demasiado ilegal.
"Dolerá mucho." Lo miró con ojos de cachorro abandonado. El miedo que tenía podía
notarse hasta en la punta de sus dedos.
"Arg..." Tapó su rostro limpiando las pocas lágrimas que caían en él.
Jungkook tomó el pene del mayor para masturbarlo mientras trataba de insertarse a
si mismo en el omega. Quién hecho su cabeza para atrás al sentir las manos heladas
del menor sobre su pene erecto. Hasta podría jurar que se había olvidado de cuanto
dolía tener su primera vez.
"Oh mierda..." Tiró del cabello del peli rojo. Sintiendo lo estrecho que este se
encontraba, el placer era casi indescriptible. Esperó un poco de tiempo para que el
mayor se acostumbrara al tamaño de su polla. Recibiendo un pequeño sigue de los
labios del más bajo.
Empezó con embestidas lentas, tratando de tocar la próstata del mayor. Cosa que no
se tardo mucho dando gracias que no tenía una polla tan pequeña que se dijera.
"Jung..."
Trató de decir el más bajo colocando su mano derecha en la pierna del menor. Todo
esto le estaba matando, pero de la buena forma. Sus piernas no dejaban de temblar
cada vez que el alfa tocaba su próstata. La respiración de Jungkook se hacía cada vez
más pesada, penetrando más fuerte al mayor, escuchando los gimoteos tiernos que
salían de esa boca que lo volvía loco.
Jungkook sonrió como el hijo de puta que era y aceleró sus caderas haciendo más
profundas y acertadas las embestidas sin soltar el miembro del mayor. Acercó su
boca al hombro del mayor y lo lamió, besándolo como si de un dulce se tratase y lo
mordió. Hasta estar seguro de haberlo marcado como suyo.
"Joder."
Mascullaron ambos, mientras Taehyung se corría en las manos del alfa y Jungkook en
el interior de Taehyung. Se estuvieron así por unos instantes, tratando de recuperar
las energías. El alfa sacó su polla del interior de Taehyung llenó de su semen y sonrió.
Satisfecho que era suyo.
Se acercó a los labios del más bajo, besándolos lentamente, sonriendo entre el beso
porque taehyung no había terminado de recuperar su respiración. Lo soltó y se acostó
observando a un sudado peli rojo. Con sus mechones en la frente y alguna más que
otra en su rostro y otras pasando por su cuello perdiéndose en sus clavículas.