El Arte de Amar

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Bustos Daniela

Mayaregua Ana
Montaño Luciana
Nosotras elegimos abordar la obra de Erich Fromm "El arte de amar". Del prólogo de este
libro tomamos lo que sostiene el autor con respecto a qué para poder alcanzar la
satisfacción individual será necesario amar al prójimo, con humildad, coraje, fe y disciplina,
estas capacidades irán siendo nombradas a lo largo del libro. Sostiene también que en una
cultura en donde esas capacidades han de ser raras, también lo será la capacidad de amar.
El autor plantea la pregunta de ¿a cuántas personas verdaderamente capaces de amar
hemos conocido?
Del primer capítulo de la obra titulado "¿Es el amor un arte?, tomamos dos puntos de vista
de los que habla Fromm: el primero es preguntándose si es el amor es un arte, lo cual
implica no sólo conocimiento sino también esfuerzo; el segundo es si el amor es en realidad
una sensación placentera cuya experiencia es una cuestión de azar. El autor sostendrá a lo
largo del libro la primera, sin embargo menciona cómo en nuestra cultura actual solemos
evidenciar más la segunda cuestión; casi nadie piensa que hay algo que aprender del amor,
para la mayoría de las personas el problema consiste en "ser amados" y no en amar, no en
la propia capacidad de amar. El problema es como lograr que se los ame; se busca ser
útiles para el otro, tener éxito, poder, ser atractivos física y mentalmente para poder ser
"dignos de amor". Plantea que otro factor que contribuye a no considerar al amor como un
arte es que el amor sea tomado desde el objeto y no desde ser una facultad; se sostiene
que el amor es un sentimiento sencillo y que lo complicado es encontrar un objeto para
amar, para ser amado por el. Menciona también en este capítulo como toda nuestra cultura
se basa en la idea de comprar, la felicidad del hombre contemporáneo se encuentra al
comprar; lo mismo, dirá Fromm, sucede con respecto a la gente, dos personas se enamoran
cuando creen que han encontrado un objeto en el mercado a partir de sus propios límites
impuestos por sus valores; el hombre y la mujer que sean atractivos (siguiendo además
más características de la época), serán los premios que se esperan obtener. El autor
sostiene que esta idea de amor en donde las relaciones humanas siguen un mismo
esquema que el mercantilismo, en donde el sujeto inicia con tales ideales y esperanzas,
tiende a fracasar muy a menudo y sin que el sujeto entienda porqué; para ello el autor
propone poder entender al amor como un arte, aprendiendo a amar a partir de tener un
dominio de la teoría, la práctica y considerándolo un asunto de suma importancia, ya que
este no beneficia a la manera moderna del éxito o el poder, pero si beneficia al alma.
En este libro, también habla acerca del amor entre padres e hijos como una forma
fundamental del amor. Aunque no dedica un capítulo específico a este tema, desarrolla
algunas ideas claves en todo el libro. Las principales perspectivas de Fromm sobre el amor
entre padres e hijos son:
● El amor maternal y paternal: Fromm reconoce que el amor entre padres e hijos es
una de las formas fundamentales del amor. En particular, destaca el amor maternal
como un ejemplo de cuidado y responsabilidad. Los padres deben preocuparse por
el bienestar y desarrollo de sus hijos.
● La importancia del respeto y la autonomía: Fromm argumenta que es esencial que
los padres respeten la individualidad y autonomía de los hijos. No deben tratar a los
niños colo objetos para moldear a su imagen sino como seres humanos únicos con
sus propias necesidades y deseos.
● El amor incondicional: promueve la idea de que el amor entre padres e hijos debe
ser incondicional. Los padres no deben amar a sus hijos solo cuando se comportan
de cierta manera o cumplen ciertas expectativas sino que deben amarlo de manera
incondicional, independientemente de sus acciones.
● La importancia del ejemplo: el autor sugiere que los padres son modelos importantes
para sus hijos. Los niños aprenden sobre el amor observando como sus padres se
relacionan entre sí y como los tratan. Por lo tanto, los padres deben esforzarse por
establecer ejemplos de relaciones amorosas sanas.
● La formación de la personalidad: también discute como las experiencias de amor en
ma infancia pueden influir en la formación de la personalidad de un individuo. Un
amor maternal y paternal saludable pueden contribuir al desarrollo de una
personalidad equilibrada y segura.

Erich Fromm comienza el capítulo tres preguntándose si es posible realmente el amor en la


sociedad en la que vivimos. Entenderá al amor de una manera diferente a la que
conocemos en nuestra vida cotidiana y dirá que el amor es fruto de aprendizaje. Hablará de
una capacidad de amar y de como no existen recetas acerca de cómo debemos hacerlo,
puesto que no existe una manera correcta o incorrecta de amar: se trata de una experiencia
personal que solo podemos tener por y para nosotros mismos.

El capítulo final del libro trata sobre la práctica del arte de amar. Siguiendo la premisa de
Fromm de que el amor es un arte, dirá que la práctica de cualquier arte tiene ciertos
requisitos que cumplir: la práctica de la disciplina y la constancia, la concentración, la
paciencia y la preocupación por la capacidad de amar. Dirá que en la sociedad occidental
actual nos encontramos diariamente con un amor mercantilizado, en donde vemos a las
otras personas como un producto a consumir que puede ser descartado, desechado o
"amado" si así lo queremos. En esta sociedad caracterizada por una forma de vida difusa y
acelerada, la concentración y la paciencia se ven enajenadas, y ante este panorama Fromm
dirá que debemos aprender a concentrarnos en todo lo que hacemos. De esta manera, leer
un libro, escuchar música, contemplar un paisaje o escuchar a otra persona deben ser
momentos de suma conciencia en el momento en que vivimos.

Por otro lado, el autor terminará describiendo las cualidades importantes para la capacidad
de amar. La condición fundamental será la superación del propio narcisismo: éste consiste
en que para poder amar debemos ver a la persona tal como es, sin colocar en ella nuestros
intereses, temores, necesidades y deseos. Además, otra cualidad necesaria para la práctica
del arte de amar es la práctica de la fé.

Eruch Fromm dirá que la fé es necesaria para todo lo que hacemos, y que ésta práctica
comenzará precisamente en los pequeños detalles de la vida diaria. Amar, siguiendo esta
línea de pensamiento, significa comprometerse sin garantías. El amor es un acto de fé y
quien tenga poca fé también tendrá poco amor. Amar consiste en entregarse por completo a
la otra persona con la esperanza de producir un amor en la persona amada.

Eruch Fromm concluye el libro diciendo que la cualidad indispensable para la práctica del
arte de amar es la actividad. Amar supone mostrarnos vulnerables y correr el riesgo de salir
lastimados; implica reconocer y aceptar el dolor y la desilusión que muchas veces conlleva
ser amado por alguien, por lo que para aprender a amar debemos estar receptivos al amor,
y saber que podemos amar y ser amados si así estamos dispuestos a hacerlo.

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