Métodos DX - Revista 1
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Resumen: El uso de las imágenes diagnósticas en mama se ha convertido en una herramienta impres-
cindible para el especialista que maneja la patología mamaria. En la actualidad, las tres herramientas
que se utilizan son: mamografía, ecografía o ultrasonido mamario y resonancia nuclear magnética;
sin embargo, se encuentran en fase de estudio nuevas tecnologías como la elastografía y tomosíntesis
(mamografía digital 3D). En el presente artículo se presentan los elementos más relevantes en estas
ayudas diagnósticas, el léxico usado en los reportes y las indicaciones para cada una de las técnicas con
el objetivo de actualizar los conocimientos y dar un uso adecuado de las herramientas diagnósticas.
Palabras clave: neoplasias de la mama, mamografía, ultrasonografía, imagen por resonancia mag-
nética, cribado.
Abstract: Breast imaging diagnostic have become an indispensable tool for the specialist in breast di-
sease. Currently, the diagnostic tools are: mammography, breast ultrasound and magnetic resonance;
but they are under study new technologies such as elastography and tomosynthesis (3D digital mam-
mography). This article presented the most important elements in these diagnostic tools, terminology
used in reports and indications for each of these techniques.
Key words: breast neoplasms, mammography, ultrasonography, magnetic resonance imaging, scree-
ning
Ossa Gómez CA. Imágenes diagnósticas en patología mamaria. Medicina & Laboratorio 2013; 19:
549-566.
1
Médico. Cirujano oncólogo de mama /mastólogo. Candidato a master en oncología molecular. Instituto de Cancerología. Clínica
Las Américas. Correspondencia: Cl 7 # 39-197 Cons 909 Torre intermédica. Medellín, Colombia. Correo electrónico: info@
drandresossa.com
Mamografía
La mamografía consiste en una exploración diagnóstica de imagen por rayos X de la glándu-
la mamaria, mediante equipos denominados mamógrafos. Estos dispositivos disponen de
tubos de emisión de rayos X, que dan una dosis de radiación de 0,7 mSv (miliSievert). Estos
equipos han avanzado en su desarrollo tecnológico desde los años sesenta, pasando de la
mamografía análoga a la mamografía digitalizada, hasta llegar a la tecnología actual deno-
minada mamografía digital; los avances tecnológicos han buscado mejorar la capacidad de
resolución de la imagen, el pos-procesamiento de la misma y por lo tanto mejorar la sensi-
bilidad y la especificidad de la prueba [1].
Los inicios de la mamografía como método radiológico se remontan a 1913, cuando Alberto
Salomón evaluaba piezas de mastectomía mediante rayos X para determinar la extensión del
tumor [6]. En 1945, Raúl Leborgne en Uruguay, mediante estudios con rayos X en la glándula
mamaria logró identificar las microcalcificaciones [7,8]. Con estos hallazgos, en la década
de los años 60 comenzaron los primeros estudios aleatorizados de cribado mamográfico
con la implementación del plan de aseguramiento en salud de New York (del inglés health
insurance plan) [9], así como en Europa se desarrollaron los estudios de los dos condados de
Suecia realizados por Lazlo y Tabar [10], y en Canadá los estudios Canadá 1 y Canadá 2. Estos
trabajos demostraron que era posible disminuir la mortalidad por cáncer de mama a través
de programas de cribado poblacional y se dio inicio a su uso de manera universal.
por el Dr. Yaffe et. al. en la revista radiology [11] evaluó mediante un modelo matemático
la probabilidad de desarrollar cáncer de mama en una cohorte de 100.000 mujeres. En el
estudio las mujeres recibían una dosis de radiación de 3,7 milligrays (mGY) (dosis actual
de irradiación con el mamógrafo digital) en un programa de tamizaje que se realizaba
anualmente entre los 40-55 años, y luego cada dos años hasta la edad de 74 años. En este
estudio se calculó la probabilidad de identificar 86 casos de cáncer, y de ellos, 11 casos fueron
asociadas a la radiación. El resultado fue un riesgo de 0,0086 %, el cual es extremadamente
bajo. Como conclusión del estudio en mención, el cribado mamográfico que inicia luego
de los 40 años tiene un riesgo muy bajo comparado con la probabilidad de reducción de
muertes por cáncer de mama que se esperan con esta modalidad de cribado [11].
La mamografía se puede clasificar con fines académicos, según el uso y la finalidad, en:
BIRADS
En la década de los años ochenta, se presentó una dificultad en el lenguaje de los médicos
que interpretaban las imágenes diagnósticas en mama, generando reportes ambiguos,
reportes de mala calidad y alta variabilidad entre observadores. Por esta razón se dio
origen a la clasificación BIRADS, el cual corresponde al acrónimo en inglés “Breast Imaging
Report And Data System” que traduce sistema de informes y registro de datos de imágenes
de mama. Esta clasificación fue desarrollada en un esfuerzo colaborativo de múltiples
instituciones, entre ellas el American College of Radiology (ACR), Centers for Disease Control
and Prevention (CDC), National Cancer Institute (NCI), Food and Drug Administration (FDA),
American College of Surgeons (ACS), American Medical Association (AMA) y el American
College of Pathologists (ACP). De este manual ya se han publicado 5 ediciones, la primera
edición fue publicada en 1993, la segunda edición fue en 1996, la tercera edición en 1998,
la cuarta en el 2003 y a finales del año 2013 se publicó la quinta edición.
El sistema BIRADS utiliza un vocabulario propio que nos permite identificar hallazgos
sospechosos o anormales [12], éste se resume a continuación (ver tabla 1):
■■ Léxico
Nódulo: toda imagen redondeada u ovoide que tiene representación en dos diferentes
proyecciones mamográficas del mismo seno. En los nódulos se evalúa la morfología, los
contornos y la densidad [12].
En segundo lugar, se debe evaluar los contornos de la lesión con respecto a la densidad del
tejido mamario de la paciente (ver figura 2).
Circunscrito:
al menos el 75% de su perímetro debe estar bien delimitado y el resto
superpuesto al tejido mamario.
Isodenso.
Riesgo de cancer
5.3
3.4
2.4
2.2 Figura 3. Riesgo relativo de
cáncer de mama en función
1.2 del grado de densidad
1
mamaria.
Ninguno <10% 10-25% 25-50% 50-75% >75%
Densidad mamaria (%)
Cutáneas
Amorfas o indiferenciadas
Heterogéneas groseras
Vasculares
En forma de vara
Heterogéneas como
puntos y comas
Redondeado
Pleomorfas finas y
lineales ramificadas
En forma de
cascara de huevo
Leche cálcica
Figura 5. Calcificaciones de sospecha intermedia y
Figura 4. Calcificaciones típicamente benignas. altamente sospechosas de malignidad.
ECOGRAFÍA
La ecografía mamaria es una técnica de imágenes que traduce las diferentes frecuencias
de sonido que genera un órgano, en este caso la glándula mamaria, a partir de la emisión
de ultrasonido por un dispositivo llamado transductor, el cual recibe el eco generado y
hace una representación bidimensional o tridimensional de la mama. Este dispositivo
descompone el sonido en diferentes escalas y las traduce en una señal visual en escala
de grises que son leídas e interpretadas por el ecografista. El método fue propuesto en
sus inicios como un método de cribado para la detección del cáncer de mama y una
técnica atractiva en comparación con la mamografía, por no emplear radiación ionizante,
además de tener un mecanismo de acción que permitía evaluar tejido denso poco visible
en la mamografía (ver figura 6). Sin embargo, en la ecografía existe una gran limitación
porque es un método operador-dependiente, es decir, el examen aumenta o disminuye
la sensibilidad dependiendo del operador, por lo cual pierde valor como herramienta de
cribado en grandes grupos poblacionales. Otra limitante es el tiempo que se requiere para
una adecuada valoración ecográfica de la mama (20-30 min vs 10-12 min en la mamografía)
estas limitantes relegaron la ecografía a unas indicaciones precisas y a no ser utilizada
de rutina en el escenario de cribado. Con la experiencia del Dr. Stavros en el centro de
enfermedades mamarias en Englewood, Colorado, se publica una serie de 11.433 ecografías
mamarias que describen las principales indicaciones de esta técnica [3] (ver tabla 3):
Figura 6. Correlación mamográfica-ecográfica de una lesión mamaria sospechosa. Cortesía del Dr. Andrés Henao,
Centro Enfermedades Mamarias. Bogotá, Colombia
Embarazo y lactancia.
Aspiración de quistes.
Drenaje de abscesos.
Biopsia mamaria (aspiración con aguja fina, aspiración con aguja gruesa, biopsia mamaria
por vacío).
Localización de lesiones con aguja para resección quirúrgica (marcación con arpón).
Léxico BIRADS
Al igual que en la mamografía, hay una clasificación BIRADS para el ultrasonido, éste se
divide en 5 categorías [15]:
Homogénea grasa.
Homogénea fibroglandular.
Heterogénea.
2 - Masa: se define como una lesión ocupante de espacio en dos proyecciones. Se valora:
Interfase con el tejido mamario adyacente: abrupta o con un halo ecogénico irregular.
3 - Calcificaciones:
Microquistes agrupados.
Quiste complicado.
Lesión cutánea.
Ganglio intramamario.
Cuerpo extraño.
Adenopatía axilar.
5 – Vascularización.
No existe al día de hoy, una ayuda diagnóstica por imágenes en mama que nos permita
saber con una sensibilidad del 100 % y una especificidad del 100 % cuales lesiones
son malignas y cuales son benignas. Sin embargo, con una adecuada correlación de la
mamografía, la ecografía y el examen físico, la posibilidad diagnóstica mejora llegando
a estar cercana al 85-90% en las pacientes pos-menopáusicas y 70-85% en las pacientes
pre-menopáusicas.
Resonancia magnética
La resonancia magnética es una herramienta de diagnóstico por imagen, que se basa
en las ondas de radiofrecuencia emitidas por los protones del tejido examinado, luego
de ser expuestos a un campo magnético. La señal que emite cada protón es capturada
y procesada por avanzados programas computacionales, transformándola en imágenes
de alta calidad. A diferencia de los equipos de rayos convencionales, como el escáner
y la medicina nuclear, la resonancia magnética no emite radiaciones. Este examen
proporciona una información complementaria, tanto morfológica, como dinámica de
las lesiones mamarias; diferente a los exámenes convencionales (ver figura 7).
Las imágenes por resonancia magnética de la mama se han utilizado cada vez más en la
detección y evaluación del cáncer de mama desde su aprobación por la FDA hace más
de 15 años. Múltiples estudios que comparan los resultados de la resonancia de mama
con los resultados de patología, demuestran que la resonancia tiene una sensibilidad
para carcinoma invasor entre el 80-93% [16,17]. Sin embargo, la resonancia magnética
presenta una amplia especificidad (65-90%) con frecuentes resultados falsos positivos,
que lleven a biopsias innecesarias. Por este motivo, la resonancia de mama tiene
unas indicaciones precisas para mejorar su rendimiento y evitar procedimientos no
requeridos (ver indicaciones actuales de la resonancia).
Figura 7. Imagen por resonancia magnética de una paciente de 51 años con cáncer de mama antes y después de
su respuesta (respuesta parcial) a la quimioterapia neoadyuvante. Imágenes cortesía de la Dra Liliana Hernández,
departamento radiología Clínica Las Américas, Medellín, Colombia
La resonancia magnética es una técnica con elevada sensibilidad, pero con una
especificidad limitada en el diagnóstico del cáncer de mama. Numerosos estudios avalan
su utilidad en el manejo de la patología mamaria, especialmente en la estadificación
pre-quirúrgica del cáncer de mama. Sin embargo, existe una falta de estandarización en
la técnica y en la interpretación de las imágenes, así como una falta de consenso en la
descripción de los hallazgos tanto morfológicos como dinámicos, que difieren porque
los protocolos varían en las diferentes instituciones. Por ello se ha desarrollado un léxico
para la resonancia magnética, con definiciones para las características morfológicas y
dinámicas [16].
Léxico
El léxico para la resonancia magnética se divide en 6 categorías:
1 - Foco: captación puntiforme que debido a su pequeño tamaño (<5 mm) no puede ser
caracterizada morfológicamente.
3 - No masa: área de captación que puede afectar a una región pequeña o grande dentro de
la mama, frecuentemente con tejido fibroglandular normal intercalado. Se describe:
Hiperseñal ductal.
Retracción piel.
Engrosamiento cutáneo.
Invasión piel.
Edema.
Adenopatías.
Invasión musculo-pectoral.
Hematoma/sangre.
Quiste.
5 - Localización:
Mama.
Cuadrante.
Profundidad.
Fase inicial: hasta los primeros dos minutos o hasta que la curva empiece a cambiar. En
esta fase la captación puede ser lenta, media o rápida.
■■ Indicaciones actuales
de la resonancia magnética en mama
Metástasis axilar de un cáncer primario desconocido. La resonancia de mama puede
ayudar al médico tratante en la localización del tumor primario.
Como parte de la revisión anual del cáncer de mama. Además de la mamografía para
los pacientes con muy alto riesgo de desarrollar cáncer de mama, especialmente
aquellos con sospecha o mutaciones deletéreas conocidas en BRCA 1 o 2, los pacien-
tes con antecedentes de radioterapia en la pared torácica y otras personas con riesgo
de un 20% o mayor de desarrollar cáncer de mama durante toda la vida [20,21].
Nuevas tecnologías
Elastografía
En 1991, Ophir et. al. [22] desarrollaron una técnica llamada elastografía, la cual
ayudaba en la evaluación de los tejidos blandos, mediante la deformación elástica que
sufren los tejidos por la aplicación de compresión en el área de interés. Este hallazgo
se realizó teniendo en cuenta las propiedades físicas y mecánicas de los tejidos como
indicadores en el diagnóstico de lesiones malignas, dado que muchos de los carcinomas
presentan tejidos más rígidos que los tejidos normales adyacentes.
Aún no hay consenso sobre cuál es la mejor técnica o clasificación definitiva en cuanto
a su utilidad clínica. Las grandes limitaciones radican en la variabilidad inter-observador
descritas en los primeros estudios y la falta de estandarización sobre cuanta compresión
se le debe aplicar a los tejidos al momento de realizar el estudio [2]. Esta técnica no se
encuentra aprobada por la FDA para su uso sistemático, sin embargo, algunos equipos
de ultrasonido de última generación la tienen incorporada. La principal utilidad de la
elastografía radica en el análisis de las lesiones BIRADS 3 ecográficas, para intentar
aclarar la necesidad de biopsia, y las lesiones quísticas complejas para evaluar el
componente solido de las mismas (ver figura 9).
Tomosíntesis mamaria
La mamografía convencional en dos proyecciones (digital y análoga) está evolucionando
a una tecnología que emplea como base la mamografía y aplica los principios de un
tomógrafo. Esta tecnológica recibe el nombre de tomosíntesis mamaria digital e implica
la adquisición de múltiples planos de proyección por un detector digital de rayos X, que
se mueve realizando cortes a más de un milímetro con arco de movimiento limitado (ver
figura 10). El lector presenta una serie de imágenes (cortes) a través de toda la mama,
que se leen en una estación de trabajo similar a la de una tomografía computarizada
o resonancia magnética. Debido a que cada corte reconstruido puede ser tan delgado
como 0,5 mm, las masas y los márgenes de la masa; que de otra manera se pueden
sobreponer con las estructuras del plano, deben ser más visibles en el segmento
reconstruido. Esto permite mejorar la caracterización y visualización de las lesiones
Nivel 1 de
elasticidad de
Tsukuba
Benigno
Nivel 2 de
elasticidad de Benigno
Tsukuba
Nivel 3 de
elasticidad de
Probablemente
Tsukuba benigno
Nivel 4 de
elasticidad de Maligno
Tsukuba
Nivel 5 de
elasticidad de Maligno
Tsukuba
Figura 9. Elastografía de una lesión BIRADS 3 por ultrasonido clasificada como categoría 2 en la clasificación
elastográfica de Tsukuba. Diagnóstico histológico de fibroadenoma. Imagen cortesía del Dr Jairo Patiño,
departamento radiología, Clínica Las Américas, Medellín, Colombia.
La tomosíntesis se encuentra aprobada por la FDA desde febrero del 2011 para su
utilización en los centros de imágenes mamarios, y en Colombia ya se cuenta con tres
centros que disponen de esta tecnología. El uso de la tomosíntesis permite mejorar
las tasas de detección y caracterización de las lesiones de la mama entre un 8-15 %
[24,25], especialmente en las mujeres con tejido mamario denso, donde se evita la
sobreposición de los tejidos y se disminuye la tasa de re-llamado de los pacientes [26].
Tubo de rayos X
Plato de compresión
Seno
Receptor de imágenes
Proyección
de imágenes
Reconstrucción
Figura 10. Mecanismo de obtención de las imágenes en la tomosíntesis de mama.
Figura 11. A-B. Proyección medio-lateral oblicua de una mamografía interpretada BIRADS O por alta densidad
mamaria. C-D. Representación de la misma mama mediante tomosíntesis que identifica área de distorsión en
cuadrante supero externo. E-F. Magnificación de la zona de interés mediante tomosíntesis que identifica lesión
BIRADS 5. Carcinoma Ductal Infiltrante confirmado por biopsia. Imágenes cortesía del Dr Jairo Patiño, departamento
radiología, Clínica Las Américas, Medellín, Colombia.
Conclusiones
Actualmente, la patología mamaria es un motivo frecuente de consulta en el médico
general, ginecólogo y especialista en patología mamaria. Un adecuado enfoque
clínico e imagenológico permite una remisión adecuada y un diagnóstico temprano
del cáncer de mama, se hace imperativo que el médico conozca el uso adecuado de
estas herramientas y la forma como esta prueba deber ser reportada. Las herramientas
actuales y estándar de oro en el enfoque de la patología mamaria continúan siendo la
ecografía mamaria, la mamografía y la resonancia nuclear magnética, esta última solo
en casos seleccionados. Las nuevas herramientas diagnósticas como la elastografía, la
tomosíntesis y la mamografía por emisión de positrones se encuentran en procesos de
aprobación por los entes reguladores internacionales y no constituyen un remplazo de
las imágenes diagnósticas disponibles actualmente.
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