Presupuesto
Presupuesto
Presupuesto
PRESUPUESTO DE VENTA
Es también conocido como presupuesto de ingresos y define lo que se espera
que la organización realice en el mercado. Se ajusta a la demanda y, a partir de
ese principio, se elabora un presupuesto de producción que contenga un
enfoque de las metas a futuro, así como el incremento del patrimonio de la
empresa.
La mayoría de las compañías realiza este procedimiento, pues mantiene todos
los datos económicos actualizados, que son un elemento clave para el buen
manejo financiero. Incluso, en muchas ocasiones, este presupuesto representa
el primer paso para crear los demás presupuestos.
Para realizar un presupuesto de ventas te recomendamos clarificar las metas
que deseas alcanzar durante un periodo específico. Haz un estudio objetivo por
medio de algún instrumento que evalúe la demanda del mercado. Así podrás
garantizar un análisis correcto de factores como la economía, la industria, las
ventas en el pasado (y del sector) para facilitar la ejecución una vez que el
presupuesto haya sido aceptado. Después de esto, deberás comunicarlo a
todos los departamentos involucrados.
CARACTERISTICAS
Este presupuesto debe incluir una relación de todos los productos o servicios
que comercializa la empresa. Las ventas previstas deben estar representadas
en cantidad (número de unidades y valor económico).
Asimismo, debe incorporar un pronóstico de ventas del sector y de la empresa
ajustado a la realidad. Para ello es importante conocer la participación de la
empresa en el mercado. En resumen, para elaborarlo se necesita tiempo,
esfuerzo y un amplio conocimiento del mercado.
PRESUPUESTO DE PRODUCCION
Es la columna vertebral del presupuesto de tu negocio. Se realiza
posteriormente al presupuesto de ventas debido a que están íntimamente
relacionados. Con la recolección de datos de ambos se prevé cuánto debe
producirse y si los resultados concuerdan con los objetivos esperados.
Este documento es sumamente importante, pues los encargados de su gestión
sabrán qué se está fabricando, el plan de requerimientos de insumos y
recursos para el crecimiento eficaz de la productividad en la organización, así
como el cálculo del costo destinado a ventas.
Quienes elaboran este presupuesto normalmente ocupan los puestos de alta
gerencia, pues deben controlar y ejecutar los factores que intervienen en el
proceso. La mano de obra y materias primas son dos aspectos principales a
considerar.
CARACTERISTICAS
Para realizar un presupuesto de producción eficaz se deben tener en cuenta
los siguientes rubros:
El personal disponible para crear el producto.
El margen de beneficio buscado.
El tiempo necesario para llevar a cabo la producción (horas de trabajo).
El valor por hora.
5. PRESUPUESTO DE COMPRAS
Es también conocido como presupuesto de necesidades de materias primas.
Se realiza posteriormente al presupuesto de producción. En él pueden
encontrarse de manera ordenada los costes de los insumos que requiere una
empresa para la producción y la venta.
Para hacerlo de manera eficiente, implementa un inventario que te ayude a
determinar las necesidades de los diferentes insumos. Considera aspectos
importantes como el estándar exacto de cada producto, el tiempo que se
requerirá, el abastecimiento eficaz de los materiales suficientes para evitar la
escasez y el precio unitario.
Es primordial que el presupuesto de compras tenga actualizados estos datos
para que la programación de pedidos (considerando el tiempo de entrega) sea
exitosa y obtengas la cantidad necesaria de materia prima para producir.
CARACTERISTICAS
En este tipo de presupuestos se deben plasmar aspectos como la rotación del
inventario, ya que su principal razón de ser radica en dar seguimiento al valor
de inventario de la empresa y la cantidad de mercancía vendida, así como el
inventario final que la empresa necesita tener al final de cada periodo.
Al realizarlo es imprescindible seguir las pautas establecidas por la política de
inventario que se maneja, con el fin de atender las necesidades de producción
y ventas del siguiente periodo, al igual que el costo que representan estos
inventarios.
Siempre debe estar alineado al presupuesto de producción, en el que se refleja
el número de productos terminados que deben producirse en cada periodo. De
acuerdo con las cantidades indicadas a fabricar de cada producto terminado,
se realiza una «explosión» de materiales. Así se determinan las cantidades
requeridas de los materiales que forman parte de esos productos terminados.
PRESUPUESTO DE TESORERIA
Este presupuesto es uno de los más importantes, si deseas generar mayor
crecimiento económico en tu empresa. Controla y anticipa los valores
financieros que posee la organización. Contempla una visión a futuro que
consiste en recolectar datos de cobros, pagos y gastos para definir si se les
puede hacer frente con los ingresos que obtuvo el negocio. Planifica también
los pasos a seguir en caso de tener desajustes, como exceso o déficit de
liquidez.
Los momentos ideales para realizar este presupuesto son al inicio de la
actividad empresarial y cada año. La forma de saber con exactitud cómo
puedes obtener este presupuesto es teniendo en cuenta la entrada de capital
menos los gastos. Por esta razón es que este presupuesto se divide en dos
tipos:
PRESUPUESTO DE COBROS
Está basado en la recolección de datos de cobros y posibles entradas que se
prevén que estarán a disposición de la empresa. Suele confundirse con el
presupuesto de ingresos, pero en este caso los cobros representan la entrada
de dinero líquido que obtienes de las ventas, transferencias o aportaciones de
capital y diversas vías. Los plazos para concretarse pueden durar meses o
años, dependiendo de la complejidad del acuerdo.
Algo importante a considerar: cuando realices este presupuesto deberás
apegarte lo más posible a la realidad, ya que necesitas integrar todos los
criterios para tener a tu disposición el dinero necesario para la empresa en el
periodo previamente estipulado.
PRESUPUESTO DE GASTOS
Hace referencia a la salida o posible salida de dinero del que dispone tu
empresa para realizar los movimientos necesarios para la producción. En este
presupuesto debes tener en cuenta los pagos a proveedores, compras,
salarios, licencias y diversos servicios consumidos constantemente. De esta
manera, puedes planificar estrategias más efectivas para su oportuna
administración financiera. Por ello, este presupuesto debe estar en constante
revisión y actualización.
Para realizar de manera efectiva este presupuesto considera los pagos
ordinarios frecuentes como cotizaciones a la seguridad social, pago de
suministros, pagos de impuestos, publicidad y marketing. No olvides considerar
los tiempos de producción estándar manejados por la organización. Con ello
podrás hacer frente a los gastos corrientes del día a día y cualquier gasto
adicional que surja sobre la marcha.
CARACTERISTICAS
El rasgo más característico del presupuesto de tesorería es, curiosamente, la
imposibilidad de que se cumpla. Es decir, siempre existirán desviaciones, por
mínimas que sean; las cuales se reflejan, normalmente amplificadas, en los
flujos monetarios; esto es, en el flujo de caja.
Entre sus componentes están:
La gestión, cuyo objetivo es identificar los instrumentos de cobro y pago, así
como los recursos financieros a utilizar. Es decir, cheques, pagarés, créditos,
pólizas.
La planificación, pues con ella se establecen políticas de gestión de riesgos,
como liquidez, crédito o tipo de interés.
El control, ya que este presupuesto servirá para identificar desviaciones en las
distintas partidas, con lo que podremos conocer si son coyunturales o se
mantendrán en el tiempo. Favorecerá asimismo la corrección y adaptación del
presupuesto a las necesidades de fondos emergentes.
PRESUPUESTO DE MARKETING
Está centrado en los diversos medios con los que interactúa tu empresa para
publicitarse y crear estrategias de marketing. Este presupuesto es
imprescindible para llegar a tus clientes y crear un diseño de comunicación
efectivo. Debe ser concreto en sus objetivos; además, poseer datos, cifras
exactas y metas alcanzables.
Es importante que siempre establezcas la cantidad de dinero que destinarás a
eventos, publicidad en línea, sitios web, medios tradicionales, agencias, entre
otros. El objetivo principal de este presupuesto es obtener los datos necesarios
de los gastos de dichos servicios durante un tiempo determinado. Así podrás
definir si tu presupuesto se ajusta a los gastos de tu estrategia de marketing.
Para saber cuál es tu presupuesto adecuado de marketing deberás atender las
necesidades de promoción que te exige el mercado. Compáralo con los
presupuestos de años previos, si no es la primera vez que realizas este
presupuesto. Cotejar los resultados de los años anteriores te permite tomar
decisiones inteligentes y establecer un porcentaje equivalente al pronóstico de
ventas.
También puedes verificar la competencia para crear un presupuesto que te
permita incrementar tu presencia frente a otras marcas del mercado. No olvides
elegir bien el medio al que distribuyes tu presupuesto, pues así podrás obtener
la información necesaria para incorporar eficientemente el medio adecuado a tu
mercado objetivo.
CARACTERISTICAS
Debe ajustarse a las necesidades (objetivos, estrategias y planes de acción),
tanto en precio como en calidad de los servicios a contratar, y de los que
consta el presupuesto.
Es coherente con los medios en los que está presente la empresa.
Es estructurado y detallado.
Además de los costes (o inversión) debe también detallar los posibles ingresos
que se derivarán de cada acción, para después calcular los beneficios o el
margen de contribución y el ROI o retorno sobre la inversión.
Tipos de técnicas
Presupuesto tradicional
Se caracteriza por hacer énfasis en los aspectos administrativos y de legalidad
en el uso de los recursos públicos, considerando al presupuesto como una
mera autorización de gasto que deben respetar los funcionarios públicos y
sobre lo cual se ejercerá el control. Entre las debilidades que presenta esta
técnica presupuestaria se encuentra lo que se denomina el incrementalismo
que no es otra cosa que practicar sobre el presupuesto del año previo las
actualizaciones por inflación o por las nuevas o mayores funciones de
determinadas áreas.
El presupuesto tradicional es un presupuesto que considera solo los insumos
que necesita el Sector Público para el desempeño de sus actividades, no
permite vincular los mismos con los productos a generar por lo que aspectos de
eficiencia en la utilización de los recursos públicos no pueden ser medidos ni
evaluados.
Presupuesto por programas
El presupuesto por programas aparece en escena en el Sector Público con
Robert S. Mac Namara, quien se desempeñara como Secretario de Defensa
de los Estados Unidos. En 1963 presentó el primer presupuesto por programas
para su Departamento. Luego, en 1965 el presidente Johnson ordenó su
introducción en todos los Departamentos de la Administración Federal. Así,
luego otros países del mundo lo fueron adoptando.
En los ’60 cambió la concepción del rol del Estado, al que se le comenzó a
requerir políticas activas y de promoción al desarrollo económico. En ese
contexto era necesario determinar ¿qué hace el Estado con los recursos
públicos? La técnica del presupuesto por programas surge para responder esta
pregunta, vinculando los insumos que utiliza el Estado como los productos que
obtiene.
La cuestión de fondo que intenta resolver el presupuesto por programas es la
de la búsqueda de eficiencia en el Sector Público. Básicamente, en un
presupuesto por programas casi todos los recursos son asignados a
programas, donde se especifican los objetivos perseguidos y se establecen las
metas a conseguir, que no son otra cosa que la cuantificación de los primeros.
Ahora, ¿cómo opera esta técnica presupuestaria para mejorar la eficiencia del
gasto público? A través de análisis costo-beneficio o costo-eficacia se evalúan
vías alternativas (distintas combinaciones de insumos para obtener un
producto) para alcanzar las metas de un programa y se seleccionan las más
convenientes.
Dentro del presupuesto por programas, un requisito importante para la
implementación de un sistema de medición de la producción es la utilización
de unidades de medida. La unidad de medida es un instrumento que debe
permitir caracterizar, con la mayor precisión posible, la producción de bienes y
servicios que va a ser medida. Para cumplir esta condición es necesario que
cumpla los siguientes requisitos:
Ser concreta, homogénea y representativa del bien o servicio.
Ser utilizable como medida del registro.
Ser expresado en términos sencillos y claros.
La técnica del presupuesto por programas no alcanzó el éxito pretendido por
los esfuerzos que requirió de las administraciones públicas, por la dificultad de
definir claramente los objetivos y metas, así como por la falta de cuadros
técnicos capacitados que lo llevaran adelante.
Por otro lado, al constituir una técnica excesivamente racional, restaba margen
de maniobra para la discrecionalidad política, con lo cual quedaba firmado su
certificado de defunción. Actualmente la mayoría de los presupuestos por
programas son un disfraz sofisticado del viejo presupuesto por insumos,
incorporando los vicios de este último, por ejemplo, el incrementalismo.
Presupuesto base cero
Esta técnica parte del supuesto de que es posible mejorar la decisión y el
control de la eficiencia interna en cada unidad administrativa formulando su
presupuesto a partir de cero, es decir, sin tomar como base el presupuesto del
período anterior. Para cada unidad deben prepararse un conjunto de
programas con el orden de prioridad, a juicio del responsable de cada
dependencia y para diferentes niveles de gasto total.
Las etapas del presupuesto base cero son las siguientes
Identificar y analizar cada una de las diferentes actividades existentes y
nuevas de una unidad administrativa, en paquetes de decisión.
Evaluar y categorizar todos los paquetes de decisión por medio de un estudio
de costos-beneficio o en forma subjetiva (esta es una ventaja respecto al
presupuesto por programas, ya que permite el uso del olfato político)
Asignar los recursos conforme a los dos puntos anteriores.
Los paquetes de decisión incluyen:
Metas
Costos
Producción o beneficios esperados
Responsables
Forma de verificación de los logros
Integración del paquete con otros
Distintos niveles de financiamiento
A diferencia del presupuesto por programas, el presupuesto base cero pudo
romper el problema del incrementalismo, pero su costo en esfuerzo por parte
de las administraciones públicas fue tan superior que prontamente dejó de
utilizarse.
PRINCIPIOS
A continuación, se presentan de manera sintetizada los principios o normas
técnicas más importantes que debe cumplir un presupuesto a lo largo de todas
sus etapas. Para ello, se recuperarán algunos textos normativos, en especial la
Ley de Administración Financiera y de los Sistemas de Control del Sector
Público Nacional.
Universalidad
El presupuesto debe presentar las previsiones de recursos y gastos por sus
montos brutos, sin compensaciones entre las mismas. Por ejemplo, la
recaudación de un determinado tributo debe ser presentada por su valor total,
sin deducir los gastos que fueron necesarios para su consecución. Veamos:
EXCLUSIVIDAD
Por aplicación de este principio se impide el ejercicio de una suerte de
contrabando normativo, que es la actividad por la cual se incluyen en la ley de
presupuesto normas que no tienen relación directa con el asunto principal. Por
ejemplo, tratar de incluir en el articulado del Proyecto de Presupuesto la
modificación del régimen de coparticipación federal de impuestos atentaría
contra el principio de exclusividad.
Al respecto, la Ley Nº 24.156 de Administración Financiera y de los Sistemas
de Control del Sector Público Nacional en su artículo 20 establece que la ley de
presupuesto general “Contendrá normas que se relacionen directa y
exclusivamente con la aprobación, ejecución y evaluación del presupuesto del
que forman parte. En consecuencia, no podrán contener disposiciones de
carácter permanente, no podrán reformar o derogar leyes vigentes, ni crear,
modificar o suprimir tributos u otros ingresos.”
Unidad
Este principio establece que el presupuesto debe contener todos los ingresos y
gastos del Estado consolidados en un documento único. De él deriva el
principio de unidad de caja, el cual sostiene que todos los ingresos deben ir a
una única caja o tesorería y los pagos deben ser realizados con los fondos de
ésa.
Para el caso argentino, se puede observar que el documento presupuestario
incluye a la administración central, los organismos descentralizados, las
instituciones de seguridad social, las universidades nacionales y los fondos
fiduciarios, quedando excluidas las empresas públicas.
Exactitud
Este es un principio básico, ya que del mismo se desprende la credibilidad que
obtenga la institución del presupuesto. Las estimaciones de las erogaciones a
realizar, como de los recursos a obtener, deben ser lo más precisas posibles.
Para poder verificar el cumplimiento de este principio, por el lado del gasto se
deben comparar los créditos originalmente asignados con la ejecución al
finalizar el ejercicio presupuestario.
De tal comparación puede surgir que los gastos previstos en el presupuesto
original sean superiores a los efectivamente realizados. Ello puede deberse a
necesidades políticas (por ejemplo, la inclusión en el presupuesto de una
determinada obra pública requerida por la sociedad que finalmente no se
ejecuta, situación que posiblemente exigió sobreestimar los recursos por
encima de las proyecciones realizadas), o puede suceder que la decisión sea
no avanzar con gastos sin contar con el financiamiento respectivo, en un marco
de prudencia financiera, debido a la evolución de los recursos obtenidos.
En contraposición, los gastos presupuestados pueden ser inferiores a los
efectivamente realizados. En los últimos años este ha sido el escenario a nivel
nacional, ya que una subestimación de recursos permite que los ingresos
adicionales sean aplicados al gasto sin pasar por el cuerpo legislativo,
otorgándole al Ejecutivo mayor flexibilidad. A su vez, esta subestimación de
recursos puede ser usada para disminuir las pretensiones salariales en un
marco inflacionario.
Claridad
El presupuesto debe ser presentado de manera que sea entendible tanto para
los legisladores (para su discusión y aprobación), para los funcionarios y
burócratas (para su ejecución), así como para los ciudadanos (para ejercer el
control sobre el uso de los recursos públicos).
Especificación
Este principio requiere establecer con precisión las fuentes que originan los
recursos, así como las características de los bienes y servicios a adquirir o
pagar por el sector público. Es una condición necesaria para que el Congreso
tenga los elementos básicos para la discusión y aprobación del presupuesto,
así como para mejorar la transparencia en el control ciudadano de las cuentas
públicas.
Periodicidad
El presupuesto por lo general se aprueba para un año que se denomina
ejercicio presupuestario, lo que se conoce también como principio de
anualidad. En los países desarrollados, es común encontrar presupuestos
plurianuales, si bien en paralelo se aprueban las leyes anuales de presupuesto.
Equilibrio
Este principio fue defendido por la escuela liberal, la cual señalaba los riesgos
del déficit fiscal de acuerdo a los medios con los que contaba el Estado para
financiarlos: la emisión monetaria traería aparejada mayor inflación, mientras
que el endeudamiento provocaría la bancarrota. Para esta escuela, un
superávit fiscal significaba una mala utilización de los recursos privados.
Luego, los keynesianos pusieron en duda este principio, indicando que el déficit
fiscal es necesario cuando hay recursos improductivos en la economía. Por
ejemplo, se genera un déficit cuando existe desempleo en una economía y el
Estado interviene para movilizar los recursos a través del gasto público, sin
tocar las tasas tributarias.
En síntesis, los principios presupuestarios permiten que el presupuesto alcance
un nivel de desarrollo técnico suficiente para cumplir con las funciones que le
son propias. Es indispensable que los mismos se respeten en todas las etapas
del proceso presupuestario tanto, en su contenido como en su forma.
Bibliografía
Bibliografía obligatoria
PETREI, Humberto, PETREI, Romeo, y RATNER, Gabriel. Presupuesto y
Control: Las mejores prácticas para América Latina. Capítulos 1 y 8. Argentina:
Buyatti, 2005.
MAKON, Marcos Pedro. La gestión por resultados, ¿es sinónimo de
presupuesto por resultados? (en línea). 2008. Fecha de consulta: 29 de Marzo
de 2018. Disponible aquí.
Referencias bibliográficas
NEUMARK, Fritz En: ALBI IBAÑEZ, Emilio, GONZÁLEZ-PÁRAMO, José
Manuel, ZUBIRI, Ignacio. En su: “Economía Pública I” 3ª ed. Pág.30.
Barcelona: Ariel, 2009.