Uprevistas,+societas Vol20 No1 89 110
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AUTONOMÍA Y ANTI-EXPANSIONISMO
EN JUSTO AROSEMENA
Dennis Chávez
HISTORIA
Profesor,
Departamento de Historia,
Facultad de Humanidades,
Vicerrectoría de Extensión,
Universidad de Panamá.
Correo electrónico: [email protected]
RESUMEN
PALABRAS CLAVES
INTRODUCCIÓN
Dado que, al promediar el siglo XIX, la historia económica y política del país princi-
pia una nueva época, determinada por la reactivación de la ruta transístmica bajo
los designios del expansionismo norteamericano, concretizados en los efectos de la
fiebre del oro californiano y de la construcción del ferrocarril, este trabajo parte del
supuesto que, de acuerdo a Justo Arosemena, la sobrevivencia y afirmación local
podía asegurarse en los marcos de una autonomía federal antiyanqui.
Para una mejor comprensión, el trabajo ha sido dividido en tres apartados con
sus subdivisiones respectivas. En su orden, los puntos principales son: la nue-
va época histórica panameña, que sintetiza el carácter de los nuevos tiempos
que vivía el país; el componente antiyanqui del Estado Federal, que contie-
Para ubicar el contexto histórico en que tiene lugar el desarrollo de la intensa cam-
paña de denuncias antiyanquis, que constituyen uno de los fundamentos del Estado
Federal en Justo Arosemena, es necesario recordar que al promediar el siglo pasa-
do se abrió una nueva época histórica en el Istmo de Panamá. Esta estuvo signada
por los efectos de los convenios de Nueva Granada con el gobierno y particulares
de los Estados Unidos, que a su vez condicionaron la viabilidad del tipo de autode-
terminación política que era posible lograr.
2
Goytía, Víctor F. Las Constituciones de Panamá. Segunda edición. Impreso en Costa Rica, 1987, p. 75.
3
Mack, Gerstle. La tierra dividida. Editorial Universitaria. 3ª edición. Panamá, 1992, p. 128.
4
Castro, Nils. «Panamá: Antiimperialismo y personalidad nacional», en Revista Lotería, N° 31, mayo-
junio 1975, Panamá, p. 67.
5
Castillo, Jorge A. Formación social panameña. Un análisis económico 1850-1960. Editorial IDEUD,
Panamá, s/f, p. 66.
6
Morales, Filiberto y otros. Desenvolvimiento económico panameño (1830-1930). Trabajo de Gradua-
ción, Universidad de Panamá, 1986, p. 115.
7
Figueroa Navarro, Alfredo. Dominio y sociedad en el Panamá colombiano (1821-1903). Ediciones
Tercer Mundo, segunda edición, Bogotá, Colombia, 1980, p. 317.
Un hecho recurrente en la historia nacional es que los proyectos políticos han res-
pondido a la posibilidad de aprovechar la ruta interoceánica. El resurgimiento de
ésta, en la mitad del siglo XIX, pero en condiciones nuevas, hace variar la visión de
la burguesía capitalina sobre la modalidad de la autodeterminación política. La
inversión de capital extranjero, la masiva inmigración humana y la afluencia de
culturas foráneas, particularmente el voraz expansionismo territorial estadouniden-
se, repercutieron en la heterogeneidad y en la búsqueda de la propuesta política
más viable, capaz de asegurar la anhelada autonomía económica y salvaguardar la
nacionalidad.
8
Arosemena, Justo. El Estado Federal de Panamá, EUPAN, Panamá, 1979, p. 75.
12
Alfaro, Ricardo J., Vida del general Tomás Herrera. EUPAN, Panamá, 1982, pp. 140-141.
13
Arosemena, Justo. «Alerta Istmeños», en Escritos de Justo Arosem ena, con estudio introductorio y
antología de Argelia Tello, p. 74.
14
Ibid, p. 78.
Para contar la realidad social que vivía la zona de tránsito, en el primer lustro
de la década de 1850, un contemporáneo de la época, el viajero brasileño Mi-
guel Lisboa, dejó un relato descriptivo de lo que observó en su estadía en Pana-
má, por el año de 1853. Sobre el particular relata que la recién creada ciudad
de Colón,
Uno de los tipos de denuncias que hace Justo Arosemena fue la relacionada con el
desacato reiterado de los estadounidenses hacia las autoridades e instituciones na-
cionales, así como el desprecio y los abusos de éstos sobre los panameños. He
seleccionado tan sólo algunos pasajes de escritos, que de inmediato se transcriben
y comentan.
18
Lisboa, Miguel María. «El Istmo de Panamá en 1853», en Revista Lotería, Nº 72, noviembre de 1961,
Panamá, p. 79.
19
Porras, Hernán. «Papel histórico de los grupos humanos en Panamá», en Las clases sociales en
Panamá, compilación de Marco A. Gandásegui, CELA, Panamá, 1993, p. 56.
20
Arosemena, Justo. «La situación», en Escritos de Justo Arosem ena, con estudio introductorio y
antología de Argelia Tello, p. 90.
21
Arosemena, Justo. «El Istmo de Panamá», en Escritos de Justo Arosemena, p. 97.
Lo cierto fue que la avalancha humana variada, el tráfico revivido y los servicios
urgidos, así como las nuevas necesidades institucionales, rebasaron las reales res-
ponsabilidades del modesto gobierno provincial, dada la ausencia de recursos eco-
nómicos y su escasa población. De manera que, debido a la inusitada situación,
eran mayores las responsabilidades gubernamentales, causadas por los capitalistas
y comerciantes extranjeros, que los pocos beneficios internos.
Los efectos de la creciente inmigración extranjera dieron lugar a que las auto-
ridades no tuvieran la presencia necesaria y fueran desconocidas reiterada-
mente (23 ). Las carencias istmeñas sirvieron de excusa a los extranjeros para
asumir decisiones propias sin el concurso de las autoridades locales, tal fue el
caso verificado en Colón donde éstos se reunieron en un mitin y nombraron un
Comité de Vigilancia, para que secretamente castigase a los malhechores al
margen de las leyes del país, determinando el no pago de contribuciones al
gobierno (24 ).
«El gobierno del infraescrito ha sido informado, con gran pena por las
autoridades de Panamá, de que en el mes de julio de 1852, han atravesa-
do aquella provincia seiscientos hombres de tropa de los Estados Uni-
dos, sin haber obtenido previamente el correspondiente permiso del Con-
greso Nacional» (25).
22
Díaz, Manuel María. «Informe a la Cámara Provincial», en sus sesiones ordinarias en 1851, Cajón 886,
Tomo 3099, Archivo Nacional de Panamá.
23
De Obaldía, José. «Nota al señor Presidente de la Cámara Provincial de Panamá», 29 de octubre de
1850, Cajón 849, Tomo 2144, Archivo Nacional de Panamá.
24
Castillero R, Ernesto J. «Ran Runnels en la ruta de El Dorado», en Revista Lotería, N° 23, octubre 1957,
Panamá, pp. 92 y 93.
25
Notas de la Legación de Colombia en los Estados Unidos al Departamento de Estado, 1810-1910.
Al observar la conducta y los fines de absorción del Istmo por los Estados Unidos,
Arosemena sanciona que:
«Es dominados por ese solo pensamiento que los yankees han perpetra-
do toda especie de atentados, mostrando en todos sus actos de provoca-
ción el más insolente desprecio por las instituciones, las costumbres, la
autoridad y la raza nacional del Istmo. Por eso desconocen la autoridad
nacional, empezando por rechazar el nombre de Colón que la Ley Ist-
meña ha señalado a la nueva ciudad fundada en la isla de Manzanillo.
Por eso cometieron los escándalos de Chagres, que fueron tan ruidosos,
y permanecieron impunes. Por eso usurparon la administración de jus-
ticia e insultaron la soberanía nacional, con el asesinato ejecutado en
Taboga de acuerdo con el cónsul portugués, sin respeto alguno por la
moral y la ley granadina. Por eso se han denegado frecuentemente a
pagar las contribuciones en la provincia de Panamá, y luego en el
Estado, pretendiendo que las autoridades nacionales les diesen gra-
tuitamente protección y servicios. Por eso se hacían siempre justi-
cia a sí mismos, erigiendo la pistola y el puñal en árbitro de todo. Por
eso enviaron a Panamá un cónsul pendenciero y atribiliario (Ward)
dispuesto siempre a la querella con los nacionales, a insultar nuestra
nacionalidad y a suscitar embarazos. Por eso crearon un misterioso
tribunal de hecho que consideraba a los ladrones y asesinos a la
pena de muerte, bajo la fórmula simbólica de enviarlos a Cartagena
o Nueva York nombres de los lugares del sacrificio, sin que nadie
pudiera impedir los muy numerosos asesinatos que esos hombres,
erigidos en tribunal por sí y ante sí, ejecutaron durante mucho tiem-
po, son escarnio de la civilización americana» (27 ).
26
Tomes, Robert. Panamá en 1855. Un relato sobre el Ferrocarril de Panamá. Traducción de José
Antonio Ureña, trabajo de graduación, Universidad de Panamá, 1971, pp. 82-83.
27
Arosemena, Justo. La cuestión americana. Nota preliminar de Ricaurte Soler, Instituto del Canal de
Panamá y Estudios Internacionales, Universidad de Panamá, 1994, p. 25.
«La misma farsa se está iniciando en Cuba, y en otra podrá muy bien
representarse en nuestro Istmo» (29 ).
28
Arosemena, Justo. «El Istmo de Panamá», en Escritos de Justo Arosemena, p. 99.
29
Ibid, p. 100.
Sobre el pasaje citado, debo hacer dos comentarios: primero, que dicho escrito
aparece a escasos meses del conflicto de la Tajada de Sandía, en abril de 1856, lo
que le permite tener una visión muy próxima a las nuevas formas expansionistas
aplicadas en Panamá; segundo, que en la década de 1850, los Estados Unidos
habían acudido a nuevas vías de absorción foránea, apoyándose en el filibusterismo,
vinculado a diferentes modalidades de anexionismo, entreguismo de sectores loca-
les y el estímulo de anarquías internas.
Más adelante, en el mismo escrito que acabamos de aludir, Arosemena señala que:
30
Arosemena, Justo. El Estado Federal de Panamá, p. 68.
31
Arosemena, Justo. La cuestión americana, pp. 16-17.
32
Ibid, pp. 24 y 25.
Interpretando al panameño insigne del siglo XIX, que trasciende hasta nuestros
días, debemos verificar que éste descartaba firmemente la posibilidad de acudir al
proteccionismo unilateral yanqui, pues en ello veía un peligroso augurio para la
sobrevivencia nacional.
33
Arosemena, Justo. «Paz y Justicia», en Escritos de Justo Arosemena, con estudio introductorio y
antología de Argelia Tello, p. 84.
34
Arosemena, Justo. «Cuestiones Internacionales relacionadas ahora con el Istmo de Panamá», p. 118.
35
Arosemena, Justo. «A Fabio», en Revista Lotería, N° 141, agosto 1967, Panamá, p. 140.
Una vez creado el Estado federal soberano de Panamá, mediante el acto reforma-
torio a la Constitución neogranadina de 1853, del día 27 de febrero de 1855, fue
convocada una Asamblea Constituyente que elegiría al primer Presidente del mis-
mo, recayendo tan alta distinción en su propio artífice, el doctor Justo Arosemena.
Éste asumió la jefatura el 16 de julio de 1855 y la ejerció hasta el 3 de octubre
siguiente; cuando renunció por diferencias con la Convención Constituyente del
Estado y el Gobierno Central, es decir, estuvo como rector del recién erigido Estado
autónomo casi tres meses, tiempo durante el cual desarrolló una activa gestión
gubernamental.
36
La Estrella de Panamá, 30 de junio de 1857. En compilación realizada por Xenia Batista.
37
Arjona de Ríos, Rita Omaira. Informes consulares sobre el comercio de Panamá desde 1853 hasta
1881, Trabajo de graduación, Universidad de Panamá, 1980, p. 26.
Sin duda Justo Arosemena fue un hombre de su época, a quien le tocó experimen-
tar el expansionismo territorial yanqui en México y Centroamérica, así como su
injerencia cada vez mayor en la anatomía local istmeña. Por ello, proyectó su
visión acerca de la autodeterminación no como un fin en sí mismo, sino como una
vía para salvaguardar y fortalecer la comunidad istmeña.
38
Arosemena, Justo. «Cuestiones Internacionales relacionadas ahora con el Istmo de Panamá», p. 127.
39
Arosemena, Justo. «Discurso pronunciado en julio de 1856», en Octavio Méndez Pereira, Justo Arose-
mena. Editorial Universitaria, Segunda Edición, Panamá, 1970, p. 209.
40
Soler, Ricaurte. «La cuestión nacional panameña: Justo Arosemena», en: Revista Tareas Nº 57, enero-
marzo de 1987, Panamá, p. 48.
A mediados del siglo XIX irrumpe una nueva época histórica en Panamá, signada
por el resurgimiento de la ruta interoceánica bajo el tutelaje norteamericano consa-
grado en el Tratado Mallarino-Bidlack y los efectos del oro californiano y la cons-
trucción del ferrocarril. Esto determina la búsqueda de un nuevo tipo de autodeter-
minación política para el Istmo, siendo la más viable el autonomismo federal, capaz
de asegurar el territorio ante los reales peligros de absorción yanqui, de acuerdo a
Justo Arosemena.
SUMMARY
AUTONOMY AND ANTI-EXPANSIONISM IN JUSTO AROSEMENA
This article shows the dilemma between Colombian absorption and American
interference suffered by the Federal State of Panama. It considers that a new
Panamanian historical epoch steams with the establishment of the Federal Sta-
te. It studies the effects of international engagements that emerged in the Isthmus
in those days. And it asks about the viability of political self-determination during
that period. It reveals the anti-American spirit of the Federal State of Panama
and circumscribes the transformation of Panamanian society from the beginning
of federalism. It identifies American abuses since the creation of the Federal
State and shows a new type oy American expansionism in the Isthmus indicating
the surrender and American protection evoking the frail economic sovereignty
of Panamanian Federal State.
KEY WORDS