SANANDO YO SANAN TODOS - Ernesto Guerra
SANANDO YO SANAN TODOS - Ernesto Guerra
SANANDO YO SANAN TODOS - Ernesto Guerra
ERNESTO GUERRA
REFLEXIÓN
.
Al igual que en el cuento, yo siempre le echaba la culpa a las piedras
malditas:
mi familia
el gobierno
el trabajo
el dinero
la salud
y por supuesto, todo eso es parte de mi programa (ego).
LINGOTES DE ORO
“Atendiendo la causa (mi mente) se corrige todo lo demás (el efecto)”
“Lo que resiste persiste”
“Primero mi paz y después lo demás”
EJERCICIO
.
Tu misión, si decides aceptarla, es respirar lento y profundo mientras
contestas las siguientes preguntas que nos ayudarán a disolver la Matrix.
1) ¿Cuáles creencias crees que son más dañinas?, ¿las positivas o las
negativas?
2) ¿Qué sabes con absoluta certeza?
Ya que hayas contestado a estas dos preguntas, te invito a hacerte dos
preguntas más:
3) ¿De qué te das cuenta?
4) ¿Qué vas a hacer con eso que te diste cuenta?
POSDATA
Para complementar el ejercicio de hoy, te invito a escuchar un audio
titulado:
¿Qué sabes con absoluta certeza?: https://youtu.be/AajP1Ujt458
¿CUÁL ES EL PROPÓSITO
DE LA VIDA?
—Maestro, ¿cuál es el propósito de la vida?
—Zabib, mejor deja que te cuente un cuento, pero antes es necesario
presentarte a Brahma y Maya. En el hinduismo se le conoce a Brahma
como el primer ser viviente creado, en otras palabras, Brahma es el creador
del universo. Maya por su parte es la deidad femenina que representa el
sueño de la dualidad en el universo de las formas. En otras palabras, Maya
es la Diosa de las ilusiones (tierra). Sin más preámbulo, deja que te cuente
un…
CUENTO .
Érase una vez Brahma y Maya que se encontraban descansando en el
espacio infinito de la quietud.
Ambos gozaban de paz absoluta pues, en esencia, ellos eran luz y habían
gozado de este estado por toda la eternidad hasta que un buen día a Maya se
le vino una revelación:
— ¡Brhama, Brhama he tenido una revelación!
— ¿Qué pasa Maya?
—He tenido una revelación y necesito compartírtela.
—Dime, ¿de qué se trata?
—Mira, se me acaba de ocurrir esto, ¿qué tal si creamos un planeta que
se llame “tierra”, y en dicho lugar tu y yo nos dividamos en 7,500 millones
de seres dormidos. Deja te explico.
—Si porque hasta ahora no te entiendo nada.
—Mira, por toda la eternidad hemos estado experimentado paz absoluta
pues esa es nuestra naturaleza, y es lo único que conocemos; sin embargo,
este experiencia ya comenzó a aburrirnos. Es por ello que se me ocurrió que
nos dividamos en 7,500 millones de seres, a los que llamaremos humanos,
para que podamos experimentar la obscuridad.
— ¿La obscuridad?, ¿qué es eso?
—Precisamente por eso necesitamos crear este mundo, pues “no
conocemos la obscuridad”.
— ¡Ahh!, ya comprendo, sigue por favor.
— ¡Sabia que te iba a interesar!, el primer paso sería olvidar quienes
somos realmente. Ya que si supiéramos que somos Dioses, no tendría chiste
el juego. Todos experimentaríamos paz y sería lo mismo que estar en este
espacio infinito de quietud. ¡No!, lo que necesitamos es una amnesia total
que nos permita experimentar la obscuridad (el miedo).
— ¡WOW!, y ¿porqué 7,500 millones de habitantes?
—No, pensándolo bien quiero que comencemos con esa cantidad y que
todos los días nazcan nuevos seres humanos que se crean separados unos de
otros por medio de un mecanismo al cual denominaremos ego.
—Comprendo pero, ¿cuándo va a terminar este juego Maya?
—El juego “terminará cuando todos recordemos quienes son
realmente” .
FIN
El Maestro continuó:
— ¿ De qué te das cuenta Zabib?
—Mhh, ¿de que mi propósito es recordar quien soy realmente?
—Ahora dilo en afirmativo
—“Mi propósito es recordar quien soy realmente”.
LINGOTES DE ORO
“No puede haber luz sin obscuridad”
“Mi propósito es recordar quien soy realmente”
“Mi propósito es disfrutar de la película que yo mismo he elegido vivir en
ésta encarnación”
“Mi propósito es respetar la elección que cada uno de mis hermanos ha
hecho”
EJERCICIO
.
Tu misión, si decides aceptarla, es imaginar que estás dentro de la película
de Matrix y en este Instante Santo viene Morpheus ante ti y te pregunta:
¿Qué eliges?, ¿olvidar todo esto que acabas de leer y “permanecer en la
realidad virtual de la Matrix” (pastilla azul)? o ¿tomar el camino de la
responsabilidad al 100% y “despertar” (pastilla roja)?
EL DRAGÓN QUE
ATEMORIZABA AL
PUEBLO
— Maestro, estoy muy preocupado. Sucede que pedí un préstamo de
$100,000 dólares y por más que trato de generar utilidades en el negocio
que emprendimos con ese dinero, solo tenemos pérdidas y siento mucho
miedo de que nos vayan a embargar la casa, pues la puse en garantía.
Pareciera que gobierna un demonio dentro de mi cabeza, que me
bombardea constantemente con pensamientos de miedo y preocupación,
¿qué consejo puede darme?
—Deja que te cuente un…
CUENTO .
Érase una vez un joven llamado Anuar, que vivió en la época del Rey
Arturo, época en donde los castillos y dragones eran comunes.
Un buen día, Anuar se levantó muy temprano para desayunar junto con
su mamá, mientras desayunaban le dice:
—Mamá, he decidido marcharme de casa y hacer mi propia vida. Te
prometo que volveré cuando me sea posible, y si no, tus enseñanzas las
llevaré por siempre en mi corazón.
—Hijo, estoy muy orgullosa de ti y sé que esto que has decidido te hará
madurar aún más. “ ¡Muchas felicidades, precioso valiente!”.
—Te amo mamá.
—Te amo hijo.
— ¿Dónde está papá?
—Está en el pueblo y dijo que llegaba a medio día, así que no ha de
tardar.
—Ok. Lo esperaré, mientras tanto quiero preguntarte, ¿qué consejos me
das para ser feliz?
—Solo recordarte que…
“donde pones tu atención se convierte en tu experiencia”
—Así que te invito a que, cada vez que tengas miedo vuelvas a poner tu
atención en pensamientos de amor. La oración es justamente eso, son
verdades absolutas que te permitirán recordar quien eres realmente y tu
verdadero propósito. —Dijo la mamá.
— ¿Qué oración me recomiendas decir cuando tenga miedo?
—Una de mis favoritas es esta:
“Mi mente es la mente de Dios y solo tengo pensamientos con Dios y solo
escucho una voz, que es la voz de Dios que habla por mi”
—También puedes decir:
“Gracias Espíritu Santo, porque siempre estás conmigo”
—Gracias mamá, lo recordaré. Oye, ¿y si tengo preocupación?
—Para la preocupación, hay una medicina maravillosa:
“Pongo el futuro en manos de Dios”
.
—Gracias. ¿Y para la culpa?
—El mejor remedio para la culpa es:
“Volver a la presencia”
—Tienes razón mamá, la culpa no es compatible con la presencia.
—Así es hijo. Mira, ¡ya llegó tu papá!, ve y platica con él sobre tu
decisión.
—Papá, ¡que gusto que llegaste!. Sucede que desde hace varios meses
siento el llamado en mi corazón de partir del hogar para conocer el mundo,
¿qué opinas?
— ¡Que hermosa noticia!, cuando yo tenía tu edad también sentí ese
mismo deseo; y gracias a que le hice caso, conocí a tu madre y venos ahora,
formamos un hogar.
— ¡Gracias papá!, ¡te amo!
—Yo también te amo hijo.
—Oye papá, hace un momento mamá me dio varios consejos para ser
feliz y ahora quiero escucharte a ti, ¿qué consejos me das antes de partir?
—Mi único consejo es recordarte que:
“Los miedos desaparecen enfrentándolos, no evadiéndolos. Nunca permitas
que un miedo te gobierne”
—Comprendo papá, desde niño me has repetido esa frase, junto con la
otra de “agarra al toro por los cuernos” . Y tienes mucha razón, cuando
huyo del miedo, este se hace más grande. Gracias por recordármelo.
—Es mejor que te alistes para tu viaje, deja te preparo algo de comer
para el camino.
—Te amo papá.
—Y yo también a ti hijo. ☺
A la mañana siguiente, Anuar salió muy temprano y se dirigió a lo
desconocido. Anuar sabía lo que quería y en su mente visualizó un lugar
precioso, rodeado de montañas y vegetación abundante; ríos caudalosos y
cascadas hermosas.
A la mañana siguiente, Dioscidentemente, Anuar encontró un lugar
exactamente como él lo había visualizado y decidió ingresar al pueblo.
La primera persona con la que se topó fue un pastor de ovejas.
—Disculpe buen hombre, soy nuevo por aquí y quiero preguntarle su
opinión sobre el pueblo pues pienso establecerme en él.
—Hola muchacho. Este pueblo es hermoso, como puedes ver, tenemos
un clima fantástico, el agua nunca nos falta pero existe un inconveniente.
— ¿Qué inconveniente?
—La desventaja de vivir en este pueblo es el dragón que habita en esa
cueva. —Anuar fijó su mirada en dirección a una cueva a la cual señalaba el
pastor.
— ¿Dragón ha dicho usted?
—Sí, un dragón de veinte metros de altura que avienta fuego y tiene unas
garras que te pueden destrozar en mil pedazos.
— ¿En serio un dragón?, yo pensé que los dragones no existían.
—Sí que existen, y prueba de ello es que me han dado ya dos ataques al
corazón del estrés que tengo de vivir a unos metros de la cueva. Sucede que
mis padres me heredaron una casa que, por mala suerte, está ubicada muy
cerca de la cueva.
— ¡Órale!, que mala suerte. Y ¿cuántas veces ha visto al dragón?
—Nunca.
— ¿Cómo que nunca?
—No, nunca lo he visto.
—Entonces ¿cómo está seguro de que es real?
—Es que todos hablan del dragón. Vamos, te invito a que pasees por el
pueblo, y preguntes para que veas que no miento.
—Ok, así lo haré. Muchas Gracias.
—De nada muchacho, que tengas un lindo día.
—Igualmente señor, buen día.
Anuar entró al pueblo y se topó con una señora y le hizo la misma
pregunta.
—Es cierto, el pueblo está aterrorizado por ese maldito dragón. —
respondió la señora, que de pronto comenzó a llorar inconsolable.
— ¿Qué le pasa señora?
—Es que… ¡ese dragón mató a mi hijo!.
— ¿Cómo?
—Si… ese dragón mató a mi hijo de varias enfermedades.
—No entiendo.
—Lo que sucede es que el estrés de saber que en esa cueva está el
dragón, hizo que mi hijo comenzara a tener un salpullido con ronchas en
toda la piel, después desarrollo una enfermedad en la sangre, el doctor dijo
que era provocado por tanto estrés. Mi hijo siguió enfermando hasta que un
día murió.
—Lo siento mucho.
—Y a mí me está pasando lo mismo ahora. He tenido dolores de cabeza
constantes y ataques de ansiedad, todo por culpa de ese maldito dragón.
—Una última pregunta señora.
—Si dime.
— ¿Su hijo, o usted, alguna vez vieron al dragón?
—No, jamás lo hemos visto.
— ¿Y por qué le han tenido miedo a algo que nunca han visto?
— ¡Pues porque todos hablan de él y me consta que me tiene enferma, y
que ya ha matado a varias personas de este pueblo!
—Ok, gracias señora, seguiré investigando, hasta luego.
—Hasta luego muchacho.
Anuar siguió recorriendo el pueblo y conforme preguntaba a más y más
personas, todos le compartían historias similares.
Todos en el pueblo habían desarrollado enfermedades físicas y mentales
debido al dragón y ninguna de ellas lo había visto. Pero eso sí, todos le
temían muchísimo, así que Anuar decidió hacer lo que hubiera hecho su
padre:
“Enfrentar sus miedos”
Como un buen guerrero, lo primero que hizo Anuar fue prepararse física
y mentalmente, así que compró alimentos en el mercado y se estableció en
una cabaña que rentó.
Su madre le había enseñado yoga, así que comenzó a realizar su práctica
y al cabo de tres días de combinar yoga y oración se sentía más que listo
para enfrentar al dragón.
En su mente no había una pizca de miedo. Es más, tan seguro estaba de
que ese dragón era una ilusión que decidió enfrentarlo sin ninguna arma o
escudo que lo protegiera pues en su interior sabía que:
“En su indefensión radicaba su seguridad”
Así que, Anuar tomó solamente una lámpara de petróleo y se dirigió a la
cueva sin hacer caso a todas las personas que le gritaban:
—Muchacho no vayas para allá, ¿qué no te han advertido del dragón?
— ¡Hey muchacho!, ¿a dónde vas?, eres muy joven para morir, ¿por qué
no nos haces caso?
Y así mientras caminaba por el pueblo, las personas le iban advirtiendo
del dragón.
Anuar llegó a la entrada de la cueva y comenzó a sentir escalofríos pues,
la cueva medía… no veinte, sino cuarenta metros de altura y comenzó a
hacer historias en su mente:
— ¿Y qué tal que el dragón si es real?, ¿y qué tal que mide cuarenta
metros?, ¿y qué tal que si me mata y no tengo la oportunidad de formar un
hogar como lo formaron mis padres?, ¿y qué tal que si…?
En ese preciso instante se dio cuenta de que se estaba distrayendo y
recordó lo que su madre le había enseñado:
“Donde está tu atención se convierte en tu experiencia”
Así que Anuar cerró sus ojos y “comenzó a poner toda su atención en su
respiración natural”. Y para rematar, comenzó a decir las oraciones que su
madre le había enseñado:
“Mi mente es la mente de Dios y solo tengo pensamientos con Dios y
solo escucho una voz, que es la voz de Dios que habla por mi”
“Gracias Espíritu Santo, porque siempre estás conmigo”
“Pongo el futuro en manos de Dios”
Anuar nuevamente comenzó a sentirse seguro y continuó caminando
dentro de la cueva. Al cabo de unos minutos observó a miles de
murciélagos salir de la cueva y aun cuando pasaron muy cerca de él, Anuar
seguía sintiéndose acompañado de un guerrero poderosísimo… ¡ESE
GUERRERO ERA DIOS!
Al cabo de media hora de caminar, Anuar se topó con una pared y fue
cuando se dio cuenta de que había llegado al final de la cueva, así que
comenzó a aluzar con la lámpara para ver si encontraba al dragón. Cuál fue
su sorpresa cuando miró al piso y observó a un dragoncito del tamaño de
una manzana, así que lo puso en la palma de su mano y lo subió a la altura
de sus ojos para preguntarle:
— ¿Dónde está tu mamá o tu papá?
—En esta cueva solo vivo yo.
— ¿Cómo es posible eso?, si todos en el pueblo están muertos de miedo
por ti, y si yo quisiera; pudiera ahora mismo bajarte al piso y aplastarte
como una vil lombriz, ¿cuál es tu secreto?
—Todo se debe a mi nombre.
— ¿Tu nombre has dicho?, ¿Cómo te llamas?
—Me llamo LOQUE…
“LO QUE TAL VEZ PASE”
REFLEXIÓN
Un día me pasó lo mismo que a Anuar e hice algo que el ego no puede
hacer:
“PEDÍ AYUDA A UN MAESTRO”
Si tú estás pasando por algún atore de salud, dinero o amor, te invito ahora
mismo a disolver esa ilusión temporal con la ayuda de un Maestro que tú
elijas pues, como dice en “Un Curso de Milagros”:
“El ego no puede imperar en contra de nuestra fuerza conjunta”
LINGOTES DE ORO
“La preocupación es planear mi futuro fracaso”
“Donde está tu miedo esta tu tarea”
“Los miedos se vencen enfrentándolos, no evadiéndolos”
“Donde está tu atención se convierte en tu experiencia”
“La oración es el vehículo de los milagros”
EJERCICIO
Tu misión, si decides aceptarla, es que cada vez que tengas miedo de lo que
sea, te atrevas a enfrentarlo con amor.
Por ejemplo, la otra vez no tenía dinero y quería comprar unos aguacates en
la tienda de la esquina así que me fui porque “tenía miedo de ser
rechazado”. Así que, “hice una pausa, respire profundo y solté el miedo
diciendo”:
“GRACIAS ESPÍRITU SANTO PORQUE SIEMPRE ESTÁS
CONMIGO”
Y con esa confianza me atreví a pedirle fiado al señor de la tienda, el cuál
accedió amablemente.
POSDATA
Gracias mamá por haberme enseñado a “agarrar al toro por los cuernos”.
Te Amo. ☺
EL LOBO BUENO Y EL
LOBO MALO
Esta era una vez un niño que sale del Kínder y le dice a su mamá:
— ¡Mamá, mamá, la maestra nos contó hoy un cuento bien bonito!,
¿quieres que te lo cuente?
— ¡Si hijo, cuéntamelo!
—Bien mamá, ahí te va: La maestra dice que todos tenemos un lobo
bueno y un lobo malo en la cabeza. ¿Sabías eso?
—No sabía hijo, pero tiene mucha razón tu maestra.
— ¿Y quieres saber cuál de los dos lobos gana?
—Si hijo, por favor dime, ¿cuál lobo gana?
—Gana, el que tú alimentes mamá, el que tú alimentes.
REFLEXIÓN
A mi padre nunca lo vi sacar un crédito bancario, ni tampoco lo vi comprar
en abonos absolutamente nada. Él prefería ahorrar pacientemente y después
pagar de contado, lo que él quisiera comprar.
Mi madre por su parte era diferente, ella si sacaba algunos créditos pero
en cuanto terminaba de pagar sus deudas rompía las tarjetas exclamando
enojada:
— ¡Malditos créditos, jamás voy a volver a sacar tarjetas!
Pues bien, un buen día yo decidí sacar no uno, sino dos créditos
bancarios que me llegaron a quitar el sueño en repetidas ocasiones.
En una ocasión, mientras trataba de meditar me di cuenta de que,
efectivamente si estaba meditando… pero ¡EN MIS DEUDAS!, ya que me
la pasaba repitiendo en mi mente, puros pensamientos descendentes tales
como:
“No vas poder pagar los créditos.”
“¡Eres un pendejo!”
“Te faltan 5 largos años para terminar de pagar la deuda y en todo ese
tiempo vas a estar pagando muchos intereses al banco.”
“Si se enteran tus padres se van a enojar contigo.”
Después de fracasar muchas veces en mis intentos de meditar por mí mismo
decidí hacer lo que debí haber hecho desde un principio:
LINGOTES DE ORO
“En donde pongo mi atención se convierte en mi experiencia”
“Donde está mi atención está mi inversión”
“Donde está mi atención… florece”
EJERCICIO
Observa donde estás poniendo tu atención ahora mismo. Si te das cuenta
que estás eligiendo pensamientos de miedo, por favor no cometas el error
de sacar el látigo de la culpa, recuerda que:
“LA CULPA NO EXISTE, SOLO EXISTEN ERRORES, Y LOS ERRORES
SE CORRIGEN EN ESTE INSTANTE SANTO”
A continuación te paso las oraciones que suelo decir cada vez que me
distraigo:
REFLEXIÓN
Cuando mi Maestro me sugirió este ejercicio no me di cuenta de lo
poderoso que es, ¡HASTA QUE LO LLEVÉ A LA PRÁCTICA!
Por ejemplo, llevo casado 21 años y se perfectamente que temas me
conviene abordar con mi mujer y cuáles no. Eso gracias a que comencé a
hacerme esa sencilla pregunta:
¿Qué hice yo para volver a sentirme así?
Antes yo era totalmente inconsciente e iniciaba las discusiones sin que me
diera cuenta. Si escuchaste bien, YO INICIABA LAS DISCUSIONES;
pues era totalmente inconsciente de que temas me convenía abordar y
cuáles no.
Ahora, gracias a esta pregunta me he hecho consciente de un montón de
cosas, entre ellas, de que:
“NADIE ME HACE NADA, TODO ME LO HAGO A MI MISMO, CON
MIS PROPIOS PENSAMIENTOS”
El preguntarme ¿qué hice yo para volver a sentirme así? deshace el viejo
papel de víctima y me devuelve a la RESPONSABILIDAD 100%, DONDE
TENGO EL PODER DE DARME CUENTA Y SER LIBRE.
LINGOTES DE ORO
“A mayor responsabilidad mayor consciencia y a mayor consciencia mayor
libertad”
“Nadie me hace nada, todo me lo hago a mí mismo, con mis propios
pensamientos”
“¿Qué hice yo para volver a sentirme así?”
EJERCICIO
Tu misión, si decides aceptarla, es probar por ti mism@ haciéndote esta
pregunta cada vez que te sientas abandonad@, humillad@, rechazad@ o
traicionad@.
Verás que al cabo del tiempo te convertirás en un(a) maestr@ de la DE LA
AUTO-OBSERVACIÓN CONSCIENTE.
POSDATA
Esto de la auto-observación es un como un deporte. Mientras más lo
practicas mejor juegas. Así que deja de tomártelo en serio y comienza a
JUGAR ☺
LO REAL Y LO FALSO
Esta era una vez un Maestro de meditación llamado Babaji que llevaba más
de 30 años meditando. Su paz y su presencia eran notables incluso sin
hablar. Un día un amigo suyo llamado Enrique le pidió que diera un taller
de mindfulness en su casa para que les enseñara a todos sus familiares y
empleados de su empresa a estar presentes. El amablemente accedió y
durante una semana les enseñó a poner toda su atención en pensamientos de
paz, amor, gratitud y compasión.
Al terminar el taller, Enrique invitó a cenar a Babaji y a continuación te
comparto la plática que sostuvieron.
—Babaji, antes que nada muchas gracias por habernos compartido a mí
y a todos los que vinieron a este bellísimo taller de mindfulness.
—Es un placer Enrique, cuando me invitaste sabía que nos iba a ser de
beneficio a todos.
Mientras el chef de Enrique se acercaba a ofrecerles los platillos que
tenían preparados para la cena, el sol comenzó a ponerse en el mar y los dos
quedaron en silencio disfrutando de un atardecer espectacular.
— ¿Sabes algo Babaji?, soy muy afortunado.
— ¿Por qué?
—Pues porque tengo una familia a la que me amo y me aman, soy un
hombre muy exitoso en los negocios, he viajado por todo el mundo y tengo
esta casa con alberca y vista al mar.
—Eso no tiene nada que ver con la felicidad.
— ¿Cómo?, no entiendo. Por favor explícame.
—Sí, mira. Pongamos por ejemplo, tu casa. ¿Qué pasaría si depositaras
tu felicidad en tu casa?
—No entiendo tu pregunta.
—Sí, vamos a suponer que tienes un apego a tu casa. ¿Qué le pasaría a tu
felicidad si de repente viniera un huracán y dañara parcial o totalmente tu
casa?
—Uy, en ese caso me pondría muy triste.
— ¿Por qué?
—Pues porque como acabas de decir, efectivamente tengo un apego por
mi casa y he depositado en ella parte de mi felicidad.
—Correcto; y muchas personas no saben todavía la diferencia entre lo
real y lo falso.
—Yo no sé, por favor explícame.
—Ok. Todo lo que es temporal es falso. Como tu casa y cualquier otra
cosa que percibas con los cinco sentidos.
—No entiendo, ¿cualquier cosa que yo perciba con los cinco sentidos es
falso porque es temporal?
—Correcto Enrique. Todo lo que percibes con los cinco sentidos en
algún momento se va a perder, te lo van a robar, se va a desgastar,
descomponer, se va podrir o simplemente, muere. Te pongo otro ejemplo
para que nos quede más claro. ¿Cómo estás de salud actualmente?
—Bendito Dios muy bien, gozo de una excelente salud porque hago
mucho ejercicio y tengo un cuerpo envidiable para muchos de mi edad.
—Bien, ¿qué pasaría si pusieras tu felicidad en tu cuerpo?
—Uy, otra vez con tus preguntas de Condorito.
—Jeje, si, es probable que te vayas para atrás haciendo PLOP, como en
el comic de Condorito, pero es importante que te des cuenta del engaño en
el que has estado viviendo durante todo este tiempo. Por favor contesta a la
pregunta. ¿Qué pasaría si pusieras tu felicidad en tu cuerpo?
—Tienes razón, he vivido con el instructivo incorrecto toda mi vida, y
contestando a tu pregunta, si mi cuerpo comenzara a enfermar perdería mi
felicidad.
— ¿Por qué?
—Pues porque quiero vivir muchos años para seguir disfrutando a mi
familia, mi éxito financiero, mi cuerpo y todo lo que el dinero puede
comprar.
— ¡Bingo!, haz dado con la clave de la infelicidad.
— ¿Cómo?
—Sí, todo lo que acabas de nombrar es falso porque todo eso, aparte de
ser temporal es CAMBIANTE. Y todo lo que es cambiante es FALSO
también.
—No entiendo, por favor dame ejemplos.
—Ok, te hago otra pregunta. ¿Qué pasaría si pusieras tu felicidad en tu
familia?
—Uy que pregunta. Para serte sincero mi felicidad es como una montaña
rusa. A veces estoy feliz y a veces muy enojado, y en gran parte es debido
al comportamiento de mis tres hijas adolescentes y mi esposa. Si te soy
sincero, mi felicidad es muy inestable porque, si he depositado mi felicidad
en mi familia, y el estado de animo de ellas cambia constantemente. A
veces ellas están felices, me hacen caso y yo estoy muy feliz también. Pero
a veces ellas son rebeldes, hacen lo que quieren, aun cuando van en contra
de mis principios y yo me enojo mucho. Es más, hasta hemos tenido que ir
a terapia familiar porque de plano no podemos congeniar.
—Y eso se debe a que has depositado tu felicidad en algo que cambia
todos los días… TU EGO.
— ¿Qué es el ego?
—El ego es tu mente condicionada. Justamente los principios que les
quieres imponer a tus hijas son parte del ego. Todos los programas,
creencias y voces que escuchas en tu cabeza también son parte del ego.
—Ah canijo. No sabía eso.
—Sí, mucha gente todavía cree que el ego es simplemente ser egoísta,
pero el concepto va mucho más allá. Deja te explico. Todo el sufrimiento
proviene de estar defendiendo a un falso yo. Y ese falso yo son todos los
pensamientos que están en tu cabeza. De hecho, la mayoría, sino es que
todos tus pensamientos, son cambiantes y por lo tanto son falsos.
— ¿La mayoría?
—Así es, y te lo voy demostrar haciéndote varias preguntas:
¿Tus creencias acerca de quién eres realmente se han mantenido
constantes a lo largo de tu vida o han cambiado?
—Mhh, han cambiado.
—Entonces tus creencias acerca de quién eres realmente son UNA
MENTIRA porque todo lo que cambia es mentira. Todo lo que permanece
inmutable (que no cambia) es verdad.
—Oh, tiene sentido.
—Pero vamos más profundo. ¿Tus creencias acerca del amor se han
mantenido constantes a lo largo de tu vida, o han cambiado?
—Mhh, han cambiado también.
—Otra mentira más.
— ¿Tus creencias acerca de Dios han cambiado a lo largo de tu vida o
han cambiado?
—Han cambiado.
— ¿Tus creencias acerca de la sexualidad?
—Han cambiado
— ¿Tus creencias acerca del propósito de tu vida?
—Han cambiado
— ¿Tus creencias acerca de la familia?
—Han cambiado
— ¿Tus creencias acerca de X, Y o Z?
—Han cambiado
—Entonces todo eso es falso también.
— ¿Y qué es real entonces?
—Deja te hago una pregunta para que comprendas lo que SI es real:
¿Qué sabes con absoluta certeza?
—Cierra tus ojos, respira profundo y espera la respuesta en el silencio.
Enrique cerró sus ojos aplicando lo que había aprendido durante el taller
de mindfulness y después de varios minutos abrió los ojos y dijo:
“EL SILENCIO ES REAL”
REFLEXIÓN
En mi vida, he depositado mi felicidad en cosas materiales, mi cuerpo, mis
padres, mi esposa, mi hijo, mis amigos, mis clientes, mis jefes, mis vecinos,
en fin, en muchas personas y en algún momento de mi vida también la
deposité en el dinero. Por muchos años busqué tener felicidad a través de
ese programa que me comandó y me tuvo atrapado como un burro tratando
de alcanzar una zanahoria.
Siéndote sincero, sigo cayendo en la trampa cuando me cacho haciendo
historias en mi cabeza que me hacen pensar que:
1) No soy lo que debería de ser
2) No tengo lo que debería de tener
3) No estoy haciendo lo que debería de estar haciendo
4) Y No estoy con quien debería de estar
LINGOTES DE ORO
“Lo falso es temporal y cambiante”
“Lo real es permanente e inmutable”
“Mi ego es falso”
“Mi Espíritu es Real”
EJERCICIO
Ahora que sabemos que
“El Silencio es la voz de Dios y que todo lo demás son malas traducciones”
Te invito a escribir a continuación UNA LISTA DE PAZ. En otras palabras,
escribe todo aquello que te devuelva a la paz, que es tu derecho de
nacimiento.
Por ejemplo, en mi caso, convivir con la naturaleza y hacer ejercicio físico
me lleva al silencio. Y después de haberme dado cuenta de eso, decidí
renunciar al trabajo que odié por muchos años y ahora me dedico a dar
tours de mindfulness por la Naturaleza.
Este ejercicio es muy poderoso porque nos hace ser conscientes de: ¿QUÉ
ME LLEVA DE REGRESO A MI ESTADO NATURAL?, y si no me doy
cuenta, seguiré estando inconsciente y atrapado en el ego.
Así que te invito a ser valiente y SER MUY SINCERO CONTIGO
MISM@.
¿Qué actividades haz realizado en el pasado que te lleven a la paz
/presencia /amor /felicidad /plenitud?
Notas Importantes:
1) Básate en tu experiencia, no en lo que tus Maestros te han dicho
hay que hacer para tener paz.
2) Si no sabes tener paz, PIDE AYUDA A UN MAESTRO QUE
IRRADIE PAZ. ☺
3) Cerciórate de poner en tu lista de paz, cosas que puedas realizar en
cualquier momento y en cualquier lugar, por ejemplo:
EJERCICIOS DE RESPIRACIÓN
ORACIÓN
MEDITACIÓN CON LOS OJOS ABIERTOS
… ETC.
REFLEXIÓN
En mi vida, y en la tuya también, nos han amputado algo (en sentido
figurado por supuesto).
Ahora nos corresponde simplemente preguntarnos:
¿Cómo quiero percibir eso?
¿Cómo un salón de clase? o ¿Como una prisión?
EJERCICIO
A continuación te invito a escribir en una hoja una línea vertical. En la
columna de la izquierda pon todas las adversidades por las que has pasado
durante tu vida. Por ejemplo: traumas enfermedades, accidentes,
separaciones, muertes, traiciones, etc.
Y en la columna del lado derecho te invito a escribir todos tus talentos y
habilidades que has desarrollado a lo largo de tu vida. Por ejemplo:
liderazgo, comunicación, empatía, etc.
Ya que termines de escribir tus adversidades y talentos te daré más
indicaciones pero por favor no te adelantes.
Bien, ahora lo que sigue es que identifiques los talentos que has
desarrollado GRACIAS A LAS ADVERSIDADES POR LAS QUE HAS
PASADO.
Por ejemplo, en mi caso mis padres discutían mucho cuando yo era niño, y
gracias a ello, me dio por aprender y practicar sobre comunicación, empatía
e inteligencia emocional.
Por último, une con líneas inclinadas u horizontales las dos columnas para
que puedas darte cuenta de que…
“TODO TRABAJA PARA EL BIEN” ☺
POSDATA
En la lección 25 de Un Curso de Milagros dice:
Propósito es significado. La idea de hoy explica por qué nada de lo que ves
tiene significado. No sabes para qué es. Por consiguiente, no tiene
significado para ti.
Todo existe para tu beneficio. Para eso es para lo que es; ése es su
propósito; ése es su significado. Al reconocer esto, tus objetivos se unifican.
Al reconocer esto, lo que ves cobra significado.
LA PANTALLA Y EL
PROTECTOR
—Maestro, tengo una consulta que hacerle, sucede que mi novio me
lastima verbalmente, me insulta, me acusa de cosas que no hago, no me
deja trabajar tranquila, me llama a cada rato. Es mi pareja desde hace tres
años y al principio no era así, pero ahora es una persona muy perjudicial
para mí ya que, tantas emociones negativas y el no contar con su apoyo
repercute en mi salud física y mental. ¿Qué debo hacer?
—Luz, ¿sabes que significa tu nombre?
—Maestro, no vine a que me dijera el significado de mi nombre. Vine a
que me ayudara con esta situación que tengo con mi novio.
—Lo sé Luz y por eso te pregunto esto.
—No Maestro, nunca me he metido a google a investigar que significa
mi nombre.
—Tu nombre significa “La mujer que da claridad".
—No me hace sentido ahora pues lo que menos tengo ahora es claridad.
—Mejor deja que te cuente un…
CUENTO
Érase una vez una niña llamada Naya que vivía junto con sus padres en una
aldea al lado del rio donde crecían unos bambúes muy altos. Algunos
llegaban a medir hasta 30 metros de altura.
Los años pasaron y Naya se convirtió en una mujer hermosa que contrajo
matrimonio con un hombre que vivía en la gran ciudad así que, para
recordar sus orígenes recogió unas semillas de Bambú para sembrarlas en
su nuevo hogar.
Al llegar a su casa, Naya sembró las semillas pero, aun cuando seguía
regando la planta todos los días, esta simplemente no crecía. Fue por ello
que decidió hablarle a su padre para preguntarle:
—Papá, hace unos meses sembré las semillas de bambú que me llevé de
la aldea y por más que las riego y las cuido, no crecen.
—No te preocupes Naya, sigue regándolas como lo has estado haciendo
y se paciente.
— ¿Cuánto tiempo necesito esperar para que crezca la planta?
— ¡Ya está creciendo!, solo que no en la forma en la que tu deseas, deja
te explico. Al Bambú Japonés le toma siete años crecer en raíces y solo
seis semanas para desarrollarse en la superficie. Durante los primeros siete
años de aparente inactividad, el bambú genera un complejo sistema de
raíces que le permiten sostener el crecimiento de hasta 30 metros que
vendrá después.
FIN
—Ahí termina el cuento Luz, ¿de qué te das cuenta? —preguntó el
Maestro.
—Mhh, pues de que ¿yo soy como un bambú japonés?
REFLEXIÓN
Durante mi adolescencia y varios años después, me la pasé culpando a mis
padres, los políticos, la religión y hasta al mismísimo Dios de mi
infelicidad.
1. — Atento
2. — Responsable
3. — Hace la Tarea
4. —
5. —
6. —
7. —
8. —
9. —
10. —
No hagas trampa y termina la lista. ☺
Listo, ahora sigue otra pregunta:
¿Quién es el más grande Maestro de todos en esta vida?
POSDATA
“No pretendamos que las cosas cambien, si siempre hacemos lo mismo. La
crisis es la mejor bendición que puede sucederle a personas y países, porque
la crisis trae progresos. La creatividad nace de la angustia como el día nace
de la noche oscura. Es en la crisis que nace la inventiva, los
descubrimientos y las grandes estrategias. Quien supera la crisis se supera a
sí mismo sin quedar ‘superado’. Quien atribuye a la crisis sus fracasos y
penurias, violenta su propio talento y respeta más a los problemas que a las
soluciones.
La verdadera crisis, es la crisis de la incompetencia. El inconveniente de las
personas y los países es la pereza para encontrar las salidas y soluciones.
Sin crisis no hay desafíos, sin desafíos la vida es una rutina, una lenta
agonía. Sin crisis no hay méritos. Es en la crisis donde aflora lo mejor de
cada uno, porque sin crisis todo viento es caricia. Hablar de crisis es
promoverla, y callar en la crisis es exaltar el conformismo. En vez de esto,
trabajemos duro. Acabemos de una vez con la única crisis amenazadora,
que es la tragedia de no querer luchar por superarla.”
Albert Einstein
LOS 4 PASOS PARA
SANAR CUALQUIER
COSA
—Maestro, ¿qué necesito para sanar mi mente?
—Que buena pregunta me haces Zabib y con gusto te la respondo pero
antes necesito saber, ¿cómo crees tú que puedes sanar tu mente?
—Sinceramente no se Maestro.
—Bien contestado Zabib. Precisamente ese es el primer paso para sanar,
DECIR NO SE . Deja que te cuente un cuento para ejemplificarlo mejor:
—Si Maestro, me encantan los cuentos. ☺
CUENTO
Érase una vez una doctora llamada Sofía. Sofía sufría de obesidad, presión
arterial alta y otras condiciones que le impedían, por ejemplo, hacer
ejercicio ya que le dolía mucho el cuerpo cada vez que ella intentaba
realizar alguna actividad física.
Sofía tenía la costumbre de auto medicarse pues, aparte de haber
estudiado la carrera de medicina, había hecho varias especialidades y
doctorados en el área de endocrinología que la acreditaban como una de las
mejores doctoras no solo de su país, sino de todo el mundo.
En una ocasión vio un poster que le llamó la atención pues decía:
“Sana tu cuerpo aprendiendo a cocinar deliciosas Recetas Crudiveganas”
Motivada por sus enfermedades se dijo a sí misma, no pierdo nada en
probar algo nuevo y aparte tengo vacaciones esos días, así que me
inscribiré.
El primer día del taller el Maestro comenzó a explicar cómo es que
trabaja el cuerpo humano e inmediatamente Sofía levantó la mano para
decirle:
—No estoy de acuerdo con lo que está explicando, sucede que yo soy
doctora y puedo decirle que el sistema linfático… bla, bla, bla...
El Maestro la escuchó con paciencia y ya que terminó de compartir le
agradeció su participación y le preguntó si podía continuar. Sofía aceptó y
el Maestro continuó explicando la forma como él había sanado su cuerpo
mediante la alimentación crudivegana y después de algunos minutos Sofía
volvió a levantar la mano para opinar como desde su perspectiva, de que el
no alimentarse consumiendo proteínas animales era malo porque… bla, bla,
bla…
El facilitador volvió a escucharla con amor y le agradeció nuevamente su
participación.
Apenas habían pasado treinta minutos desde que inició el taller cuando
Sofía volvió a levantar la mano para dar su opinión sobre…bla, bla, bla…
Mientras Sofía seguía hablando, el Maestro agarró un vaso y le preguntó
a Sofía si quería té. Ella asintió con la cabeza mientras seguía dando
consejos a todo el grupo sobre… bla, bla, bla…
El facilitador le dio el vaso a Sofía en la mano y comenzó a verter el té.
Sofía para abruptamente de hablar pues nota que el Maestro seguía
vertiendo té dentro del vaso, aun cuando el vaso ya estaba lleno.
—Maestro, ¿qué no ve que el vaso ya está lleno?
—Igual que tú.
— ¿Cómo?
—Sí Sofía, desde que llegaste no has parado de darnos consejos y para
poder sanar necesitamos primero ser humildes. Todos aquí hemos elegido
soltar nuestros egos y DARNOS PERMISO de que un Maestro nos guíe. Es
por ello que necesito saber ¿si estas dispuesta a soltar tu papel de guardián
de tu sistema de pensamientos y comienzas a confiar en mí?
FIN
LINGOTE DE ORO
EJERCICIO
El deseo más grande de mi corazón es:
P.D. ** “Muy bien muchachito Harrison muy bien ” era una expresión que
usaban Los Polivoces (2 comediantes mexicanos) que podrás conocer en
YouTube. ☺
MAESTRO, SOY UN
PERFECCIONISTA
—Maestro, vengo con usted porque ya estoy harta de mis problemas,
sucede que tengo una obsesión por la limpieza y ello me ha llevado a
problemas con mi pareja. De hecho ya voy por mi quinto matrimonio y es
que nadie me aguanta, por ejemplo, cuando van al baño me enojo cuando
no limpian el lavabo pues las gotas de agua forman manchas y no me gusta
eso. Así mismo cuando llegan a la casa, la cual está toda alfombrada, me
cae muy mal que se metan con zapatos, ¿qué no tienen sentido común?
Tuve que poner un letrero en la entrada y aun así, a los amigos de mi esposo
les vale y me manchan la alfombra que con tanto esfuerzo mantengo limpia.
Reconozco que tengo una obsesión pues sufro de nervios e insomnio, de
hecho me levanto seguido por las noches y en lugar de estar pensando, me
pongo a aspirar toda la casa. A mi marido y a mis hijos ya los tengo hartos.
De hecho he tenido problemas con mi esposo, y es que él es un empresario
exitoso y cuando lleva a posibles inversionistas a mi casa para cenar, yo les
pido que se quiten los zapatos, acomoden bien las sillas después de comer,
limpien el lavabo, y si llegaran a dejar restos de orina en la taza del
escusado… ¡A MI NO ME IMPORTA QUE SEAN MILLONARIOS!, ¡YO
LOS REGAÑO Y SI MI ESPOSO PIERDE EL NEGOCIO POR MI
CULPA, A MI ME VALE! La razón por la que vengo con usted es debido a
que, sé que estoy mal pero, por más que quiero cambiar, no puedo y mi
marido ya me pidió el divorcio. Bueno Maestro, el caso es que estoy muy
desesperada y una buena amiga me recomendó con usted para que me diera
un consejo. ¿Qué puedo hacer?
—Con mucho gusto hermana, ¿Cómo dijiste que te llamas?
—Ay perdón, no me presenté, me llamo Gloria.
—Muy bien Gloria, la forma como yo enseño es mediante cuentos, así
que pon mucha atención y como dijo un Maestro sabio hace muchos años:
“El que tenga oídos, que oiga”
CUENTO
EL CLAVO ENTERRADO
Érase una vez un señor que va a cargar gasolina en un pueblo. Mientras
terminaba de llenarse el tanque decide ir a platicar con el dueño de la
gasolinera que estaba sentado en una banca al lado de su perro.
—Buenos días Señor, ¿puedo sentarme un momento mientras se llena el
tanque?
—Claro, siéntese.
—Gracias. Qué bonito su perro.
—Sí, es un pastor alemán y lo tengo desde hace diez años.
—Qué lindo está. ¡Órale!, ya vio que está sangrando de su pata.
—Si ya se. Lo que pasa es que está sentado sobre una tabla con un clavo.
— ¡No puede ser!, ¿Y porque no lo levanta?
—Ya lo he hecho antes y el vuelve a sentarse en el mismo clavo. Lo que
él necesita es un clavo más grande.
FIN
FIN
DIOS Y EL AUTO
Érase una vez un señor llamado Octavio que era ateo. No creía en Dios y
por lo tanto confiaba únicamente en su propia guía (el ego). Él se repetía
todos los días: “Yo soy el arquitecto de mi propio destino” y así fue como
decidió vivir su vida hasta los 30 años.
En esta historia vamos a hacer una analogía con manejar un auto, así que
imagina que en este cuento, el auto de Octavio representa su vida, y por lo
tanto, el decidió poner de copiloto a su ego que le iba dando instrucciones
para dónde dirigirse, a qué velocidad, ¿qué hacer cuando se le presentaban
topes o pozos en el camino?, etc.
A los 30 años sufrió un grave accidente automovilístico que lo llevó al
hospital. Mientras se recuperaba en la cama, comenzó a cuestionarse si
realmente existía un Dios y como dicen por ahí, “Lo mismo que te hace
sufrir te puede hacer despertar”, así que el decidió despertar. Bueno, más o
menos.
Sucede que al salir del hospital decidió meterse en su auto y puso al ego
de copiloto nuevamente. La diferencia ahora radicaba en el hecho de que
cuando se le presentaba algún problema, llámese mucho tráfico, no
encontrar estacionamiento, una multa o incluso un choque, Octavio
reemplazaba al ego por Dios y le decía: “Dios mío me pongo en tus manos,
por favor dime que debo hacer”.
Esta segunda forma de operar por la vida le llevó a tener nuevamente un
accidente automovilístico todavía peor que el anterior, así que cuando salió
del hospital decidió hacer algo que jamás había hecho antes:
“CEDERLE EL VOLANTE A DIOS”
En cuanto salió del hospital puso a Dios de piloto y Octavio se puso todo
nervioso, POR PRIMERA VEZ EN SU VIDA PUSO A DIOS AL VOLANTE
. Esto era realmente aterrador porque Dios iba en ocasiones muy rápido y
Octavio quería ir más lento, así que le decía a Dios: “Vas muy rápido Dios,
por favor desacelera”.
A veces pasaba al revés. Dios iba muy despacio y Octavio se la pasaba
regañando a Dios diciéndole a qué velocidad debería de ir.
Lo mismo pasaba con el destino. Dios decidía desplazarse por una calle
empedrada y Octavio le pedía que mejor se fuera por la avenida. En
ocasiones Dios quería irse por la derecha y Octavio se enfurecía porque él
quería irse por la izquierda. En fin, era una constante lucha que terminó en
una volcadura de auto tan impactante que cayó en coma por un mes.
Al despertar en el hospital, lo primero que se dijo fue: “¡BASTA,
NECESITO AYUDA!”, así que agarró su celular y comenzó a buscar en
google: “grupos de terapia y meditación”.
Dioscidentemente, ese día estaba visitando el hospital una persona que
solía dar servicio a los enfermos y sostuvo la siguiente conversación con
Octavio:
—Buen día, ¿puedo pasar?
—Si adelante.
—Gracias, mi nombre es Emanuelle y vengo a dar servicio a los
enfermos.
— ¿Qué tipo de servicio?
—Lo que haga falta. Si es que quieres platicarme algo, aquí estoy para
escucharte. —Octavio decidió platicarle toda su situación a lo que
Emanuelle le contesta:
—Yo estaba igual que tu Octavio, por muchos años me creí el arquitecto
de mi propio destino, después pedía ayuda a Dios, solo cuando tenía
problemas, y también estuve en el tercer escenario que comentas de poner a
Dios de piloto pero diciéndole para dónde ir.
Ahora estoy viviendo en el cuarto escenario que consiste en dejar de
sentirme separado de Dios. En otras palabras, he elegido sentarme junto con
Dios en el asiento de piloto.
— ¿Se puede hacer eso?
— ¡Claro!, deja te explico, pero antes tengo que aclárate algo
importante. En el segundo y tercer escenario puede ser que no haya sido
Dios quien te ayudó. Era más bien el ego disfrazado de Dios. En el cuarto
escenario se necesita hacer un cambio radical de la consciencia.
— ¿Y cómo se logra eso?
—Es muy sencillo, solo se trata de elegir paz.
— ¿Cómo paz?, por favor explícame más.
—Si mira, cuando eliges tener una mente en paz, estás con Dios. Eres
uno con Dios. Ya no existe un programa que te controla. Ya no existe un
ego que te dice que hacer o que no hacer. Cuando tienes una mente en paz,
haz elegido ser uno con el Espíritu Santo.
El Espíritu Santo es simplemente:
“UNA MENTE EN PAZ”
Cuando eliges paz, el ego desaparece por completo y en ese Instante
Santo la voluntad de Dios y la tuya se vuelve una sola.
—Me queda claro pero ahora tengo una pregunta más: ¿qué desventajas
tiene el tomar esta decisión tan radical?
—Más que desventajas tendrás ventajas. Por ejemplo, gozarás de amor,
plenitud, gozo, dicha, sensación de libertad y abundancia constante,
también tu salud mejorará, tus relaciones se volverán santas, y lo mejor de
todo:
“Percibirás nuevamente las cosas como son realmente”
Otra ventaja de elegir paz es que te alineas a toda la ayuda celestial.
Miles de Ángeles vendrán a apoyarte para que todos tus propósitos se
realicen. Pues esos propósitos dejarán de ser del ego y comenzarás a servir
a los propósitos de algo mucho más grande que tú. Y como para Dios no
hay imposibles, todo fluirá en tu vida naturalmente, como eres en esencia.
Dejarás de percibirte separado de tus hermanos, gozarás de una infinita
sabiduría, las dudas, rencores, luchas y miedos serán cosa del pasado. Todo
esto, porque simplemente haz elegido paz, haz elegido volver a ser uno con
Dios.
— ¡WOW!, no digas más. ¿DÓNDE ME INSCRIBO?
—JAJA, no tienes que inscribirte a ningún lado, solo hace falta que
pongas a tu paz como prioridad y todo lo demás se te dará por añadidura.
FIN
REFLEXIÓN
Por muchos años yo también fui ateo después, seudo-creyente, y luego
creyente cuando me convenía y después de mucho sufrimiento he elegido:
“PONER A MI PAZ COMO PRIORIDAD”
LINGOTES DE ORO
EJERCICIO
Tu misión, si decides aceptarla, es decir la siguiente oración cada vez que te
sientas inseguro o con dudas acerca de qué camino tomar:
No debo preocuparme por lo que debo decir ni por lo que debo de hacer.
Me siento satisfecho de estar donde quiera que Él desee pues sé que Él
estará ahí conmigo.
Sanaré en la medida que le permita al Espíritu Santo (una mente en paz)
enseñarme a sanar”.
Extraído de Un Curso de Milagros.
¿Y SI VIENE UN TIGRE Y
ME COME?
—Maestro, hoy quiero preguntarle, ¿cómo le hago para manifestar mis
deseos?
—Ya sabes que te voy a decir, ¿verdad?
—Si Maestro, me va a decir, “Deja que te cuente un cuento”.
—Así es Zabib ☺
CUENTO
Érase una vez un señor que estaba descansando debajo de un árbol cuando
de repente se le ocurre una idea:
— ¿Y qué tal que se apareciera de repente un mantel con un bufete lleno
de comida deliciosa?
A lo que mágicamente aparece un mantel lleno de comida de todo tipo,
tal y como él lo había pedido. El señor se sorprendió y a la vez tuvo dudas
de su poder de manifestación, así que volvió a hacer otra pregunta.
— ¿Y qué tal que apareciera una masajista profesional que me diera un
masaje relajante?
A lo que mágicamente aparece una mujer, muy bella por cierto, que se
ofrece a darle un masaje. Él queda impactado y mientras se dispone a
recibir el masaje se distrae diciendo:
— ¿Y qué tal que viene un tigre y me come?
FIN
— ¿De qué te das cuenta Zabib?
—De que el señor del cuento debió haberse enfocado únicamente en
aquello que soportara su bienestar.
— ¿Qué más?
—De que si no tengo claro lo que quiero, terminaré realizando los
deseos de los demás (ego).
—Fantástico Zabib, ¿qué más?
—De que existen muchos deseos del ego (propósitos externos) y solo un
deseo del corazón (propósito interno).
— ¡ORALE!, ¡Qué profundo Zabib!, ¿De que más te diste cuenta?
—De que la clave de la manifestación radica en el enfoque, pues si me
distraigo con muchos deseos al mismo tiempo, el que mucho abarca poco
aprieta.
REFLEXIÓN
Por muchos años me hice estas 4 preguntas, que por cierto me atormentaron
hasta el grado de querer suicidarme cuando era adolescente:
1) ¿Estoy haciendo lo que debería de estar haciendo?
2) ¿Estoy con quien debería de estar?
3) ¿Tengo lo que debería de tener?
4) ¿Soy lo que debería de ser? y la respuesta que me daba mi mente
condicionada siempre fue:
“¡NO!”
Aun no estás haciendo lo que debería de estar haciendo, aun no estás con
quien deberías de estar, aún no tienes lo que deberías de tener y aún no eres
lo que deberías de ser.
Hoy comprendo que quien me decía todo eso era mi mente condicionada (el
falso yo) que tenía muchos apegos por cierto.
Por ejemplo, algunos de mis apegos, que todavía me controlan cuando no
elijo paz son:
Quiero ser el centro de atención.
Quiero ser poderoso.
Quiero tener la razón.
Quiero tener mucho dinero, “¡MAS, MAS, MAS!”
Quiero poseerte (el ego no es nada y por eso necesita
poseer).
Quiero controlar a mi papá, mamá, esposa, hijo, etc.
Quiero control mis pensamientos.
Quiero controlar mi estado de ánimo.
Quiero controlar mi cuerpo.
Quiero controlarlo “TODO”.
Quiero ser reconocido.
Quiero ser exitoso.
Quiero ser fuerte.
Quiero placer.
Quiero ser el mejor.
Quiero iluminarme.
Y como para el ego nunca hay suficiente, me la pasé igual que en la fábula
del burro y la zanahoria, siempre buscado la felicidad “afuera”.
Hoy me doy cuenta de que lo único que me da plenitud es eso que está, y
que siempre ha estado “dentro de mí”. Y a lo que me refiero con eso que
está dentro de mí, es a la “indescriptible presencia divina”.
Hoy reconozco que la paz, la presencia, el gozo, la felicidad, la dicha, la
plenitud, la sabiduría y la abundancia en todos sentidos, los obtengo cuando
dejo ir todos los condicionamientos y simplemente descanso en lo que
realmente soy. Lo que realmente soy es la presencia, ¿o acaso haz visto a un
bebé recién nacido preocupado por su futuro o con culpa por el pasado?
Hoy me doy cuenta de que los únicos momentos en los he tenido atores
(problemas) es cuando me he distraído de mi naturaleza.
LINGOTES DE ORO
EJERCICIO
Tu misión, si decides aceptarla es preguntarte:
POSDATA
Ayer asistí a un curso “Maravilloso de Amor Incondicional” en los que los
Maestros Sukradev y Sita Ishaya nos compartieron gran parte de lo que
compartí en este capítulo 11.
Si te interesa aprender a Meditar con los Maestros Ishayas te invito a entrar
a: www.thebrightpath.com y buscar un Maestro cerca de donde tú vives.
EL PLAN C
—Maestro, tengo un gravísimo problema, mi hija ha sido diagnosticada
con cáncer en el páncreas y según los doctores, solo le quedan 6 meses de
vida. Ya fuimos con 7 médicos diferentes y todos dicen lo mismo.
—Maravillosa noticia.
— ¿Cómo que maravillosa noticia?
—Si Matilde. “Lo mismo que te hace sufrir te puede hacer despertar”.
— ¿Despertar?, ¿a qué refiere con eso?
—Despertar es soltar el control. Mira Mathilde, ante toda adversidad
solo tengo 3 opciones:
1) Lo Acepto.
2) Lo Cambio.
3) O lo Perdono (Cambio mi percepción).
¿Cuál eliges?
—Bueno Maestro, ¡la primera definitivamente no!, pues tengo la
esperanza de que vamos a encontrar algún método alternativo que va a
ayudarle a mi hija a sanar.
—Ok, en ese caso, sigue haciendo todo lo que est
e en tus manos para sanar a tu hija.
—Así seguiré haciéndolo Maestro. Muchas gracias.
—Mathilde, solo una cosa antes de que te vayas. Si por alguna razón
decides optar por la tercera alternativa, ya sabes que cuentas conmigo en
cualquier momento.
—Lo sé Maestro, muchas gracias.
El tiempo pasó hasta que un buen día el Maestro recibe una llamada del
esposo de Matilde informándole que su hija había muerto y que necesitaban
que fuera a ver a su esposa pues estaba muy deprimida. El Maestro aceptó y
se dirigió a casa de Matilde donde comenzaron a charlar.
—Hola Matilde.
—Hola Maestro.
En eso Matilde se pone a llorar desconsolada.
— “Date permiso”. —Dijo el Maestro.
Matilde comenzó a llorar hacia adentro, como si se estuviera ahogando.
—“¡No Matilde!”, saca el llanto hacia afuera. Date permiso.
Y por primera en su vida, Mathilde decide dejar su papel de “Súper
Woman” y se rinde al sentir. Su llanto pasó de ser un llanto reprimido a
unos gritos desgarradores que poco a poco se fue convirtiendo en sollozos
de liberación. El Maestro y su esposo simplemente la acompañaron en
silencio. Un silencio indescriptible lleno de amor y compasión. Pasaron los
minutos y Matilde comenzó a tener un nuevo semblante. Su rostro reflejaba
paz y aceptación.
—Ahora entiendo Maestro. Gracias. —dijo Matilde llena de paz.
El Maestro asintió con la cabeza.
—Y sigue “dándote permiso de sentir” todo el tiempo que necesites.
Sentir es Sanar y lo estás haciendo muy bien.
—Así lo haré Maestro, muchas gracias.
—Bueno, te dejo con tu esposo.
—Gracias de nuevo Maestro, hasta luego.
—Hasta luego Matilde, que descanses.
Matilde comenzó a sentirse mucho mejor hasta que cayó en el viejo
hábito de la culpa pues comenzó a poner su atención en pensamientos
descendentes tales como: “Era tu única hija y fracasaste como madre”,
“pudiste haberlo hecho mejor”, “su cáncer fue tu culpa pues estaba en la
adolescencia y te necesitaba”, “debiste haber renunciado al trabajo y
ponerle más atención”, etc.
Matilde sabía que:
“El primer paso para sanar es pedir ayuda.”
Así que tomó el teléfono y le marcó al Maestro:
—Maestro, tengo mucha culpa de la muerte de mi hija y no sé cómo
quitármela.
— ¿Estas lista para el tercer paso?
— ¿Tercer paso?
—Si Mathilde, ante toda adversidad solo tenemos tres opciones:
1) Lo Acepto.
2) Lo Cambio.
3) O lo Perdono (Cambio mi percepción).
—Ahh si, ahora recuerdo y si, ya estoy preparada para perdonarlo.
—Bien, y como ya sabes, a mí me gusta enseñar por medio de cuentos,
así que ponte cómoda y deja que te cuente un…
CUENTO
Érase una vez un hombre de 30 años llamado Luis que decide casarse con
una bella mujer (María) después de haberse conocido en un viaje a Europa
en el cual coincidieron gracias a que ambos contrataron los servicios de la
misma agencia de Viajes.
Al poco tiempo se hicieron novios y en tan solo tres semanas Luis le
propuso matrimonio a María.
Los amigos y familiares pensaban que ella estaba embarazada pues
estuvieron de novios únicamente tres semanas cuando anunciaron su boda.
De cualquier manera, la fecha de la boda llegó y todo fue extraordinario,
buena comida y muchísima diversión. La luna de miel igualmente
fantástica, repleta de pasión para no entrar en detalles.
El “enamora-miento” siguió por seis cortos meses pues un buen día Luis
decide quitarse la máscara de príncipe perfecto y comienza a mostrarse tal
cual es. Luis era un hombre muy flojo.
María por su parte también decide quitarse la máscara y comienza
mostrarse tal cual es. María era muy celosa.
La relación poco a poco comenzó a deteriorarse pues estos no eran los
únicos “defectos” que tenían.
Al cabo de dos años, Luis y María comenzaron a odiarse. Sus peleas
sucedían todos los días hasta que un día, María le pide el divorcio a Luis,
quien acepta con agrado pues ya estaba harto de vivir en ese infierno y
como no tenían hijos, el divorcio fue muy sencillo.
El tiempo pasó y Luis decide casarse nuevamente, ahora con otra mujer
llamada Martha.
Martha era una mujer perfecta, según la percepción de Luis. Y
habiéndose terminado la etapa del “enamora-miento”, como era de
esperarse los conflictos comenzaron.
Al igual que con María, Luis comenzó a quejarse de Martha porque era
muy celosa y se dijo para sí mismo: “¡No puede ser!, ¡Me salió igual que la
otra!”.
Luis nunca antes había ido a terapia pero en esta ocasión, las ganas de
salvar su matrimonio eran mayores así que tomó valor y decidió llamar a un
terapeuta que le habían recomendado.
Al llegar al consultorio lo recibió la secretaria que le pidió tomar asiento
mientras llegaba el psicólogo. El psicólogo llegó al poco tiempo y saludó a
Luis, a quien le pidió que pasara junto con él a un cuarto alfombrado.
—Gracias por haber llegado puntual Luis.
—Gracias a usted por recibirme.
—Puedes llamarme Paco y por favor háblame de tu.
—Ok. Te informo que nunca he estado en terapia antes, ¿qué sigue?
—Pues que me digas, ¿a qué viniste?
—Vine a que me ayudes para no divorciarme otra vez. Sucede que tengo
muchos problemas con mi mujer y como tengo dos hijos, quiero hacer todo
lo que esté en mis manos para salvar mi matrimonio.
—Dijiste que ya no quieres divorciarte otra vez. ¿Qué aprendiste en tu
primer matrimonio?
—La mera verdad no sé. En la pasada relación duramos solamente dos
años pues ella era súper celosa y para serte sincero, ahora estoy sufriendo
los mismos conflictos con mi actual mujer.
—Comprendo; ¿y a qué crees que se deba eso Luis?
—Pues, ¿a qué no he aprendido la lección?
—Correcto Luis, lección no aprendida, lección repetida.
—Y ¿qué necesito hacer para aprender la lección?
—Yo digo esta oración cuando quiero aprender algo:
REFLEXIÓN
Por muchos años utilicé el plan A, B, D, E, F, G… Y ME SALTÉ EL PLAN
C. El resultado… una vida llena de sufrimiento, carencia y enfermedad.
Ahora conozco mi PLAN C (ejercicio/yoga, comida saludable y
meditación) y desde que he sido consistente con ese plan, mi vida ha dado
un vuelco de 180 grados.
LINGOTES DE ORO
___________________________________
(Si tu respuesta fue “No”. ¡Felicidades!)
¡ELIGE AHORA! ☺
¡Ahh!, y también escribe en una hoja tu PLAN C.
POSDATA
Gracias a los Maestros Ishayas del Camino Brillante por haberme hecho un
día esa maravillosa pregunta que cambió mi vida para siempre:
CUENTO
Érase una vez una princesa que amaba la naturaleza. Sus padres la amaban
muchísimo, así que en su cumpleaños número trece decidieron regalarle un
jardín dentro del palacio repleto de árboles de todo tipo. Ella se puso muy
contenta pues los árboles atraían mariposas, colibríes, ardillas y demás
animales con los cuales comenzó a convivir.
La labor de cuidar a los árboles era ardua, ya que el terreno era muy
grande y por lo tanto, el rey decidió contratar a varios jardineros para que
mantuvieran a los árboles en perfecto estado.
Como era costumbre, lo primero que hacía la princesa llegando de la
escuela era dejar su mochila y salir corriendo al jardín.
Todo era hermoso hasta que un día la princesa notó que el árbol de
limones comenzó a secarse, lo mismo estaba pasando con el árbol de fresas,
peras, granada, uvas y la mayoría de los demás árboles.
De inmediato fue corriendo con los jardineros para que verificaran lo
que estaba sucediendo y después de analizar la tierra se dieron cuenta que
estaba bien abonada así que esa no era la causa. También checaron si había
alguna plaga de insectos que pudiese estar dañando a los árboles pero nada,
tampoco era eso, así que checaron si era algo relacionado al agua, pero
nada, todos los árboles habían sido regados como de costumbre así que esa
tampoco era la causa.
Y así pasaron los días y para mala suerte, los árboles seguían muriendo
poco a poco. Ninguno de los jardineros comprendía lo que estaba
sucediendo así que se declararon incompetentes y fue entonces cuando a la
princesa se le ocurrió una maravillosa idea:
“Pedir ayuda a San Francisco de Asís”
San Francisco de Asís era un monje que se volvió famoso por varias
razones, su paz, su sabiduría y su capacidad de comunicarse con la
naturaleza, así que, sin perder un solo instante, la princesa mandó traerlo
ante su presencia.
—Hola Princesa, ¿cómo puedo ser útil? —Dijo el monje mientras le
hacía una reverencia.
—Gracias Francisco por haber atendido a mi llamado. Sucede que por
alguna razón, que aún desconocemos, casi todos los árboles del jardín están
secándose. Los jardineros ya trataron de revivirlos por todos los medios
pero hasta ahora no hemos tenido resultados favorables.
— ¿Puedes ir a hablar con ellos y preguntarles porqué están muriendo?
—Claro, vamos.
Al llegar al jardín, el primer árbol con el que se toparon fue el árbol de
limones.
—Hola hermano árbol, ¿por qué te estas secando? —Preguntó el monje.
— ¿Qué porqué me estoy secando?; desde hace varias semanas que he
tratado de cambiar el sabor de mis frutos pero no puedo conseguirlo.
— ¿Cambiar el sabor de tus frutos?, ¿y por qué quieres hacer eso?
— ¡A mí no me gusta su sabor!, ¡ve nomás la cara que pone la princesa
cuando prueba un limón!, y no solo la princesa, toda persona que viene a mí
y prueba alguno de mis limones pone una cara de insatisfacción que no me
gusta. A mí me gustaría ser como el árbol de fresas. ¡Dichosa la fresa que
puede dar frutos dulces, no como yo que solo produzco acidez y amargura!
—La princesa y el monje trataron de convencer al limón de que sus
frutos eran perfectos, pero el limón seguía aferrado en su postura, así que se
dieron por vencidos y prosiguieron su caminata por el jardín.
—El segundo árbol que visitaron fue precisamente el árbol de fresas, y le
hicieron la misma pregunta, ¿por qué te estas secando?
—Estoy muy triste.
— ¿Por qué estas triste?
—Porque no soy como debería ser.
— ¿Qué no eres como deberías ser?, ¿cómo deberías ser entonces?
— ¡Sí!, yo debería ser como el gran roble que crece muy alto y da
sombra y cobijo a muchos animales.
El monje trató de convencerlo que así era perfecto, pero el árbol de
fresas seguía aferrado a su postura:
¡Yo no soy suficiente así como soy, yo debería ser como el gran roble!
El monje y la princesa se quedaron viendo con cara de sorpresa mientras
prosiguieron su caminata. Las respuestas que les daban los demás árboles
eran similares. El árbol de chiles quería ser como el de uvas, el de uvas
quería ser como el de toronjas, el de toronjas como la naranja, el de naranja
como el de nueces, en fin, todos se comparaban unos con otros y nadie
estaba feliz siendo quien era.
Así es que los dos siguieron caminando hasta que llegaron con el árbol
de manzanas quien, para su sorpresa, estaba lleno de vida y repleto de frutos
grandes y jugosos.
— ¿Me das permiso de arrancar uno de tus frutos? —Preguntó el monje
al árbol de manzanas.
—Con gusto Francisco, toma todos los que quieras. —dijo el árbol de
manzanas. —Para eso son.
REFLEXIÓN
Por muchos años estuve como el árbol de limones del cuento. Siempre
comparándome con los demás diciéndome:
LINGOTE DE ORO
EJERCICIO
Responde las siguientes preguntas:
1) ¿De qué te das cuenta?
______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
_________________________________________
2) ¿Qué vas a hacer con eso que te diste cuenta?
______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
______________________________________________________
_________________________________________
POSDATA
P.D. Si te interesa aprender a meditar con los Maestros Ishayas del Camino
Brillante, te invito a entrar a: www.thebrightpath.com y busques a un
Maestro cerca de donde tú vives.
REFLEXIÓN
Una de mis citas favoritas es la siguiente:
“No me cae bien ese hombre. Tengo que llegar a conocerlo mejor”
Abraham Lincoln
Y la reflexión que hoy quiero compartir contigo es que, hasta que me puse
en los zapatos de mi herman@ fue cuando realmente pude conocerlo,
comprenderlo y amarlo total e incondicionalmente.
En otras palabras, que nunca hubiera podido perdonar la percepción errónea
que tenía de ellos, si no me hubiera dado permiso de conocerlos desde el
corazón.
LINGOTES DE ORO
“No permitas que tus miedos te impidan conocer a las personas más allá de
sus máscaras”
“No puedo cambiar mi historia de vida, pero si puedo darle un nuevo
significado”
“Nadie me ha hecho nada, todo me lo hago a mi mism@ con mis propios
pensamientos”
“Es hasta que me puse en los zapatos de mi herman@ cuando realmente
pude conocerlo, comprenderlo y amarlo total e incondicionalmente”
“No me cae bien ese hombre. Tengo que llegar a conocerlo mejor”
EJERCICIO
Tu misión, si decides aceptarla, es el de darte permiso de conocer a alguien
que te caiga muy gordo como decimos acá en México. Elige a esa persona
“que te botonéa” (que te hace reaccionar) y antes de abrir la boca te invito a
decir esta pequeña oración:
LINGOTES DE ORO
“No hay nada bueno, no hay nada malo, solo una resaca que afrontar si
sigo poniéndole atención a mis amigos (voces en mi cabeza)”
“El ego se alimenta de historias”
“Todos ya están hartos de mi historia, todos menos yo”
“El ego desaparece cuando elijo paz”
“El ego desaparece cuando pido ayuda”
“La oración es el vehículo de los milagros”
“De tanto recordar llegará un d
ía en el cual deje de olvidar”
EJERCICIO
Tu misión, si decides aceptarla es buscar un Maestro que sea congruente
con el deseo más grande de tu corazón y pedirle que te guie.
EL LEÑADOR
—Maestro, estoy agobiado por el trabajo, la escuela y aparte la familia.
Sucede que he decidido volver a la universidad después de cinco años de
haberla abandonado debido a que mi novia quedó embarazada. Lo malo es
que ahora tengo más responsabilidades, entre ellas, dos trabajos y mi hijo
pequeño que me demanda mucho tiempo, así que estoy reprobando materias
porque llego tarde a las clases y aparte tengo problemas con mi esposa
porque casi no los veo, ¿qué hago?
—Deja que te cuente un…
CUENTO
Érase una vez un pueblo dedicado a la tala de árboles. Y en este pueblo
habitaba un muchacho llamado Bill que vivía con su abuelo, quien por
cierto, había dedicado la mayor parte de su vida a cortar árboles en el
aserradero del pueblo.
Como era de esperarse, Bill también eligió ser leñador. Los años pasaron
y Bill comenzó a desarrollar una musculatura envidiable de tanto talar
árboles. En una ocasión, el dueño del aserradero decidió organizar un
concurso. El concurso consistía en convocar a todos los leñadores para ver
quien lograba cortar la mayor cantidad de árboles en una semana y al
ganador le iban a regalar una “Camioneta 4x4 Último Modelo”.
Bill fue el primero en inscribirse pues él sabía que tenía muchas
probabilidades de ganar. Lo que no sabía, es que la convocatoria fue
enviada a muchos aserradores de todo Estados Unidos.
De todos modos Bill se sentía confiado y se preparó para el primer día de
competencia y para su sorpresa quedó en primer lugar tumbando diez
árboles, mientras que Hanes, su rival más cercano, tumbó siete.
Para su sorpresa, el segundo día Bill tumbó solamente siete árboles,
mientras que Hanes tumbó once.
Bill sabía de la importancia de pedir ayuda, así que fue con el dueño del
aserradero para pedirle un consejo.
—Pregúntale a tu abuelo, él ganó este mismo concurso hace muchos
años.
Bill, sorprendido por lo que le dijo el dueño del aserradero, fue corriendo
a su casa para platicar con su abuelo, quien por azares del destino, se
convertiría también, en su entrenador.
—Abuelo, Abuelo, no sabía que de joven tú habías ganado un premio
por cortar árboles, por favor cuéntame.
—Si Bill, cuando tenía tu edad, gané el torneo por cinco años
consecutivos.
—Increíble Abuelo, yo buscando ayuda afuera sin saber que tenía al
Maestro en casa. Déjame te cuento que me fue muy bien el primer día, pero
en el segundo mi rendimiento disminuyo. ¿Qué consejo puedes darme?
— ¿Ya afilaste tu hacha?
—No, he estado demasiado tiempo enfocado en cortar árboles que se me
ha olvidado afilar el hacha.
—Eso es entonces. Afila el hacha y mañana verás que te va mejor.
—Fantástico Abuelo, así lo haré.
Bill destinó el resto del día afilando su hacha y al día siguiente logró
tumbar nueve arboles mientras que Hanes tumbó once.
Esto hizo enfurecer a Bill y en cuanto regresó a casa fue a platicarle al
abuelo, a lo que él contestó:
— ¿Ya afilaste tu hacha mental?
— ¿Cómo?
—Sí, me refiero a que si has hecho oración.
—No Abuelo, he estado demasiado ocupado en tumbar árboles que me
he olvidado de hacer oración. Me puedes enseñar por favor.
—Claro. Es muy sencillo, solo tienes que repetirte frases que te hagan
sentir bien. Por ejemplo, yo creo mucho en el Espíritu Santo y las oraciones
que digo hasta la fecha son:
“Gracias Espíritu Santo porque siempre estás conmigo”
“Gracias Espíritu Santo por enseñarme a estar en silencio”
“Gracias Espíritu Santo por enseñarme a ser humilde”
“Gracias Espíritu Santo por enseñarme a estar en paz”
“Gracias Espíritu Santo por enseñarme a estar presente”
— ¿Y si no creo en el Espíritu Santo?
— ¿Quién representa para ti y para todos tus hermanos la fuente de todo
bien?
—El Amor.
—Perfecto, entonces reemplaza la palabra Espíritu Santo por Amor. ☺
—Gracias abuelo, mañana voy a decir esas frases mientras esté cortando
los árboles.
—No solo las digas durante la competencia, sino “en todo momento”.
No dejes que tu mente se distraiga en pensamientos descendentes.
—Ok, así lo haré abuelo, muchas gracias.
En el 3er día de competencias Bill cortó ocho árboles y Hanes diez.
A diferencia de los dos días anteriores, Bill fue con Hanes a estrecharle
la mano y felicitarle por su buen desempeño.
Al llegar a casa, el abuelo le preguntó:
— ¿Cómo te fue?
—Es raro abuelo, perdí este día pero me siento genial.
—Jejeje… —Se rió el abuelo.
— ¿De qué te ríes?
—Estas cambiando tu percepción.
— ¿Cómo?
—Si mira, antier estabas enojado porque estabas perdiendo la
competencia y ahora estás feliz porque perdiste. Una buena forma de saber
si estás despierto es dándote cuenta de que:
“Estás tratando por igual al éxito que al fracaso”
.
—Y “cuando tratas por igual al éxito que al fracaso, puedes hacer
cualquier cosa”.
— ¿Entonces eso me está sucediendo gracias a la oración?
—Sí, “estas dejando de ver con tus ojos y estas comenzando a ver con
los ojos del amor”.
— ¡WOW!, ya me está gustando la oración abuelo.
—Qué bueno que te esté gustando afilar tu hacha mental, pero, ¿ya
afilaste tu hacha emocional?
— ¿Cómo?, eso en nuevo, por favor explícame.
—Si mira. Los seres humanos estamos constituidos por un espíritu,
cuerpo, mente y emociones. La clave de una vida plena es atender
equilibradamente esas cuatro áreas. Hasta ahora hemos hablado de atender
la mente pero, ¿de qué sirve eso si tengo reprimidas mis emociones?
— ¿Y cómo puedo atender mis emociones?
—“Dándote permiso de sentir” .
— ¿A qué te refieres?
—Cuando eras un niño pequeño eras un “sabio emocional” y de adulto te
has convertido en un “reprimidor emocional”.
—Tienes razón, en ocasiones estoy triste, pero me aguanto las ganas de
llorar porque mi papá solía decirme que “los hombres no deben llorar pues
eso es muestra de debilidad”.
—Eso es igual a morir lentamente. Tanto hombres como mujeres hemos
sido condicionados para reprimir emociones y eso también es la causa del
porqué estás perdiendo en las competencias. Tu misión si decides aceptarla,
es…
VOLVER A DARTE PERMISO DE SENTIR.
Para ello te propongo un ejercicio. Agarra una hoja, una pluma y en ella
escribe el nombre de la persona con la cual quieres sanar tu relación.
Esta carta te va a servir para descargar 3 emociones principalmente:
1) Enojo.
2) Tristeza.
3) Miedo.
Puedes comenzar la carta diciendo: “Estoy muy enojado contigo
porque…”
Y ya que termines de expresar tu enojo continúa con la tristeza diciendo:
Estoy muy triste porque…
Y después continua con el miedo diciendo: Tengo miedo porque…
Ya que hayas llorado, gritado, golpeado cojines, o lo que sea que te nazca a
hacer para sacar las emociones reprimidas de forma constructiva, el último
paso consiste en “DAR LAS GRACIAS POR EL APRENDIZAJE
RECIBIDO”.
Verás que después de haber vaciado todas esas emociones te quedarás
con una sensación de vacío maravilloso. Y en ese preciso instante, es el
momento perfecto de llenar ese vacío con AMOR .
— ¡WOW!, me parece genial. Lo voy a hacer y mañana te digo como me
fue cuando regrese de las competencias.
Bill hizo el ejercicio emocional que, en conjunto con la oración y haber
afilado el hacha lo hicieron sentirse más que preparado para el quinto día de
competencias.
Muchos de los espectadores tenían a Hanes como favorito pues seguía a
la cabeza en las puntuaciones. En eso, se oye el silbato que daba la
instrucción a todos los concursantes de comenzaron a tumbar los árboles.
Al terminar la competencia, Bill había tumbado la increíble cantidad de
quince árboles y Hanes solamente diez, lo cual colocaba a Bill en un
empate, con un total de 49 árboles cada uno.
REFLEXIÓN
¿Cuántas veces he descuidado mi cuerpo por ingerir alimentos poco
saludables?, ¿cuántas veces he descuidado mi cuerpo no haciendo ejercicio
o no durmiendo lo suficiente?
¿Cuántas veces he desequilibrado mi vida y luego, les echo la culpa a los
demás?
Hoy me doy cuenta de que soy un ser holístico y hoy elijo atender:
MI CUERPO
MI MENTE
MIS EMOCIONES
MI ESPÍRITU
LINGOTES DE ORO
“No puedo meditar con un dolor de panza”
“En el equilibrio estoy en paz”
EJERCICIO
Tu misión, si decides aceptarla, es volver al TAO (punto medio) y desde la
presencia darte cuenta que en el equilibrio esta la paz. ☺
¡YA SUÉLTALA!
—Maestro, tengo un problema con mi hija adolescente. Sucede que la he
cachado fumando marihuana y eso me tiene muy preocupada. Por otro lado
es muy rebelde, y cada vez que trato de acercarme, ella me rechaza. Solo
somos ella y yo porque su papá nos abandonó cuando se enteró que yo
quedé embarazada. Sé que debo de sanar todo eso, pero no sé cómo.
—Hola María, ¿sabes que solía decir mi Maestro ante este tipo de
situaciones?
— ¿Qué decía?
—“Primero mi paz y después lo demás” , así que vamos al silencio, ¿te
parece?
— ¿Al silencio?, no sé cómo.
—Respirar es limpiar, así que vamos a comenzar con un ejercicio muy
simple. Solo cierra tus ojos y ponte en una postura cómoda que te permita
olvidarte del cuerpo. Solo descansa tal y como es ahora.
Muy bien, ahora quiero que comiences a respirar con tu abdomen. Lleva
la mano a tu abdomen y siente como se infla y desinfla tu estómago. Muy
bien, ahora quiero que comiences a contar 7 segundos mientras inhalas por
la nariz, luego reten tu respiración por 7 segundos, ahora exhala por la nariz
en 7 segundos, y por último quédate sin aire otros 7 segundos. Esto lo
vamos a hacer por 7 series, ¿ok?
—Ok Maestro.
—Comenzamos entonces.
Los dos comenzaron a respirar de esta manera por 7 series y después
siguieron conversando.
— ¿Cómo te sientes?
—Un poco mejor pero, para serte sincera, sigo sintiéndome ansiosa.
—Entonces es necesario ir más profundo; por favor cierra tus ojos e
inhala en 6 segundos por la nariz, de igual manera inflando y desinflando tu
abdomen como si fuera un globo. Luego retén tu respiración por 3
segundos, después exhala por la boca muy despacio en 9 segundos, como si
estuvieras echando bao en una mañana fría. Por último te quedas sin aire 3
segundos. Todo esto lo hacemos por 12 series, ¿comprendido?
—Comprendido Maestro.
—Comencemos entonces.
María comenzó a hacer el ejercicio de respiración y poco a poco empezó
a quedarse dormida.
—Te puedes recostar en el sillón María, sigue respirando de esa forma.
María se recostó en el sillón y se quedó profundamente dormida por más
de dos horas. El Maestro se puso a meditar mientras tanto. Las horas
pasaron hasta que María, ya descansada, se levanta.
—Me quedé dormida, ¡válgame Dios!
—La meditación siempre nos da lo que necesitamos y en tu caso fue
dormir.
—Me siento genial.
—Qué bueno María, ahora es el momento perfecto de hacer un ejercicio
para pedir ayuda al Espíritu Santo con el asunto de tu hija.
—Fantástico Maestro, soy todo oídos.
—Muy bien, lo que sigue es que tomes una hoja y una pluma para que
comiences a escribir lo que puedes hacer. Pero mucho ojo, no estás sola.
Ahora que tienes una mente en paz, estás siendo guiada por el Espíritu
Santo.
El Espíritu Santo es, en pocas palabras, es una mente en paz. Y después
de los ejercicios de respiración y de la siesta de dos horas que acabas de
tomar, hasta aureola de Santa te salió.
—Jajaja, y sí que me siento en paz, pues llevaba varias semanas sin
poder dormir. Muchas gracias Maestro.
—Un placer María. Ahora toma la hoja y comienza a escribir todos los
pensamientos que tengas sobre la situación con tu hija:
— ¿Lo que sea?
—Sí, escribe todos los pensamientos que tengas sobre ese tema que me
comentaste al principio.
—Ok, aquí vamos.
María comenzó a escribir los pensamientos sobre la situación con su
hija.
CUENTO 1
CHABELITA VA A CONFESARSE
Érase una vez una señora llamada Chabelita que va a confesarse con el
padre de la iglesia, con quien sostiene la siguiente conversación:
— ¡AAAAAYYYY PADRE, SIENTO MUCHA CULPA!
—Adelante hija, confiesa tus pecados.
— ¡AAAAAYYYY PADRE!, confieso que corrí a mi suegra de la casa
por 3 semanas.
En eso el padre reconoce la voz de la mujer y le dice:
— ¿Eres tu Chabelita?
— ¡SIII PADRE, SOY CHABELITA!
— ¡Ay Chabelita, pero si eso pasó hace 5 años!
—SI PADRE, ¡PERO ES QUE ME GUSTA RECORDARLO!
CUENTO 2
¡YA SUÉLTALA!
Érase una vez dos monjes que iban de regreso al monasterio, y como había
llovido mucho, observaron que el río estaba muy crecido. Lo bueno es que
ambos sabían nadar, así que empezaron a buscar una parte donde estuviera
menos hondo para poder cruzarlo y llegar a tiempo con su Maestro.
Por ahí se encontraba una bella joven que se les acercó mientras les
decía:
— ¿Saben nadar?
—Sí. —Respondió uno de los monjes.
—Yo no, ¿me ayudan a cruzar?, sucede que mi madre me está
esperando, pues fui al pueblo por unas medicinas y me urge llevárselas.
—Con gusto hermana, sujétate de mí cuello, solo ten cuidado de no
asfixiarme porque nos hundimos los dos.
—Ok, tendré mucho cuidado de sujetarme sin asfixiarte. ☺
Mientras tanto, el otro monje comenzó a golpearle las costillas a su
compañero con el codo.
— ¡No lo hagas! —le dijo susurrándole en secreto.
— ¿Por qué?
—Tenemos un voto de celibato y no podemos tocar a las mujeres.
El monje ignoró este último comentario y le dijo a la muchacha.
— ¿Estás lista?
—Lista.
—Ok, aquí vamos.
El monje y la muchacha se encomendaron a sus respectivos Dioses y
comenzaron a cruzar el rio sin problema. Al llegar al otro lado la muchacha
les hizo una reverencia mientras les decía:
—Infinitas gracias, yo no sé qué hubiera hecho sin su ayuda. Nos vemos
que tengo que llevarle las medicinas a mi madre.
—Hasta luego hermana, bendiciones.
—Bendiciones para ustedes también, hasta luego.
Los monjes comenzaron a caminar rumbo al monasterio cuando de
repente el monje comenzó con la misma cantaleta.
— ¿Qué no escuchaste a nuestro Maestro decir lo importante que era
mantener nuestra pureza?, ahora que lleguemos tendré que informarle sobre
tu falta porque… bla, bla, bla… —La queja continuó por treinta minutos,
hasta que el otro monje le dijo:
—Yo ya la bajé de mis hombros mientras que tú, la sigues cargando, “
¡YA SUÉLTALA!”.
REFLEXIÓN
Hoy por la mañana no tenía inspiración así que decidí hacer lo que suelo
hacer cuando no tengo inspiración:
“Confiar en el Instante Santo”
Y ¡voilà!, por azares del destino llega a mí, una película preciosa que te
recomiendo ver llamada “Overcomer” (Vencedor).
En fin, esa película me devolvió la inspiración para seguir escribiendo.
Y te comparto esto porque para mí, el despertar tiene mucho que ver con:
“Rendirme al momento presente exactamente como es”
Por muchos años me la pasé en constante lucha con mis padres, mi cuerpo,
mi salud, mi situación económica, incluso con las voces de mi cabeza
llegué a pelearme muchas veces, JAJA. Y hoy me doy cuenta, de que el
despertar es simplemente:
“Dejar de luchar con el aquí y ahora”
Y para ejemplificar lo anterior te comparto 2 analogías que un día me
compartieron los Maestros Ishayas:
1 - EL EGO JUGANDO TENIS
Imagina que el ego es un jugador de tenis y tu (el Ser) es el otro jugador que
está del otro lado de la cancha. El ego hace el primer saque y tú decides no
contestarle. En este escenario, ¿hay juego?
No ¿verdad? La única forma como el ego puede dañarte es cuando te
enganchas en su juego de hacer historias entre “lo que pasó y lo que podría
pasar”.
2 - EL TRÁFICO DE AUTOS
Imagina que te pido ir a la avenida más transitada de la ciudad donde tú
vives para hacer un ejercicio de observación de los pensamientos. La
indicación es sencilla:
“Simplemente quédate quieto observando los autos pasar”
Tu y yo nos quedamos plácidamente sentados en una parada de camiones a
observar los autos pasar. El semáforo estaba justo enfrente de nosotros por
lo que podíamos observar con más detenimiento los autos cuando el
semáforo se ponía en rojo.
Pues bien, pasaron 10 minutos y todo perfecto, simplemente
observábamos los distintos autos, camionetas y camiones que pasaron
frente a nuestros ojos. Esto cambió cuando de repente se para frente a
nosotros una Brasilia Volkswagen color naranja igualita a la que tenía mi
papá cuando yo era niño. En ese instante yo me levanto y sujeto al auto de
la defensa pues no quería que arrancara. En cuanto el semáforo se pone en
verde el auto avanza a toda velocidad y yo… “¡SIGO ENGANCHADO DE
LA DEFENSA DEL AUTO!” .
LINGOTES DE ORO
POSDATA
Realicé un video de la analogía del “tráfico de autos (pensamientos)” y lo
que pasa cuando me engancho con alguno de ellos haciendo historias por si
gustas verlo en: https://youtu.be/m7YZL0IYtq0
LA ESPINA ENTERRADA
—Maestro, tengo un atore terrible, estoy pasando por un duelo
espantoso. Siento tanto dolor que quisiera no vivir pues, no puedo
soportarlo, este dolor me hace temblar, tener náuseas, es como un síndrome
de abstinencia. Sucede que terminé una "relación" con una persona que amo
mucho, pero yo era "la otra". Siempre que estuve con él, todo fue hermoso,
pero él no estaba para mí cuando yo lo necesitaba, por otro lado, la culpa de
que la otra mujer fuera engañada me estaba matando, siento un dolor
espantoso quisiera llamarlo, buscarlo y rogarle, es tan grande mi
desesperación que quisiera morir para no sentir esto, pues no logro
disminuirlo con nada. ¿Qué hago?
—María, deja que te cuente un…
CUENTO
Érase una vez una muchacha llamada Estericoncha la Charra. ☺
Estericoncha era una mujer muy feliz hasta que un día se enterró una
espina en su pie. La espina era tan grande, y se la enterró tan profundo, que
era imposible sacarla con la mano, así que llegó a su casa y por más que
trató de sacarla con alfileres, pinzas y demás objetos, nomás no pudo.
Estericoncha sabía que un doctor si podía quitársela, pero tenía mucho
miedo de sentir dolor , así que mejor optó por andar con muletas y cuando
las personas le preguntaban qué le había pasado, ella simplemente mentía
diciendo que se había caído de un caballo o que se había dislocado el tobillo
jugando voleibol, etc.
El tiempo pasó y Estericoncha comenzó a sentir más y más dolor en el
pié; la razón, su pie se estaba infectando.
Estericoncha siguió evadiéndose y para no hacerte el cuento largo, ella
murió por una infección en la sangre producto de la gangrena que se había
esparcido por todo su cuerpo.
FIN
— ¿De qué te das cuenta?
—De que Estericoncha debió haber ido al doctor desde un principio.
— ¿De qué más te das cuenta?
—De que es importante buscar a un experto que tenga los aparatos y el
conocimiento necesario para poder sacar una espina.
—Y ¿qué hay contigo?
—No comprendo la pregunta.
—Sí, ¿qué similitud tiene el cuento con la situación que me acabas de
comentar?
—Ahh, pues que yo estoy igual que Estericoncha, siempre con miedo a
sentir dolor y por eso no pido ayuda.
— ¡MUCHAS FELICIDADES! Ahora eres libre, pues, como dijo Carl
Jung:
“Hasta que hagas consciente lo inconsciente sanarás y dejarás de echarle
la culpa al destino”
Érase una vez un taxista que estaba tratando de encender su auto por la
mañana sin éxito. El taxista también era mecánico, así que abrió el cofre y
se dio cuenta de que estaba dañado el cable de la batería por lo que era
necesario reemplazarlo. Lo malo es que no tenía el cable ni las pinzas
necesarias para arreglarlo.
Por otro lado, existía un chofer de Uber que le pasó algo similar pues su
auto tampoco arrancaba, así que abrió el cofre y como nunca había
estudiado mecánica, por más que observaba el motor, la batería, el radiador,
etcétera, no podía ubicar donde estaba la falla. Este chofer, a diferencia del
taxista, si contaba con todas las herramientas necesarias para arreglar su
auto, sin embargo, no sabía cómo usarlas porque no era mecánico.
FIN
— ¿De qué te das cuenta ahora?
—De que yo estoy igual que el taxista y el chofer de Uber.
— ¿Por qué?
—Porque no sé cómo quitarme esta dependencia afectiva de pareja, en
otras palabras, no sé de mecánica, ni tengo las herramientas necesarias para
arreglar mi auto.
— ¿Y qué vas a hacer entonces?
—“Voy a pedir ayuda a un Maestro que me devuelva al camino”
REFLEXIÓN
Por muchos años me la pasé ocultando mis heridas con curitas, y pensé que
así iba a sanar. En realidad, lo que estaba haciendo era permitiendo que
todas esas heridas de la niñez fueran contaminando todas las áreas de mi
vida, incluyendo mis relaciones.
LINGOTES DE ORO
“Hasta que hagas consciente lo inconsciente sanarás y dejarás de echarle
la culpa al destino”
“No necesito un terapeuta que me sane, tampoco necesito unos padres que
me amen, lo único que necesito es un Maestro que me devuelva al camino”
EJERCICIO
Tu misión, si decides aceptarla, es “SACARTE LA ESPINA” , y como solo
puedo recomendarte lo que conozco, a continuación te comparto a mis
Maestros:
1) Taller de Oruga a Mariposa (para hombres y mujeres), que estoy
impartiendo virtualmente con los facilitadores Enrique y Lulú.
Más Información en:
http://escueladelafelicidad.org/deorugaamariposa/
2) La Ascensión de los Ishayas para que aprendas a meditar y dejes de hacer
historias “entre lo que pasó y lo que podría pasar”.
Más Información en: https://www.thebrightpath.com
3) Si vives en Puerto Vallarta, te invito también al Grupo de Estudio de Un
Curso de Milagros donde todos los jueves nos reunimos a “recordar
quienes somos realmente ”.
Más Información al whatsapp: +521 3227797688
4) Por último, te invito a meditar conmigo a través de muchas meditaciones
guiadas que he subido a YouTube y que puedes encontrar poniendo:
“meditación del instante santo” o entrando a nuestro canal de:
https://www.youtube.com/videosdereflexion
POSDATA
Unos amigos terapeutas y tu servidor hemos creado un servicio denominado
TERAPIAS EN LINEA y en:
http://escueladelafelicidad.org/terapeutas/ podrás conocerlos por si gustas
disolver la Matrix junto con nosotros. ☺
LAS 3 PUERTAS
—Maestro, he cometido un gravísimo error y no sé qué hacer.
— ¿Qué pasa Zabib?
—Sucede que le dije a la novia de mi primo que la estaba engañando con
otra mujer y aunque me juró que nunca le iba a decir a mi primo; ella me
echó de cabeza y ahora mi primo no me quiere ver ni en pintura. Reconozco
que cometí un error y quiero repararlo pero no sé cómo. ¿Qué puedo hacer?
—Zabib, para empezar, deja que te cuente un....
CUENTO
.
Érase una vez un alumno que llega corriendo con su Maestro diciéndole:
— ¡Maestro, Maestro, en el pueblo andan hablando mal de usted!, fíjese
que…
— ¡ALTO!, ¿ya pasaste lo que me vas a decir por las 3 puertas?
— ¿Las 3 puertas?, ¿a qué se refiere?
—Deja te explico, la primera puerta es que te preguntes: “¿si lo que me
vas a decir es verdad?”.
—Mhh, pues en realidad no me consta que sea verdad.
—Entonces no me interesa. De todos modos te voy a explicar cuáles son
las otras dos puertas para que, de ahora en adelante pases todo lo que me
vas a contar por esos 3 filtros, ¿ok?
—Ok Maestro.
—La segunda puerta es preguntarte “¿si lo que me vas a decir es
necesario? ”.
—Mhhh, la mera verdad no es necesario.
—Entonces no me interesa doblemente. La
última puerta es “LA REGLA DE ORO” y consiste en que te preguntes: “¿si
lo que voy a decir es de beneficio para mí y de beneficio para todos mis
hermanos?”.
—Y ¿por qué se le llama la regla de oro?
—Porque si es de beneficio para mí y es de beneficio para todos,
entonces es de beneficio para Dios.
— ¡Ohh!, ahora me hace sentido. ¿Y cuándo puedo utilizarla?
—La regla de oro la puedes utilizar cuando no sepas que hacer. Cuando
te gobierne la indecisión, en ese momento cierra tus ojos y reflexiona:
“Si lo que voy a hacer es de beneficio para mí y es de beneficio para
todos mis hermanos, entonces es de beneficio para Dios”
Porque si es solo de beneficio para ti, pero no es de beneficio para todos
tus hermanos. O si no es de beneficio para ti y solo es de beneficio para tus
hermanos. O si es de beneficio para solo unos cuantos de tus hermanos;
entonces eso es de beneficio para el ego. Y todo lo que es de beneficio para
el ego siempre trae consigo consecuencias (sufrimiento, carencia y
enfermedad).
FIN
— ¿De qué te das cuenta Zabib?
—Pues de que me contó ese cuento demasiado tarde.
—JaJa.
—No se crea, usted me dijo una frase que se me quedó bien gravada:
“No sé y Todo trabaja para el Bien”
Así que en este Instante Santo elijo de nuevo
REFLEXIÓN
Hoy en la mañana me sucedió algo similar a Zabib, sucede que al igual que
en el cuento, yo no pasé por las 3 puertas algo que les dije a unos clientes y
luego me arrepentí de lo que dije porque comencé a sentir mucha culpa
mientras me repetía en la mente:
— ¿Por qué les dijiste eso?
— ¡Que indiscreto eres!
— ¡Debiste haber pensado antes de hablar!
— ¡Te falta meditar más!, etc. etc. etc.
Luego me acordé que:
“La culpa no existe, que solo existen errores, y los errores se pueden
corregir en este Instante Santo”
Así que, cerré mis ojos y comencé a realizar el siguiente ejercicio (Plan C):
1) Respiré muy lento y muy profundo, primero llevando el aire a mi
abdomen, luego a mis pulmones y por último imaginé que el aire
llegaba hasta mi cerebro.
2) Cuando exhale por la boca, lo hice con un suspiro, imaginando que
en ese suspiro soltaba todos esos pensamientos que me hacían sentir
culpable.
Realicé este ejercicio por varios minutos hasta que sentí nuevamente paz en
mi mente. Y como expliqué en un capítulo anterior, el Espíritu Santo es una
mente en paz, así que a partir de ese instante comencé a dar servicio
mediante la apreciación, la gratitud y el amor. Al cabo de unos minutos
volví a sentirme alegre y en total unión con ellos.
Hoy comprendo que aunque siga distrayéndome mil veces, puedo recordar
1,001 veces. Y “de tanto recordar, llegará un día en el cual deje de
olvidar”.
LINGOTES DE ORO
“La culpa no existe solo existen errores, y los errores son corregibles en
este Instante Santo”
“De tanto recordar llegará un día en el cual deje de olvidar”
EJERCICIO
Tu misión, si decides aceptarla, es recordar que:
“Tu único problema es que primero tomas decisiones por ti mismo y
después pides ayuda al Espíritu Santo”
Así que en este Instante Santo te invito a elegir paz mediante tu Plan C (eso
que SIEMPRE te funciona para volver al silencio) y desde ahí, comiences a
ser guiado por Él.
También te comparto mis oraciones favoritas de UCDM por si alguna de
ellas resuena con tu corazón:
¡AHH Y RECUERDA!
“La Voluntad de Dios es que su hijo seas feliz”
LA MARIPOSA QUE
NUNCA PUDO VOLAR
—Maestro, tengo un problema. Sucede que mi hijo está muy gordo y yo
lo humillo constantemente para que cambie sus hábitos alimenticios y se
ponga a hacer ejercicio pero no me hace caso, ¿qué hago?
— ¿Qué edad tiene tu hijo?
—Tiene diez años. —Respondió Zabib.
—Mejor deja que te cuente un…
CUENTO
.
Érase una vez una niña que estaba paseando por el jardín, cuando de
repente observa que en la rama de un árbol estaba un capullo de mariposa
monarca.
A ella le encantaban estas mariposas, de hecho era su animal favorito,
por lo que arrancó la rama con todo y capullo y se la llevó a su casa.
Los días pasaron y el capullo comenzó a moverse a lo que la niña estalló
de alegría pues estaba a punto de presenciar, por primera vez en su vida, el
nacimiento de una mariposa. Para su sorpresa, el proceso de nacimiento
tomó más tiempo de lo que ella suponía, así que decidió ayudarle tomando
unas tijeras para cortar el capullo y así pudiera nacer fácilmente.
Lamentablemente este hecho provocó que la mariposa no pudiera
extender sus alas por sí misma, el resultado, nunca pudo volar y al poco
tiempo se la comió una lagartija que andaba por ahí.
FIN
— ¿De qué te das cuenta Zabib?
—No sé Maestro. La mera verdad hoy no me siento bien, así que me
gustaría que en lugar de contarme cuentos me dijera algún consejo práctico
para solucionar este asunto.
—Ok, en ese caso podemos hacer un ejercicio. Por favor agarra una hoja
y una pluma.
—Listo.
— ¿Cuántos años tienes Zabib?
—Tengo 30.
—Bien, ahora escribe una línea horizontal y supón que esa línea
representa tu vida, así que te pido pongas una marca a los 10, 20 y 30 años
de la siguiente manera:
__________10 años_________20 años_________30 años__________
—Listo.
—Muy bien, ahora lo que sigue es que pongas en la parte de arriba de
esa línea los eventos más hermosos que te han sucedido alrededor de los 10,
20 y 30 años.
—Listo.
—Ok. Ahora lo que sigue es que escribas debajo de esa línea, los
eventos más traumáticos que te han sucedido alrededor de los 10, 20 y 30
años.
— ¿Traumáticos?, ¿a qué se refiero con eso?
—Si, a los eventos más dolorosos que te han pasado en toda tu vida.
—Ok.
—Listo Maestro.
—Ok. Ahora dime, ¿cuál de esas dos líneas te ha ayudado a evolucionar
y crecer para bien en todas las áreas de tu vida?, ¿la de arriba (cosas lindas)
o la de abajo (adversidades)?
Zabib cerró los ojos por un momento y después dijo:
—La de abajo Maestro.
—Bien, entonces…
“¿Quién eres tú para negarle a tu hijo la oportunidad de aprender de
las adversidades?”
“El creerte responsable de la felicidad de los demás es la forma más
cobarde de evadirte de la única responsabilidad que tienes:
TU MISMO”
REFLEXIÓN
“YO ESTOY BIEN, TU ESTÁS BIEN”
Mi mamá me regaló un libro que llevaba justamente ese mismo título y
desde entonces llegamos a un acuerdo:
“Tu estás feliz, yo estoy feliz”
LINGOTES DE ORO
¿Quién eres tú para negarle a tu hijo la oportunidad de aprender de las
adversidades?
“El creerte responsable de la felicidad de los demás es la forma más
cobarde de evadirte de la única responsabilidad que tienes: TU MISMO ”
“Yo estoy bien, tú estás bien”
EJERCICIO
Tu misión, si decides aceptarla es hacer el ejercicio anterior (línea de vida)
y hacerte la pregunta:
¿Cuál de esas dos líneas es la que te ha ayudado a evolucionar para bien
en todas las áreas de tu vida; la de las cosas bonitas o la de las
adversidades?
POSDATA
La mejor definición de dependencia y codependencia que he escuchado
hasta ahora son:
Dependencia:
No puedo ser feliz sin ti.
Codependencia:
Yo soy responsable de tu felicidad.
BENDIGO LA VOLUNTAD
DE DIOS
—Maestro, he puesto como prioridad al deseo más grande de mi corazón
y desde entonces he notado cambios positivos en mi vida, sin embargo,
siento que algo me falta.
—Zabib, deja que te cuente un…
CUENTO
.
Érase una vez un pianista de cuarenta años llamado Gregorio. Todos los
días Gregorio comenzaba su día con yoga y meditación. Después
desayunaba comida fresca, natural y orgánica pues aplicaba lo que
Hipócrates había dicho un día:
“Que la comida sea tu alimento y el alimento tu medicina”
Luego hacía oración y así, con el hacha bien afilada, comenzaba a dar
clases de piano. Entre sus alumnos se encontraba Alicia, una joven de
dieciséis años a quien metieron a fuerzas. Y digo “a fuerzas”, porque Alicia
se la pasaba todo el día pegada a su celular, por lo que sus papás tuvieron
que tomar cartas en el asunto.
Alicia iba cinco veces por semana (dos horas diarias), para tomar clases
particulares en casa de Gregorio. Sus papás le habían puesto esta condición
si es que quería seguir teniendo celular, así que Alicia aceptó a
regañadientes.
La razón por la cual Alicia se la pasaba tanto tiempo en el celular, era
porque tenía un novio, pero como su papá era muy celoso y le había
prohibido rotundamente que no tuviera novio; así que tenía que
comunicarse a escondidas cuando su padre estaba distraído o dormido.
Alicia y su novio solían irse de pinta de la escuela, pues era el único
momento del día en el que podían verse. Los meses pasaron y los besos se
convirtieron en caricias apasionadas que terminaron en visitas a un motel
cercano a la preparatoria. El resultado… ¡ALICIA QUEDÓ
EMBARAZADA!
Cuando Alicia le platicó a su novio la noticia, este decidió romper la
relación y le dijo que le hiciera como pudiera, pero que él no iba a hacerse
responsable del bebé.
Alicia se sentía entre la espada y la pared pues sabía que si le decía la
verdad a su padre, este era capaz de agarrar una pistola e ir a matar al novio,
así que optó por una estrategia diferente.
Por su parte, Gregorio se encontraba dando clases a un niño de ocho
años, cuando de repente llegan los papás de Alicia a interrumpir la clase.
— ¡NECESITAMOS HABLAR CON USTED…! —Dijo gritando el
padre de Alicia. — ¡URGENTEMENTE!
—Ok, pero estoy en medio de una clase.
—Aquí esperaremos entonces.
—Bien, ¿gustan algo de tomar mientras tanto?
— ¡NO GRACIAS!
Pasaron los minutos y en cuanto terminó la clase, Gregorio se dirigió a
los padres.
—Ahora sí, ¿en qué puedo ayudarles?
— ¡PUES EN HACERSE RESPONSABLE DE LO QUE LE HIZO A
MI HIJA!
— ¿Cómo?
— ¡NO SE HAGA PENDEJO!, ¡BIEN SABE DE QUE ESTOY
HABLANDO!
—No, no entiendo de que me hablan.
— ¡ALICIA ESTÁ EMBARAZADA DE USTED Y QUEREMOS QUE
SE HAGA RESPONSABLE DEL BEBÉ!
Gregorio se quedó pensativo por varios minutos y después hablo.
—Comprendo, yo me haré cargo del bebé. —Dijo Gregorio.
—Pues que bueno porque nosotros no estamos dispuestos a criar esa
criatura que es producto de una violación. ¡Ahh!, y una cosa más… ¡MAS
VALE QUE SE ALEJE DE NUESTRA HIJA, PUES TODAVÍA ES
MENOR DE EDAD Y LO PODEMOS REFUNDIR EN LA CARCEL!,
¿ME ESCUCHÓ?
—Comprendo señor, así lo haré entonces.
Alicia que había acompañado a sus padres, se mantuvo callada mirando
hacia el piso durante toda la conversación.
Gregorio tomó cartas en el asunto de inmediato y comenzó a prepararse
tomando cursos psicoprofilácticos, leyendo libros para padres primerizos y
por supuesto consiguió a un ama de crianza para que le diera pecho al bebé
cuando naciera pues, él sabía de la importancia de la leche materna.
El tiempo pasó y Alicia dio a luz a un bebé hermoso. Sus padres pidieron
que en cuanto naciera se lo llevaran lejos de la sala de parto para que Alicia
no creara ningún vínculo afectivo con el recién nacido.
Gregorio estaba en la sala de espera del hospital gracias a que los padres
de Alicia le avisaron en cuanto entro en labor de parto.
El padre de Alicia por su parte, ya había arreglado todos los asuntos
legales para que Gregorio formara una familia monoparental.
Gregorio sabía de la posibilidad de que algún día Alicia les dijera la
verdad a sus padres y que fuera a reclamar la custodia de su hijo, así que
todos los días crió a Ángel, así le puso al niño, sabiendo que era prestado,
pero no por ello iba a perder la oportunidad de criarlo con el más profundo
y puro amor incondicional.
Para su sorpresa, los años pasaron y Ángel se convirtió en un niño
hermoso, lleno de vitalidad y un profundo amor que había integrado de su
padre y de los muchos amigos de Gregorio que le ayudaron de una y mil
formas.
Cuando Ángel cumplió cinco años, Gregorio y sus amigos le hicieron
una fiesta sorpresa, llena de globos, juegos y muchos juguetes.
Para sorpresa de Gregorio, Alicia apareció en la fiesta con un regalo, y él
amablemente la dejo pasar. Alicia esperó el momento adecuado para
acercarse a su hijo y felicitarlo mientras le daba el regalo. Ángel pensó que
era otra de las muchas amigas de su padre, así que tomó el regalo, dio las
gracias y se fue corriendo con sus amigos para seguir jugando. ☺
Acabada la fiesta Alicia se acercó con Gregorio y le dijo:
—Por favor perdóname. No sé ni dónde meter la cara.
Alicia comenzó a llorar.
—Alicia, gracias. Gracias por haberme prestado a tu hijo estos cinco
años. Yo no había planeado ser padre. He destinado mi vida a hacer la
Voluntad de Dios y cuando viniste aquél día con tus padres para decirme
que yo era el padre de ese niño, hice una pausa, ¿recuerdas?
—Sí. ¡Una pausa que se me hizo eterna!
—Pues en esa pausa dije en silencio:
“Bendigo la Voluntad de Dios en mí y Bendigo la Voluntad de Dios en
todos mis hermanos”
Luego añadí:
“Rindo todo lo que queda de mi a Dios”
Y el resto es historia. Ahora considero a Ángel como mi Maestro pues,
me ha enseñado en cinco años lo que no había logrado aprender en toda mi
vida antes de su llegada.
— ¿Me podrías permitir recuperar a mi hijo? —preguntó Alicia.
—Claro.
— ¿En serio?
—Si claro. Es tu hijo y sabía que tarde o temprano este día llegaría.
Aparte, soy consciente de que existe algo que yo no podría darle jamás: ¡EL
AMOR DE UNA MADRE!
—Te agradezco infinitamente y ahora me doy cuenta de que, dentro de
mi inmadurez, tuve algo de cordura al haberte elegido como el padre de
Ángel.
—“Todo trabaja para el Bien Alicia” . Desde hoy comenzaré a
prepararlo psicológicamente para que cuando tú le digas que eres su madre
lo pueda asimilar mejor.
—Gracias Gregorio, no tengo palabras para agradecerte este regalo que
ahora me haces.
FIN
— ¿De qué te das cuenta Zabib?
— ¡WOW!, me doy cuenta de un sin fin de cosas, pero principalmente
de que estoy aquí únicamente para servir al Plan Divino y Perfecto de
Dios.
REFLEXIÓN
Por muchos años creí que mi misión yo la iba a estipular. En otras palabras,
que yo era el arquitecto de mi propio destino.
Hoy me doy cuenta de que soy más feliz rindiéndome a lo que el Instante
Santo tiene preparado para mí, y una buena forma de hacer eso es
repitiendo una bella oración de Un Curso de Milagros que dice:
“Estoy aquí únicamente para ser útil,
estoy aquí en representación de aquel que me envió.
No debo preocuparme por lo que debo decir ni por lo que debo de hacer,
pues aquél que me envió me guiará.
Me siento satisfecho de estar donde quiera que Él desee,
pues sé que Él estará allí conmigo.
Sanaré en la medida que le permita al Espíritu Santo enseñarme a sanar”
LINGOTES DE ORO
FIN
—Tiene razón Maestro, le tengo miedo a Dios porque todavía creo en un
Dios castigador. Con este cuento me doy cuenta de que al elegir paz, todas
esas mentiras se disuelven y vuelvo a percibir las cosas con amor.
SUÉLTATE
Érase una vez una atleta de alto rendimiento que estaba entrenando para
participar en un maratón que se iba a realizar en el Gran Cañón de
Colorado.
REFLEXIÓN
Recuerdo que un día un Maestro me dijo:
“Cuando tengas tiempo medita 20 minutos
y cuando no tengas tiempo medita una hora”
Y es cierto para mí porque cuando no tengo tiempo es justo cuando más
necesito paz interior. Y cuando le doy prioridad al deseo más grande de mi
corazón, soltar es muy fácil y hasta disfrutable pues, vuelvo a ser como un
bebé que descansa en los brazos de Dios.
LINGOTES DE ORO
EJERCICIO
Te invito a relajarte con una meditación guiada titulada del Miedo al Amor:
https://youtu.be/1ZirTm8Ovcg
DIME CON QUIÉN ANDAS
Y TE DIRÉ QUIÉN ERES
—Hola Maestro, tengo un atore, siempre me siento culpable de todo.
Tengo mucho sentimiento de culpa desde que nací y eso me lleva a
enfermedades físicas y problemas de todo tipo. ¿Cómo hago para erradicar
esa culpa?
— ¿Qué crees María?
— ¿Qué?
—Hoy no hay cuento, hoy quiero compartirte mi experiencia.
—Fantástico, soy todo oídos.
—Yo, al igual que tú, provengo de una formación llena de culpa, y en
cierto modo, estoy de acuerdo contigo de que me empezaron a programar
con esa creencia desde que nací.
Por ejemplo, cuando fue tiempo de entrar a la escuela, mis padres
eligieron para mí escuelas católicas comandadas por personas que
empezaron a programarme con creencias como…
Fue tu culpa
Fue mi culpa
No me eches la culpa
Siento mucha culpa, etc.
REFLEXIÓN
Hoy quiero compartirte una anécdota que me sucedió cuando mi hijo tenía
10 años. Sucede que yo solía prestarle mi celular y un día se le hizo fácil
comprar dos videojuegos sin mi permiso.
Cuando chequé mi estado de cuenta y vi que apareció un cargo de $60
dólares por Angry Birds y no recuerdo que otro juego, fui con él y lo regañé
muy fuerte. Le dije que a la gente deshonesta no le iba bien en la vida y le
aventé un “choro mareador” como decimos acá en México.
Al poco tiempo fuimos a una fiesta con unos amigos y alguien mencionó
que su hijo le hizo una travesura similar, así que yo aproveché y les dije a
todos:
¿Qué creen?, nuestro hijo nos robó $60 dólares, BLA, BLA, BLA… y en
eso sentí un codazo de mi mujer, mientras me decía al oído:
“¡Eso ya pasó!, ¡SUÉLTALO!”
Y desde ese momento decidí:
“No perder un solo instante en pensamientos de culpa”
Porque:
“La única forma de hacer real lo falso es creyendo que lo falso es real”
LINGOTES DE ORO
“Nos convertimos en el promedio de las 5 personas con las cuales más nos
relacionamos”
“La única forma de hacer real lo falso es creyendo que lo falso es real”
EJERCICIO
Tu misión, si decides aceptarla, es escribir en una hoja los nombres de las 5
personas con las cuales más te relaciones y escribas al lado de cada uno de
ellos “si se la pasan haciendo historias entre lo que pasó y lo que podría
pasar” o si “viven y disfrutan del Instante Santo”.
Lo que sigue después es que tú decidas, si sigues conviviendo con esas
personas o cambias, así de fácil.
LA PAYASITA FELIZ
—Maestro, lo invito a desayunar.
—Hola Zabib, gracias por la invitación, acepto. ¿Cuándo puedes?
—Ahora tengo tiempo, ¿y usted?
—Yo también puedo ahora.
—Perfecto, usted decida a dónde quiere ir a desayunar y yo invito.
—Muy bien, vamos a comer al mercado.
— ¡Saz!
Llegaron al mercado, se sentaron uno frente al otro y comenzaron a
desayunar mientras Zabib le pregunta al Maestro:
— ¿Qué es lo más importante para usted Maestro?
—No entiendo tu pregunta.
—Sí, ¿cuál es su prioridad máxima?
—Ohh, ya entiendo. Mi prioridad es la paz, en mi vida todo gira
alrededor del silencio y la quietud.
En eso, Zabib recibe una llamada telefónica que atiende, al terminar la
llamada regresa disculpándose.
—Lo siento Maestro, lo que pasa es que tengo una empresa muy grande
y cuando los empleados tienen alguna duda me llaman para poder atender a
los sesenta mil clientes que tenemos actualmente.
— ¿Sesenta mil clientes haz dicho?, ¡WOW!
—Así es Maestro, gracias a esa empresa tenemos inversiones en Nueva
York, Hawái, Paris y otros destinos turísticos.
—Ok ¿y cuántos empleados tienes?
En cuanto Zabib iba a responder, recibe otra llamada por lo que la
responde, y después de varios minutos vuelve con el Maestro.
—Otra llamada del trabajo, lo siento.
—No te preocupes, te estaba preguntando qué ¿cuántos empleados
tienes?
—Tengo doscientos empleados. Lo malo es que cuando los supervisores
no pueden resolver los problemas, me llaman a mí y la mera verdad ya me
estoy cansando.
— ¿De qué es tu empresa?,
—Somos desarrolladores de aplicaciones para celular.
— ¡Ohh!, ¿y para qué quieres tantos clientes?
Antes de que Zabib pudiera responder, vuelve a recibir otra llamada
telefónica y después de atenderla le dice al Maestro:
—Así es todos los días.
— ¿En serio?
—Sí, todos los días recibo un promedio de ciento cincuenta llamadas
telefónicas.
— ¡WOW!, pero volviendo a la pregunta que te hice hace un momento:
¿para qué quieres tantos clientes?
—Pues para poder comprar más bienes raíces y realizar inversiones que
me permitan tener libertad financiera.
—Ve más profundo y vuelve a responder la pregunta.
— ¿Ir más profundo?, ¿a qué se refiere con eso?
—Cierra tus ojos y comienza a respirar lento y profundo.
Zabib respiró lento y profundo, y después de unos minutos abrió los
ojos.
—No sé. En realidad no sé para qué quiero tantos clientes. —Respondió
Zabib.
— ¡Fantástico!, decir “no sé” te abrirá las puertas a la sabiduría infinita.
Te invito a seguir diciendo no sé y verás que la respuesta llegará
naturalmente.
—Ok Maestro.
En eso vuelve a recibir otra llamada del trabajo, la atiende y después le
dice:
—Lo siento Maestro, me tengo que ir a la oficina. Aquí dejo el dinero
para que pague la cuenta. ¡Hasta luego!
— ¡Hasta luego Zabib, que tengas un feliz y bendecido día!
—Igualmente Maestro.
Zabib regresó a su oficina pues estaban siendo demandados por la
cantidad de $70,000 dólares, a causa de varios errores en una de las
aplicaciones que ellos habían desarrollado.
Zabib atendió este problema y cuando pensó que ya iba a poder
descansar llegaron nuevos problemas, pero ahora en el departamento de
contabilidad, ya que el sistema de facturación estaba fallando, luego
problemas con impuestos, ya que les llegó una auditoría no planeada, luego
problemas en recursos humanos, ya que no tenían suficiente personal y
tenían que trabajar horas extras, luego problemas con los sindicatos, pues
los demandaron por no cumplir con las leyes de los trabajadores, en fin, el
estrés era interminable.
Zabib sufría de insomnio, el cual lo mitigaba un poco con pastillas para
dormir, pero como sus nervios estaban a flor de piel, comenzó a tomar una
copita de whisky por las noches, que después se convirtieron en muchas
copas de licor diariamente. Esto sin mencionar las dos cajetillas de cigarros
diarias y la cantidad excesiva de comida que ingería diariamente.
Zabib siguió este ritmo de vida hasta que un día su cuerpo no pudo más.
Una mañana comenzó a sentirse muy mal así que tuvieron que llevarlo al
hospital de manera urgente. El diagnóstico, insuficiencia renal, por lo que
tuvieron que someterlo a hemodiálisis pues tenía la sangre contaminada.
Ya en el hospital, Zabib tuvo tiempo de reflexionar:
— ¿Qué tal que me muero?, mis hijos están muy pequeños y no es justo
que los deje sin un padre. Necesito ayuda urgente. —Pensó Zabib mientras
marcaba por su celular.
— ¿Bueno?
—Hola Maestro, soy Zabib.
— ¡Que gusto escuchar tu voz!, ¿cómo estás?
—Pues no muy bien que digamos, me estoy muriendo y necesito hablar
con usted.
— ¿Cómo que te estas muriendo?
—Sí, estoy en el hospital, me diagnosticaron insuficiencia renal pues mis
dos riñones ya no funcionan. Estoy cayendo en depresión y necesito de su
guía urgentemente, ¿puede venir?
—Claro, voy para allá ahora mismo.
El Maestro colgó y se dirigió al hospital donde continuaron conversando:
—Gracias por haber venido. —Dijo Zabib al ver al Maestro entrar al
cuarto.
—Para eso estamos Zabib.
—Fíjese que me quedé pensando en la pregunta que me hizo la otra vez
de ¿para qué quiero tantos clientes? y creo tener la respuesta.
—Haber cuéntame.
—Pues en estas 24 horas que he estado en el hospital, mi familia ha
estado atendiendo todos los asuntos del trabajo y, gracias al tiempo libre
que ahora tengo, caí en cuenta de que estoy repitiendo el mismo patrón de
mi padre. Mi padre también era un hombre muy exitoso en el ramo de las
ferreterías. En la ciudad donde él se crió, comenzó desde abajo trabajando
en una ferretería y al cabo de unos años decidió abrir su propia empresa. Al
poco tiempo abrió otra sucursal, después otra, después otra, y así hasta que
un día decidió franquiciar su ferretería y ahora tiene más de 5,000 en todo el
mundo. Yo no he podido superar a mi padre y creo que, inconscientemente,
tengo el deseo de ser exitoso y así poder recibir su aprobación, ¿qué opina?
—Mejor, deja que te cuente un cuento, ¿te parece?
—Me parece genial.
CUENTO
.
Érase una vez una señora llamada Meche que había nacido en una familia
de padres divorciados, su familia siempre estaba llena de conflictos,
envidias, peleas, etc. Así que desde muy pequeña decidió volverse
independiente y rompió relación con todo su pasado.
Meche se metió a un monasterio en la India y en este país aprendió
varias técnicas de yoga y meditación, técnicas que comenzó a seguir al pie
de la letra, pues, su deseo máximo era “ILUMINARSE EN ESTA VIDA”.
Meche era muy estricta consigo misma y todos los días se levantaba a las
cuatro de la mañana a meditar y se quedaba tres horas después de que todos
los monjes se iban a dormir, pues ella tenía muy claro su objetivo:
“ILUMINARSE EN ESTA VIDA”.
Un buen día mientras meditaba, comenzó a ver a un ser de luz que se iba
acercando hacia ella. Cuando estuvo cerca lo reconoció como el mismísimo
Dios, por lo que aprovechó para hacerle una pregunta que siempre había
estado en su cabeza:
—Oh Dios mío, ¿cuántas vidas más me hacen falta para iluminarme?
—Al ritmo de esfuerzo que llevas actualmente, te hacen falta solamente
cinco vidas más para iluminarte.
— ¿cinco vidas más haz dicho?
—Sí, cinco.
— ¡No te creo!, yo he hecho todo lo necesario para iluminarme en ésta
vida y por lo tanto Tú estás mintiendo. A mí se me hace que eres un
impostor haciéndote pasar por Dios. ¡LÁRGATE, NO TE QUIERO VER!
El ser de luz hizo una reverencia mientras se iba disolviendo en la
quietud de la noche.
En otra parte del mundo existía una mujer muy peculiar. Se dedicaba a
hacer reír a las personas en los semáforos de la ciudad de Barranquilla,
Colombia.
Todos la conocían como “la payasita feliz”.
La payasita era feliz, en parte, porque todos los días comenzaba su día
haciendo una oración que decía:
“Bendigo la presencia de Dios en mí y Bendigo la presencia de Dios en
todos mis hermanos”
“Gracias Espíritu Santo por los milagros que voy a dar recibir el día de
hoy”
La payasita gozaba de la Paz de Dios pues siempre estaba feliz. No
importaba si ganaba o no ganaba dinero en los semáforos, ella siempre
estaba feliz. No importaba si encontraba un cuarto donde dormir, o si tenía
que dormir en la calle, o en el parque, ella siempre era feliz.
En una ocasión la payasita estaba haciendo oración, cuando de repente
comienza a ver como un ser de luz comienza a acercarse a ella.
Cuando estuvo lo suficientemente cerca, lo reconoció como Dios mismo,
así que le hizo una reverencia mientras le decía:
— ¡Ohh Dios mío, que gusto conocerte, y que honor el que vengas a
visitarme!
—Es un honor para mí también estar aquí contigo.
—Maravilloso, estoy muy contenta y me gustaría aprovechar este
momento para hacerte una pregunta.
—Adelante.
—Siempre me he preguntado, ¿cuántas vidas más me hacen falta para
iluminarme?
—Al ritmo de vida que llevas actualmente, solo te hacen falta setenta
vidas más para iluminarte.
— ¡Setenta vidas más haz dicho!, ¡MARAVILLOSA NOTICIA!, setenta
vidas más para seguir haciendo tu voluntad.
¡GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS!
Cuenta la historia, que en ese preciso instante mientras decía estas
palabras, la payasita se dio cuenta de que “ya estaba lista, y se ilumina”.
REFLEXIÓN
A los 30 años tuve una empresa “exitosa” y también recibía muchas
llamadas telefónicas acompañadas de muchos problemas diversos. El
resultado, un intenso dolor en el pecho que me llevó a parar en urgencias
del hospital. Ese día cuando entré a urgencias, fue al mismo tiempo, el peor
y el mejor día de mi vida, ¿por qué?, muy sencillo, ese día toqué fondo y
me puse a platicar con Dios mientras observaba a varias personas morir a
mi lado.
—Dios, te prometo que si me dejas salir de esta voy a ser un mejor
padre, esposo e hijo. Por favor te pido me des la oportunidad de criar a mi
hijo pequeño.
Milagrosamente al día siguiente llegó el doctor con los resultados de los
análisis que me habían hecho el día anterior.
—Tú no tienes nada, ¿cargaste algo pesado?
—Sí, ayudé a una amiga a hacer una mudanza y cargué varios muebles.
—Ahh, entonces lo que sientes en el pecho no es un ataque al corazón,
sino más bien, un dolor intramuscular que se te va a quitar con estas
pastillas y reposo. Vete a tu casa y vive una larga y feliz vida con tu familia.
LINGOTES DE ORO
EJERCICIO
.
Tu misión, si decides aceptarla, es cerrar los ojos y comenzar a escudriñar
tu mente para que descubras cuál es tu más grande apego que tienes. Ya que
lo hayas identificado, lo que sigue es que vuelvas a cerrar tus ojos y
comiences a respirar lento y profundo… después pregúntate:
¿Cuál es la necesidad aun no resuelta detrás de este apego?
Cuando hayas dado con la respuesta, lo que sigue es simplemente
responsabilizarte de atender esa neurosis y listo, el apego desaparecerá
naturalmente. ☺
Nota Importante: No te dejes engañar con la primera respuesta que venga a
tu mente. En mi caso fui varias veces con mi Maestro de Gestalt y cuando
le decía una respuesta, él me contestaba:
“Eso es la punta del iceberg, ve más profundo”
Y para que lo comprendas mejor te comparto una anécdota:
Sucede que en aquél tiempo tenía un fuerte apego a nuestra mascota Oly.
Esa perrita era mi adoración pues me seguía a todos lados. Nos íbamos
juntos a la playa, el rio, el mercado, etc.
En una ocasión enfermó de gravedad y casi se muere. Yo me puse muy mal.
Tan mal que me hizo pensar que tenía un fuerte apego a esa criatura así que
decidí ir con mi Maestro y le dije:
—Paco, tengo un fuerte apego a mi perrita Oly y necesito que me ayudes
a sanar eso.
— ¿Cuál es la necesidad aún no resuelta detrás del apego a tu mascota?
—Mmhhh, yo creo que se debe a que, de niño me regalaron tres perros y
mi mamá terminó devolviéndolos, pues yo era muy pequeño y no me hacía
cargo de ellos y pienso que esa es la necesidad aún no resuelta.
—Esa es la punta del iceberg. Quiero que cierres los ojos y vayas más
profundo.
—Mmhhh. ¡YA SE!, la necesidad aun no resuelta es que Oly es “mi
maestra del perdón”, pues me perdona rápido cuando no la saco a hacer
popó y me está enseñando a estar presente.
—Esa es la punta del iceberg. Quiero que vuelvas a cerrar los ojos y
vayas más profundo.
—Mmhhh, la necesidad aún no resuelta es que Oly es mi compañera
incondicional que nunca me juzga y no quiero dejar de aprender de ella.
—Veo que estás muy distraído. Mejor vete a tu casa y sigue haciéndote
la pregunta. No importa que pasen varios días, tú me llamas cuando tengas
la respuesta.
—Ok Paco, así lo haré.
Pasaron varios días, hasta que un día me llegó la revelación y le llamé de
inmediato a mi Maestro para compartírselo.
Él me escuchó y me dijo:
“¡Felicidades Neto!, es hasta ahí hasta donde quería que llegaras, ahora,
responsabilízate de eso y verás que el apego desaparecerá naturalmente.”
POSDATA
Ni creas que te voy a hacer la tarea así que te invito a ir más profundo y
descubras por ti mism@:
¿CUÁL ES LA NECESIDAD AUN NO RESUELTA DETRÁS DE TU
APEGO?
Ya que sepas cual es la neurosis, simplemente responsabilízate y listo, ¡a ser
libre se ha dicho!
SI TÁN SÓLO
RECUERDAS ESTO,
SERÁS MUY FÉLIZ
—Maestro, me puede platicar ¿cómo fue el momento exacto cuando se
iluminó?
—Sí, estaba lavando platos.
— ¿Cómo?, yo lavo platos todos los días y no me siento iluminado.
—Mira Zabib, primero debemos definir la palabra iluminación porque
puede ser sujeta a malas interpretaciones.
—Tiene razón Maestro, pero después me cuenta como se iluminó ¡ehh!
—Si Zabib lo prometo. La iluminación es simplemente salir de la
ignorancia. Y la ignorancia es andar en “lo que pasó y en lo que podría
pasar”, “culpa del pasado y preocupación del futuro”.
—Comprendo Maestro, en otras palabras, iluminarse es estar presente.
—Eso mismo Zabib.
—Bueno Maestro, habiendo aclarado eso puede decirme ya, ¿cómo es
que usted se iluminó?
—Si Zabib. Yo, al igual que tú, tuve un Maestro que me enseñó tres
cosas que cambiaron mi vida para siempre:
1) “El trabajo más importante de toda mi vida, es en el que estoy ahora”
2) “La persona más importante de toda mi vida, es con la que estoy ahora”
3) “El momento más importante de toda mi vida, es en el que estoy ahora”
Pues bien, un día decidí volverme sabio llevando a la práctica estas tres
frases.
Sucede que yo antes me la pasaba todo el día pensando “en lo que pasó y
en lo que podría pasar”. Mi mente era como un chango que se la pasaba
saltando sin parar del pasado al futuro.
Ese hábito lo tuve hasta que decidí AUTO-OBSERVARME. Y la auto-
observación es simplemente estar gentilmente alerta mientras descanso en
Dios.
En ese momento cuando elegí “auto-observarme” estaba lavando platos
y me caché haciendo historias entre “lo que pasó y lo que podría pasar”. La
diferencia radicó en que en ésta ocasión, en lugar de seguir haciendo
historias, elegí “descansar tal y como es ahora”.
REFLEXIÓN
En una ocasión nuestro Maestro de meditación, Maharishi Krishnananda
Ishaya nos dijo en una reunión:
“Todos ya están hartos de tu historia, todos menos tu”
En ese momento me di cuenta de que efectivamente, todos los días estaba
haciendo más grande al ego al estar enfocado en platicar historias de mi
pasado.
Así que hoy elijo elijo de nuevo, y sin importar cuantas veces me distraiga,
en este Instante Santo elijo soltar mis historias y “descansar tal y como es
ahora” ☺
LINGOTES DE ORO
Nota: Si eres pensador compulsivo, sí puedes hablar acerca del futuro, pero
con una condición, que sigas en el supuesto de que NO EXISTE EL
PASADO.
¡Ahh! y por favor, no les digas a tus amigos que estás jugando este juego
porque te pueden tachar de loco. Simplemente hazlo como un ejercicio
personal y descubre por ti mismo que sucede. ☺
ACEPTACIÓN VS
RESISTENCIA
—Maestro, odio a mis padres y a mis hermanos, siento que nací en la
familia equivocada. Y ahora que formé una familia, odio a mi pareja y a
mis hijos. También odio a los políticos corruptos de mi país que se roban
todo el dinero del pueblo. Sé que estoy mal al estar odiando tanto a mis
semejantes, pero no sé cómo cambiar mi percepción, ¿qué puedo hacer?
—Zabib, antes de contarte un cuento quiero compartirte un manual con
“15 pasos para ser infeliz”.
— ¿15 pasos para ser infeliz?, ¿y yo para que quisiera saber eso?
—Zabib, cuando yo tenía tu edad era muy rebelde y mi Maestro, con su
infinita sabiduría, decidió enseñarme con creatividad, ¡y funcionó! Así que
te pido te mantengas humilde y simplemente escuches con atención.
—Comprendo, adelante pues con los…
LINGOTES DE ORO
“Donde pongo mi atención se convierte en mi experiencia”
“Lo que enfoco expando”
“La infelicidad no puede habitar en un cuerpo agradecido”
“Hoy elijo apreciar lo bueno y solo lo bueno”
EJERCICIO
Tu misión, si decides aceptarla, es responder Si o No, a las siguientes
preguntas:
¿El cielo es perfecto?
Por último:
¿Tú eres perfect@ así como eres?
POSDATA
Por sí no tuviste suficiente con los “15 PASOS PARA SER INFELIZ”, te
comparto 6 pasos más… por lo que ahora serán en total “LOS 21 PASOS
PARA SER INFELIZ”
16
No te enfoques en lo que quieres,
enfócate en lo que NO tienes.
17
Fomenta el hábito de tomar/quitar, nunca dar.
18
Repasa tus historias en compañía de tus amigos historiadores y si no tienes
a nadie a la mano, comienza a repasar LO QUE PASÓ Y LO QUE
PODRIA PASAR.
19
Pospón el deseo más grande de tu corazón y en su lugar sigue poniendo
como prioridad a los deseos externos del ego.
Si nada de esto funciona, pon a Dios FUERA DE TI.
MUCHO OJO: Si reconoces que Dios está dentro de ti la ansiedad y el
miedo desaparecerán así que por favor sigue creyendo que Dios está
AFUERA de ti.
20
Sigue sacando el látigo de la culpa cada vez que te equivoques y por favor,
por favor, por favor, NUNCA PIDAS GUIA AL ESPÍRITU SANTO PARA
CORREGIR EL ERROR
21
Cuando tengas dudas, COMPARATE CON LOS DEMAS. Ayuda mucho si
te comparas con gente más exitosa que tú.
POSDATA 2
No tienes que desarrollar maestría en todos estos puntos, con que te
enfoques en solo UNO será suficiente para dotarte de una buena dosis de
miseria durante el resto de tu vida.
POSDATA 3
Si quieres vivir en gozo y prosperidad en todos sentidos haz justamente lo
opuesto a estos consejos.
POSDATA 4
Había una vez una mujer Hindú que deseaba ser millonaria, así que le
rezaba con mucha devoción todos los días a la Diosa Lakshmi (Diosa de la
abundancia).
Así continuó haciéndolo por muchos años, sin embargo, su condición
económica no incrementaba. Fue por ello que se rindió a la voluntad de
Dios y comenzó ahora a enfocar toda su devoción a Krishna (El Cristo de la
India).
Su felicidad y plenitud en todos sentidos fue en aumento día con día a
partir de ese instante.
Tanta era su paz que podía sentir el Amor de Krishna en todos los
lugares a donde ella fuera, sin importar la condición de salud, económica o
afectiva en la que ella se encontrará.
Un buen día mientras realizaba su oración matinal observó como un
bello ser se iba acercando a ella, ¡era la Diosa Lakshmi!
Ella le agradeció su presencia y sostuvieron la siguiente conversación.
—Oh Gran Diosa Lakshmi. ¡Que bella eres!
—Mi querida hermana, tú también estás bella y honro tu espíritu
radiante.
— ¿A qué debo el honor de tu visita?
—Vengo a entregarte la abundancia que me solicitaste hace tiempo.
—Gracias, la recibo con humildad para beneficio mío, para beneficio de
mis hermanos y por lo tanto, para beneficio de Dios. Solo una pregunta:
¿por qué hasta ahora?
— Lo que pasa es que “quería que conocieras a Krishna” y haberte
dado la abundancia en aquel tiempo te hubiera distraído de tu verdadero
propósito divino.
FIN
EPÍLOGO
Zabib sigue en contacto con el Maestro pues ahora es consciente de que el
camino del despertar es una “Maestria Eterna ”.
A continuación te comparto las más recientes conversaciones que
sostuvieron por correo electrónico:
—Hola Maestro, le escribe Zabib. Quiero aprovechar el presente para
agradecerle todas las enseñanzas que me ha otorgado a través de todos esos
cuentos y hoy quiero compartirle algo que escribí titulado:
LA VIUDA ALEGRE
Por: Maria Sierra de Logroño, España.
Había una vez una chica que se fue a vivir a Ibiza, España. Allí conoció a
José con quien concibió amorosamente a su hijo Samuel, quien les lleno y
unió aun más.
Un día después de 15 años de relación, María y su hijo llegaron a casa y
encontraron a José como si estuviera dormido sin embargo, el había
fallecido de muerte súbita.
Podría hacer un drama, podría hundirme, podría deprimirme, podría ser una
víctima pero lejos de ello, elijo sentirme viva, más fuerte, más empoderada
y ser una “VIUDA ALEGRE”.
Y aunque a veces me siento mal por sentirme bien, elijo estar bien para
poder estar lo mejor posible para mi hijo de 12 años a quien deseo
transmitirle el mensaje de que ¡SIEMPRE SE PUEDE EMPEZAR DE
NUEVO y de que SI YO PUEDO, TODOS PUEDEN!
ME ESTOY SANANDO
Por: Magda Seijas
"Estoy entendiendo que no tengo
que hacerme indispensable.
Estoy recordando que ser amable no me impide ser clara, y que es normal
dejarme sentir las emociones que afloran en mi interior en este preciso
momento.