Psicología Ganzheit
Psicología Ganzheit
Psicología Ganzheit
2. Describir cómo se conectan entre sí dichas unidades para constituir las estructuras
básicas más complejas
Por otra parte, es de resaltar, especialmente dentro de la perspectiva experimental, la importancia que
Wundt concedió a la esmerada identificación, al estricto control y a la precisa cuantificación de las
variables que su concepción y metodología implicaban.
En tal encuadre, la introspección experimental la describió como una observación en la cual los
fenómenos observables surgen y se desarrollan por la acción voluntaria del observador, mientras que en
la observación propiamente dicha no se daría la intervención del sujeto en la producción de los
fenómenos, como acontece cuando se estudia la lengua, los mitos y las costumbres del ser humano.
En otro orden de cosas, una característica nuclear del sistema wundtiano es lo que se ha dado en
llamar voluntarismo, que supone situar las actividades volitivas como el eje central de los
fenómenos mentales.
El voluntarismo wundtiano implica que todos los procesos psíquicos pasan por cuatro fases:
De acuerdo con tal perspectiva, Wundt propone una doctrina de síntesis mental, donde la función
atentiva cumple un papel clave, al lado de los actos de voluntad.
Por otra parte, Wundt delimitó con precisión el objeto de la ciencia psicológica, diferenciándolo
del propio de la fisiología y de la filosofía. Como antes hemos dicho, mantuvo al respecto que el
campo de trabajo del psicólogo había de ser la experiencia inmediata, entendida como la totalidad
de la experiencia consciente en un momento dado (Leahey, 1980), dejando para la fisiología la
experiencia mediata, esto es, el conjunto de procesos mediadores, de naturaleza biológica, que
propiciaba la experiencia psicológica.
En todo caso, la experiencia inmediata no es estimada como un contenido estático, sino una
conexión de procesos, que poseen un contenido objetivo y otro subjetivo (Wundt, 1896)
En cuanto a la ruptura con la filosofía, Wundt abandonó la concepción de los psíquico como
sustancia o cosa, insistiendo en una consideración de la mente como proceso o fenómeno, es
decir, como acontecimientos mentales que se desarrollan sin rupturas a lo largo del tiempo, con
una identidad mantenida.
Para Wundt, la consciencia es una actividad y no una sustancia pasiva, aserto que trae consigo la
negación de todas las formas metafísicas de psicología, así como cualquier reduccionismo
materialista (Leahey, 1980).
Como ciencia, la psicología debía ocuparse de la descripción de los hechos de la consciencia,
junto con la búsqueda de sus relaciones y combinaciones y los principios reguladores de las
mismas.
Tal modo de enfocar la tarea investigadora estimamos que vino influida por la química orgánica,
que a finales del siglo XIX empezó a desarrollarse fuertemente en Alemania, mostrando la
composición molecular de muy diversas sustancias a través de precisos aparatos.
Junto a ello, Wundt partió del modelo de la química mental de John Stuart Mill, entendiendo que
los fenómenos componentes de la experiencia inmediata o hechos de la consciencia, incluían
representaciones o percepciones, sentimientos, impulsos y actos volitivos, aunque sólo los dos
primeros era susceptibles de una objetivación por medio de la introspección analítica.
Mediante el oportuno trabajo analítico era posible describir, con posterioridad, ciertas
unidades y atributos de carácter psicológico (y no fisiológico) más elementales, que
compondrían los fenómenos psicológicos complejos.
Wundt no pensaba, por otro lado, que lo mental estuviera al margen de lo fisiológico: ambos
tipos de fenómenos tenían para él una estrecha relación, aunque yendo cada uno de ellos por
su camino, con sus particulares y específicas causaciones, paralelismo psicofísico con el que
trató de resolver el tradicional y debatido dualismo cuerpo – mente.
Dada la compleja trama de la experiencia inmediata, Wundt preconizó que la investigación
psicológica debía implicar necesariamente tres tareas complementarias:
Tras ello había que esclarecer las relaciones y combinaciones que se daban entre dichos
elementos, para, finalmente, fijar los principios que son operativos en la formación de tales
agrupaciones (Wundt, 1896).
Según el resultado de los programas de investigación wundtianos, el análisis de los hechos de
consciencia muestra, en un primer paso, que los elementos objetivos presentes en la experiencia
inmediata son las representaciones o percepciones, pudiéndose también tener acceso a elementos
subjetivos como los sentimientos, formando todos ellos un conjunto activo, un proceso que se desarrolla
en el tiempo y no una sustancia estática y pasiva, como antes de ha indicado.
Una introspección atenta permite captar que unos y otros elementos de la consciencia, las percepciones y
los sentimientos, tienen en común los atributos de cualidad y cantidad (intensidad): en el caso de las
percepciones encontraríamos los atributos cualitativos de distinción y claridad, que poseerían una
intensidad variable, mientras que en los sentimientos lo cualitativo y cuantitativo se reparten entre lo
hedónico (placer o displacer), la activación nerviosa (excitación – apaciguamiento o depresión) y el
carácter psicológico (tensión – relajación o alivio).
Profundizando analíticamente, esto es, yendo más allá de las estructuras mentales que en un
primer paso se evidencian, nos encontraríamos con las unidades irreductibles que componen a
aquéllos: por un lado, las sensaciones, que presuponen una abstracción de las representaciones
en que se integran y de los sentimientos con que están ligadas; y, por otro lado, en cuanto a
éstos, se verían reducidos a sentimientos más simples.
La segunda tarea psicológica, la síntesis, se ocupa del estudio de cómo se agrupan entre sí los
diversos elementos detectados por el análisis anterior. Con ello se persigue esclarecer la
formación de los compuestos mentales objetivos y subjetivos a los que se tiene primariamente
acceso.
Wundt sostuvo que las representaciones (o percepciones) se constituirán a partir de las
sensaciones, dándose tres compuestos principales:
- Las representaciones intensivas
- Las representaciones de espacio
- Las representaciones de tiempo
Se hablaría de aprehensión cuando el contenido está en la conciencia, pero sin darse la anterior
focalización por parte de la atención voluntaria.
4. Estructuralista, pues mantiene que los procesos complejos son organizaciones totales que
derivan de los elementos, poseyendo propiedades peculiares respecto a éstos.
TEORÍAS Y SISTEMAS PSICOLÓGICOS