Dolor Precordial en La Consulta Odontologica
Dolor Precordial en La Consulta Odontologica
Dolor Precordial en La Consulta Odontologica
1.- DEFINICIÓN:
El dolor torácico se define como una sensación álgida localizada en la zona situada entre
el pecho (diafragma y la fosa supraclavicular). Puede ser el anuncio de una enfermedad
grave y potencialmente letal. En la consulta odontológica la generación de catecolaminas
por el estrés provocado por determinados procedimientos puede llevar a la presencia de
este cuadro clínico en pacientes con antecedentes de Síndrome coronario anterior o
cardiopatías mal controladas.
2.- FISIOPATOLOGIA
Entonces, ¿cómo sospechar que estamos ante una urgencia? Tenemos que recordar que
no existe un patrón sintomático fidedigno y fiable para identificar los Síndrome
Coronario. De hecho, en el infarto agudo y la angina los pacientes suelen tener dolores de
reposo prolongados, sin relación con el esfuerzo. Es más, muchas veces pueden aparecer
dolores atípicos, o síntomas distintos del dolor, que se acompaña de diaforesis, palidez y
sensación ahogo.
Las características del dolor deben analizarse como un modelo multifactorial para
aproximarse al diagnóstico, pero ninguna característica en concreto es suficiente por sí
misma: por ejemplo, la irradiación típica está presente sólo en el 20% de los casos, y la
sudoración profusa, náuseas y vómitos varían de acuerdo con los diferentes estudios, pero
siempre están por debajo del 50%.
Cuando hablamos de dolor de pecho una de su principal causa es la obstrucción de las
arterias coronarias, mismas que son encargadas del flujo sanguíneo de miocardio.
3.- ETIOLOGÍA Y PATOGENIA
La aterosclerosis, enfermedad universal que consiste en el depósito de lípidos debajo de
la capa íntima de las arterias de mediano y gran calibre propicia mas del 90% de los
problemas coronarios entre sus complicaciones se encuentran trombosis, embolia,
hemorragia y aneurismas. No sólo los antecedentes familiares determinan su desarrollo,
sino que intervienen otros elementos biológicos y sociales. Los factores de riesgo más
importantes para la formación de ateromas y sus complicaciones son la edad, el sexo (es
más común en los varones y en las mujeres después de la menopausia), el padecer diabetes
mellitus, hipertensión arterial no controlada, hipercolesterolemia, tabaquismo, hipertrofia
del ventrículo izquierdo, incremento del fibrinógeno plasmático (que se observan en
estados de alarma), obesidad y vida sedentaria.
Los ateromas son depósitos de lípidos que pueden obstruir de manera muy importante el
flujo sanguíneo coronario. A veces se erosionan, se fragmentan, sufren calcificación o
hemorragia y propician el desarrollo de trombos oclusivos, que impiden la circulación de
manera total o parcial en estas arterias que irrigan al miocardio.
El cambio súbito en estas placas ateromatosas, con el desprendimiento de un fragmento
de esta y su embolización, producen también isquemia obstructiva en el miocardio.
Durante el proceso de trombosis, embolia o hemorragia del ateroma participan también
las plaquetas, con lo cual se liberan mediadores químicos y sustancias como el
tromboxano A que produce vasoconstricción sostenida, y se compromete la irrigación del
miocardio.
Al producirse una oclusión coronaria e isquemia por cualquiera de las razones antes
mencionadas, se modifica el metabolismo celular. Los miocitos afectados empiezan a
generar energía a través de mecanismos de glicólisis anaerobia y hacen uso del glucógeno
almacenado; sin embargo, este esfuerzo metabólico no es suficiente.
4.- CLASIFICACIÓN