Las Particulas Subatomicas
Las Particulas Subatomicas
Las Particulas Subatomicas
El modelo atómico de Rutherford. En 1911, Rutherford, Geiger y Marsden estudiaron las trayectorias
de las partículas α disparadas contra láminas de diferentes materiales (figura 1.1). De acuerdo con los
resultados obtenidos, Rutherford propuso un modelo de átomo (figura 1.2) caracterizado por la existencia
de un núcleo central con una carga positiva idéntica a la negativa de los electrones, que están fuera del
núcleo, y que contiene el 99,9% de la masa total del átomo en sólo el 0,01% de su diámetro (d ≈ 1 106
toneladas/cm3 ). El tamaño de un átomo es del orden de 10–10 m (= 1 Å) mientras que el del núcleo es del
orden de 10–15 m.
La representación
Figura 1.2. Interpretación del experimento de Rutherford. La mayor parte no es a escala. Si
del espacio de un átomo está casi “vacío” ya que sólo está ocupado por a
los núcleos fueran
livianos electrones. Toda la carga positiva del átomo y casi toda su masa se b tan grandes como
encuentra en su centro, en un núcleo muy denso y pequeño. La mayoría de a los puntos negros
las partículas α con carga positiva (a) atraviesan el átomo por el espacio que los
representan, el
desocupado sin experimentar desviaciones. Algunas (b) se acercan a los c tamaño del átomo
núcleos y se desvían al ser repelidas por su carga positiva. Sólo unas pocas a debería ser de unas
llegan a acertar (c) en un núcleo y salen despedidas hacia atrás. decenas de metros.
Nucleones. El núcleo atómico está constituido por protones y neutrones, que por ello se llaman nucleo-
nes. El número atómico (Z) de un átomo es el número de protones, que es igual al de electrones en el áto-
mo neutro, e identifica a un elemento. El número neutrónico (N) es el número de neutrones. El número
másico (A) de un átomo es el número de nucleones, A = Z + N. Un elemento puede contener átomos de
diferente número másico, es decir, puede contener diferentes isótopos de distinta masa atómica (tabla
1.2). En un elemento natural, la abundancia relativa de sus isótopos en la naturaleza suele ser casi cons-
tante y recibe el nombre de abundancia isotópica natural. La denominada masa atómica de un elemento
es una media de las masas de sus isótopos naturales ponderada de acuerdo a su abundancia relativa.
Tabla 1.2. Algunos elementos con varios isótopos
Número Número Número Abundancia
Nombre Símbolo atómico (Z) neutrónico (N) másico (A) Masa natural, %
Hidrógeno–1 1H 1 0 1 1,674 10–24 g, 1,008 u 99,985
Deuterio 2H oD 1 1 2 3,344 10 g, 2,014 u
–24 0,015
Tritio 3H oT 1 2 3 1,674 10–24 g, 3,016 u muy inestable
Carbono–12 12C 6 6 12 1,9926 10–23 g, 12 u exactas 98,90
Carbono–13 13C 6 7 13 2,159 10–23 g, 13,00 u 1,10
Cloro–35 35Cl 17 18 35 5,807 10 g, 34,97 u
–23 75,77
Cloro–37 37Cl 17 20 37 6,138 10–23 g, 36,97 u 24,23
Uranio–235 235 U 92 143 235 3,902 10 g, 235,0 u
–22 0,72
Uranio–238 238 U 92 146 238 –22
3,953 10 g, 238,05 u 99,27
Modelo electrónico. ¿Por qué los electrones no caen sobre el núcleo que los atrae? La situación recuerda
a la Tierra que no cae sobre el Sol porque gira en una órbita estacionaria, en la que fuerza centrípeta y
fuerza de atracción gravitatoria se igualan. Sin embargo, el modelo planetario no es aplicable a partículas
cargadas, ya que según las leyes clásicas del electromagnetismo, un electrón con un movimiento
acelerado, como el circular, radia energía electromagnética, lo que debería producir su progresiva caída
sobre el núcleo. Un modelo electrónico coherente se encuentra en las leyes de la mecánica cuántica.
1.2 La luz: frecuencia, cuantos y efecto fotoeléctrico
Naturaleza ondulatoria de la luz. La luz es una radiación electromagnética, es decir, una onda de cam-
pos eléctricos y magnéticos. Se caracteriza, como cualquier onda, por su frecuencia (ν ), que se define
como el número de ciclos por unidad de tiempo y cuya unidad en el SI es el hertz o hercio (Hz),
equivalente a 1 (ciclo) s–1. La longitud de onda (λ ) es la distancia entre picos y su relación con la
frecuencia es λ = c/ν, donde c es la velocidad de la luz. La frecuencia de una luz determina su color,
aunque sólo es visible una parte del espectro electromagnético (figura 1.3).
La luz como un haz de partículas. En 1900, Max Planck estudia la radiación emitida por un cuerpo
negro y observa que es como si ésta fuera emitida en porciones E = hν, donde h es la constante de Planck
(6,63 10–34 J s). En 1906, Einstein estudia el efecto fotoeléctrico (figura 1.4) y, para explicarlo, propone
que la luz puede ser considerada como un haz de partículas o como una onda, con una relación E = hν
entre la energía cinética de cada partícula y la frecuencia de la onda (recuadro 1.1). Una partícula de luz
recibe el nombre de fotón y la energía de cada fotón es un cuanto de energía.
Universidad de Alcalá Tema 1: La estructura electrónica de los átomos | 7
Visible
Ultra- Ondas
Rayos γ Rayos X Infrarrojo Microondas
violeta de radio
Violeta Rojo
a) b)
e + Ec
B
hν a lA al
Ec = 1 mv2
2 Tubo a et et
M M
vacío
–
e
Placa
ν0A ν 0B
metálica ν
Figura 1.4. a) Efecto fotoeléctrico. Cuando una radiación electromagnética de frecuencia suficiente choca contra la superficie
de un metal (electrodo negativo) en el interior de un tubo a vacío, se desprenden electrones del metal que crean una corriente
eléctrica. La intensidad de la corriente crece con la intensidad de la radiación.
b) La gráfica relaciona la energía cinética de salida de los electrones con la frecuencia de la luz. Para cada metal, hay una
frecuencia umbral ν0 por debajo de la cual la luz no es capaz de arrancar electrones de la placa metálica. Por encima de la
misma, la energía cinética aumenta linealmente con la frecuencia. La pendiente de la recta es la misma para todos los metales.
Cada gas da un espectro característico. Al estudiar el espectro del hidrógeno, se encontró una relación
matemática entre las frecuencias de sus líneas llamada ecuación de Rydberg:
Serie de Lyman n1 = 1 n2 = 2, 3, 4, 5… Serie de Brackett n1 = 4 n2 = 5, 6, 7, 8…
1 1
ν = ℜ 2 − 2 Serie de Balmer n1 = 2 n2 = 3, 4, 5, 6… Serie de Pfund n1 = 5 n2 = 6, 7, 8, 9…
n1 n2 Serie de Pashen n1 = 3 n2 = 4, 5, 6, 7… ℜ = 3,29 10 15 s–1 (constante de Rydberg)
¿Cómo se origina un espectro de emisión? En un tubo de descarga, la corriente eléctrica aumenta la tem-
peratura generando suficiente agitación térmica como para que los átomos rompan sus enlaces y los elec-
trones salten a estados de energía superior. Los espectros de emisión los producen los átomos al retornar
sus electrones a estados de menor energía, por lo que informan sobre los estados electrónicos del átomo.
El modelo de Bohr. Con esta información, Bohr propuso en 1913 su modelo de electrones que giran en
torno al núcleo en órbitas circulares para las que no es aplicable el concepto clásico según el cual una
carga acelerada emite radiaciones continuamente. Bohr postuló que “un electrón siempre absorbe o emite
energía electromagnética en cuantos completos de hν” (primer postulado). Como la luz emitida en el
espectro de un átomo no contiene todas las frecuencias, Bohr sugirió que no todas las órbitas son posibles
y, en concreto, propuso que “las únicas órbitas en que se puede mover un electrón son aquellas en las que
su momento angular es nh/2π, siendo n un número entero. Cuando un electrón se encuentra en estas
órbitas, no emite energía” (segundo postulado). El número n se llama número cuántico principal.
A partir de estos postulados (recuadro 1.2), Bohr calculó la energía (figura 1.6) y el radio (figura
1.7) de las órbitas de un electrón en el átomo de hidrógeno. Además, dedujo la ecuación de Rydberg y el
valor de su constante (recuadro 1.3).
Recuadro 1.2. Modelo de Bohr: Deducción del radio y energía de las órbitas
La fuerza centrípeta asociada al giro de un electrón en una órbita circular vale v
2
Fcentrípeta = me vr (me = masa del electrón, v = velocidad, r = radio de la órbita) r e–
La fuerza de atracción electrostática entre el electrón y el núcleo vale
Ze +
2
Felect. = 1ε Ze2 (Z = número atómico, 1 para H, e = carga elemental)
4π 0 r
2 2
Si el electrón gira estacionariamente, ambas fuerzas tienen que ser iguales, me vr = 4π1ε Ze2
0 r
Despejando la velocidad, v = 1 Ze2 Velocidad que, según la mecánica clásica, debe tener un electrón
4πε 0 mer para moverse estacionariamente en una órbita de radio r.
Para que en su giro el electrón no emita ninguna radiación electromagnética, el segundo postulado de Bohr señala que su
momento angular (mevr) debe de ser igual a nh/2π
0,0 n=6
n=5
n=4
–2,7 n=3
Infrarrojo λ
Energía (en 10–19 Julios/átomo)
–10,9
6,00 10–7
Azul
Violeta
4,00 10–7
–21,8 n=1 Ultra-
violeta
1 2 3 4 5 6
Serie de Serie de Serie de
n Lyman Balmer Paschen
Figura 1.6. a) Gráfica de la energía de los orbitales atómicos del hidrógeno en función de n. Obsérvese que al aumentar n, la
diferencia de energía entre estados de energía sucesivos es cada vez más pequeña.
b) Algunas transiciones electrónicas que pueden ocurrir en un átomo excitado de hidrógeno. Las transiciones hasta n = 1 son
las de mayor energía y dan las rayas de menor longitud de onda (las de la serie de Lyman en el ultravioleta). Las líneas de la
serie de Balmer aparecen en el visible; la de mayor longitud de onda (la roja) se debe a una transición desde n = 3 a n = 2.